-William -le llamó Carter.

El castaño se giro en su dirección. Ese día Víctor vestía ropa casual y no podía verse más como un profesor en ese momento. Incluso traía consigo una carpeta beige.

-Profesor -se acercó a él y estrechó su mano -Es un gusto volver a verlo.

-Lo mismo digo, ah ¿Tomamos asiento? Hay algo que debes saber -dijo esta vez, con un tono más serio. William volvió su expresión una más profunda y aceptó.

Se encontraban en la cafetería del hospital, William esperando por noticias de Sara, ya que no había mostrado mejoras en esos días y los doctores tampoco le decían qué era lo que tenía.

-¿Y bien? ¿Qué es eso que debía decirme? -le preguntó, tenía miedo de lo que fuera a decir el hombre pero debía ser un miedo menor, las cosas estaban mejorando en esos días.

-Es sobre Sara -respondió, pasó saliva en seco.

-... Dígame.

-Verás... ¿Recuerdas cuando Alba comenzó a sentirse mal? Fuiste hacia mí por eso-empezó despacio, el joven asintió -Bueno, ten eso en mente, por favor.

Sacó las carpetas y las abrió. Dentro se encontraban varios archivos con información personal de la castaña, todos con diferentes fechas. Carter tomó una y se lo mostró.

-Este de aquí muestra que Sara había despertado antes... de que Alba comenzara con los problemas.

William levantó la vista de la hoja, confundido. Por el color del papel y su olor a viejo podía decir que no lo habían falsificado, que era verdadero.

-Y este otro -tomó uno diferente, con una fecha antigua -Muestra otra ocasión en que ella estaba despierta, poco después del incidente de Angelina.

-¿Profesor? ¿Qué significa todo esto?

Víctor tuvo cuidado al responder su pregunta, pues no quería que el joven le pasara algo al recibir tal información. Él mismo entró en shook durante unos minutos al intentar procesar todo.

-Al parecer Sara estuvo despierta todo este tiempo.

-No, no, expliqueme bien por favor.

-Ah... No ha pasado nada que no supieras ya -le respondió -Es algo que sabías... No puede haber dos portadores de los cuatro elementos al mismo tiempo y eso ha sido lo que hizo que Alba empeorara.

Era verdad. Había hablado de eso con la misma Sara hace un tiempo, incluso estuvo presente cuando se mostraron los primeros temblores.

Pero Alba había mostrado molestias hasta hace poco, ¿cómo es posible? Claro... Si revisaba las fechas se daría cuenta de ue coincidían con el tiempo en que Sara despertó.

Y recordó lo que ella le había dicho, que se había esforzado en mandarle esa representación suya para ayudarle. Tomó su cabeza con una mano temblorosa. Era demasiado para procesar.

-¿William? ¿Estás bien?

-Ella... Estuvo viva, todo este tiempo y yo... -las lágrimas comenzaron a salir, desesperadas -Yo... Yo no me di cuenta. Maldita sea, era tan obvio ¡Todo!

-William, espera, tranquilizate -el hombre utilizó un tono de voz bajo y claro, para evitar que él entrara en pánico.

-Escucha por favor, no me has dejado terminar.

-¿Hay más? -preguntó con incredulidad, el miedo se notaba en sus ojos.

-Es difícil pero debes comprender todo o no podrás seguir... La has encontrado ahora, es lo que importa.

-Pero pude hacerlo antes, pude salvarla antes, pude, yo-

-No funciona así, William -lo tomó de los hombros, para hacer que él se mantuviera enfocado -No sabes que hubiera pasado si la encontrabas antes.

-Claro que lo sé, ella no habría sufrido tanto como ahora, ella podría...

-William - le interrumpió, el joven se giró a verlo - Si vas por ese camino, las cosas se volverán difíciles para ti... - intentó que recibiera bien el mensaje de lo que quería decirle, pues aunque fueran palabras que podrían sonar simples llevaban un gran peso.

-... Gracias, profesor - le respondió cuando estuvo más calmado.

