Noches de amor y lujuria.
Los Personajes y las imágenes utilizadas en la historia no son de mi propiedad. Todos los derechos a sus creadores.
Lenguaje y contenido fuerte y explícito.
Agradezco las portadas de yan_skiblue y de Mónica tadakatsu.
Una disculpa por la redacción.
©® Historia con derecho de autor.
No se permite, copiar, adaptar ni tomar prestada.
<<>>, " ": Son pensamientos del personaje.
Lemon chicas!!!!
❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️
" Tiempo al tiempo,
Cada huella ira encontrando
su arena,
cada beso deteniendo
un momento,
y cada canción, matando una pena."
Las palabras entre Cataleya y Jack eran confusas y distraían a Sesshomaru.
- Terminamos?
Jack volteó a mirarle y sonrió.
- Necesito tu ayuda por un par de horas más, ¿tienes tiempo?
Sesshomaru hiba a decir que no, quería llegar a casa y besar a kagome pero Jack era su amigo y pocas veces le pedía ayuda fuera del trabajo.
- Qué necesitas.
- Por lo pronto acompáñanos.
Acompañarlos, ¿que tramaba?. Ya se arrepentía de ir en la limo todos juntos, al ver que Cataleya no dejaba de preguntarle cosas y mirarlo como si fuera un postre y quisiera darle una mordida, se relamia los labios rojos y sus ojos brillaban, era hermosa pero no de su tipo.
El adoraba a kagome, a su pálida piel cremosa, brillante y sedosa erizandose ante el leve toque de su lengua y de sus dedos, esos dedos pequeños y traviesos que lo enloquecieron la noche anterior. Jamás se imaginó que se atreviera a tocarlo y . . . Probarlo, probar de su escencia, de su viril sabor. De sólo recordarlo su miembro se endureció dolorosamente, tan perdido estaba, que no escucho la música que acompañaba a la melodiosa voz de la modelo.
Jack le hablo dos veces hasta que lo codeo, Sesshomaru lo fulminó con la mirada Jack con una sonrisa de oreja a oreja le señaló su prominente erección. Sesshomaru puso su chaqueta sobre sus piernas con molestia por su descuido.
- Pareces el dios Príapo a punto de coger a sus ninfas. Dime Sesshomaru amas a kagome o así te calienta ver cantar a una preciosa mujer?
Sin esperar su respuesta, le señaló a la chica que con sensualidad bailaba cadenciosamente al ritmo de la canción sin dejar de mirarlo.
Sesshomaru con fría mirada congeló por un segundo la sonrisa de Cataleya al clavar su dorados ojos helados en ella. Sin mirar a Jack contesto con voz petrea erizandole la piel.
- No te metas con kagome, lo que hay entre ella y yo no te incumbe. No me conoces aún Jack, pero te diré que mi cuerpo no reacciona ante exhibicionistas ni cuerpos desnudos. Reacciona a recuerdos, olores y sensaciones, personas con alma, sin lujuria ni deseó banal de un cuerpo escultural. Kagome es . . . Poesía para los sentidos, ante esa poesía responde mi cuerpo. Ahora me voy, no me hagas arrepentirme de considerarte un amigo.
Jack, por fin pudo respirar, la ira con la que Sesshomaru le habló lo dejó perplejo.
- Lo . . . Lo Siento. Tienes razón no es de mi incumbencia, pero quiero a kagome como una hermana no quiero verla sufrir. Mmm, bueno Ahora , este es el favor que te pedí, necesito que me digas que te parece la voz de Cataleya? Y la música, tú conoces de música dime qué te parecen.
Sesshomaru tomó su chaqueta y mirando por unos minutos al grupo y la chica concluyó.
- Ella es buena, pero el de la guitarra, desafina terriblemente.
Busca otro mejor. Adiós.
Y se retiró, ya había tenido suficiente. Cataleya lo miró irse con un claro gesto de deshilusion.
- Ni lo pienses, él ya está enganchado. No te hagas hilusiones.
