-¿Cómo es que llegaron tan rápido? -le preguntó William.

-Bueno -Daniel se rascó la nuca -Digamos que no podremos avanzar por dónde llegamos.

-¿Qué?

-Usé mi elmento.

-¿Qué? ¿Por qué? ¡Te dije que sólo era para emergencias! ¿Recuerdas lo que te sucedió cuando lo utilizaste la última vez?

-¡Esta era una emergencia! ¡Tenía que llegar rápido contigo! ¿Y si ella moría?

-¿Si muere? No creo que eso suceda -se dio cuenta de la preocupación en las palabras de su amigo, lo miró pícaramente -... ¿Te preocupaste por ella?

-¡Desde luego!

Daniel miró alrededor, esperando encontrar a Damián, el amigo de William, pero no lo vio por ningún lado y él tenía manchas de sangre en su rostro y en su ropa. Preguntar qué había pasado estaba de más.

-¿Puedo saber por qué? Apenas la conoces -William alzó las cejas, sonriente, desconociendo lo que pasaba por la mente de su amigo.

Daniel se quedó sin habla, miró a otro lado, se rascó la cabeza, nervioso.

-Pues porque... porque..

A William le empezaba a gustar poner a su amigo en una situación un tanto incómoda.

Poco a poco, la gemela fue abriendo los ojos.

-¿Alba? ¡Alba! -le habló Daniel, poniendo toda su atecnión en ella.

-¿Q-que... que pasó? -preguntó al tiempo que intentaba levantarse.

-Espera, descanza un poco más, aún estás pálida -le dijo William y la volió a recostar.

-Por qué... ¿Estoy aquí? -miró su alrededor, confundida -¿Qué estoy haciendo aquí? No debería estar aquí yo debo...

-Alba, estás a salvo -le dijo Daniel, colocando una mano sobre la de ella -Puedes estar tranquila.

-No, no entiendes - sacudió la cabeza, negando las palabras de él -Yo no debo estar aquí, yo... Tengo que estar en la cápsula, ellos... Ellos me van ayudar.

-¿Qué? No -le replicó de inmediato, totalmente sorprendido por sus palabras -Ellos te estaban haciendo daño, Alba, no te ayudaban.

-Es que no lo entiendes -intentó ponerse de pie -Es mi deber, para eso estoy aquí -insistió.

-¿Tu deber?

Ella se tropezó, por lo que su primer instinto fue tomarse de la pared, pero su brazo simplemente no reaccionó, haciendo que cayera de nuevo al suelo.

-... ¿Me hirieron? -preguntó con pánico.

-¿Herirte? No ¿quién? -William estaba confundido.

Alba comenzó a respirar de manera acelerada, su mano izquierda se fue hasta su brazo derecho, temblaba.

-¿Qué pasa? -Daniel se acercó un poco más, para poder ayudarle.

-Por qué... por qué... - respiró hondo - ¿Por qué no siento mi brazo?

-¿Qué? -preguntaron los dos al mismo tiempo.

-¡Que no siento mi brazo! ¿Por qué? -se levantó inmediatamente del suelo para revisarlo.

Su mano izquierda tocaba de manera desesperada su brazo, pero éste, no respondía, no podía moverlo. Sentía que lo tocaba, pero éste no sentía que era tocado.

-Alba ¿De que hablas? -preguntó William, con preocupación.

-¡Les digo que no siento mi brazo! ¡No puedo moverlo! -lágrimas de desesperación comenzaron a salir, corriendo por sus pálidas mejillas.

-Calma, calma -le dijo Daniel, en un intento de tranquilizarla, pero era inútil, ella no les prestaba atención.

-¡No lo siento... no puedo mover mi brazo!

Justo en ese instante, el suelo comenzó a temblar. Primero movimientos leves, pero después aumentó de intensidad, al punto de que las paredes y suelo se cuartearon.

-Alba... ¿Tu estás haciendo esto? Porque no es divertido -Daniel observó como las grietas hacían su aparición cerca de dónde ellos estaban.

La gemela se limpió las lágrimas, pero eso no quitaba el hecho de que olvidaba lo que le sucedía.

-No, yo no... -miró a su alrededor -Yo no hice esto.

-Vamos, hay que irnos, aún no hemos encontrado lo que buscamos.

La gemela lo miró y con su mano izquierda, aceptó de la de él.

-No entiendo.. -susurró -¿Por qué sucede esto?... Es culpa mía, debe ser culpa mía -sacudió la cabeza, abrumada por la situación -Esto sucede porque no estoy haciendo lo que debería.

-¿Lo que deberías? Alba... No entiendo qué dices -le dijo Daniel, intentando comprender a la gemela.

-¿No es obvio? -para este punto las lágrimas se habían secado y sus menciones se apagaban poco a poco -Ser de utilidad para el laboratorio.

-¡Alba! -la tomó de los hombros, haciendo que ella lo mirara -No sé qué tanto te habrá dicho ese hombre, pero no es verdad.

-Me dicho la verdad, Daniel -con su mano retiró los brazos de sus hombros -Soy un elemento del laboratorio, estoy viva porque soy de utilidad para ellos... Ése es mi propósito, agradezco que hayas querido ayudarme pero como puedes ver -levantó su brazo inútil -No puedo vivir fuera de estas paredes.