- Ahora tengo noticias sobre los estudios que te hicieron - dicho eso tomó otros papeles de la carpeta y se los pasó a William.

El joven los leyó pero nl entendía lo que querían decir esos números y cantidades, miró al profesor con clara confusión en su rostro, a lo que Víctor le explicó:

- Ahí está mencionando que presentas dolor en el torso.

- Lo sé, ha sido porque caí en la sustancia del elemento - le respondió, recordando la extraña sensación al haber caído, pero seguí sin entender.

-Bueno, pues al parecer el dolor no se irá - negó con la cabeza - Y lamentablemente te está quitando vitalidad.

- ¿Quitándome? ¿Es posible? - inquirió con incredulidad, pues le resultaba ilógico que sucediera cuando ya no estaba ahí dentro.

- Es posible por supuesto, estamos hablando de la energía pura materializada - tomó las hojas y le mostró otra a William - Victoria me dio más información que no tenía Petterson.

- ¿Y bien? ¿Ahí dice algo sobre esto que me pasa? ¿Hay una solución? - inquirió. El dolor era realmente molesto y atacaba en cualquier momento y encima siempre lo dejaba sin energía.

- Sí y no. El asunto es que si bien el archivo habla sobre las consecuencias y efectos secundarios, son sólo hipótesis, por lo que no hay una manera de curarlo... Y a menos que quieras someterte a una serie de experimentos para encontrarlo-

- No - le cortó de inmediato, ni siquiera lo dejó terminar - No - repitió, sus manos tomaron con fuerza el vaso de café - Sara y Alba la pasaron terrible, yo... No podría tomar ese camino.

Víctor asintió, sabía que el joven diría algo similar. No lo cuestionó pues de haber estado en su lugar, su respuesta sería la misma.

- De acuerdo - procedió a guardar las hojas de nuevo en la carpeta.

Para William era confuso, aún no entendía cómo era que la respuesta había estado frente a sus ojos todo ese tiempo y simplemente no las había visto.

Pero Carter tenía razón, no debía dejarse llevar por la emoción del momento o se quedaría estancado. Y lo que quería era avanzar, avanzar junto a Sara.

-Lo siento profesor -sacudió la cabeza -Sólo... Sigo confundido.

-Y está bien, pero no de abrumes por eso.

-¿Qué más iba a decirme? -limpió su rostro con el dorso de su mano -¿Es sobre Sara?

-Lo es, ella... Me temo que su recuperación tomará un tiempo, lo siento.

🔥💧🌪️🌱

William estaba recostado en la cama donde se encontraba Sara. Tenía la mano de ella entre las suyas.

Apenas si podía mantener sus ojos abiertos, ya que los sentía hinchados por tanto llorar, aún después de la noticia.

La miró de nuevo.

Sus ojos estaban cerrados, claramente durmiendo. Su pecho subía y bajaba con cada respiración que daba. El monitor cardiaco marcaba sus latidos de manera normal y sin problemas.

La joven tenía una sonda nasogástrica que se encargaba de mantenerla alimentada y también una del suero, para que no se deshidratara.

Tenía una máscara de oxígeno, que aunque no la necesitaba, los doctores dijeron que era necesario que la tuviera puesta.

Él sentía hambre, quería ir por lo menos a tomar un café, pero no quería separarse de la joven por si despertaba, aunque sabía bien claro que eso no sucedería pronto.

Un coma inducido.

Eso había dicho Víctor.

El hombre le explicó que hace dos años, ella sí estuvo a punto de morir. Le mintieron a William diciéndole que la joven había fallecido en ese momento, que fue el Quinto Elemento lo que le quitó su corazón, cuando en realidad fueron los Elementos lo que mantuvieron sus órganos funcionando.

Que los agentes que se la llevaron eran hombres del laboratorio de Petterson y por órdenes de Angelina la habían llevado con él. Lamentablemente el director recurrió a inducirla en la inconsciencia para poder terminar lo que Angelina había empezado.

Sara llevaba cerca de dos años en coma, y no sabían cuando despertaría. Aunque tampoco estaban seguros de en qué momento había caído dormida.

