Escrita y publicada por el Autor original del Fic: RhysThornbery

Descargo de responsabilidad: no soy dueño de ningún personaje de Star Wars visto, mencionado o usado en esta historia, le pertenece a Lucasfilm y Walt Disney, tampoco sooy dueño de dueño de Harry Potter, le pertenece a J.K. Rowling, así como de cualquier otro elemento de cualquier otra obra, creación que aparezca, créditos a quien corresponda.

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Campamento del barranco del bosque de Felucia

Hermione apareció con un chasquido justo afuera de la entrada de su pequeño escondite en una cueva, solo unos pasos detrás de Harry.

Decir que se sentía enferma sería quedarse corto. A pesar de la distancia recientemente agregada entre ellos y el campo de batalla detrás de ellos, todavía podía sentir un aluvión de emociones y visiones que obviamente no eran de su propia mente.

Los más mínimos destellos de imágenes... visiones, sentimientos de conmoción, traición, dolor... y miedo ahogaron el aire a su alrededor. Eso ya sería bastante malo si no estuvieran acompañados por las imágenes y los sonidos que los acompañaron.

Parpadeos de luz, predominando el azul y el verde, pero algunos de otros colores, todos arremolinados, chocando. Se pellizcó los ojos con la esperanza de borrar las imágenes, con poco efecto cuando sintió otra oleada de emociones. Estos eran poderosos y espesos, un miasma parecido al alquitrán que amenazaba con ahogar su mente con su vitriolo.

Cuando abrió los ojos para mirar a Harry donde él la estaba esperando, supo con solo ver su expresión que él también estaba viendo lo que ella estaba. Aunque había que decir que él parecía estar soportando mejor que ella, pero teniendo en cuenta el alboroto que se había hecho de sus primeros años de vida, Hermione realmente no estaba tan sorprendida.

Hermione recordó con un sobresalto que Harry tenía, de hecho, cierta experiencia en lidiar con sentimientos y pensamientos que no eran los suyos propios pululando en su cabeza. Ella había sido comprensiva a nivel intelectual en ese entonces, por supuesto, pero nunca podría haber entendido realmente cómo era eso hasta ahora. Fue muy desconcertante por decir lo menos.

Entonces, no fue sorprendente que Harry lograra recuperarse antes que ella, enderezándose y mirándola a los ojos con más seguridad, la mujer alienígena aún en sus brazos. "Hermione, necesito que hagas algo". Ella ya estaba asintiendo incluso antes de que él terminara de hablar, "Necesito que refuerces las protecciones, no creo que esas... personas, allá atrás, puedan seguirnos, pero realmente prefiero estar seguro de que no pueden encontrarnos si lo hacen."

Ella asintió con la cabeza una vez más, sin ganas de discutir. Hacía mucho tiempo que había descubierto que su amiga tenía buenos instintos cuando se trataba de tiempos de crisis, y rara vez la habían desviado del camino.

En algún nivel ella entendió exactamente lo que él estaba haciendo, ya sea que fuera o no consciente de su parte. De hecho, Harry estaba garantizando su seguridad, sí, pero también le estaba dando algo más en lo que concentrarse. Algo para distraer su mente de lo que les estaba pasando, lo cual era un respiro bienvenido de los círculos en los que su mente parecía correr cuando estaba en pánico.

Su amigo luego cambió el peso de la mujer en sus brazos y, a pesar del encantamiento de estasis sobre ella, parte de su sangre de aspecto inquietantemente humano manchó su camisa y chaqueta. Hizo una mueca antes de darse la vuelta y dirigirse a la tienda de campaña, ambos entendían bien cuán corto era el tiempo de la mujer.

Hermione los observó irse hasta que la solapa de la tienda volvió a colocarse detrás de ellos, luego cambió su enfoque a la tarea que tenía entre manos. Tuvo suerte de tener suministros para este tipo de cosas en su persona. No mucho exactamente, pero más que suficiente para la tarea en cuestión. Al menos no tendría que ir a cavar en la tienda por lo que necesitaba, lo que podría distraer a Harry mientras él estaba ocupado tratando de salvar a su paciente.

