Capítulo 1: Algo extraño.
"No importa lo rápido que viaje la luz, siempre se encuentra con que la oscuridad ha llegado antes y la está esperando"
Terry Pratchett
La vida en Mobius transcurría en armonía. El viento surcaba Green Hill Zone con su silbido agudo, acariciando tanto las imponentes ciudades como los apacibles poblados. Sus habitantes vivían en paz, aunque de vez en cuando la sombra de la amenaza se cernía sobre ellos. Villanos como Eggman anhelaban el dominio absoluto, pero siempre había alguien dispuesto a arriesgarlo todo para proteger a los más indefensos. Y sí, ese alguien era Sonic, el erizo.
Sin embargo, esta historia comienza cuando una antigua pesadilla regresa. Mephiles, aquel ser envuelto en tinieblas, había vuelto, pero esta vez no solo deseaba acabar con Sonic... ahora lo quería todo.
—¡No te dejaré ganar tan fácilmente, Mephiles! —exclamó Sonic, desafiando a su propio destino.
El demoníaco ser respondió con una carcajada macabra.
—Solo estás retrasando lo inevitable, erizo insolente.
Sin dudarlo, Sonic corrió a toda velocidad, empujando sus habilidades al límite. Se lanzó en un Spin Dash directo contra su enemigo, pero Mephiles, ágil y despiadado, contraatacó alzando una esfera de energía oscura. El impacto fue tan brutal que Sonic salió despedido por los aires y, al caer, su cuerpo quedó inmóvil sobre la tierra provocando que un líquido carmesí se esparció a su alrededor.
El mundo pareció contener el aliento. Todos observaban la escena, paralizados por el horror., pero Shadow no titubeó. Sin dudarlo, se lanzó contra Mephiles, dispuesto a luchar sin embargo, el enemigo era más fuerte de lo que imaginaban.
—No lograrán vencerme... Ahora soy más poderoso que todos ustedes juntos —se jactó Mephiles con una sonrisa perversa.
Sonic y Shadow luchaban con todo lo que les quedaba, pero la verdad era innegable: Mephiles los superaba. No solo resistía cada uno de sus ataques, sino que parecía disfrutar viendo cómo sus esfuerzos se volvían inútiles. Pero rendirse no era una opción. Había demasiado en juego. Debían destruirlo, sin importar el precio.
«Si tan solo Mephiles no hubiese destruido las Esmeraldas del Caos... Esto sería más fácil. Pero no pienso rendirme. Un momento...».
Sonic sintió una chispa de esperanza. Con sigilo, deslizó la mano hasta su guante y sacó un objeto brillante: una esmeralda. La única que había sobrevivido a la devastación. Aquel fragmento de poder podía significar la salvación... o la perdición absoluta. Pero era su única oportunidad. Sonic tenía un plan. Uno arriesgado. Uno que podría costarle la vida. Pero no dudó en ponerlo a prueba. Mientras continuaba luchando, entre jadeos y heridas abiertas, se dirigió a Shadow con un tono grave:
—Debes usar toda tu fuerza en un solo ataque...
Shadow frunció el ceño.
—No seas tonto, Sonic. Así no lo venceremos.
—Confía en mí. Es peligroso, pero es nuestra única oportunidad. No dudes.
El erizo negro lo observó por un instante. Finalmente, asintió.
—Está bien. Lo haré.
Con determinación, Shadow se quitó los anillos de sus muñecas liberando su verdadero poder. Antes de partir, dirigió una última mirada a Sonic aferrándose a la confianza que este depositaba en él. Luego, fijó su vista en Mephiles.
Debía engañarlo. No podía levantar sospechas.
Con astucia fingió estar agotado tambaleándose, mientras Sonic seguía su ataque frontal. El erizo azul se arrojaba contra Mephiles una y otra vez, soportando cada golpe, cada herida que su enemigo le infringía. Su cuerpo estaba al límite. La sangre se deslizaba por su piel azul, pero no se detenía. Sabía que lo que estaba por ocurrir no era una buena idea... sin embargo, no había alternativa. Entonces, Shadow se colocó en posición de defensa frente al Sonic Team, concentró toda su energía y, en el momento justo, desató su ataque definitivo.
Mephiles, cegado por su propio sadismo y entretenido con Sonic, no lo vio venir.
La embestida atravesó su pecho, arrancándole un alarido de agonía. Cayó de rodillas, debilitado... pero no vencido. No podía aceptar la derrota sin cobrar venganza.
—¡Cometieron el peor error de su vida, malditos erizos! —gruñó con furia.
Con esfuerzo, alzó su brazo tembloroso y lo apuntó hacia Shadow, quien apenas podía mantenerse en pie. Su voz adquirió un tono siniestro, impregnado de odio.
—Nunca acabarán conmigo. Esto solo es el principio. Prepárense para lo que vendrá... Y tú, Shadow... lo pagarás.
