Donna Beneviento

(A las afueras de la villa, Miranda y James se encontraban caminando hacia la nueva prueba del chico.)

James: ¿A dónde nos dirigimos?.

Miranda: Nos dirigimos a la casa Beneviento, hogar de mi hija Donna Beneviento, la mujer con el velo oscuro.

James: De acuerdo...pues veamos qué me espera.

Miranda: ¿Tienes miedo?.

James: Tenerle miedo a lo desconocido es de los miedos mas humanos que pueden haber.

Miranda: Cierto, buen punto de vista, me alegra saber que te expresas más conmigo.

James: Bueno...si me tendré que adaptar a este lugar, por lo menos quiero ser yo mismo.

(Al escuchar esto Miranda le dirigió una sonrisa al chico, pero su recorrido fue interrumpido al ver lo que se encontraba frente a ellos.)

Miranda: Muy bien, hemos llegado.

James: Aguarde...¿es aquí?.

Miranda: En efecto...¿hay algún problema?.

James: ¿Recuerda lo del miedo a los desconocido?.

Miranda: Aja.

James: Bueno...este lugar no digamos que ayuda mucho.

Miranda: Jaja, tranquilo chico, no sucederá nada.

(Miranda se adelantó un poco dejando a James algo contraria y reacio a esto, pero sin más opciones suspiro y avanzo.)

James: (Si claro, entremos en la casa del terror, ¿que puede salir mal?...estoy que me lleva el demonio.)

(Los dos subieron los escalones para acto seguido Miranda tocar la puerta, enseguida esta se abrió revelando a la dueña de la casa.)

Donna: Madre Miranda, es un gusto volver a verla, me honra con su presencia.

Miranda: Querida hija, gracias por ofrecerte y ser la segunda en ayudarme en esto.

Donna: Por usted, haré lo que sea, madre.

Miranda: Te lo agradezco hija mía, entonces te dejo la custodia de nuestro futuro integrante, claro, si es que el logra pasar tu prueba.

Donna: Puede confiar en mi, así será.

Angie: ¡Así será madre Miranda!.

(Al terminar de hablar Miranda se volteó a James, esta la miro por un momento y extendió una mano para acariciar su mejilla, a pesar de la situación, sorprendía la delicadeza de la mujer.)

Miranda: Querido, pasaré por ti más tarde, aun tienes que mostrarme de lo que eres capaz, espero que llenes mis expectativas.

James: Tratare, usted este tranquila...madre.

(Miranda le sonrió al joven al escuchar la palabra con la que la llamo, James no tenía más opción que adaptarse a esto y comenzar a tratar a la matriarca como ella deseaba, después de esto, la mujer desapareció con la velocidad que siempre la caracteriza.)

Donna: James, pasa por favor.

Angie: ¡Si pasa hermanito, tenemos tiempo para pasarla bien!.

James: (suspiro), no me queda de otra.

(James paso a la casa y la contemplo, digamos que se ve mejor por dentro que por fuera.)

James: (Bueno, por dentro no se tan miserable este lugar.)

Angie: Ven hermanito, vamos a pasarnosla bien!.

James: Solo espero que tu, "pasarnosla bien", no sea querer matarme.

(Los tres comenzaron a subir las escaleras a un paso lento, a James le desconcertada la misteriosa mujer y la horripilante muñeca.)

James: (Genial, primero un fenómeno y ahora una una enferma mental, solo me falta la anciana traga sangre y el dross de los chinos, sin duda tengo mucha...suerte.)

(James se detuvo en los escalones, su vista se hizo atraída por algo inesperado.)

James: Oh vaya...¡oye!, te vez muy bien ahí.

(Donna se dio media vuelta y observo lo que le dijo James.)

Donna: ¡¿Ah?!...¿dices que me veo bien?...¿enserio?.

James: La verdad es que si, pero, ¿a que de debe que lleves ese velo?.

Donna: No...no es nada, sigamos caminando.

(Ah James le sorprendió el semblante serio eh indiferente que tomo Donna en un santiamén, sin más que poder hacer tuvo que seguirla, no tardaron mucho en llegar hasta una habitación, pero lo verdaderamente llamativo de esto, era lo que esperaba ahí.)

