El Colgante
-¿Amanda?- ella voltea asustada, notando que era Credence, con unos folletos en su mano.
-Credence... No esperaba encontrarnos así...
-Estuviste llorando...- ella se toca el rostro, notando su rostro húmedo.
-...Yo...- Amanda no sabía que decir, balbuceando -No, solo... Yo...
-... Eres... ¿Una bruja?
-¿Qué? ¿De qué...?- intenta negarlo.
-Te vi... Guardando una escoba en ese bolso... Y sacando esa botella...- Amanda comienza a temblar -¿Qué vas a hacer?- ella saca su varita.
-... Lo siento, Credence... Debo desmemorizarte.
-¿Qué significa?
-No recordarás haber visto magia... No me... No me recordarás...
-Espera...- Amanda se acerca temblando -Amanda...
-Si me olvidas, es mejor...
-Déjame saber... Al menos quiero saber para que era el colgante en realidad...- dice Credence con la voz temblorosa, pero con firmeza -¿Era... Para controlarme?
-No, no, yo... Es difícil de explicar...- Credence toma su mano con la varita.
-Solo dime...
Amanda no dejaba de temblar, podía sentir las heridas de Credence en su mano, no podía borrar su memoria, no quería que la olvidara así, sus ideas estaban revueltas. Las lágrimas volvieron a salir sin control, porque no podía desmemorizarlo, porque le costaba tanto hacerlo olvidar la verdad, quería que él lo supiera, no tener que ocultarse, pero debía hacerlo. Entonces lo sintió, unos brazos la rodearon en un cálido abrazo, ella se dejó vulnerable en las manos del chico, entendiendo que a ella le costaba hacer lo que estaba haciendo.
-... Lo siento...- dice Credence, avergonzado de verla en ese estado.
-No tienes que hacerlo... Es mi culpa, no debí acercarme tanto... Pero no pude evitarlo... Quería ayudarte...
-¿Pará qué es el colgante?
-... Es experimental... Pero es para sentir lo que siente el portador... Quería saber si estabas en peligro...
-¿Peligro?... ¿Así que... Sentiste...?- ella alza la mano.
-Cada golpe...
-... No debiste hacerlo... ¿Porqué lo harías?
-... Te escuche...
-¿Escucharme?
-... Soy legeremante, puedo leer los pensamientos...
-¿Leíste mis pensamientos?
-... Es involuntario, pero me permitió saber que te estaban lastimando... Y sé que es ser marginado en tu propio hogar.
-Pero tienes a tu hermano...
-Es mi tutor...- Credence se noto consternado -Preferimos decir que somos hermanos cuando son muggles, y así puedo decir que nuestros padres no están con nosotros.
-¿Muggles?
-Los brujos aquí los llaman nomajs, personas sin magia.
-... ¿Qué les pasos a tus padres?
-Mi madre murió cuando nací y mi padre fue desmemorizado junto a su novia... Pero nada quita que soy una impura... Y de no ser por Newt, habría terminado como un obscurus.
-¿Obscurus?...
-... Debería irme... Newt debe estar necesitando mi ayuda para salir y... Aun falta encontrar a Dougal... Solo... No te muevas.
-Espera...- Credence toma su mano, soltandola casi de inmediato -No quiero olvidarte... Menos sabiendo que... Estas sintiendo mi dolor...
-El que se preocupa, sufre por dos... No quiero que pienses que me estas lastimando. Yo decidí dártelo y no te lo quitaré.
-¿Porqué?
-... Al menos podré ayudarte si me necesitas...- Credence se muestra confundido, pero se quita el colgante -¿Qué haces?
-Si vas a hacerme olvidarte, entonces no sufras dos veces por mi...- Credence le entrega el colgante, lo que pone a Amanda en una decisión complicada para su corazón.
-... Bien... Dejaré tus memorias, pero pontelo, por favor... Estaría más preocupada si no me entero si algo te pasa...