Antes de que alguien pudiera reaccionar, desató su último ataque: la temida "Lanza Oscura del Caos". Sonic conocía bien ese ataque. Pero esta vez... parecía más fuerte. Más oscuro.
¿Acabaría con Shadow?
El erizo negro cerró los ojos. No tenía fuerzas para esquivarlo. Se preparó para recibir el golpe final... Pero nunca llegó.
Un destello cegador iluminó el campo de batalla. Sonic se había interpuesto.
Había alzado la Esmeralda del Caos en el último instante, absorbiendo el impacto de la Lanza Oscura. La energía desatada provocó una luz deslumbrante que lo envolvió todo. El destino de la batalla estaba a punto de decidirse.
A lo lejos Knuckles mencionó con un rostro sombrío: —El corazón más puro ha recibido el ataque más malvado y poderoso de todos— provocando que todos lo mirarán.
El resplandor era cegador, envolviendo todo en una luz imposible de atravesar. Nadie podía ver nada. Y cuando, finalmente, la luz se disipó, la imagen que quedó fue desoladora: Sonic yacía sobre la hierba, su cuerpo cubierto de heridas, la sangre tiñendo de rojo el verde pasto. Entre sus dedos, la Esmeralda del Caos, ennegrecida, sin poder alguno. Un grito ahogado rompió el silencio y, en un instante, todos corrieron hacia él.
Pero, contra toda lógica, Sonic se obligó a ponerse de pie. Sus piernas temblaban, su cuerpo protestaba con cada movimiento, dejando tras de sí un rastro escarlata. Sus amigos intentaron sostenerlo, pero él apartó sus manos con un gesto decidido. Lentamente, con pasos tambaleantes, avanzó hacia Mephiles.
El miedo y la preocupación se reflejaban en los rostros de todos.
—Esta vez no ganarás, Mephiles —declaró Sonic con voz firme, aunque débil.
El ser de sombras sonrió con arrogancia.
—Estás cometiendo un grave error, erizo.
—Acepto las consecuencias... con tal de destruirte.
Sonic levantó la Esmeralda del Caos con la última fuerza que le quedaba. En un acto de pura voluntad, el brillo dorado volvió a inundar la gema. Un poder latente despertó en su interior, como un eco de todas las batallas que había librado antes.
La energía se desató en un fulgor abrasador y, antes de que Mephiles pudiera reaccionar, Sonic lanzó su ataque final.
El impacto fue absoluto.
Un resplandor envolvió al villano mientras su grito desgarrador resonaba por todo el lugar. Su cuerpo se desvanecía, consumido por la luz de la Esmeralda del Caos. En un último destello, Mephiles desapareció.
Sonic, con una leve sonrisa en los labios, susurró:
—Nos volveremos a ver, Mephiles...
Y luego, sin fuerzas para mantenerse en pie, cayó al suelo.
Sus amigos corrieron hacia él. Su respiración era entrecortada, su cuerpo, al borde del colapso. Con un débil susurro, llamó a Amy.
—A-Am... Amy... —susurró en el oído de la eriza, su voz apenas un hilo de aire.
Ella se inclinó más, con lágrimas en los ojos. Sonic hizo un esfuerzo sobrehumano para decir sus últimas palabras.
—Gracias, Amy... por todo...
Un ataque de tos sacudió su cuerpo. Su respiración se volvía más pesada, más errática. El final estaba cerca. Lo sabía. Todos lo sabían. El peso de la realidad cayó sobre el grupo. Su héroe, su amigo... se estaba muriendo.
—¡SONIC! —gritó Tails con desesperación—. ¡No puedes dejarnos! ¡Resiste, sé que puedes!
Pero las palabras eran inútiles.
Sonic solo esperaba su destino. No había nada que hacer, su cuerpo tembló en otro espasmo de tos y, de repente, la Esmeralda del Caos, oscura y fría, emitió un tenue brillo en su mano.
Una punzada de dolor recorrió su pecho.
Su visión se nubló.
Y, cuando cerró los ojos...
Todo se volvió negro.
Un vacío infinito lo rodeaba.
Oscuro. Profundo. Como un abismo sin fin.
Sonic estaba perdido.
¿Había muerto?
¿O solo estaba atrapado en un sueño del que no podría despertar?
Continuará...
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Holaaaa mis loquill@s aqui esta su primer capitulo de la historia espero que les guste y no olviden votar y comentar.... creo que les dejo mucho suspenso y estan confundidos pero la se aclararan en los demás capítulos.
Este capítulo está dedicado a una personita que me ha dado muchos ánimos y voto para que fuera publicada espero que jamás se rinda te quiero mucho CryInTheDarkness
Si les gusta la historia para avisos o algo similar agreguen mi libro a su biblioteca
"The book of chimuelo78" y sin más que decir nos vemos en el próximo capitulo ^w^/
27 de Octubre- 2017
by:chimuelo78
Edición: 06/02/2025
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