Los personajes y las imágenes utilizadas en la historia no son de mi propiedad. Todos los derechos a sus creadores.

Lenguaje y contenido fuerte.

Agradezco las portadas de yan_skiblue y de Mónica tadakatsu.
Una disculpa por la redacción.

©® Historia con derecho de autor.

<<>>, " ": Son pensamientos del personaje.

Aviso: Capitulo con contenido de abuso.

^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓^↓

" Desde que te quiero, he vuelto del silencio a la palabra, y he vuelto de la oscuridad a la luz."

La música de Jazz inundaba el salón, los hombres importantes se paseaban con las chicas bellas de la compañía Vanderbilt, el mejor shampagne, y las bebidas exóticas.
Midoriko observó todo el salón, definitivamente un lugar de ricos, ostentando opulencia.
<< "Donde te metiste Sesshomaru">> meditaba, tomando una copa de shampagne. Bankotsu debía estar con él, seguro, esos dos no se separarían a menos que . . . Midoriko enfoco la vista en el hombre alto de pelo negro y traje que hablaba con el señor Vanderbilt, se quedó mirándolo por un momento, lo vio detenerse y hablar con alguien, entonces lo reconoció.
<<" Así que aquí es donde estas">> una sonrisa enigmática surco los perfectos labios rojos de Midoriko.
<<" Esto será muy interesante">>
Con una seña le hablo al joven que la acompañaba, y dandole indicaciones le señalo con disimulo aquel hombre, el joven asintió y se alejo saliendo al jardín.

Sango se encontraba con Kagome en la entrada, lucía un precioso vestido de Prada de espalda descubierta largo en la parte de atrás, terminando en una pequeña cola, escote estilo princesa y mangas largas de gasa transparente en color negro, no quería verse gorda,el estilo era tan hermoso que resaltaba las espectaculares curvas del cuerpo de Sango.

- Kag, en serio, ¿me veo bien, no es muy entallado?

Sango no llevaba sus acostumbrados lentes de aro, se puso lentes de contacto, así se apreciaban sus bonitos ojos grises.

- Sango te ves . . . espectacular, eres muy hermosa que daría yo por tener algo de tus curvas, me haces sentir como una tabla.

Sonriendo le tomaba las manos a su amiga, mientras la admiraba.

- No me dejes comer, siento que si como algo este vestido reventara.

Kagome sonrió, moviendo la cabeza de un lado a otro. Sango tenía una figura hermosa, cintura pequeña, vientre plano, pero insistía en que estaba gorda, con su estatura se veía muy bonita y con el pelo recogido con algunos mechones sueltos dejaba ver su largo cuello, afinando sus facciones, se veía preciosa.
Hiba a reprenderla por insistir en el tema, cuando llegó Jack acompañado de koga, Sesshomaru y Bankotsu, el corazón de kagome dió un vuelco y dejo de respirar.
Sesshomaru era la personificación de la elegancia con su largo pelo recogido en una cola baja, el traje negro de Armani hecho a medida, robaba el aliento., Todas las mujeres que se encontraban en el salón voltearon a mirar a los recién llegados, y más de una lanzo exclamaciones ahogadas. Sesshomaru con su semblante frío, ignoraba a todas, pero al verla, sus ámbares ojos cobraron un brillo de admiración, sintió ser atravesada por su profunda mirada, evaluandola de pies a cabeza, cómo si la tocará, y una punzada de deseo le recorrió toda la espina dorsal. Por dios!! Por qué siempre le causaba ese efecto la mirada de Sesshomaru, parecía querer comercela, un intenso rubor cubrió las mejillas de kagome, Jack fue el primero en acercarse a saludarla dándole doble beso, la tomo de las manos mientras la admiraba.

- Kag, cariño te vez, hermosa, Ayame hizo su mejor trabajo y con el pelo suelto te vez . . . Divina.

La voz ronca y melodiosa de Jack la saco de su trance. Y sonriendo les dió la bienvenida.

- Muchas gracias, también tu estás muy guapo.

- y para mí, no hay elogios?

Koga se acerco a Kagome y le dió un gran beso en los labios tomandola de las manos le dió una vuelta para admirarla mejor, una gran sonrisa pícara se formó en su atractivo rostro.

- Hermosa!!! Si no estuviera Jack aquí, te robaría para casarme contigo. Sabes que siempre has sido mi amor platónico.

Sesshomaru achico los ojos ante la actitud de koga con kagome, Sino supiera que Jack y koga eran pareja, lo hubiera golpeado.

- Muy gracioso koga, sugiero que te disculpes si no quieres que Jack te mande a dormir a la sala.

