Un tenso silencio se formó entre ellos en aquella sala de laboratorio.

Ichiji la miraba sintiendo su corazón latir con rapidez, un estado de nerviosismo que no sintió cuando creyó estar apunto de morir en aquella reunión con la familia de Charlotte Linlin. Observaba como ella permanecía con la mirada apagada viendo la superficie de aquella mesa blanca que había entre ambos.

Pudo apreciar sus ojos enrojecidos y su rostro aún rojo debido al llanto y sintió una sensación de culpabilidad por haberle provocado eso a la joven.

(Tn) - Nunca quise creer en los rumores que había entorno a tu familia. -dijo con un tono de voz bajo y cansado. - Creía que era uno de los precios a pagar por tener un alto cargo... El soportar comentarios de personas que intentan arruinar tu reputación a costa de mentiras...

Ichiji apretó un poco sus labios y vio a la joven alzar su mirada hacia él, percibiendo una mirada llena de dolor.

(Tn) - Pero me equivoqué... y me da miedo empezar a creer a que el resto de rumores también sean ciertos...

Ichiji - (Tn)...

(Tn) - Me duele... Duele pensar que la persona a la que más amé en mi vida sea un asesino... -confesó sintiendo su voz romperse nuevamente y sus ojos empañarse en lágrimas.

Ichiji - No soy un asesino. --respondió recordando por un instante las palabras de su hermana.

La joven desvió su mirada secando sus mejillas.

Ichiji - Siento mucho todo esto... nunca quise que vieras eso. -le dijo comenzando a sentir el deseo de poder rodear aquella mesa y consolarla.

(Tn) - Pero lo vi, y agradezco haber visto tu verdadera cara...

Ichiji - Esa no es mi verdadera cara.

La chica lo miró frunciendo un poco el ceño.

Ichiji - Mi verdadera cara es la que muestro únicamente cuando estoy contigo... cuando siento que puedo quitarme esta coraza sin ser juzgado ni herido.

Ella apretó un poco sus labios intentando reprimir nuevamente las lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos.

Ichiji - Estoy enamorado de ti... te amo y haría lo que fuera por tenerte. -confesó sintiendo su voz arder. - Pero cada vez siento que hay algo que quiere alejarte de mi y me estoy quedándome sin recursos...

(Tn) - Eres tú quien se aleja, desapareciendo nuevamente por semanas sin dar explicaciones...

Ichiji - Todo tiene una explicación... y desearía poder contarte todo... pero temo que seas tú esta vez quien decida irse.

(Tn) cerró un poco sus ojos y los abrió dejando salir un brillo aún más intenso en su mirada debido a la capa de lágrimas que se formó sobre sus ojos.

(Tn) - Lamento mucho lo que voy a decirte, Ichiji.

Algo en el interior de aquel pelirrojo comenzó a quebrarse, comenzando a experimentar una nueva sensación para él.

(Tn) - Pero va a ser mejor declinar la oferta de trabajar para tu familia...

Ichiji - (Tn)...

(Tn) - Lo siento, pero no puedo... -dijo antes de levantarse de su asiento tomando su bolso.

Ichiji la miró sintiendo como todo comenzaba a derrumbarse. La joven le dedicó una mirada fugaz, una mirada donde el joven sentía que ya no había amor, solo decepción.

La chica salió de la sala dejando allí al pelirrojo, a quien le costó salir de sus propios pensamientos abrumadores. Se levantó sintiendo una oleada de nerviosismo comenzar a apoderarse de su cuerpo. Sentía como poco a poco todo parecía ponerse en su contra, parecía como si la vida se estuviese riendo de él impidiendo que consiga estar con ella.

Comenzó a correr saliendo de aquella sala y recorriendo los pasillos llamando la atención de los alumnos.

No podía permitirse aquello, no podía permitirse comenzar a perderla.

Vio a la joven a lo lejos saliendo del edificio a paso rápido. Aumentó su velocidad y al cabo de unos segundos, pudo ponerse a su altura sobresaltando a la joven.

Ichiji - No te vayas. -dijo con voz casi desesperada mientras la sujetaba del brazo.

Los transeúntes comenzaron a mirarlos por aquella escena, no era habitual ver a un hombre elegante vestido de traje correr a esa velocidad hacia una mujer, y sin dudas era un espectáculo que muchos querían presenciar.

(Tn) - Suéltame. -le pidió intentando zafarse de su agarre pero los dedos del pelirrojo eran firmes. - Ichiji...

Ichiji - Sube al coche.

(Tn) - Suéltame.

Ichiji - He dicho que subas al coche. -dijo esta vez en un tono más autoritario.

(Tn) - Y yo he dicho que me sueltes. -replicó ella comenzando a molestarse.

Ichiji frunció el ceño ligeramente al ver como la joven se estaba comenzando a enojar.

(Tn) - Suéltame ahora. - dijo volviendo a intentar soltarse, pero Ichiji mantenía su agarre.

Ichiji - Sube.

(Tn) - ¿Eres idiota?.