Cataleya con sonrisa sensual, miró con un moín de terquedad.
- No he visto ningún anillo, la esperanza es lo último que muere.
Jack negó con la cabeza, se daría contra un muro, no tenía ni la más mínima idea de quién y cómo era Sesshomaru, le caía bien la chica por eso le insistíria en que dejara a Sesshomaru en paz.
Mientras el taxi lo llevaba a casa, los recuerdos de la noche anterior inundaron su mente haciéndolo sonreír y suspirar.
<Recuerdo de Sesshomaru:
Sesshomaru muy quieto, veía como kagome dejaba un sendero de besos por su cuerpo en dirección al vientre, ver qué lo deseaba tanto le lleno de calidez su corazón, y no sólo por el deseo sino por el cariño y la desinibicion que al fin, se había logrado entre ellos. Lo acarició por enzima de los bóxers, haciéndolo gemir de placer la vió levantar la vista mientras daba pequeños mordiscos en el vientre, sus caricias juguetonas eran muy dulces y maravillosas que se quedarían grabadas en su corazón. Le rodeó la cara con las manos y le devolvió la sonrisa intentando grabar en su memoria esa imagen para no olvidar ese momento.
Kagome siguió bajando y dando besos aquí y haya, se quedó muy quieto, kagome regreso por su pierna izquierda, Sesshomaru contuvo el aliento al verle tomar la orilla de los bóxers, mientras acercaba su cara para verlo fijamente, entonces kagome sonrió. Muy lentamente le bajó los bóxers y se le aceleró el corazón, Kagome se mordía el labio con cara de satisfacción cuando lo bajo del todo. Sesshomaru la tenía . . . Espectacular . . . Aunque ya lo sabía, se había hecho una idea en sus encuentros anteriores, pero verlo así . . .
Termino de sacarselos y se tomó su tiempo para admirar la belleza de todo su cuerpo. Era perfecto, absolutamente perfecto, desde los anchos hombros, las caderas estrechas, las fuertes y largas piernas. Y lo tenía sólo para ella, quería complacerlo.
Al fin, lo acarició. Sesshomaru lanzó la cabeza hacia atrás, mudo de placer entorno los ojos para ver a kagome cómo se la examinaba con detenimiento, la vió separar los labios para meterse la punta en la boca, pero se apartó frunciendo el ceño, ladeó la cabeza y volvió a habrir la boca pensando en la mejor forma de saborearlo tocó la punta con su rosada lengua.
- Kagome, me estás matando.
- Lo siento.
Volvió a examinar su miembro duro y fruncir los labios.
- Es que . . . quiero hacerlo lo mejor posible y que te agrade.
Sesshomaru sonrió.
- Cualquier cosa que me hagas me gustará.
Se enderezó para besarla con ternura..
- Una caricia tuya es como estar en el cielo.
Kagome tragó saliva, cuando él llevo su mano al miembro para enseñarle cómo acariciarlo. Y, cómo quería complacerlo, inclinó la cabeza para lamer la humedecida punta. Sesshomaru se quedó inmóvil al cerrarse los labios de kagome alrededor, tuvo deseos de empujar pero no quería hacerle daño con todo el control de que fue capaz de quedó quieto mientras lo acariciaba con la lengua.
- Tu lengua es . . . Maravillosa.
Gimió, kagome le acarició las piernas con las manos y siguió hasta los testículos son dejar de lamerlo. Sus caricias lo pusieron en un estado total de Placer, pero no pudo soportarlo más y se apartó.
- Soy capaz de controlarme, kagome, pero si sigues así, no podré aguantar mucho. Y quiero estar dentro de tí cuando termine.
- Está bien. Estoy lista.
Él soltó una risa ronca y profunda ante la seguridad de su respuesta, aunque ya lo acogía completamente sabía que debía prepararla para que no le doliera.
Le introdujo un dedo , ella se mordió los labios y dió un respingo.
- Estás mojada.
Lo dijo en el momento en que se inclinó para lamerla y humedecerla aún más, kagome con un jadeo separó las piernas lo más que pudo para no perder de vista lo que hacía.
