Pasaron dos día más hasta que la joven nuevamente tomara un vuelo de regreso a Francia.

La noticia de que Kureha podría seguir recuperándose en casa alivió profundamente a (Tn) e hizo feliz a sus amigos, prometiendo Chopper cuidar de doctorine hasta que sane al completo.

La joven con gesto triste se despidió de sus amigos, no sólo porque se marchaba nuevamente, si no porque ahora estaría sola en París.

Sola en la ciudad de la cual se enamoró y en la cual su corazón comenzaba a latir lleno de amor hacia un chico.

Un chico que ya no estaba en su vida.

Sin embargo, sus amigos al ver su gesto triste quedaron con la joven en hacer más videollamadas y le recordaron las increíbles vacaciones que les esperaban juntos a finales de agosto. Animando así un poco a la joven.

El vuelo de regreso fue tranquilo, ella permaneció todo el trayecto con sus auriculares puestos intentando evadirse del mundo y señalando así a su compañero de vuelo que no estaba abierta a mantener una conversación.

Al poner un pie en Francia, tuvo esa extraña sensación de hacerlo sin ningún equipaje, tan solo su móvil y sus auriculares frente a todo el ajetreo de maletas corriendo por los amplios correderos y pasillos del aeropuerto.

Encendió la pantalla de su móvil y se dispuso a pedir un taxi que le llevara de regreso a su apartamento. Ignorando así, los ojos que la observaban desde distintos puntos de ese lugar.

Ojos que analizaban y seguían sus movimientos.

Fue en ese momento en el que en la mansión Vinsmoke, Judge recibió la notificación que tanto había esperado.

- (Tn) acaba de llegar a París, señor. -informó vía mensaje. - Acaba de llamar a un taxi.

Judge - Ya sabéis que hacer.

- Si, señor.

Mientras tanto...

Ichiji se encontraba sentado en su despacho, tenía un aspecto desenfadado e impropio de alguien como él. Alguien de alta cuna que siempre había cuidado su imagen.

Llevaba un pantalón oscuro y una camisa de tirantes blanca que dejaba al descubierto el tatuaje que tenía en su brazo.

Un tatuaje que (Tn) amaba y a la que le encantaba repasarlo con la yema de sus dedos provocando al pelirrojo un grado de excitación. Aún más cuando en lugar de los dedos usaba sus labios.

Un recuerdo que trató de dejar ir mientras observaba la red social donde la joven se encontraba junto a sus amigos.

Su corazón se detuvo durante unos segundos al ver una nueva publicación en el perfil de su hermano. Una publicación de una foto en la que salía él sonriendo al móvil junto a (Tn). Parecían estar sentados en el restaurante del rubio. Ambos tenían una sonrisa tierna mientras ella tenía su cabeza ligeramente ladeada hacia el hombro de su hermano.
A los pies de la foto, se podía leer la descripción que le dedicó Sanji.

Una descripción que Ichiji sintió que también iba para él en modo de ataque.

"Siempre voy a estar aquí para ti, amándote sinceramente, sin mentiras y sin obstáculos."

Apretó un poco sus labios y observó la serie de comentarios de aquella foto, muchos de ellos eran de sus amigos mandando mensajes cariñosos hacia ambos y hacia ella, pero había otros que solo provocaron molestia en el pelirrojo. Y eran esos comentarios de hombres que comenzaban a preguntar por el perfil de la chica.

Unos comentarios que le recordaron a las palabras de aquella pitonisa acerca de que la joven tenía admiradores.

En ese momento la puerta de su despacho se abrió y antes de que él joven pudiera reaccionar, una voz inundó aquel lugar.

Niji - Oh pareces molesto. -dijo entrando al interior del despacho y cerrando la puerta tras de si.

Ichiji - ¿No sabes llamar?. - cuestionó apagando la pantalla de su móvil.

Niji - No. -respondió sentándose en el sillón que había frente a él. - Vine a comentarte que ya organicé las reuniones que me diste.