Mientras más pensaba William en lo que le había dicho, con más claridad veía que las pistas de que ella no había muerto.

Recuerda que fueron unos hombres con trajes azul marino quienes se la llevaron y fueron unos científicos vestidos del mismo color quienes le dieron la noticia de que había perdido el corazón.

Sintió su pecho estrujarse de tan solo pensarlo.

Dos años.

Dos años estuvieron las respuestas frente a él y no puedo descifrarlas. Se sentía tonto, torpe, estúpido cuando lo recordaba.

De nuevo, apretó la mano de ella y las lágrimas hicieron su aparición.

Las manos de Sara estaban tibias ante el contacto de él. El joven no dejaba de repetirle que estaba ahí, que estaba junto a ella, que podía despertar para mantener la promesa que le había hecho. Llevó su mano hasta su bolsillo, sintiendo un objeto que había olvidado.

¿Cómo...?

El joven encontró la pulsera que le había dado Alba varias semanas atrás, por que sí, William llevaba con Sara casi un mes a su lado.

Sacó la pulsera y la observó, viniendo a su memoria el momento en que se la había regalado. Limpió sus ojos y con las manos temblorosas, colocó el regalo en la muñeca de ella.

Una parte él, esperaba que despertara ante el acto, pero no lo hizo.

Suspiró, cansado.

Recostó su cabeza por un lado del brazo de ella y mientras las lágrimas corrían nuevamente por sus mejillas, se quedó dormido.

💧🌱🔥🌪️

L

as dos hermanas habían caído en coma. Pero lamentablemente, Sara tenía más posibilidades de despertar que Alba.

- Daniel - le llamó William - Yo... Lo lamento.

- ¿Por qué? - inquirió, se giró para mirarlo.

- Por no haber hecho lo suficiente para salvarla, me siento en parte culpable.

- Pero hiciste lo suficiente - respondió y realmente no culpaba a su amigo por lo sucedido —No estaba en nuestras manos que ella cayera en coma —sacudió de manera suave la cabeza —Y tampoco lo es qie ella despierte.

—El tiempo lo dirá eh —hizo una mueca —Como odio esa frase.

William lo abrazó sin decirle nada y Daniel lloró sobre su hombro, más que culparse se sentía arrepentido, porque pudo detener a Alba y no lo hizo. La dejó elegir.

Daniel no amaba a Alba, sólo le había tomado aprecio por lo similares que eran sus historias, ambos separados de sus padres, dos niños que crecieron bajo el cuidado de científicas ambiciosas y que forzaron a obtener algo que no querían.

Si hubiera tenido tiempo, aunque hubieran sido unos segundos, le habría dicho que la comprendía y que podía contar con él.

Y se sentía culpable por provocarle el dolor que sentía ahora.

- William - Daniel levantó la vista, en su rostro no había lágrimas, pero se notaba la tristeza - Gracias.

Su amigo lo miró sin entender a qué se refería, como todas las cosas últimamente.

- ¿Gracias? - preguntó de vuelta.

- Ajá - asintió, de pronto sintió pena - Por llamarme ése día, de no haber sido así... No nos hubiéramos conocido.

William mostró una pequeña sonrisa al escucharlo, colocó su mano en el hombro de Daniel.

- Por supuesto.

Ahora sólo les quedaba esperar que ambas despertaran. El mundo podría resentir la ausencia del portador de los cuatro elementos.

-karimodelarosa.

I'm the one that I should love in this world🎶!!

Lo siento, estaba escuchando la canción, ahora...

No me odien, les recuerdo que tengo todo fríamente calculado
¿Lo ven? Nadie murió no que en el anterior capítulo de estaban diciendo de madres ¿:D?

Les voy a dar un adelanto:

Sara despertará en el siguiente capítulo.

Bai

Alba sí se murió, espero que se haya entendido bien el por qué se su decisión. Ella sufrió mucho y quería descansar. Esa es la principal razón por la cual volví a escribir la historia.