- Sesshomaru, por favor.
- Paciencia, bonita, paciencia.
Le metió otro dedo mientras succionaba su clítoris, kagome lanzó un grito, el orgasmo fué tan intenso que, creyó moriría. Pero no la penetró con su miembro cómo esperaba, la acomodo boca abajo y empezó a darle un masaje, pero no cualquier masaje, era para relajarla por completo.
- No quiero que estés tensa.
Le dijo con esa voz que le encantaba.
- Ya estoy que me derrito.
Su risa le provocó un delicioso escalofrío mientras volvía a penetrarla con los dedos, el ya estaba dolorido pero pronto la tendría lista estaba más mojada. Se inclinó y le mordió una nalga, kagome volvió a gritar de dolor y de placer, sus dedos la penetraban más y le besaba la espalda, se frotaba contra su clítoris desde atrás sin penetrarla, lo que sintió la hizo jadear cuando le tomó los senos con las manos. Fué como un click y se dejó ir en otro orgasmo, en ese momento Sesshomaru la penetró, kagome temblaba y jadeaba como loca rasguñando las sábanas, comenzó con un lento Vaivén, kagome volvió a gritar.
- Estás bien?
- Es . . . En. . . Serio?
Le pregunto al mismo tiempo que jadeaba y temblaba, pero levantó las nalgas para meterselo por completo. Sesshomaru gruño a punto de perder el control.
- Pasa . . . algo si, hago ésto?
- No.
Susurro él con el cuerpo a punto de explotar extremeciendose cerró los ojos. Kagome se movió más rápido.
- Detente!!! . . .
Grito, kagome se detuvo temiendo que le hubiera hecho daño.
- Qué . . . Pasa?
Preguntó en un murmullo sudando y con la respiración entrecortada. Salió de ella, se acostó de espaldas la atrajo hacia él y le apartó el pelo que se le había pegado por el sudor. Le acarició el dedo con el pulgar.
- Quiero mirarte a los ojos mientras termino dentro de tí.
Kagome lo beso mientras la acomodaba montada en sus caderas. Sesshomaru bajó la mano por su espalda hasta llegar a su miembro y lo metió de nuevo dentro de ella, ambos jadearon, kagome se levantó poniendo las manos en su pecho y le hablo en un murmullo.
- Lo estoy haciendo . . . Bien.
Sus dudas lo abrumaron.
- Eres maravillosa, kagome, perfecta.
Kagome dejó de mecerse para verle a los ojos.
- De verdad?
- Sí.
Le Susurro besando su mano, entendió que la ternura de kagome acababa de doblegarlo, cómo nunca lograron doblegarlo las palizas de su padre, y por primera vez comprendió la diferencia. Y entendió lo que era hacer el amor, lo que era compartir su cuerpo con alguien, no por obligación o miedo, si no para sentirse unido a una persona, en ese preciso momento, ambos se pertenecían. La pasión consumió a kagome mientras Sesshomaru entraba profundo en su interior., Nada se comparaba a la maravillosa sensación de tenerlo dentro, conteniendose, para que ella disfrutará. Sesshomaru la tomó de la cara besándola con pasión embistiendola con fuerza, justo antes de derramarse completamente dentro de ella. Dejó de respirar, con un gruñido la miró gemir mientras experimentaba lo que era el éxtasis absoluto.
Kagome se dejó caer contra su pecho, con una sonrisa y jadeando se acurrucó como una gatita sin separar sus cuerpos, soltando un hondo Suspiro. Le encantaba sentir su cuerpo desnudo y cómo su interior se encontraba firmemente apretado alrededor de su pene.
- Podría quedarme aquí, así.
- Cuando quieras.
Kagome lo beso de nuevo con cariño y devoción, quería transmitirle el amor que ya crecía y deboraba su corazón y su ser. Dios!! Este hombre se había convertido en su todo y, tenía miedo . . . Un miedo muy grande a despertar de este maravilloso sueño dónde él era su príncipe y la había salvado de una vida de soledad y sin sabores, dónde al fin, a alguien le importaba. Lo amaba, y esperaba con todo su ser que su padre no interfiriera en su felicidad.