Miró hacia abajo, sacó una bolsa de cuero de su cintura y la abrió. Esta bolsa fue una de sus propias creaciones, similar en función a su viejo bolso de cuentas en el sentido de que era más grande por dentro que por fuera, pero no tan grande por dentro, como consecuencia de tener que trabajar con un material más resistente.

Dentro de sus profundidades llevaba su alijo de emergencia. En su mayoría pociones de curación básicas y similares, pero en este caso también algunas tabletas de piedra rúnica y algo de tiza magnética.

La joven bruja colocó sus herramientas y suministros en el suelo y se puso a trabajar, sacó su varita y comenzó a tallar las matrices rúnicas en las tabletas según su función.

La primera piedra era la más fácil, una que había construido muchas veces antes. La primera runa, grande y en el centro, Thurisaz como se la conocía en Elder Futhark, una runa que encarna los conceptos de fuerza reactiva, para la defensa en conflicto, así como el concepto de regeneración después de la lucha. Una línea con una flecha que apunta justo a un lado, se puede ver fácilmente por qué a veces se la conoce como "La Espina".

Sacó su tiza magnética cuando terminó de tallar eso, y encantó la pequeña barra de minerales para comenzar a inscribir sus fórmulas lo más pequeñas posible alrededor de la runa. Las fórmulas que inscribió eran las personificaciones aritmánticas de todas las variantes del encantamiento Protego, incluido Horribilis. Lo siguió con Fianto Duri, todas las fórmulas de alarma y seguridad, Salvio Hexia (un hechizo repelente de maleficios), así como Cave y Repello Inimicum y Muggletum. Hechizos para alertarlos de la presencia de enemigos o muggles, así como para ahuyentarlos. Encontró un pequeño espacio en la superficie frontal para inscribir también algunas protecciones repelentes de animales.

Todas esas inscripciones agregarían contexto a la intención que colocó en los encantamientos, anclándolos a la realidad con runas para formar las protecciones.

Luego volteó la tablilla e inscribió las runas secundarias, Algiz, otra runa de protección, aunque esta era más adecuada para proteger a otros queridos, así como para alejar el mal. El símbolo de un guardián. Esto ayudaría particularmente a las protecciones y escudos repelentes, mientras mejora y fortalece la intención defensiva de las protecciones.

Uruz, que significa fuerza, energía y tenacidad, se vincula aquí con Eihwaz, que también encarna fuerza, pero también resistencia o fortificación, particularmente en el área de defensa. Estos dos trabajarían bien juntos bajo su intención de fortalecer e intensificar la fuerza de las protecciones una vez levantadas.

Terminando con Kenaz, lo que significa que estaba abierto a nueva fuerza, energía y poder. Esto se vinculó a Eihwaz, y luego los demás actuarían como fuente de energía y sistema de distribución para toda la matriz.

La segunda piedra rúnica era más simple y más dura al mismo tiempo. Las magias que necesitaría inscribir eran más complejas pero el trabajo con las runas era más fácil.

Primero y principal fue Perthro, que literalmente significaba magia, pero también incorporaba los atributos de cosas ocultas, misterios, secretos y habilidades ocultas. Con las fórmulas de todos los hechizos de ocultación que se le ocurrieron, incluidas algunas para el olor de todas las cosas, así como para la imposibilidad de rastrear, inscritas a su alrededor, esto anclaría las protecciones que las haría casi invisibles.

La siguiente runa, Isa, se invertiría para contrarrestar su intención normal. En su nueva configuración significaba Ilusión y engaño, pero también sigilo. En particular, mejoraría la sala de desilusión.