-Claro que puedes -insistió, parecía que el lugar se había vuelto sólo de ellos dos, porque William se mantenía ajeno a la situación que intentaba controlar Daniel -Sabes que un propósito no es necesario.

-Lo es para mí -repitió, las palabras de Petterson se habían quedado grabadas en su inconsciente.

-Pues entonces toma otro, o varios -respondió, cansado de la negatividad de la muchacha -Si un propósito te hace daño o no es para ti, siempre puedes tomar muchos más... Y no es necesario que sea importante.

-Pero esto es importante -replicó, sin entender sus palabras -Estoy ayudando a los descubrimientos del laboratorio ¿Aún no entiendes?

Daniel negó con su cabeza. Seguía sin poder cambiar la mentalidad de Alba, pero no quería rendirse. No importaba cuanto le haya dicho Petterson, él podía cambiar eso. Podía eliminar las ideas que que tenía Alba.

-Alba, escuchame... -tomó las manos de ella, sin importar que no tuviera sensibilidad en una -Nosotros podemos cambiar eso, podemos-

Antes de poder continuar, cerró los ojos y cayó de lado, inconsciente.

-¡Daniel! -exclamó Alba.

Todos voltearon a ver. Daniel estaba en el suelo, inconsciente. La gemela estaba sentada sobre sus piernas, por un lado de él, intentado hacerlo reaccionar con su brazo.

-Ah... Maldición.

William levantó a Daniel, pasó su brazo por debajo de los de él, lo hizo con tal naturalidad que sorprendió a Alba.

-Alba ¿Estarás bien? -le preguntó William.

-No, pero ¿Qué le pasó? ¿Por qué se desmayó?

-Ah, eso, supongo que él no te contó nada ¿Verdad? - la gemela negó con la cabeza -¿Qué tiene?

-¿Él? -miró a su amigo, inconsciente -Es un menso, sabía que esto pasaría y aún así hizo lo que le dio su gana.

-¿Lo sabía? ¿A que te refieres?

-Bueno... Daniel no es un Alterado normal, como Damián —el sólo mencionarlo, le dolía —O cómo yo.

-¿Es un Alterado? ¿En serio? ¿Y por qué no lo dijo antes? -la gemela estaba asombrada, no sabía que Daniel era también uno de ellos.

-Es que tú no te diste cuenta, te contaré -respiró hondo -Cuando te... Atraparon y él te trajo, se topó con Agentes, que querían detenerlo atraparlo, pero él utilizó su elemento para destrozar el cemento y taparles el paso, pero también para huir de ellos y traerte conmigo, para saber que te había pasado. Daniel sabía que esto pasaría, porque ya lo hizo antes, cuando recién lo conocí.

-¿Quieres decir que él sabía de las consecuencias, todo ese tiempo?

-Si, y todo para traerte aquí, conmigo.

Alba sintió sus mejillas arder.

Pudo haberse caído en cualquier momento en el camino y aún así, se arriesgó para llevarla con William.

Pero el pensamiento de que ella no pertenecía ahí seguía presente en su cabeza. Aún sentía que estaba cometiendo un error al quedarse con William, Damián y Daniel.

La gemela aún estaba concentrada pensando en lo que había hecho Daniel, no podía creer que él se había arriesgado por ella.

Sintió algo en su pecho, su corazón latía más rápido de lo usual y sus mejillas aún estaban rojas.

¿Cómo lo miraré a la cara cuando despierte? y más importante aún ¿Por qué siento esto en mi pecho?, pensó apenada.

-William ¿A que te refieres cuando dices que él no es un Alterado normal?

-Oh eso... es que bien, es el resultado de un experimento, casi perfecto.

-¿Casi?

-Cada que él utiliza ese elemento, se desmaya, durante unas dos horas, más o menos, aún no se el por qué. Lo que el tiene, es la capacidad para mover tierra, de cualquier tipo.

-Entonces es el elemento tierra, por lo que sé ¿No?

-No, es totalmente distinto. Daniel puede utilizar las rocas, la arena de desierto, de playa, hasta el cemento, por eso lo utilizó en su defensa en ese instante que te traía conmigo. Pero digo que es un experimento casi perfecto porque no terminaron de crear ese elemento cuando se lo pusieron ¿O debería decir inyectaron?

-Eso debió ser... difícil para él.

-Pasó por algo similar a ti, creo que es por eso que se llevan tan bien -le dijo William.

-Alba ¿podrías adelantarte para encontrar un lugar seguro?

Ella asintió y se adelantó.

William temió por el hecho de que quisiera escapar, escuchó lo que había dicho sobre "Debo irme, no debo estar aquí" y lo ponía de nervios.

De nuevo sólo estaban ellos tres y si Alba se iba... Las cosas se irían por el desagüe.

Al poco rato, Alba les hizo seña de que ese era el lugar y los tres entraron.

La gemela se sentó en el suelo y en sus piernas recostó la cabeza de su amigo, esperando que despertara. De la mochila de Daniel sacaron el aerosol y cubrieron las cámaras que había ahí.

Aunque les gustaría quedarse ahí por más tiempo no debían hacerlo. Sólo esperarían a que Daniel se despertara y entonces continuarían.

-karimodelarosa.

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