En el ministerio de magia de París, los seguidores de Grindelwald se robaron el documento de la familia Lestrange, momento en el que Queenie estaba buscando a su hermana en el lugar sin éxito. En la calle, ella escucho la voz de Jacob, siguiéndolo y tratando de encontrarlo, pero perdiendo su rastro y su voz, mezclada entre miles de voces de parisinos apresurados, hasta que una dama la ayudó. Por su parte, los tres jóvenes caminaban por un mercado, Amanda les compro comida con el dinero que aún le quedaba, sin notar que eran vigilados en su camino hacía el lugar que estaban buscando.

-Esta en casa...- el grupo entro en el lugar, dirigiéndose al cuarto donde estaba la mujer en sus papeles, entrando a un cuarto.

-¿Quién está ahí?- pregunto una mujer.

-Él es su hijo, madam...- respondió Nagini.

-¿Quién es usted?

-¿Usted es Irma?...- preguntó Credence, un poco inquieto y preocupado, Amando sentía una tensión en su pecho -¿Usted es Irma Dugard? Perdone. Su nombre aparece en mis papeles de adopción ¿Sabe de que estoy hablando? Usted me dejo con la Sra. Barebone en Nueva York.

-¿Será él? ¿Ese pequeño bebé que cuide?- la mujer se acerca a ellos, revelandose,  siendo una persona baja como un elfo -Yo no soy tu madre... Yo solo era una sirvienta...

-Es tu nana...- dice Amanda, escuchando sus pensamientos -Cuidaba de ti...

-Eras el bebé más hermoso...- Credence se agacha a su altura -Eres un hombre hermoso- la mujer lo abraza, las chicas se apartaron -Yo no quería dejarte allí solo.

-¿Porqué nadie me quiso? ¿Y porqué está tu nombre en mis papeles de adopción?

-Yo te lleve con la Sra. Barebone, porque se suponía que ella te iba a cuidar- Nagini ve algo extraño en la pared, un mago la jala, Amanda intenta paralizarlo, pero él la bloquea, entonces se miran reconociéndose al instante.

-Gardener... Así que era cierto. Viniste a salvar a tu mascota.

-¡Él no es un animal, Crimson! ¡Demaius!- Crimson la bloquea, paralizandola.

-Debiste quedarte en Londres, Gardener.

Lanza el hechizo asesino, pasando de largo a las chicas, viendo que a quien asesino fue a Irma, el obscurus lo acechaba desde el techo, a lo que el mago se puso un hechizo de protección. La habitación se destruyó, Credence atacó al mago con los escombros, queriendo comprimirlo hasta la muerte, el escudo no le permitió alcanzar el cuerpo encapsulado, volviendo a intentarlo. Nagini tomó el cuerpo de Amanda, mirando la furia desatada del muchacho hasta que el hombre desapareció, el chico se calmo y la bruja se liberó del hechizo paralizador. Él volteo a hacía las chicas, la maledictus se acercó a abrazarlo y consolarlo, mientras la legeremante recuperaba sus fuerzas para levantarse.

-... Se fue...- dice Credence con dolor en su voz -No pude hacer nada...

-No es tu culpa...- dice Amanda, ambos la vieron abrazándose -Debí estar más atenta... Fui muy lenta...

-No, Amanda...- dice Nagini -Hiciste todo lo que pudiste para protegerlo...- Amanda se limpia sus lágrimas, pero Nagini toma su mano.

-No hice suficiente... No pude salvarlos...- Amanda presiona con fuerza su mano libre.

-¿Salvarnos?- Credence se muestra confundido.

-... Tenías razón, Credence... No vine solo a saludar... Tu obscurus... Incluso si sobreviviste a él, es solo cuestión de tiempo...

-¿A qué te refieres?

-Un amigo me dijo que... Sí lográbamos encontrar a un familiar, alguien que pudiera tomar ese lugar en tu ausencia de amor, de una familia... Podríamos salvarte... Creí que al encontrar a Irma, podría... Pero solo... Crimson tenía razón, debí quedarme en Londres... Pero no pude quedarme quieta...

-Amanda...- Credence se acerca, tomando su mano libre, que dejaba ver nudillos blancos y pequeñas gotas de sangre -Has hecho demasiado por mí, no podría estar más agradecido de que me encontraste...- Credence la abraza mientras Nagini acariciaba su espalda.

-... No siento que sea correcto... Cuando estoy tan desesperada porque seas feliz...- Credence acaricia su cabeza, dejando que sus lágrimas caigan en su hombro -... ¿Quieres... Enterrarla? ¿Pará qué te puedas despedir?

-... Sí... Busquemos un lugar para ella.

Amanda saca una manta blanca de su bolsa, usando magia para envolver su cuerpo y usando la aparición para llevarlos a un lugar apropiado. En otra parte, Crimson se reunió con Grindelwald, informando los hechos y su preocupación al haber fallado al ministerio, a lo que su contrario le pidio mantener al muchacho vigilado. Mientras tanto, Newt y Jacob se encontraban en una cafetería, esperando encontrase con el dueño de la pluma, conversando y pensando sobre las damas que tenían su cabeza en las nubes, cuando el hombre que buscaban pasó a su lado, liberando la pluma y acercándose a él.

-Lo siento... Bonjour...- él se retiraba, pero Newt insistió -No, espere. Perdón. Solo queremos... Queremos saber si vio a una amiga nuestra.

-Tina Goldstein.

-Monsieur, París es una ciudad grande.

-Es aurora. Y cuando los aurores desaparecen, el ministerio los busca, así que... Tal vez sería mejor reportar que no aparece.

-¿Es alta? ¿Castaña? Un tanto...

-Intensa/Hermosa...- dijeron Newt y Jacob a la vez, ambos empezaron a divagar en sus respuestas, antes de volver al tema.

-Creo que vi a alguien parecida anoche. Tal vez si les muestro donde... 

-Si no es una molestia, se lo agradeceremos...

-Claro.

El par siguió al por las calles de París, llegando a una entrada a una serie de tuneles que llevaba a las alcantarillas, viendo a la maga sentada en el suelo juntos a varios papeles. Aclarando su voz y viéndola levantarse, Tina Goldstein, la mujer que estaban buscando, pero desgraciadamente, no había señales de Amanda por ninguna parte. En ese momento, Yusuf los desarma y los encierra en el luga, revelando que buscaba a Credence para matarlo, pero entonces, el hombre cae desmayado en el suelo. Los magos se liberan con la ayuda Pickett, revisando al inconsciente en el suelo y recuperando sus varitas.

-¿Dices que necesitas a este hombre?

-Sí, creo que sabe donde está Credence, Sr. Scamander...

-¿De casualidad, no habrá visto a Amanda o sí?

-... Ella está con él...- Newt se muestra sorprendido -Huyó con Credence y una maledictus, no sé a dónde. Lo siento- se escucha un rugido.

-Ese debe ser el zouwu.

El grupo, con el inconsciente mago, suben a la superficie, viendo a la criatura causando caos y pánico, por lo que Newt se para cerca a él, dejando su valija abierta en el suelo y sacando un juguete. El zouwu se quedó mirando con fascinación, siguiendo el objeto con la mirada y escuchando los tintineos, teniendo su atención, el magizoologo soltó el juguete y el animal lo siguió dentro del maletín, cerrándose con este. Newt sacó la tarjeta que Dumbledore le había dado, llendose con Tina y Jacob al refugio en una aparición.