Todos rieron tras el comentario de Sango, Bankotsu no apartaba la mirada de ella desde que entró, se veía hermosa, y al girarse hacia Jack para saludarlo, le regaló una espectacular vista de su espalda desnuda y su redondo trasero delineado por el vestido entallado, una dolorosa erección cobro vida en sus pantalones, trago grueso, de no ser por el largo del saco hubiera sido demasiado vergonzoso y notoria la reacción de su cuerpo. !Demonios! Cruzo las manos al frente, mientras terminaban los saludos, Sango se volvió a ellos y admiro a Sesshomaru elogiando su aspecto, Sesshomaru agradeció con una leve inclinación de cabeza, al saludar a Bankotsu un rubor tiñó sus mejillas por la manera abierta con que la admiraba con una sonrisa de lado, reaccionando a su profunda y ronca voz.

- Se ve hermosa esta noche señorita Sango.

Inclinándose para tomarle la mano y besarle el dorso, Sango se llevó la otra mano al pecho cohibida por tan galante saludo, se le puso la piel chinita al sentir los cálidos labios en su piel, provocándole un extremecimiento.

<<Ay dios!! Creo que ya estoy mojada>> su respiración entrecortada no la dejó articular palabra.

- Me concederas un baile, en algún momento de la velada?

Sesshomaru veía con suspicacia la interacción de esos dos, ya sospechaba que algo había, una imperceptible sonrisa se formó en los inexpresivos labios de Sesshomaru.
Su mirada busco la de kagome y se acerco, Kagome lo miro a los ojos mientras Sesshomaru le extendía la mano, que hipnotizada, la tomo. Sesshomaru se la llevó a los labios besando la palma, una oleada de ansiedad le inundó el vientre, recobrando la compostura aparto la mirada.

- Bienvenido, espero que se diviertan.

Sesshomaru sin soltarla, con mirada enigmática le susurro.

- Espero hacerlo . . . En tu compañía.

Su voz, ronca y sensual, le erizo los vellos de la nuca. Este hombre era una bomba sexual andante, y siempre tenía que decir algo que la ponía, nerviosa y excitada.

Siguieron recibiendo a los invitados, kagome de ves en cuando buscaba con la mirada a Sesshomaru, y de pronto lo enfoco tomando de las manos a la hermosa mujer de vestido rojo, como si fueran viejos amigos mientras ella lo besaba en la boca , poniendo sus manos en el pecho de Sesshomaru, una punzada de celos le atravesó, formándose un nudo en su garganta, al tiempo que veía también a Bankotsu tomar de la cintura a la mujer, aceptando otro beso en la boca igual al de Sesshomaru con una gran sonrisa, parecían conocerla, ambos la tomaban de forma muy íntima de ambas manos.
En ese momento, recibió un codazo por parte de Sango enfocando la vista en lo que le señalaba, llegaban en ese momento nada menos que las hermanas Mahmoru, Sara y Aby, con su padre Ahago, dueños de la compañía, ZUBA, la competencia en moda de Vanderbilt. Sango no las soportaba, pues Aby tuvo un romance con Miroku al principio de su relación, y Sara, envidiaba a Kagome, por ser la dueña absoluta de Vanderbilt, mientras que ella sólo tenía acciones a partes iguales con su hermana.
Con amabilidad y educación los recibieron como los invitados de su padre, dándose sonoros besos sin tocarse de manera más que hipócrita.
Ahago, saludaba de forma efusiva a Naraku. Mientras la vos lánguida de Sara se dirigía a su padre.

- Que belleza de mansión!! Ya le hemos pedido a papá que tiene que conseguir una tan hermosa como ésta, señor Vanderbilt, lo felicito por tan espléndida fiesta.

Sara se acerco a besar la mejilla de Naraku, siempre había intentado seducir a tan apuesto y millonario hombre, pero él la rechazaba con fría amabilidad. Para él era una chiquilla mimada, sus conquistas eran verdaderas mujeres, consientes de que sólo era una relación pasajera.
Sango fue jalada por unas manos frías, Ahago, nunca perdía la oportunidad de poner las manos en los voluptuosos atributos de la hija de kotaro, a él le gustaban las chicas jóvenes y voluptuosas. Sango era su obsesión . . .desde aquel día.
Abrazo a Sango recorriendo su espalda desnuda tratando de tocar su voluminoso trasero, cuando una mano firme pero gentil la retiró de sus brazos, atrayendola hacia un pecho ancho y musculoso.

- Señorita kotaro, me prometió un baile.

Y con una inclinación de cabeza se disculpo con Ahago, que lo miraba con un brillo de ira en los ojos.

- Señor, con permiso.

Sango aún temblaba pensando en cómo ese horrible hombre se atrevió a tocarla.
Bankotsu la atrajo hacia él, tomandola con delicadeza de la cintura, colocando su mano cerca del pecho mientras bailaban.