-Gracias...- Credence se vuelve a poner el colgante -Antes de que te vayas... ¿Podrías... Tal vez...?
-... ¿Quieres que... Trate tus heridas?- él asiente -Puedo ayudar, pero las marcas seguirán ahí.
-No importa, solo quiero que deje de doler- Amanda apunta la varita a las manos de Credence.
-¿Tu madre te lastima?
-Me castiga... No entiendo porque me odia...
-Mi padre también me odiaba- ella se alza las mangas -No podía aceptar que era diferente...
-... ¿Te arrepientes de dejarlo?
-No... De haberme quedado, no te habría conocido.
-... Si vuelves a sentir que te necesito... Por favor...
-Vendré tan rápido como pueda ¿Sí? Mantente a salvo, Credence.
Amanda se aparece del lugar, dejando a Credence solo en el callejón, quien no podía evitar sentir sus manos húmedas, agarrando el colgante que ella le había dado. Su soledad no duró mucho, sintiendo una corriente de viento que le alertó de la llegada de alguien, a quien había buscado en el callejón originalmente. Volteando la mirada para encontrarse al Sr. Graves, quien portaba la vestimenta a la que ya estaba acostumbrado, no estando muy seguro de si mencionar a la chica que había conocido.
-Credence, ¿Encontraste al niño?...
-... No puedo...
-... Muéstrame...- Graves se acerca, tomando su mano y viendo unas cicatrices -Cuánto más rápido encontremos al niño, más rápido dejarás el dolor en el pasado, donde debe estar... Quiero darte esto, Credence. Se lo confiaría a muy poca gente...- le pone un collar -Pero tú... Eres diferente...- dice Graves, tomando el rostro de Credence -Y cuando encuentres al niño, toca este símbolo, y lo sabre y vendré a buscarte... Hazlo y serás venerado por los magos para siempre...
-Haré lo que pueda...- Credence aun sostenía el colgante de Amanda con su otra mano, lo que Graves notó.
-¿Qué es eso?
-... Un regalo...
-¿Conociste a alguien?...- Credence asiente algo avergonzado, Graves toma la mano que sostenía el colgante, notando un símbolo curioso -Legeremancia... ¿Quién te lo dio?
-... Se llama Amanda...
-... Credence, esa chica se relaciona con un hombre peligroso. Si la vuelves a ver, no dejes que se vaya ¿Sí? Debo hacerle unas preguntas.
-... De acuerdo...- Graves abraza al chico.
-El niño está muriendo, Credence. El tiempo se agota.
Graves se separa de él y se aparece, dejando a Credence nuevamente solo, dudando de en quien dejar su confianza, puesto que su lealtad a Graves ponía en riesgo su nueva amiga, pero sabía que no la conocía lo suficiente, aunque ella estaba dispuesta a sufrir por él. Por otra parte, Amanda se apareció en el edificio donde vivían las hermanas, viendo al grupo de magos andar por un callejón, alcanzandolos rápidamente y abrazando a su tutor.
-Amanda, estas bien- Newt regresa el abrazo, acariciando su cabello -Siento tanto haberte dejado sola en el maletín, yo...
-Tranquilo, estoy feliz de que no murieran.
-... A veces quisiera que dejarás de leer mi mente... Pero también estoy feliz de que sigamos vivos.
-¿Cómo hiciste para salir?- preguntó Jacob, Amanda saca a Teddy de su bolso.
-Pequeño escurridizo...
-Ella no podrá entrar con nosotros, es un lugar peligroso- dice Tina.
-Entiendo a lo que se refiere. Amanda, entra en el maletín.
-Estas muy equivocado si piensas...
-Amanda, por favor. No te puedo dejar afuera, es muy peligroso, si nos buscan a nosotros, también a ti. Necesito que entres...
-Esta bien...- Newt abre la valija.
-Y después me dirás a quien le diste el colgante- cierra la valija.
-¿Colgante?
-Después le explico, guienos.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top