James: (Esto...tiene que ser una puta broma.)

Angie: ¡Toma asiento hermanito, vamos a tomar el café y comamos algunas galletas!.

James: Si...claro, es solo que...¿por que tantos...muñecos?.

Donna: Son nuestros amigos, ellos nos acompañan a comer.

Angie: ¡Así es, Donna los hizo a todos, ellos nos hacen compañía, ¿no es genia?!.

James: Ssssi...claro que lo es, (definitivamente este lugar está lleno de locos.)

(Sin otra opción, James se sentó en alguna de las sillas en la mesa para tomar el café, este lugar sin duda era inquieto, aquellos muñecos parecían estarlo viendo, Donna se sentó frente a el y Angie fue asentada en la mesa, inquietaba como esta podía moverse, al final del día debía tratarse de una muñeca o eso era lo que aparentaba, pero a la vez, parecía ser un cadáver, algo inquietante y desconcertante desde luego.)

Angie: Y, dime hermanito, ¿por qué te gustaría unirte a nuestra familia?.

James: Solo busco poder irme de aquí.

Angie: owwww, ¿que?, ¿no planeas quedarte hermanito?.

James: No me interesa quedarme aquí.

Angie: ¿Nisiquiera por nuestra madre?.

James: No me interesa, ni aún por madre Miranda, solo quiero largarme de aquí.

Donna: Pero luchas por unirte a nosotros, tu determinación es grande a eso, ¿y así dices no querer quedarte?.

James: Lucho para poder irme, si le demuestro a su amada madre Miranda que puedo hacerlo, me dejara ir.

Angie: Ow, entonces ¿no piensas quedarte hermanito?.

James: Para nada, yo lo pertenezco aquí, debo volver a mi hogar.

(Tras hacérselo saber, Donna y Angie se miraron mutuamente, no se sabía del todo el acuerdo entre Miranda y James, pero lo que si estaba más que obvio, es que la matriarca, no lo dejaría irse, aquí había algo entre manos, algo del plan de Miranda y era obvio que no debían hacérselo saber a James.)

Donna: James, hermano, ¿podría pedirte un favor?.

James: Pues no me queda de otra, ¿que se te ofrece?.

Donna: Afuera, hay unas hermosas flores, me gustaría si podrías cortar algunas, servirán de decoración en la sala principal, están en la parte trasera de la casa, con gusto te acompañaré para que no te pierdas.

James: (suspiro), esta bien.

(James siguió a Donna esta lo llevo a la parte trasera de la casa Beneviento.)

Donna: Muy bien, trata de arrancar las flores de raíz por favor, además de que debes seguir el sendero marcado, de ese modo no te perderás, hay mucha neblina, además el lugar es lago grande.

James: Muy bien, solo espero que nada salte y me arranque la cabeza.

(James salió de la casa y comenzó a caminar, aquel lugar en verdad, era para nada agradable, no hacía falta verlo por mucho tiempo para darse cuenta de eso.)

James: Por dios bendito, este maldito lugar no puede ponerse peor, muñecas colgadas de los árboles, este lugar está lleno de lunáticos, enserio, no puedo creer esto.

(Molesto y reacio a querer hacer esto, James comenzó a caminar por aquel lugar, a todos lados donde mirara, los árboles estaban marchitos, aquel lugar parecía muerto, desde hace mucho tiempo, aquella muñecas ya no estaban, parecía ser que a la lunática de su dueña se le habían terminado, pero por el camino, algo llamo la atención de James, este miro en los árboles y varios cuervos se encontraban en los arboles, por un momento, James podría jurar que estos lo están viendo.)

James: Cuervos, oficialmente son mi mayor enemigo, ¡gracias por haberme metido a este maldito agujero, estudias ratas de aire!.

(Al gritarles esto, nos cuervos comenzaron a irse, pero en ese instante, algo más llamó su atención, una voz, alguien comenzaba a hablarle, este miro por todas partes, no había señal de quien le hablaba, era una voz femenina, de eso no había duda, ¿acaso era madre Miranda?, no, era algo más, sus sospechas se hicieron presentes, cuando escucho algo, que no lo dejaría tranquilo.)

???: ¡JAMES!.