- Tengo sueño, mmm, podemos . . . ¿dormir hasta tarde?
Sesshomaru beso su frente y la apretó más contra él tapando sus cuerpos con una frazada, hacia frío.
- Avisaré que no iré mañana hasta tarde, está bien?
Kagome ya cerraba los ojos extasiada, satisfecha y muy feliz, Sesshomaru era increíble y la hacía muy feliz, por fin venció sus inhibiciones y lo había probado, su sabor era . . . Muy suyo y le encantaba. Se fueron perdiendo en un sueño profundo, roto por la lluvia tranquila y pertinaz cayendo en la ventana.
<Fin de recuerdo>
***†***
- Todo está listo señor, la mercancía está en camino.
- Y el dinero?
- Depositado en la cuenta de Suiza.
- Bien, vamos no quiero viajar de noche, reserva en un hotel.
Eran las seis de la tarde y habían terminado el último encargo, ahora toda la mercancía debía ser verificada, malditos proveedores lo único que querían era más plata, las ganancias eran mayores pero se estaba artando.
Eran las tres de la mañana y despertó con una pesadilla, se levantó agitado y con el corazón latiendo a mil. !¡¡Malditas pesadillas!! se estaban presentando más seguido. Cómo era posible que tanto hubiera pasado, y él no lo hubiera sabido. Afuera hacía calor, extrañaba el frío y la nieve, era la última vez que viajaba a aquel lugar, tomo el teléfono y llamo a uno de sus guardias.
- Trae a una, sí, la jovencita de ojos verdes, sí . . . No, sin drogas, no, yo la controlare. Partiremos en tres días me aseguraré de que la mercancía llegue bien y así terminar el trabajo. Sí, a todos. No dejen ningún cabo Suelto, limpien todo.
Pasaron 15 minutos y tocaron la puerta. Fué a habrir.
- Señor, aquí está si necesita que la tranquilice . . .
- No, así la quiero, vete.
Con un asentimiento de cabeza, se fue.
La chica estaba asustada, sus grandes ojos miraban con miedo al hombre que sentado frente a ella sin decir nada, la miraba de forma extraña. No sabía que había pasado, en su casa hacia una semana llegó de la escuela y su padrastro la saco del cuarto cuando se cambiaba, llorando preguntaba que pasaba y lo vió dejar entrar a unos hombres que le taparon la boca y antes de que se la llevarán pudo ver qué le pagaban con un gran fajo de billetes. La había vendido. En su comunidad era el pan de cada día, madres vendían a sus hijos pues la pobreza en Colombia era muy común. No quería llorar, debía aguantar, quizás sí este hombre la quería podría seguir viviendo.
- Dime, cuántos años tienes?
Flor, temblaba pero logró contestar.
- Te . . . Tengo 14 señor.
El sonrió, le gustaban sus grandes ojos verdes, se parecía tanto a su mariposa. Así la bautizo en cuanto la vió, sabía que ese capullo daría a una hermosa mariposa, tenía casi la misma edad que ella en aquel entonces.
- Eres virgen?
Flor, se acomodo subiendo las piernas en el sillón abrazándolas. Tenía tanto miedo.
- Sí . . .