Esta piedra se terminó con Eihwaz, Uruz y Kenaz nuevamente para anclar la fuerza de las protecciones en defensa propia, pero también para potenciarla y darle durabilidad.
Casi hecho ahora. Hizo una pequeña incisión en su mano con su varita permitiendo que la sangre brotara, para poder usarla para sellar los encantamientos en las piedras.
Dirigió la sangre del corte en finos riachuelos con su varita y los corrió hacia las runas grabadas antes de sellarlas en su lugar y luego cerrar la herida. Luego, conjuró el amuleto que se usaba para comenzar a activar un encantamiento y usó tanta energía como se sintió segura para activar las protecciones. Una vez corriendo, aprovecharían la magia del mundo que los rodeaba, ya que esa había sido su intención al crearlos. Pero por ahora, su fuerza gastada los pondría en marcha de inmediato y agregaría un poco de durabilidad en caso de que alguien los atacara en un futuro cercano.

Es poco probable, pero sintió la necesidad de ser cautelosa. Se hundió un poco cuando lo último de la magia que estaba canalizando entró en las tabletas y las protecciones finalmente estuvieron listas. Todo lo que quedaba era colocar las piedras y activarlas.

Usó su varita para aplanar la piedra generalmente porosa en dos puntos a cada lado de la entrada de la cueva, luego usó un hechizo para fusionar las tablas en su lugar. Luego los activó y desaparecieron de la vista cuando la magia de ocultación surtió efecto. Revisó su trabajo y lo consideró bueno.

Hermione había hecho todo lo posible por ahora y necesitaba ver cómo estaba Harry y ver cómo se las arreglaba con su nuevo invitado. Pensando así, dio media vuelta y emprendió el regreso a la tienda, entrando solo para detenerse momentáneamente sorprendida, sorprendida por lo que Harry había logrado mientras ella no estaba.

Harry, en su ausencia, básicamente había convertido el centro de la sala de estar principal de la tienda en un quirófano, completo con luces flotantes, mesa de operaciones de acero inoxidable, toallitas con alcohol, hisopos y pequeños carritos de metal cubiertos con botellas de pociones.

En la mesa de operaciones, la mujer... si ese era realmente el término correcto para una mujer alienígena, estaba boca abajo sobre ella, con la cabeza apoyada en una almohada especial que mantenía su rostro despejado pero no corría el riesgo de lesionarse el cuello como lo haría girarlo. .

Ella también estaba desnuda, a excepción de algunas sábanas que él había conjurado y colocado sobre ella en abundancia para preservar tanto de su modestia como pudo. Hermione notó que la ropa, arruinada y ensangrentada como estaba, había sido cortada y puesta a un lado en un carro.

Como no podía ver a Juno ni a Crookshanks, supuso que se habían retirado para permitir que Harry trabajara.

Levantó la vista rápidamente cuando ella entró, se quitó la chaqueta y se arremangó mientras se preparaba para trabajar. Él asintió brevemente hacia ella antes de volver a mirar a su paciente, pareciendo trabajar para entrar en el estado de ánimo adecuado para lo que le esperaba. Empezó a erigir encantamientos de monitoreo y hechizos de exploración alrededor de la mujer, pequeñas lecturas ilusorias se proyectaban en el aire a su alrededor de forma similar a la luz dura o las pantallas holográficas en los programas de ciencia ficción que Hermione le había mostrado cuando había venido de visita.

"Hablando idealmente, no estaría tratando de hacer esto yo mismo. En un mundo perfecto, la tendríamos con los curanderos dedicados para trabajar en ella. Pero viendo que no podemos hacer eso... y nos estamos quedando sin de tiempo-" Se quejó y se fue apagando. "Y no la golpearía con pociones destinadas a nosotros, ya que no es garantía que no muera por ellas..."