(El chico se congeló, aquella voz, sin duda era lo que el imaginaba, hace años, hubo un suceso, el cual marcaría su vida, aquellos recuerdos que no son nada agradables, pero se quedarán en la cabeza de uno, hasta el final de nuestra existencia, James comenzó a correr, seguir aquella voz.)

James: ¡Adriana, ¿estás aquí?!...¡no, esto no puede ser verdad, ella...ella esta.

???: ¡JAMES!.

James: ¡No, esto no es verdad, ¿qué me está haciendo este maldito lugar?, Adriana esta muerta, ella no está aquí!.

(El chico comenzó a correr más rápido, arrancaría esas malditas flores y regresaría a la velocidad de un rayo, daba igual si no las entregaba como Donna le había dicho, se largaria de ahí lo más rápido que pudiera, esto no fue fácil, aquella voz no dejaba de gritar, un llamado desgarrador, el chico se sentía superado, por más que se tapaba lo oídos, podía escuchar aquel llamado retumbar en sus tímpanos, tras un largo recorrido, encontró lo que Donna había dicho.)

James: Esa debe ser la maldita tumba, bien, toma las flores y larguemonos de aquí.

(James comenzó a arrancar varias de estas flores, le deba igual en el estado que las entregaría, ahora lo que le importaba era no volver aquí, aún que, con el pasar y el arrancar de las flores, este comenzó a calmarse y sobre todo, dejo de escuchar aquel grito, ¿habrá sido algo de su imaginación?, no tendría sentido, se suponía que ese trauma ya lo había superado, pero nuevo esta aquí, tal parece que muchas cosas no se superan, se quedan en nuestras mentes, esperando el momento de regresar, pero, mientras James se encontraba recogiendo las flores, algo salió de la tierra húmeda, un brazo, el cual parecía estar en descomposición, este tomo firmemente el brazo de James, era algo aterrador, pero poco a poco algo comenzó a emerger de la tierra, frente a James, se hacía presente el cadáver de una chica, el joven se hizo hacia atrás como pudo, aquella visión, comenzó a levantarse y retorcerse, acomodando sus extremidades las cuales se encontraban en posiciones inhumanas, ahí mismo, frente a su mirada incrédula, el ente habló.)

Adriana: James...James, ¿no estás feliz de verme?...podemos estar juntos nuevamente.

James: ¡No, aléjate de mi, esto no es posible, Adriana esta muerta!.

Adriana: ¡Estoy aquí, frente a ti, nuevamente tienes una oportunidad, ¿oh acaso no me amaste?.

James: ¡No, yo siempre te amé!...pero esto, esto no es real, tu, tu estas muerta, ya pasó un año, esto no puede seg...

(James fue interrumpido por aquel ente, este se aproximaba a el, la visión era algo bizarra, lo que debía ser su fallecida novia, se acercaba con unos movimientos algo provocativos o bueno, eso era lo que intentaba, pero no, todo lo contrario, James se alejaba de aquel ente, era obvio que aquello podría tratar de parecerse a esa persona que fue muy especial para el antes, pero esta no era ella, sin dudarlo, James corrió tan rápido como pudo, mientras se alejaba, podía escuchar la risa de aquel ente, con el pasar del tiempo James vio la casa Beneviento, este sin dudarlo entro a toda velocidad demoliendo la vieja puerta en el proceso, se encontraba cansado, pero feliz, lo había conseguido.)

Angie: ¡¿Por que hiciste pedazos la puerta?!.

James: (Jadeando) Aquí, están...sus, putas flores.

(Dijo para acto seguido arojarselas.)

Donna: Que descortés.

James: ¿Descortés?...¿descortés?, descortés debe ser, haberme puesto algo en la bebida o en la comida.

Donna: ¿Que?.

James: Ahí, en ese espantoso patio, tuve una visión, algo...que preferiría que se quedara en el pasado.

Donna: ¿Que fue lo que vist...

James: ¡Eso no te interesa!.

(Donna se vio sorprendida y por el susto se escondió detrás de Angie.)

Angie: ¡Oye cálmate, no le estés gritando!.