Él sonrió, era lo que esperaba. La iniciaría como a ella, lo acababa de decidir, se la llevaría con él y la haría a su modo, tendría otro hijo, hacía mucho que no permitía que ninguna mujer se embarazara. Ella sería su nueva mujer, su mariposa entendería ella, ella lo entendería. Y así auto convencido de sus fantasías tomó a la jovencita y la metió a bañar, una vez limpia, se desnudo y la llevo a la cama, Flor, ya se imaginaba lo que pasaría, derramó lágrimas mientras él besaba sus piernas, no podía hacer nada así que sólo se quedó ahí, no quería que la golpeara. Al acariciar con devoción ese cuerpo virgen su mente lo transportó al tiempo en que tenía dieciocho años. Con cariño besaba el vientre de la jovencita que tenía los ojos vendados, que jadeaba por las extrañas sensaciones que le causaban los besos y mordiscos en su carne virgen, de pronto, una lengua tibia y húmeda se adentraba en su zona íntima, su cadera se elevó ante la invasión. Si primer impulso fue cerrar las piernas pero unas manos calientes no se lo permitieron, la boca y la lengua hacían cosas en su vagina que le estaban gustando. Sintió como un dedo largo sé introducia en su interior y Jadeó más fuerte, la lengua y los labios del hombre chuparon su botoncito entre sus pliegues, un nudo que se formó en su vientre explotó al momento de que dos dedos entraban y salían de su interior con suavidad pero con ritmo, gritó ante su primer orgasmo, oleadas de algo que jamás había sentido pero que la llenaban de satisfacción le hicieron temblar de pies a cabeza. La violaban pero no era como pensaba que sería, él era cuidadoso y la preparaba, aún así su mente sabía que cuando su pene entrara en ella, dolería y así, terminaría violandola, fuera con violencia o no. Lo sintió acomodarse sobre ella y sintió su dureza fuerte y gruesa, el miedo la invadió tensando su cuerpo, una boca caliente tomó uno de sus pechos, lamió y chupó uno de sus pezones, se relajó dejándose llevar volvió a jadear y se arqueó, sus manos volaron a los brazos del hombre, apretandolos cada vez que chupaba sus pezones, movía su cadera pasando su miembro entre sus pliegues mojados sin penetrarla, se deslizó besando sus hombros su cuello y amasaba sus senos, su miembro cada vez más duro, subía y bajaba por sus pliegues, volvió a chupar sus pechos, Flor ya estaba al borde de su segundo orgasmo, un último chupetón la lanzó de nuevo por el espiral de la pasión y el éxtasis que recién descubría, estando su cuerpo en pleno órgasmo la penetró, con suavidad pero con firmeza, entró y traspaso su virginidad, la chica gritó por el dolor, era grande para su vagina y lágrimas escurrieron por sus ojos cerrados, él beso sus labios con delicadeza sin moverse, la acariciaba para relajarla, Flor estaba tensa pero la calidez y suavidad del beso la relajó poco a poco, se encontró tratando de seguir el beso y deseando que se moviera, el dolor ya cási había pasado, él se movió con lentitud, dentro y fuera sin salir de ella inicio un movimiento sincronizado hasta que levantó sus piernas y las acomodo sobre las de él cunminandolo a qué se moviera más, ella jadeaba con cada embestida que recibía, jamás había pensado que estar con un hombre fuera tan . . . Placentero, no era tan inocente, varias veces había visto como su madre tenía sexo con su padrastro, ella veía con curiosidad como el hombre se enterraba en su madre y ella gritaba pidiendo más y más. A ella le pareció asqueroso lo que hacían pero sus compañeras de escuela decían que era lo mejor. Ahora, que ya lo sabía, se sentía . . . Muy bien. Mientras ese hombre tomaba su cuerpo y ella gritaba llena de placer entendió lo que era el sexo, en medio de su orgasmo el hombre llegó al suyo y se derramó con abundancia y lujuria dentro de aquel vientre virgen. Así fue iniciada en el sexo durante toda la noche de variadas formas, sin ser forzada, y por grotesco que pareciera, a los ojos de la jovencita, ese hombre sería de ella, si podía se quedaría con él, sabía lo que le pasaría si la llevaban con las demás, este hombre era su única esperanza de seguir con vida.
Éstos, eran los pensamientos de una niña, que toda su vida había sido tratada a golpes y vivido en la pobreza y la violencia, por primera vez, alguien, le había dado algo que le gustó, y la trato con ternura, aún y cuando al final, seguía siendo la violación de una menor de edad.
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Regresé!!! Qué les pareció?? Un capítulo que quizás les parezca extraño. Comenten por favor.
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