- Te encuentras bien? Pensé que necesitabas ayuda.

Sango elevó su mirada, reflejaba temor,  su cuerpo temblaba,  pero contesto en un murmullo.

- Gracias. . . Te lo agradezco.

- Es un placer servirte, dime, quién es el viejo verde?

Ante el comentario sarcástico de Bankotsu, no le quedó más que sonreír, como agradecía su intervención, una oleada de asco la invadió de sólo recordar sus manos recorriendo su espalda, no toleraba a ese hombre, desde que lo vio varias veces en su adolescencia visitar a su padre pues eran socios en aquel entonces, le daba miedo las miradas lividinosas con la que recorría su ya entonces bien formado cuerpo, pero eso no había sido lo peor.  La mente de Sango la llevo al peor día de su vida, el día en que ese hombre, acabo con su inocencia.

Recuerdo de Sango:

Un día se encontraba sóla en casa, pues sus padres y hermano salieron para retirarle la escayola a Kohaku, cuando ese hombre apareció buscando a su padre, las sirvientas lo hicieron pasar al despacho de su padre y le avisaron, ella por educación fue a saludar, nunca se espero que el hombre se acercará a saludarla y en el proceso la abrazó recorriendo su espalda hasta sus nalgas tocandolas y apretandolas, Sango intento apartarse, pero un fuerte brazo la sostuvo de la cintura elevándola sin dejarla moverse, el depravado hombre la acarició por debajo de su falda corta, amasando su duro trasero mientras lágrimas de impotencia bajaban por las mejillas de Sango, los dedos del miserable encontraron la orilla de sus panties , y se introdujeron con avides tocando sus labios vaginales buscando su clítoris, Sango se mordía los labios, sabía que aunque gritara nadie la escucharía pues el despacho de su padre no dejaba salir ningún sonido.
El infame hombre salibaba lleno de ansiedad mientras mantenía inmóvil a la jovencita, era un hombre muy grande y fuerte para ella en aquel entonces. Sango logro safar una de sus manos y lo aventó, pero el hombre sonrió de manera siniestra, la puso boca abajo sobre uno de los sillones mientras le inmovilizada las manos con su corbata y le metía un pañuelo en la boca, Sango ya lloraba a gritos presintiendo lo que venía.
Le saco las panties  levantandole la falda para deleitarse con la vista de su precioso trasero. Se dedicó a besar y chupar sus muslos su  respiración acelerada indicaba lo excitado que se encontraba, un bulto enorme se formaba en su entrepierna, acercó uno de los varios cojines que adornaban los sillones y lo puso bajo el vientre de la chica, ella se revolvía con desesperación, le abrió las piernas de forma brusca, acercando su rostro al oído y con voz amenazante le advirtió.

- Si te mueves, te dolerá más, y no creo que quieras que tu madre sufra otro accidente, verdad? Quédate quieta, te va a gustar, tienes un cuerpo delicioso y quiero ser el primero en probarlo, demás está decirte que no debes contárselo a nadie pues de tu silencio depende la vida de tu madre, dime si lo has entendido.

Sango aterrada, miraba el asqueroso rostro del hombre , era atractivo pero la mirada lasciva con que la miraba provocaba el más infinito asco en ella,  nada podía hacer, sus padres tardarían por lo menos tres horas más y los sirvientes no entrarían , el hombre ya había cerrado con seguro, nadie vendría en su ayuda, llorando desesperada, asintió con la cabeza esperando lo peor.
Ahago, se inco en el piso mientras acariciaba las piernas de Sango besando y chupándole los glúteos con ansiedad, disfrutando de esa carne joven y suave, desde que la vió la deseaba y está era su gran oportunidad de probarla, después lidiaria con las consecuencias.
Llegó a su lugar deseado separó los pliegues que cubrían el bultito sonrosado y delicado, lo probó con la lengua degustando el dulce sabor, la sintió temblar, y se dedicó a lamer y chupar hasta que la escucho jadear, una sonrisa siniestra se formó en sus labios mientras lamía y tragaba todo el delicioso orgasmo de la chica.

- Eso, vez como te ha gustado, pero esto es sólo el comienzo, veraz que vamos a disfrutar juntos mucho más.

Sango lloraba ya sin moverse, de manera impotente su traicionero cuerpo reaccionó ante las caricias de ese perverso hombre, teniendo su primer orgasmo. Se sentía sucia, pero aún le faltaba por experimentar algo mucho más atroz.

( CONTINUARA)

Creo que, el capítulo no necesita explicación, muchas gracias por sus✨, comenten por favor, la infamia sufrida por Sango se las contaré en el siguiente capítulo.