(El joven solo pudo verlas con una gran molestia, James se alejó y le dio la espalda a Donna, se veía muy furioso, pero esta para romper el hielo, hablo con el.)

Donna: Hay una habitación arriba, acompáñame, ahí te quedarás hasta que sea mañana y madre Miranda venga por ti.

(Donna comenzó a caminar y James la siguió, estos subieron al piso de arriba, ahí el chico entró en aquella habitación y la cerró con fuerza, este se recostó y decidió dormido lo que pudiera, pero mientras el joven trataba de consilidar el sueño, en el primer piso, se estaba dando una plática, muy interesante.)

Miranda: ¿Que fue lo que viste?.

Donna: Una tragedia, desde que James comenzó a respirar la esporas, todo fue claro para mi, ahí lo vi, en la vida del chico, hubo una tragedia, algo que aún lo persigue al día de hoy.

Miranda: Quiero que lo sometas a eso.

Donna: ¿Someterlo a su trauma?, madre, el duelo del chico aún sigue presente, mentalmente es inestable, si usted espera que el sea parte de nosotros, someterlo a esto, lo matará, no creo que el pueda soportar esto.

(Miranda escucho las advertencias de Donna, ella es una experta en lo que sus habilidades pueden hacer en la mente de las personas, pero si ella quería estar segura que James, seria el siguiente integrante en su familia, debía ponerlo aprueba en todo.)

Miranda: Hazlo, si el pasa la prueba, entonces me dará más razones para tenerlo con nosotros, si no es así, entonces, me habré equivocado.

Donna: Que así sea entonces, madre.

(Miranda se retiró y Donna comenzó a trabajar, era hora de poner a prueba que James.)

(Mientras tanto con el, su intento de consiliar el sueño había resultado, lamentablemente ese sueño sería interrumpido, poco a poco, este comenzó a despertarse, un olor extraño en el ambiente podía sentirse, el olor era similar al de aquellas flores, sin dudarlo se levantó tan rápido como pudo, amarrando sus agujetas y colocándose su camiseta, se plantó cara a cara con la puerta, algo en el le decía que podría ignorar todo esto y seguir durmiendo, pero algo le decía, que tenía que salir, aquel sentimiento logro dominar en el y así se aventuró en la desolada casa Beneviento, en verdad este lugar era horrible, varias paredes se veían desgastadas, despistadas y apunto de caerse a pedazos, con linterna en mano comenzó que bajar por la escaleras, llamo por la dueña de la casa, pero no hubo ninguna respuesta.)

James: ¡Donna, Donna!, maldita sea, este maldito lugar parece que me estuviera observando, tengo que salir de aquí, ¡a la mierda la prueba de Miranda!, no pienso volverme loco aquí.

(James comenzó a forcejear la puerta principal, por más fuerza que el este aplicaba, no lograba nada, pero en un momento de rapidez, alguien o algo tomó del hombro al chico y con una gran fuerza lo lanzó a una pared, haciendo un gran agujero en este.)

James: ¡Auch!, ¿qué...que demoni...

(James no tuvo tiempo de hablar, encima de el cayo alguien frente a el, aquel ente parecido a Adriana, cayo encimado en el, aparte de ser algo aterrador, todo comenzó a tornarse en algo grotesco.)

Adriana: Oh, James...Aaaah, querido, que momento más oportuno, jamás tuviste la oportunidad de hacerme tuya, tienes la ocasión ahora, estamos solos, en esta gran casa, llévame cargada por la escaleras...anda, hazme tuya♡.

(Aquel ente tenía una fuerza descomunal, pero en su voz se escuchaba un gran deseo, esto no le generaba ningún sentimiento positivo que James, al contrario, esto se trataba de un rechazo total, sin perder el tiempo empujo al ente y comenzó a correr.)

Adriana: ¡James, vuelve aquí, necesito a alguien que me proteja, no quiero estar sola, no me abandones por favor!.

(James comenzó a buscar un lugar para esconderse, por más que intentaba no escucharla, no podía evitarlo.)

James: Yo...yo la abandoné, ¡no!, eso no fue tu culpa...tu hiciste todo lo que pudiste...ella murió...lo que paso estaba fuera de tu alcance...debí haber manejado mejor...¡no!, el juicio se dictó, el conductor estaba ebrio...¡no pudiste ni verla antes de se quemada!...¡no!, su cuerpo...su cuerpo estaba irreconocible...no podía verla en ese estado...yo...yo le fallé, le jure cuidarla.