"¿Por qué nos estamos quedando sin tiempo?" preguntó acercándose, sintiendo una sala de esterilización fluir sobre ella mientras se acercaba a unos pocos metros de la mesa.
Lanzó algunos hechizos de diagnóstico más, antes de hablar. "Dos razones, aunque están conectadas. En primer lugar, el hechizo de estasis está fallando, lo cual no hace falta decir que es malo, porque en segundo lugar, sin el hechizo de estasis, tal como está ahora, estará muerta en menos de un minuto. Tenemos hasta que sus reservas mágicas se agoten, entonces el hechizo de estasis colapsará. Podría lanzar uno nuevo, pero sin su núcleo, el hechizo fallaría casi de inmediato".

No era algo común que Hermione encontrara algo que Harry sabía que ella no. Y, como era su naturaleza, empezó a hacer preguntas. "¿No puedes er-simplemente agregar más poder al hechizo tú mismo? O... bueno, ¿y si la ponemos en un cofre de estasis?" Dijo pensando en las unidades de conservación de alimentos en la sala de almacenamiento.

Había visto representaciones en historias muggles de personas gravemente heridas que evitaban la muerte simplemente congelándose, ¿tal vez los cofres de estasis podrían hacer algo similar?

Sin embargo, Harry estaba negando con la cabeza y soltó una carcajada corta y amarga. Sin embargo, sabía que era mejor ofenderse, Harry estaba en una situación difícil en ese momento. Tal vez sería mejor callarse y dejarlo trabajar ahora que lo pensaba.

Aparentemente, no pensó que eso fuera necesario, sin embargo, mientras le hablaba a pesar de todo: "El hechizo no está diseñado para eso. Es un tipo de fuego y olvido, y la fuerza que puse en él se agota rápidamente de todos modos, porque depende de la magia de la persona en la que se usa para mantenerlo y luego se rompe cuando no puede proporcionar la energía para mantener el hechizo por más tiempo sin arriesgar su salud".

Continuó leyendo los diagnósticos, tarareando para sí mismo un momento antes de asentir y continuar. "En cuanto a la idea del cofre de estasis... entiendo porque lo pensaste. Pero déjame decirlo así, hay mucho más para mantener la vida que simplemente mantener a raya la podredumbre".

Empezó a limpiar las heridas con su varita, la sangre se deslizó hacia la punta antes de desaparecer. "El cofre de estasis está diseñado para hacer bien esa parte... pero para mantener a alguien realmente vivo, necesitas mantener las células funcionando y cumpliendo sus propósitos. También necesitas mantener su actividad cerebral y su fuerza vital".

Sacudió la cabeza con tristeza. "Si trataras de preservar a alguien en un cofre de estasis, podría funcionar manteniéndolos juntos hasta que hayas curado el daño, pero saldrían de él como una cáscara. Efectivamente, al menos con muerte cerebral. Es por eso que eso, que no la pondré en  esa clase de estasis.

Harry pensó por un momento antes de continuar, "Pueden ser hechizos similares pero tienen funciones muy diferentes con métodos muy diferentes para ejecutarlos. En resumen, no son intercambiables".

Ella se estremeció un poco, sintiéndose enferma de nuevo al pensar que su solución podría haber matado a alguien, Merlín conocía la teoría del hechizo de la que hablaba Harry. Ella tomó esto como una prueba más de que Harry manejaba mejor la crisis y volvió a mirarlo en busca de orientación una vez más. Él asintió con simpatía ante su comprensión y consideró una última lectura. "Hermione, ¿puedes tomar algunas pociones adicionales de los suministros de emergencia?"

Hermione asintió con facilidad, podría jugar a la enfermera de su médico... esperaba. Aunque era bastante triste que apenas habían pasado unas pocas horas en su expedición y ya necesitaban echar un vistazo a sus suministros de emergencia, evidentemente, el 'Suerte Potter' no tuvo problemas para seguirlos a través del Velo, pensó con pesar para sí misma.

"Necesitaré más pociones para reponer la sangre, algo de Skelegrow y un kit de llaves para que podamos configurar las pociones para que funcionen mejor en ella, cualquier cosa que pueda usarse para tratar y reducir las quemaduras... y un limpiador general de toxinas y un tejido muscular".