Ichiji - Por favor... (Tn). -dijo esta vez con un tono más bajo. - Déjame hablar, dejame explicarte todo...

La chica lo miró a los ojos pudiendo ver el dolor que se reflejaban en ellos. Pero la imagen fugaz de él ante un cuerpo ensangrentado no dejaba de aparecer en su mente.

Sin embargo, no podía su amor hacia él y fue por ello por lo que cerró sus ojos ligeramente y suspiró un poco asintiendo.

Ichiji sintió una ligera sensación de alivio y ambos se dirigieron al coche de él, quien abrió la puerta del copiloto permitiendo a la chica entrar, quien pareció volver a dudar en el último momento.

Cerró un poco sus ojos hasta que escuchó la puerta del piloto abrirse e ichiji sentarse a su lado. Cerró dicha puerta y ambos se quedaron en silencio durante unos segundos hasta que el sonido del motor del coche se hizo presente entre ellos.

(Tn) - ¿Qué querías decirme?.

Ichiji - Deja que nos alejamos de aquí. -susurró pisando el acelerador.

La joven frunció el ceño y miró por la ventanilla tratando de mantener la calma. Una calma que el pelirrojo era incapaz de llevar a su cuerpo. Sentía que su mente trabajaba demasiado rápido en barajar tantas ideas que por primera vez no era capaz de aplicar esa habilidad de poder mostrarse frío y calmado.

Dándose cuenta de que esas habilidades que su padre le enseñó desde pequeño, con la joven parecían quedar totalmente anuladas.

Con la joven parecía que su corazón quería apoderarse de la situación.

Y en aquel momento lo comenzó a odiar.

Al cabo de unos minutos, llegaron a una pequeña zona solitaria de las afueras de París. Ichiji apagó su motor y ella observó el lugar.

(Tn) - ¿Por qué hemos venido aquí?.

Ichiji - Hay personas que me están siguiendo, (Tn). -habló lanzando aquella.

(Tn) - ¿Qué...?

Ichiji - Hay personas que me tienen vigilado, personas peligrosas que llevan semanas siguiéndome. -explicó. - Por eso desaparecí, porque no pude permitirme ponerte en peligro a pesar de tenerte custodiada.

(Tn) - Espera... -susurró tratando de procesar todo aquello. - ¿Qué personas y porqué te tienen vigilado? Y... ¿custodiada?.

Ichiji - Me alié con una familia que es sumamente poderosa, quise anular nuestro trato y eso los enfureció. Desde ese día estoy vigilado, observan cada movimiento que hago.

(Tn) - ¿Pueden estar viéndonos ahora...?

Ichiji - Me confirmaron que no.

(Tn) - ¿Quiénes?.

Ichiji - Mis hombres. -respondió. -  Y ellos son los que te custodian.

La chica abrió sus ojos ante aquella afirmación.

Ichiji - Cuando te prometí protegerte... te puse un equipo de mis hombres para que te brindaran protección en todo momento.

(Tn) - Es decir... allá donde iba era siempre seguida de cerca por tus hombres.

Ichiji - Si.

La joven tomó aire mirando hacia el frente bajo la atenta mirada de él.

(Tn) - Por eso sabías donde estaba en cada momento... y por eso supiste que la pulsera me gustó...

Ichiji - Si...

(Tn) - Ichiji...

Ichiji - Te amo. - la interrumpió. - No quiero que te ocurra nada, por ello te puse la protección... nos vieron juntos en muchos lugares que frecuentan gente importante y es también peligroso para ti saliendo con alguien como yo... alguien que a tus ojos ya se ha convertido en alguien peligroso.

La joven apretó sus labios y lo miró.

(Tn) - Yo también te amo... pero no esperaba esto. -susurró.

Ichiji - ¿Qué puedo hacer, (Tn)?. -preguntó en tono bajo. - ¿Qué puedo hacer para evitar que siga sintiendo que te estoy perdiendo...?

(Tn) - Lo siento...

Aquella respuesta no sólo le confirmó a Ichiji sus palabras, si no que también le mostró que la joven parecía no saber ninguna forma en la que poder arreglar esa situación tan abrumadora que se estaba produciendo en la relación de ambos.

Iba a hablar nuevamente pero el sonido de la vibración del móvil de la joven lo interrumpió.

Ella tomó el teléfono y frunció un poco el ceño al leer el nombre de la persona que llamaba, y sin dudarlo, respondió.

Llamada

(Tn): Chopper, ¿qué ocurre?.

Chopper: ¡(Tn)!. -gritó alterado. - ¡Tienes que venir ahora!.

(Tn): ¿Qué ocurre?. -preguntó alarmádose llamando la atención de Ichiji.

Chopper: ¡Doctorine ha sufrido un accidente y ahora está grave!

El corazón de la joven se sintió quebrarse, provocando que las lágrimas comenzaran a salir alarmando aún más a Ichiji, quien oyendo todo, puso en marcha su coche dirigiéndose hacia donde tenía su avión privado.

(Tn): ¿Qué...?

Chopper: ¡Alguien estrelló su coche frontalmente con el de ella y está grave! -gritó pareciendo estar llorando. - ¡(Tn) ven... por favor...!