(James cayo de rodillas, se encontraba en lágrimas y devastado por esto, sea lo que sea que estuviera pasando, se sentía tan real, algo había aquí, pero sus pensamientos fueron interrumpidos, cuando frente a el se materializó Adriana, la cual aún con su aspecto de muerto viviente, James se puso de pie y la miro fijamente.)

James: Se que...se que ya no estamos juntos, pero a pesar de todo, no dejo de llevarte conmigo, no te fallé...ese día...jamás pudimos saber que algo así pasaría...espero puedas perdonarme, jamás te olvidaré, sigues estando conmigo...pero tengo que superarlo, un año, suena poco, pero en ese estado, se te hace una vida completa...un año fue lo que me duró, pensé que ya lo había superado, pero no es así...no puedo olvidarte, pero tampoco dejar consumirme por esto...lo siento.)

(Sin ningún aviso, James abrazo al ente, esta se vio sorprendida, del rostro de aquella aparición, salían lágrimas, lentamente, todo comenzó a volver a la normalidad, James pudo percatarse de esto, enseguida reacciono y yo a quien estaba abrazando, era Donna, con una parte de su velo, revelando uno de sus ojos, en el habían varias lágrimas.)

James: ¿Que...que fue lo que pasó?.

Donna: Yo...yo te escuche aquí abajo, vine a verte, estabas hablando solo, parecías ser sonámbulo...hasta que repentinamente...me abrazaste.

James: Oh, ya veo, vaya, enserio te pido una disculpa, no quería incomodarte, subiré enseguida y nuevamente, disculpa la molestia.

Donna: Nnno, tranquilo, no pasa nada.

(James comenzó a subir las escaleras, pero este se detuvo para mirar a Donna.)

James: Oye, también, quiero disculparme, por, pues, mi comportamiento, no fue lo mejor, de veras lo siento.

(Sin darle tiempo a Donna de hablar, el chico entró a la habitación y se recostó en aquella cama, no se quitó los zapatos ni la playera, se sentía cansado, pero sobre todo, extrañado por lo que había pasado, por más vueltas que su cabeza dio por este suceso, no pudo ser rival para el gran sueño que este tenía, tan rápido como cerro los ojos y los abrió, nuevamente ya era de día, más que nada, lo había despertado alguien tocando a su puerta.)

Donna: James, madre Miranda te está esperando.

James: ¡Ah, sí, ya voy!.

(Al salir, ahí estaba la mujer, tan imponente como siempre, con esa túnica de plumas.)

Miranda: James, querido, ¿cómo estuvo todo?.

James: Pues, no se como explicárselo.

Miranda: Ya veo, no te preocupes, ya tendremos tiempo de hablar, bien, nos retiramos.

Donna: Cuídese madre, tu también, James.

James: Ah, gracias, cuídate Donna, pero, ¿qué hay de la prueba?.

Miranda: No hace falta eso en esta ocasión, solo sígueme.

(Los dos se retiraron del lugar, dejando a la mujer de velo negro, con muchas intrigas.)

Donna: No hizo falta decirle, que paso la prueba...James, ¿cómo pudiste superar ese dolor del pasado?...¿acaso mis esporas no fueron del todo fuertes?, que chico...más interesante.

(Así la propietaria de la cada Beneviento, entro para hacerse cargo de sus asuntos, una nueva prueba había sido superada, pero lo más difícil está por venir, sin ninguna duda, James cada vez más está ganándose la admiración de Miranda, pero la siguiente prueba, será la decisiva, si el chico logra pasar la siguiente, este ya tendrá el voto de la matriarca, pero eso, esta aún por verse.)

Buenooooooo hasta aquí este capítulo, lo se, me tarde eones en sacar un nuevo capítulo, en verdad pido una disculpa a quienes esperaban este capítulo, les prometo que trataré de actualizar lo más rápido posible en esta historia también, agradezco tu interés y paciencia amigos mío, sin más que decir, nos vemos pronto!!.

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