La improvisada enfermera asintió con la cabeza con decisión y se dio la vuelta para irse cuando se vio obligada a detenerse cuando una visión la golpeó y la hizo jadear. Allí, en el suelo bajo un arco cavernoso, una figura se arrodilló, no para suplicar, sino para meditar. La luz de la luna de la tarde proyectaba sombras extrañas a su alrededor mientras una figura oscura, encapuchada y encapuchada se acercaba. La figura se detuvo y el hombre arrodillado levantó la vista, con una mirada de tristeza y decepción en su rostro. Él habla aunque ella no puede oír lo que se dice. Y de repente la figura oscura se agita con emoción, rabia... odio y dolor. Pero sobre todo miedo.

Se lanzó hacia adelante, una hoja azul descendió hacia la figura arrodillada, luego un borrón y la hoja azul chocaron contra el verde.

Se tambaleó y la visión se intensificó. Más movimientos giratorios, cuchillas amarillas chocando contra cuerpos blindados blancos que se derrumbaron. Destellos de azul y... una sombra titánica. La luz roja inundó el mundo.

Hermione se sacudió eso, su visión se aclaró, mirando hacia arriba para ver a Harry, la piel pálida y sudorosa. "Iré a buscar las pociones", graznó y luego se apresuró hacia la sala de almacenamiento.

Le tomó solo un minuto reunir lo que necesitaba, aunque le divirtió brevemente notar que Harry se había excedido en las compras de suministros. Se preguntó si San Mungo tenía un alijo de pociones tan grande y luego recordó por qué estaba comprando las pociones en primer lugar y rápidamente agradeció a Merlín por la previsión de Harry.

Regresó a la "cirugía" en un par de minutos y le entregó a Harry la primera poción que pidió, una poción para reducir quemaduras. Vertió la poción en el depósito de una aguja conjurada y se la inyectó en el costado. No fue posible obligar a la mujer herida a beberlo con seguridad en esta condición.

Si se tratara de una mezcla mundana de los ingredientes de la poción, tal mezcla habría matado a la mujer. Pero las pociones eran más que la suma de sus partes, la magia dentro de ellas les permitía funcionar de una manera que no lo harían normalmente.

"Está bien, veamos", murmuró Harry mientras dejaba que la poción de reducción de quemaduras hiciera su magia, literalmente, de hecho. "Necesitamos algo para volver a codificar el Skelegrow, pero soy reacio a arriesgarme a darle la vuelta ahora mismo para que mire. Ya fue bastante malo moverla tal como está... y no es como si tuviera pelo después de todo..."

Tenía que preguntar, considerando que estaban discutiendo sobre Skelegrow. "¿Se rompió algo cuando cayó?"

Sacudió la cabeza, desvaneciendo un círculo de acero en la parte inferior de la mesa para poder ver el rostro de la mujer. "Le hará bien, creo. Incluso mejor que sus pestañas... No, esas... lo que sea que le dispararon, le rompieron un par de costillas y le fracturaron la cadera, una también se acercó peligrosamente a su columna..." Harry respondió eventualmente, enderezándose antes de depositar la muestra de saliva en el vial de poción que esperaba con la solución clave y el Skelegrow. La mezcla comenzó a burbujear.

"Sus costillas están destrozadas más allá de toda esperanza, tendremos que desaparecer esas. Afortunadamente su cadera no lo está dañada, la dejaremos en su lugar". Se decidió, tomó la mezcla que ya no burbujeaba y la vertió en un nuevo depósito. Después de todo, mezclar pociones antes de beberlas era una mala idea.

Probablemente fue una misericordia que lo estaba inyectando. Skelegrow era conocido por su mal sabor.

Durante los minutos siguientes, aplicaron un par de pociones más para reducir quemaduras mientras Harry se ponía a trabajar tratando de curar las horribles heridas en la espalda, la cadera y la pierna de la mujer.