Ichiji asintió sin decir nada más y Niji lo comenzó a analizar con su mirada provocando que el pelirrojo levantase una ceja ante ese análisis.

Niji - ¿Tus vacaciones las vas a pasar sin hacer nada?.

Ichiji - No estoy de vacaciones.

Niji - Pero no tienes trabajo ya. -añadió. - Tomemos toda tu agenda para que quedases libre y sólo te lo pasas aquí metido con pinta de vagabundo.

Ichiji frunció ligeramente el ceño viendo a su hermano, quien le sonrió un poco.

Niji - Pensé que o hiciste para tomar cartas en el asunto, no me decepciones.

Ichiji - ¿A qué te refieres?.

Niji - No soy partidario de la idea del amor, pero sé que te has encaprichado de esa mujer... como quiera que se llame. -dijo haciendo un movimiento de mano. - Sería humillante para un Vinsmoke no hacer nada al respecto por tenerla.

Ichiji - ¿Qué propones?.

Niji - Secuestrarla y encerrarla aquí. -dijo de forma casual.

Ichiji suspiró ante aquella idea y volvió a bajar su mirada hacia su móvil comenzando a ignorar a su hermano.

Niji - Es lo que yo haría, la tendría sólo para mi en mis aposentos y nadie tendría por qué enterarse. -dijo sonriendo.

Ichiji - Ella merece mucho más que ese tipo de vida, Niji.

Niji - Oh vamos, tan solo imagina poder encontrarla en tu cama cada noche. -dijo con una sonrisa. - Podrías desahogarte con ella de tanto trabajo.

Ichiji apretó ligeramente sus labios ante esa fugaz visión.

Una visión que rechazó cerrando un poco los ojos y volviendo a mantener su postura.

Ichiji - Ella merece estar en mi vida de manera formal, no sólo en mi cama.

Niji - Tsk... aburrido.

Ichiji - Algún día te enamorarás y entenderás lo que digo.

Niji hizo una mueca de asco sacando la lengua y negó rotundamente.

Niji - Antes me pego un tiro en la sien.

Ichiji - Asegúrate de terminar tus reuniones antes de hacerlo.

Niji - Insensible.

Ichiji miró su reloj y se levantó de su asiento llamando la atención del peliazul.

Niji - ¿A dónde vas?

Ichiji - A dar una vuelta.

Niji - ¿Un martes? Los locales nocturnos no abren hoy... ¡Eh!. -gritó al sentirse ignorando viendo a su hermano salir del despacho.

Mientras tanto...

La joven observaba por la ventana del taxi la ciudad parisina en aquel día de verano. Hacia calor y el interior fresco del taxi creaba un ambiente agradable frente a las altas temperaturas.

Un ambiente que se volvió tenso cuando el taxita giró su volante entando por una calle secundaria alejándose de la principal.

(Tn) apagó su música y comenzó a analizar las calles por las que ese taxita iba.

Calles que ella no reconoció.

(Tn) - Señor, por aquí no es. -le dijo en tono tranquilo a pesar de sentirse nerviosa.

El taxita no respondió.

La joven comenzó a marcar el número de la policía justo en el mismo instante en el que el coche se detuvo al lado de las zonas bajas del río Sena. Un lugar alejado de las miradas de curiosos. Frente a ellos había un gran coche negro y pudo ver como a ambos lados del taxi se situaban hombres vestidos de negro portando lo que parecía ser un arma y ahí, su corazón comenzó a latir más rápido.

- Baje del coche. -le dijo el taxita en tono alto.

La chica apretó su mandíbula sintiéndose nerviosa.

Sintiendo como su cuerpo comenzaba a paralizarse del miedo.

- Baje del coche. -repitió, esta vez en un tono más alto.

(Tn) desabrochó su cinturón y abrió la puerta del coche. Sintió el sofocante calor golpear su cuerpo al salir del ambiente frío del taxi.
Observó a aquellos hombres de mirada sería y sintió a alguien situarse en su espalda.