(Tn) miró a Ichiji esperando una respuesta por su parte, un gesto que el joven supo interpretar.

Ichiji - Estaremos allí en una hora.

(Tn) - ¿Es posible eso...?

Ichiji - Posible si, permitido no. - respondió. - Pero por ti no importa si esta o no permitido.

La joven sintió su garganta arder y comenzó a secar sus lágrimas sintiendo un fuerte dolor en su pecho. Una sensación tan dolorosa para ella que poco después permitió al joven comenzar a consolarla mientras estaban en aquel avión privado.

Ella permanecía recostada en el sillón junto con Ichiji, quien acariciaba suavemente su pelo en silencio tratando de calmarla. Dejando ambos la conversación y la situación que vivieron hace apenas unos minutos por aquel nuevo suceso.

Un suceso más importante para la joven.

Al llegar tras la hora que Ichiji le prometió que tardarían, ella entró a toda prisa al hospital adelantándose a Ichiji, quien antes de poner un pie en aquel lugar recibió una llamada desde un número oculto.

Frunció su ceño y descolgó aquella llamada guardando silencio, oyendo una voz al otro lado que supo identificar.

Una voz que le provocó una oleada de rabia y náuseas.

Charlotte: Es una pena el pequeño accidente de la abuela de esa niña, Ichiji. -dijo hablando con tono burlón. - No voy a permitir más faltas de respeto a este compromiso. Ahora mismo, sé donde encuentra ella ahora mismo, dos de mis hombres la siguen, sería una pena que corriera peor destino que su pobre abuela, ¿no crees?.

Ichiji: Eres una mal... -comenzó a hablar con rabia.

Charlotte: Tienes tres minutos para romper con ella, de lo contrario, te despedirás de su compañía en el cementerio.

El sonido de la llamada finalizada resonó en su oreja.

Sus ojos se mantuvieron fijos sobre el suelo sintiendo una fuerte presión en el pecho.

El pensar en romper con ella, era sin duda la idea que jamás se le pasó nunca por la cabeza, al contrario, deseó poder estar siempre junto a ella. Por lo que aquello solo provocó que el joven sintiera más arrepentimiento por no haber asesinado a Pudding cuando tuvo esa oportunidad.

De haberlo hecho esa situación no estaría ocurriendo.

De haberlo hecho no estaría a punto de perder a la mujer de su vida.

Comenzó a marcar el número de la joven y tras unos segundos le pidió que saliera, una petición que ella al principio rechazó pero ante la seriedad de él, aceptó.

La vio salir con gesto preocupado y triste, sin dudas estaba siendo un día demoledor para ella, y aquel sería el último golpe de gracia para terminar romper su corazón.

Ichiji - Aún no te conté algo, (Tn).

(Tn) - Puede esperar para más tarde...

Ichiji - Debe ser ahora.

(Tn) - Ichiji tengo a mi abuela en...

Ichiji - Tengo a otra mujer.

La joven dejó sus labios abiertos tratando de pronunciar la frase que estaba diciendo, pero aquella confesión provocó que ya fuera incapaz de continuar.

(Tn) - ¿Qué...?

Ichiji - Tengo a otra mujer, y estoy comprometido con ella. -dijo con frialdad.

(Tn) - ¿Esto es una broma...? -susurró sintiendo sus ojos arder. - Tú... tú y yo estamos... -trató de decir.

Ichiji - Ella siempre fue la oficial, no tú. -le dijo. - Es con ella con la que me casaré.

(Tn) - Pero... dijiste que me amabas... me diste un anillo... me...

Ichiji - Sólo jugué contigo.

La joven ahogó un sollozo apretando sus labios sintiendo como todo comenzaba a venirse encima.

Sintiendo como su corazón comenzaba a quebrarse.

(Tn) - Pero... todo este tiempo...

Ichiji - Nunca te amé, nunca quise nada contigo. -continuó. - Tan solo me divertía contigo haciéndote creer que podías tener la oportunidad con alguien como yo.

(Tn) - Tú no eres así... Ichiji... dime que esto no es verdad, por favor...

Ichiji - Soy así. -respondió. - Alguien frio que es capaz de asesinar a alguien a sangre fría. Nunca fuiste importante para mi, y nunca lo serás.

El pelirrojo no pudo continuar, sentía que se desmoronaría si continuaba con aquel papel.

Observó a la joven, quien lo miraba con ojos llenos de dolor, una mirada que provocó que el joven comenzase a odiarse.

Pero sin dudas, la imagen más dura que pudo ver aquella noche era la de la joven quitándose el anillo que él le ofreció en la Torre Eiffel. Deseó que le pegara, deseó que lo abofeteara.

Pero no lo hizo.

Ella le tendió el anillo, el cual fue depositado sobre la palma de Ichiji y sin decirle nada, la joven volvió a entrar al hospital.

Dejando a Ichiji solo tratando de no permitir a sus emociones salir.

Sintió la vibración en su bolsillo, esta vez anunciando un mensaje.

Charlotte: Bien hecho.