Tenía razón, una de las heridas estaba inquietantemente cerca de la columna, aunque afortunadamente no estaba dañada. Incluso con magia, el daño neurológico a esa escala era difícil de curar. No es casi imposible como lo era para la medicina mundana, pero aún así, muy difícil.

Mientras Harry trabajaba, habló un poco sobre lo que había aprendido sobre la fisiología de la mujer. Hermione estaba levemente interesada en escuchar que la materia cerebral de la mujer estaba distribuida en los extraños tentáculos en su cabeza así como dentro de su cráneo, y que tenía un segundo estómago.

Probablemente habría estado más interesada, si hubiera estado más consciente. Por otra parte, si hubiera estado más consciente, probablemente se habría dado cuenta de que estaba un poco sorprendida cuando los eventos de la última hora comenzaron a pasar factura.

Su mente comenzó a divagar después de que Harry terminó de hablar sobre pequeños puntos médicos de interés y comenzó a pensar en cosas que normalmente dejaría para más tarde.

En primer lugar, y lo más irrelevante, notó que, aparte de las horribles quemaduras por todo el cuerpo, la mujer realmente era bastante atractiva... En realidad, estaba un poco celosa. Esta mujer, quienquiera que fuera, tenía una figura casi perfecta, de hecho, como un reloj de arena. Mientras que claramente es muy atlético también. También tenía un trasero maravilloso y aparentemente un par de pechos que habrían dejado a Lavander verde de envidia...

Hermione finalmente se contuvo y se sonrojó sacudiendo la cabeza, quejándose de cosas estúpidas en las que pensar mientras se masajeaba las sienes en un intento de ahogar uno o dos destellos esporádicos antes de que se desvanecieran una vez más.

Ella no sabía cómo sentirse acerca de todo en ese momento. Las cosas se habían torcido tan rápidamente... Un minuto estaban felizmente explorando un mundo nuevo y extraño, envueltos en la maravilla de todo. Y al siguiente...

Estaban cargando en medio de una zona de guerra. Lo que a su vez la llevó a su primer acertijo. La mujer en la mesa.

Claramente había sido traicionada por los soldados que la seguían. ¿Pero por qué? Parecían perfectamente contentos de seguir su ejemplo hasta entonces... ¿Había estado justificado de alguna manera? Le costaba creer que, por lo general, incluso si los soldados se enteraban de que su superior era un traidor, lo que había que hacer era arrestarlos, ¿no? Por otra parte, ella no sabía cómo se manejaban las cosas aquí, ¿tal vez ese era el proceso normal de la justicia? Ella esperaba que no.

Independientemente, esta mujer podría ser cualquiera realmente, podría haber hecho cualquier cosa... no debería confiar en ella de ninguna manera y, sin embargo, sus instintos le gritaban que no pensara en la figura sobre la mesa de esa manera.

Ella se estremeció cuando otra breve visión estalló. Un enjambre de cuerpos blindados blancos, más dolor, más traición, más miedo... Más cuchillas chocando, más muerte.
Lo que la llevó a su siguiente problema, estas visiones, a juzgar por lo que estaba captando de ellas, personas como esta mujer, personas que manejaban espadas extrañas como ella, estaban bajo ataque. Los soldados ocuparon un lugar destacado, pero también lo hizo un portador de espadas lleno de ira oscura...

La morena se despertó de esta cavilación cuando Harry habló, un hechizo trabajando en conjunto con una poción para unir el músculo debajo de las quemaduras. "Es bastante malo, ¿no?" Él notó, luego continuó con su mirada burlona. "Me refiero a las visiones... Sentí esa última y vi tu rostro, tú también debes haberlo visto".

Ella asintió con la cabeza y luego hizo una pregunta. "Sí, ¿era así cuando... bueno, cuando Voldemort estaba en tu mente?"

