Pasaron dos semanas desde aquel incidente con (Tn) y un hombre del G-23.

Pasaron dos semanas desde que ella no supo más de Niji.

Dos semanas en los que ella tampoco trató de ponerse en contacto con él a pesar de sentir algo de remordimiento por lo ocurrido. Pero trató de ignorar ese sentimiento concentrándose en los preparativos de la fiesta de Navidad con sus amigos. Una fiesta que llenaba de emoción a los chicos.

En especial a Nami, quien quería escabullirse con su amiga a la fiesta más "selecta" y poder ver como se desenvolvía la élite.

Sin embargo, otra parte no se sentía del todo satisfecho con aquella distancia.

La mirada de aquel joven estaba posada sobre aquel libro abierto entre sus manos pareciendo leer lo que había allí escrito. Pero su mente estaba divagando por zonas ajenas a aquella lectura. Provocando que el brillo de sus ojos se encontrase apagado y sin vida.

Una luz que pudo descifrar la mujer que entró en aquel salón.

Reiju - ¿Todo bien?. -preguntó sentándose en el sillón que había a su lado.

Niji - Todo bien.

Reiju - Padre me informó que las reuniones que tenias con los (Ta) me las derivaste a mi. - dijo. - Pensaba que te gustaba visitar a los hermanos.

Niji - Cambié de idea.

Reiju - ¿Por qué?. -insistió en saber. - Siempre que venías de su mansión parecías más sonriente.

Niji - ¿Puedes dejar de preguntarme?.

Reiju - Me parecía extraño y quise saber.

Niji - ¿Puedes o no ocuparte de esos asuntos?. -preguntó molesto.

Reiju - Claro que puedo.

Niji - Entonces deja el interrogatorio.

La mayor lo miró y suspiró un poco recostando su espalda en el respaldo del sillón y mirando al frente, mientras que su hermano menor volvía a su lectura.

O al menos eso intentaba.

Reiju - Recuerdo el día que tenías tu cena. -dijo tras unos minutos en silencio. - Estabas tan nervioso buscando un perfume a corde que se me hizo divertido verte. -sonrió. - Ni ante las reuniones más importantes te veía así.

Niji - Era un idiota, es todo.

Reiju - ¿Un idiota?. -preguntó. - A mi me parecía de lo más entretenido ver a mi hermano pequeño así... aún más cuando tú siempre fuiste tan frío y terco.

Niji - Y un idiota porque ella me detesta. -dijo de forma cortante cerrando su libro.

Reiju - Siempre sospeché de que te gustaba... -susurró.

Niji - No me gusta. - dijo rápidamente. - Tan solo... me gusta su compañía... es una persona interesante, inteligente y...

Reiju - Linda. -completó.

Niji la miró durante unos segundos y se levantó dejando el libro sobre la mesa.

Niji - Y yo muy estúpido por creer que podría acercarme a ella. No quiero seguir importunándola más.

Reiju - Niji...

Niji - Voy a entrenar, avísame si tienes dudas con las reuniones que te dejé. -dijo dando por finalizada aquella conversación.

Mientras tanto...

(Tn) - ¿Te gusta este?.

Shanks - Quizás debemos dejar el tema de la elección de los entrantes a nuestros cocineros... todos me parecen bien.

La chica sonrió un poco por aquel comentario y cerró la décima propuesta del menú navideño.

(Tn) - Dos horas aquí sentados y al final dices que lo dejemos a los cocineros. -dijo riendo.

Shanks- Todo tiene buena pinta y buena presentación para esa cena...

(Tn) - ¿Lo elegimos al azar?

Shanks - ¿A qué te refieres?.

Ella tomó todos los menús apilándolos unos encima de otros y se levantó con una sonrisa divertida.

Una sonrisa que él no solía ver, por lo que se incorporó un poco más en su asiento para observarla mejor.

(Tn) - El que caiga derecho sobre la mesa será el menú navideño de la importante cena de Navidad.

Shanks rió un poco justo en el momento en el que la puerta se abrió mientras ellos, ajenos a eso, siguieron con lo suyo.