Se giró y aquel hombre, con arma en mano, le apuntaba al coche que había delante de ellos.

Tenía miedo, aquello parecía ser una escena de película en la que el protagonista o la víctima se presentaba a una escena en la que posiblemente sería amenazado o asesinado.

Sus piernas comenzaron a caminar hacia el coche. La idea de comenzar a correr no era una opción estando rodeada de aquellos hombres con armas. No le quedaba otra opción que ir hacia aquel lugar.

Al llegar, uno de los hombres abrió la puerta y la joven entró dentro percibiendo un aroma a perfume y un ambiente fresco.

Se sentó en el asiento de tapizado beige y la puerta se cerró.

Aquella parte posterior del coche estaba formada de dos largos asientos horizontales con una pequeña mesa entre ellos. En aquella mesa se encontraba una cubierta dorada con dos botellas de costoso vino francés y dos copas de fino vidrio.

Alzó su mirada pudiendo ver a alguien sentado frente a ella.

Alguien que le provocó una sensación de poder y una fuerte energía.

Mientras tanto...

- Te vas a enfrentar a una fuerte lección, Ichiji Vinsmoke.

El joven frunció el ceño viendo a aquella pitonisa barajar unas cartas con simbologia extraña.

- Una lección que sigue teniendo las mismas opciones de salida, sigue teniendo el mismo modo de cambiarlo todo a tu favor.

Ichiji - ¿Qué quiere decir...?.

- En una vida pasada. -dijo señalando una de las cartas. - Actuaste desde el miedo y la posesividad por temor a perderla, y así terminaste. En esta nueva oportunidad el aprendizaje es otro. - lo miró mostrándole una carta.- ¿Recuerdas lo que te dije el primer día? Solo se logrará superar la prueba si se actúa desde el corazón... y esa será tu prueba.

Ichiji miró aquella carta en la que aparecían dos personas tomándose de la mano mientras caminaban en direcciones distintas.

- Una prueba en la que el joven que ignoraba tener corazón, se enfrente a una situación donde tiene que hacer uso de él. -dejó la carta y observó las demás. - Pero esto no sólo depende de ti, tampoco depende solo de ella... hay terceras personas aquí implicadas que también influyen en vuestro camino.

Ichiji - Terceras personas...

- La salida a un buen futuro sigue siendo el amor.

Ichiji - Yo solo quiero que ella vuelva a mi. -le dijo comenzando a sentir molestia. - Haga algo que me permita volver a tenerla.

La mujer sonrió volviendo a tomar sus cartas.

- Y ahí nuevamente sale a relucir el miedo y la posesividad... no vas a aprender nada y la perderás para siempre.

Ichiji - ¿Y qué propones que haga?. -cuestionó irritado.

- Deja que tu corazón sea el que hable, con la persona correcta.

En ese momento, la joven abrió sus labios a modo de expectación al ver a aquella persona observarla con atención.

Sintió su poder, sintió la magnitud de lo que imponía su mera presencia.

La joven iba a hablar pero de su garganta no salían palabras que pudieran expresar el grado de sorpresa y confusión que sentía por estar allí.

Charlotte Linlin - Buenas noches, (Tn). -saludó con una sonrisa. - He oído hablar mucho de ti.

(Tn) - ¿De mi...?

Charlotte Linlin- ¿Quién no hablaría de la primera de la promoción de la universidad más prestigiosa de Francia?. -sonrió. - ¿Quién no hablaría de la científica más prometedora de su generación?.

La chica tomó aire sintiendo sus nervios aumentar.

Charlotte Linlin- Tengo el honor de permitirme hacerte una propuesta, (Tn). -le dijo tomando una de las botellas. - Pero antes, acompañemos esta conversación con una copa.

En ese mismo instante, el grito enfurecido de Judge Vinsmoke estalló en la mansión.