Capítulo 18: Cruda realidad.
"Los que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo"
Un día como cualquier otro, el sol emergía de su escondite más recóndito, dejando atrás a la luna y brindándonos luz, esperanza, paz y tranquilidad. Para mí, era un día sereno, de esos en los que deseas que el tiempo se detenga, que el cielo nunca se oscurezca y que la calma te abrace hasta la eternidad. Pero esta vez no fue así... No pude contemplar la luna con asombro como solía hacerlo. En este momento, estoy herido. No hablo de sangre, ni de fracturas, sino de algo mucho peor: estoy roto por dentro. Pero no solo yo... también ella. La pequeña dama. ¿Cómo llegamos a esto? Es una pregunta que retumba en mi mente con un eco doloroso.
En mi interior solo hay oscuridad, culpa y un profundo odio... Odio dirigido a nadie más que a mí mismo. Fui cruel con Amy. La lastimé de la peor forma posible. No merezco su perdón ni el de nadie. Destruí su amor, su confianza, su cariño. Ella solo quería ayudarme, como siempre lo ha hecho, como tantas veces le agradecí en el pasado... Pero ahora... ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué perdí la cordura?! Esa pregunta me tortura una y otra vez.
Amy estaba en el suelo, de rodillas, con la mirada perdida, luchando contra las lágrimas que finalmente empezaron a brotar. Lágrimas que yo provoqué... Y, sin embargo, yo solo miraba al suelo, incapaz de sostenerle la mirada. Cobarde, una vez más.
Me siento despreciable... un miserable egoísta atrapado en su propio rencor. Me he aferrado tanto al pasado que lo dejé devorar todo a su paso, incluso a la única persona que siempre creyó en mí. Mi castigo es este dolor que me carcome el alma.
—C-¿Cómo pudiste hacerlo...? —murmuró Amy con la voz rota. Me miró a los ojos y, poco a poco, las lágrimas cayeron con más fuerza. Fue como una puñalada directa a mi corazón. Aparté la mirada, incapaz de sostener su dolor.
Pero ella no se contuvo. Se acercó y, con desesperación, comenzó a golpear mi pecho con sus pequeñas manos temblorosas.
—Mi padre... y todas esas personas inocentes... ¡¿Cómo pudiste?!
No tenía palabras. Mi boca estaba seca y el dolor me ahogaba. Amy... ella me amaba. Me regaló las sonrisas más bellas, estuvo ahí cuando más la necesitaba, incluso cuando nadie más lo estuvo. Me llenó de momentos maravillosos, de calidez, de amor puro... Y, sin embargo, yo... yo la traicioné. Cometí el peor error de mi vida. La rompí. Le fallé. Despedacé su corazón...
Me obsesioné con mi pasado, con mi sufrimiento, con la sombra de lo que fui, y no supe valorar lo que tenía frente a mí. No supe ver que mi mayor tesoro no estaba en lo que perdí... sino en lo que aún tenía. Pero ya era demasiado tarde.
—Lo siento, Amy... Mis palabras no bastan, lo sé. No pueden devolver lo que se perdió... Pero espero que algún día puedas perdonarme. No quise gritarte... y mucho menos lastimarte —dije con la voz quebrada. Un silencio sepulcral nos envolvió.
Y entonces...
—¡Pero qué momento tan conmovedor! —Una voz familiar emergió desde las sombras de los árboles. Esa voz... hacía años que no la escuchaba y desearía que hubiera seguido siendo así.
Me giré de inmediato, colocando a Amy detrás de mí en posición de defensa.
—¡¿Qué demonios haces aquí?! —solté con furia, mirándolo con una mezcla de rabia y alerta.
—Tranquilo, no te alteres... y mucho menos intentes desafiarme —respondió con desdén. Su tono burlón solo me enfureció más. —Mephiles me contó que ahora juegas al héroe... ¡Patético! —rió con malicia.
—¿Y qué si lo soy? —dije, pero en mi interior... dudaba. Ya no todos me veían como un héroe.
—Yo diría que ya no lo eres. Pero eso no importa. He venido a llevarte conmigo. Crearemos una nueva Edad Oscura, donde los mortales sufran de la peor manera imaginable. Mephiles nos ha liberado a todos y pronto desatará el poder de las Esmeraldas para apoderarse del mundo. No tienes opción... Acepta tu destino... o ellos pagarán. Todos sufrirán como antes. Ella... y los demás. ¿Qué dices, Dark Sonic?
Salió de las sombras y dirigió su mirada hacia Amy con un destello de crueldad imposible de describir. Sus intenciones eran claras. Pero yo... no podía rendirme. No ahora.
Di un paso al frente, protegiendo a Amy con mi cuerpo. Pude sentir su miedo, leerlo en su expresión aterrada. Pero no solo le temía a él... también a mí.
—Me niego —respondí con firmeza. Su expresión cambió al instante, de burla a furia.
Me giré ligeramente y susurré a Amy:
—Amy, debes irte. Cuéntales a los demás lo que está pasando, pero... nunca vuelvas a buscarme. Olvídame.
Sus ojos se abrieron de par en par. Mi pecho se apretó al ver su expresión de dolor. Decir esas palabras me desgarró por dentro... La herí otra vez, quebré ese frágil y cálido corazón. El sufrimiento me consumía. Despedirse es lo más difícil, sobre todo cuando se trata de la persona que más amas.
—¡Vete! —grité, con el alma hecha pedazos.
Ella corrió... y con cada paso que daba, sentí que mi mundo se alejaba. Sabía que jamás volvería. Que mi vida... se fue corriendo con ella.
Dicen que la vida es hermosa. Pero si alguna vez la encontré... en este momento me ha abandonado.