(Tn) - ¡Uno! -gritó sosteniendo los menús. - ¡Dos y... tres!.

La joven lanzó hacia arriba todos los menús sin poder contener su sonrisa divertida por aquello.

(Tn) - ¡Dos derechos! -gritó señalándolos.

Shanks - Menú Mediterráneo y Menú Asiático. -dijo leyendo.

(Tn) - Entrantes y bebidas mediterráneas y plato fuerte y postre asiáticos. -concluyó.

Shanks - Excelente, caso cerrado. - rió.

Garp - Y así es como los miembros de la gran casa (Ta) elige el menú para una de las cenas más importantes del año.

(Tn) - Mi cena más importante será con mis amigos en la sala de al lado. - sonrió.

Shanks - Yo también me escabulliré a esa fiesta.

Garp - Yo también, allí al menos puedo desabrocharme el pantalón para seguir comiendo. -rió.

(Tn) - Ojalá pudiéramos cancelarla y quedarnos más en familia...

Shanks - Ojalá. -susurró.

La joven se levantó y abrazó a su hermano desde atrás provocando la sonrisa en este.

(Tn) - Se los daré a los chef's y cocineros para que opinen. - dijo en tono calmado. - La cena saldrá bien.

Shanks - Eso espero... vendrán invitados muy importantes.

(Tn) - Eres un modelo a seguir para mi, Shanks... lograrás triunfar con esa cena, como siempre lo haces.

Shanks - Todo es gracias a ti, (Tn). -dijo tomando su mano. - Tener tu apoyo es algo fundamental para mí.

Ella sonrió y besó con cariño la cabeza de su hermano mayor provocando una sonrisa en Garp, quien siempre estuvo con ellos viéndolos crecer.

(Tn) - Ahora... -dijo separándose y tomando las cartas de menús. - Esto lo encargamos a la cocina, la decoración corre por mi cuenta. - sonrió.

Shanks - ¿Quieres decorar tú la mansión?.

(Tn) - ¡Si!. -respondió con ilusión. - Un gran árbol de Navidad, luces y guirnalda decorando los pilares, y focos de luz en el jardín que iluminen los copos de nieve... como lo hacían en la antigua mansión.

Shanks sonrió un poco recordando la última Navidad que celebraron de pequeños. Una Navidad amarga y oscura para todos.

(Tn) - Traigamos un poco del amor de antes ahora. -le dijo con tono bajo. - No podemos recuperar a las personas que se fueron... pero si tenerlas en nuestros corazones estas fechas.

Garp - Mocosos... como me hagáis llorar os doy un puñetazo a los dos.

Los chicos rieron por aquello y Shanks se levantó de su asiento.

Shanks - Tengo que atender unos asuntos ahora fuera de la mansión, nos vemos en la cena hermanita. - Cuida de ella Garp.

(Tn) - Ve con cuidado...

Shanks le sonrió y salió de aquel despacho dejando a la joven sola con Garp, se sentó nuevamente en el sillón y volvió a hojear sus propuestas de menús mientas su mente volvía a viajar nuevamente al pasado.

Nuevamente a aquellos dolorosos recuerdos.

Garp - ¿Quieres ir a ver a Luffy y Ace?. -preguntó al ver su mirada triste.

(Tn) - Por favor... -susurró.

Mientras tanto...

La puerta del despacho se abrió provocando que el rubio alzase la vista para ver a la persona que entró.

Sabo - Hola Koala. -sonrió.

Koala - Tengo unos nuevos documentos...

Sabo - Gracias. -respondió si borrar su sonrisa.

Ambos quedaron en silencio durante unos segundos hasta que ella volvió a hablar.

Koala - Sabo...

Sabo - ¿Si?.

Koala - Me preguntaba si te gustaría ir a cenar esta noche...

Sabo - ¿Solos?.

La joven asintió apenada mirándolo y Sabo dejó los documentos sobre la mesa viéndola.

Sabo - Me encantaría salir esta noche contigo, Koala.

Ella sonrió llena de felicidad y dio unos pasos hacia atrás.

Koala - Hasta esta noche entonces.

Sabo - Hasta esta noche. -respondió sin borrar su sonrisa.