"Peor", fue la breve respuesta de una palabra. Ella asintió comprendiendo al menos un poco. Finalmente, continuó. "Tuve destellos, visiones, sí, pero eran más claras y coherentes que estas. Y pude sentir exactamente lo que él sintió..." Continuó trabajando sobre la mujer, inyectándole otra pequeña poción para quemaduras. "Esta figura que sigue apareciendo en estas visiones..." comenzó, atrayendo su atención nuevamente.

"El enojado, liderando a los soldados y atacando a los demás..." Sacudió la cabeza con tristeza, una sonrisa irónica pero despectiva curvó sus labios. "Él cree que sabe lo que es el odio, cree que entiende el dolor, el miedo, la malicia... los está usando para alimentarse, para impulsarlo hacia adelante. Pero no tiene idea. No es nada al lado de Voldemort..."

Ella se estremeció ante eso, la figura en las visiones la asqueaba y la perturbaba, si él era una sombra pálida al lado de Voldemort... "¿Se sentían similares entonces?"

Asintió bruscamente, moviéndose de herida en herida. "Sí, aunque Voldemort era mucho más intenso y concentrado... hizo que manejar esas emociones fuera una especie de forma de arte enfermiza". Harry notó mordazmente, antes de enderezarse y mirar su reloj.

"Maldita sea, está a punto de salir del éxtasis, Hermione. Necesito que le inyectes los recargadores de sangre cuando yo lo diga..." Instruyó con urgencia y ella se apresuró a prepararse. Tengo que cerrar estas heridas antes de que termine la estasis o corremos el riesgo de que se desangre.

Hermione sacudió la cabeza un poco aturdida mientras trabajaba. Harry trabajó duro durante diez minutos más, todas las heridas estaban en camino de cerrarse, pero la estasis finalmente cedió y la sangre comenzó a acumularse rápidamente en las heridas antes de derramarse.

"Está bien, primer rellenador de sangre—" instruyó Harry y ella obedeció mientras él extraía la sangre de las heridas y continuaba trabajando para cerrarlas.

Pasaron veinte minutos más y dos inyecciones más, una de pociones para reponer la sangre y otra de la poción para fortalecer los músculos, antes de que la carne finalmente se cerrara.

Dejaron cicatrices fruncidas, y Harry hizo todo lo posible para reducirlas antes de que realmente se asentaran. Donde antes había un círculo de carne arrugada del tamaño de una pelota de futbol, ahora, cuando terminó, se parecían más al tamaño de una pelota de béisbol o incluso de golf.

Cuando se liberó el último hechizo, suspiró y se acomodó sobre sus talones. "Está bien, bien. Eso es lo peor, creo". Murmuró, y Hermione se hundió un poco aliviada. "¿Podrías hacerme un favor? Toma un poco de poción para reducir los moretones e inyéctala junto con la mezcla de purga de toxinas. Voy a conseguir un poco de pimienta para mí..."

Trabajó en eso mientras él salía de la habitación y logró completar ambas tareas antes de que él volviera a sentarse en una silla convocada, claramente cansado. No fue tanto el gasto mágico, que debe haber sido considerable después de tanto trabajo. Era el nivel de concentración que había nivelado en la tarea. Eso habría sido agotador por sí solo.

Él bebió el pepper-up, ignorando el vapor de sus oídos mientras se animaba un poco, y ella se sentó frente a él, retorciéndose las manos con un poco de nerviosismo antes de calmarse un poco ella misma.

"¿Entonces, qué hacemos ahora?" Ella preguntó finalmente.

Él se rió entre dientes, frotándose los ojos. "Primero la limpiaremos y la acomodaremos en una cama en alguna parte. Le colocaré algunos hechizos de monitoreo mientras estamos en eso...", explicó, luego se encogió de hombros con indiferencia.

"Ella debería recuperarse en unas siete horas más o menos... eso es unas ocho horas y media después de que le dispararon... no está mal. Debería estar fuera de peligro ahora. Es un juego de espera de aquí en adelante..."

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