—¡Te arrepentirás de esas palabras! —rugió la criatura frente a mí. Un halcón de ojos rojos, más oscuros que los míos, con un pelaje anaranjado carente de vida. Su presencia era fría, vacía. —Eres patético y débil. No tienes ninguna oportunidad contra mí —espetó con burla.
Sin previo aviso, lanzó un ataque. Me moví rápido, pero sus golpes eran constantes, feroces. Algunos los esquivé, pero otros... me alcanzaron con brutalidad. Cada impacto drenaba mi fuerza, debilitándome poco a poco. Hasta que...
Mi aura se desató.
Me volví oscuro.
Pero... incluso así... no pude vencerlo...
Corro tan rápido como mis pies me lo permiten, pero tropiezo con el dolor que me consume el corazón. Cada latido es una punzada, un eco del tormento que me deja su despedida. No entiendo cómo él pudo traer tanto caos y destrucción, pero lo que más me destroza no es eso... sino dejarlo ir. "Olvídate de mí"... ¿Cómo pretende que lo haga, si él es lo que más amaba? Mi alma se desgarra con cada paso que doy, como si al avanzar, parte de mí se extinguiera en la oscuridad que lo envuelve. Me tortura tanto abandonarlo, no quiero, no puedo... pero ya no tengo elección.
Llego al pueblo antes de darme cuenta. Apenas cruzo el parque que parece más un bosque, un laberinto de sombras y recuerdos. Las luces del pueblo parpadean ante mis ojos nublados por las lágrimas, y cuando finalmente me encuentro frente a mis amigos, no tengo palabras. Quiero hablar, quiero gritar lo que sucedió, pero solo mis lágrimas responden. "¿Qué pasó, Amy? ¿Dónde está Sonic?", escucho una y otra vez, pero cada pregunta es un puñal clavándose más profundo en mi pecho. No puedo responder, no cuando aún siento su voz retumbando en mi cabeza, no cuando su adiós sigue ardiendo en mi piel.
—Sonic... no es quien todos creíamos —logro susurrar, sintiendo mi corazón romperse en mil pedazos. Mi voz apenas se sostiene mientras les explico lo sucedido. Cada palabra me quema por dentro, reviviendo el instante en el que lo vi desaparecer de mi vida. Algunos quedan atónitos, otros llenos de furia, pero hay alguien que permanece inmutable... Shadow. Su mirada no se altera, pero algo en su postura me inquieta. Siempre ha sido serio, pero esta vez hay algo diferente, como si supiera más de lo que deja ver.
—¿Cómo es el aspecto de ese halcón? —pregunta Blaze con voz tensa.
Me esfuerzo por recordar cada detalle, aunque la imagen ya está grabada en mi memoria como una pesadilla imborrable.
—Sus ojos... de un color granate profundo. Sus alas inmensas... todo su cuerpo es anaranjado con algunas plumas blancas y grises... —mi voz se apaga en el silencio expectante.
De repente, un estruendo sacude el suelo, y la tierra misma parece temblar bajo nuestros pies. Un rugido de destrucción resuena a pocos metros de distancia. Al girarme, veo el horror desplegarse ante mis ojos. Ahí están... Sonic y ese halcón, enfrascados en un combate brutal. Pero... ¿es realmente Sonic? O lo que queda de él...
Sonic está herido, su cuerpo cubierto de cortes profundos, la sangre manchando su pelaje azul. Y aun así, sigue luchando. Intenta golpear a su enemigo, pero es demasiado rápido. Antes de que pueda reaccionar, el halcón lo derriba con una fuerza demoledora. El impacto resuena como un trueno, levantando polvo y gritos de los testigos aterrados. El aire se llena de un silencio asfixiante cuando la criatura posa su pie sobre el pecho de Sonic y, sin piedad alguna, cierra su garra alrededor de su cuello, apretando... arrebatándole el aliento poco a poco.
Las personas comienzan a perder la cordura. Gritos de desesperación estallan a mi alrededor, algunos huyen despavoridos, otros simplemente se paralizan, atrapados por el terror.
—Debemos ocultarnos —murmura Sky con voz temblorosa, su mirada clavada en la batalla. Todos lo miramos, buscando respuestas, buscando algo a lo que aferrarnos. Su siguiente frase hace que el miedo se vuelva aún más real.
—Él es Minos. Uno de los seres más poderosos y crueles de este mundo, algo así como un rey... o un dios. Y el otro... —traga saliva antes de continuar—. Es Dark Sonic.
El silencio que nos envuelve es peor que cualquier grito.
En el campo de batalla, Sonic vuelve a su color azul. Es él... pero sigue siendo golpeado, una y otra vez, como si su existencia misma no tuviera importancia. Cada impacto me retuerce el alma, cada herida en su cuerpo es como un cuchillo atravesando el mío. Quiero hacer algo, pero... ¿Qué puedo hacer?
Mi corazón grita su nombre, pero mi voz no encuentra salida. Solo puedo ver, impotente, cómo el amor que un día sentí ahora se transforma en el dolor más cruel que jamás haya experimentado.
"Y todo eso que un día fue amor, hoy lamentablemente se transformó en dolor."
Hola!!!!!! X3
perdón por tardar xd espero les guste y no se aburran porque es un poco mas largo... estaba inspirada xd no olviden dejar su comentario y voto para saber como les pareció el capitulo :3 nos vemos en unos días.
creo que antes de entrar a la escuela podre escribir dos capítulos mas según la agenda el sabado es el próximo >w< que tengan buen día.
[Cualquier error se corrige al final]
Capitulo dedicado a: DaniRamirez118
By:chimuelo78
25 de Enero 2018
Edición: 09/02/2025
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