Día 26

~Día Enfermo~

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Adrien se sorprendió cuando llegó al salón y Marinette no estaba en su sitio. Esa mañana le había enviado un mensaje de que no la fuera a buscar, pero como esperaba encontrarla en el salón, se preocupó.

Dudoso sobre si ir o no, a verla, terminó por entrar al salón y esperar a que llegara. La profesora Bustier llegó, pero no había señales de Marinette.

A la hora del receso, Adrien consultó con Alya, pero la bloguera tampoco sabía nada de su amiga, así que decidieron comunicarse con ella.

Tras varios intentos, finalmente respondió la llamada de Alya, quien festejó frente al rubio que parecía molesto por no haber sido él, el que lograra contactarla.

-Cuídate -dijo, antes de colgar.

-¿Qué te dijo? -preguntó de inmediato, Adrien. Alya se tomó el tiempo para guardar su teléfono y aspirar profundo, antes de mirar al chico.

-Ella está enferma. Como anoche no pudo dormir bien -le explicó con voz afligida -, hoy ha dormido todo el día y por eso no respondía el teléfono. Solo lo tomó para mandarte el mensaje de que no la esperes.

-¿Es muy grave? -consultó, realmente preocupado. Alya lo examinó detenidamente - ¿Eh?

-Tal vez. Me dijo que no quiere que la vayamos a ver porque es posible que nos contagie algo y...

-¡Eso no importa! -dijo Adrien, interrumpiéndola-. ¡Necesito ir a verla! ¡O al menos saber qué tiene! ¡No me puedo quedar aquí!

Alya y Nino observaron cómo el chico subió las escaleras para ir por su bolso y luego salía del colegio en dirección a la panadería.

-Si Marinette estuviera tan grave, no estarías tan tranquila -dijo Nino, sin mirarla. Alya se acomodó los lentes y miró a su novio.

-Se intoxicó con comida, nada grave, pero... ajam... quería ver que tan fuerte eran los sentimientos de Adrien.

-Se va a enojar...

-¡Que se enoje! -dijo con fastidio -. ¡Tuve que ver a Marinette con el corazón roto! ¡La tuve que consolar, viéndola llorar hasta dormirse en mis brazos! Mínimo, debo corroborar que no volveré a ver a mi mejor amiga así, por culpa de tu mejor amigo.

Nino observó a la chica y la abrazó.

-Ya. Dejemos que nuestros mejores amigos resuelvan eso y que no nos afecte.

Alya afirmó, abrazándolo también.

...

Adrien llegó a la panadería. Saludó a Sabine y a Tom, y pidió permiso para ver a Marinette. Los suegros del muchacho no entendieron la urgencia de la situación, pero acompañaron al chico hasta el departamento.

Sabine abrió la puerta y Adrien sintió que volvía a respirar cuando vio a Marinette con una frazada, sentada en el sillón, viendo televisión.

-¿Adrien? -dijo, sorprendida de que estuviera ahí.

-Los dejo -comentó Sabine, regresando a la panadería. Adrien hizo una reverencia, antes de acercarse a la chica que aún lo miraba perpleja.

-¿Estás bien? -preguntó.

-¡Pero si le dije a Alya que solo me desperté con indigestión!

- ¿De verdad?

-Sí -afirmó-. Con unas tazas de té verde con jengibre y canela, estaré bien para mañana.

-Qué alivio -dijo, dejando caer sus hombros y la maleta del colegio.

-¿Te fugaste del colegio?

Adrien bajó la mirada, rojo de la vergüenza. No solo había caído preso de la mentira de Alya, sino que además se había salido del colegio. Le esperaba una buena regañada.

-Mi padre se va a enojar... -comentó, tomando el peso a lo que había hecho.

-Mándale un mensaje a Nathalie -sugirió, palmeando el espacio junto a ella en el sillón.

Adrien buscó su teléfono y tras abrir el chat con la asistente de su padre, envió un texto simple.

«Tuve que salir de clases. Estoy con Marinette en la panadería.»

Envió el mensaje y suspiró.

Bien valía aguantar el sermón de su padre, si sabía que Marinette estaba bien. Se acercó a ella y se sentó a su lado.

-Estaba muy preocupado -confesó. Marinette lo observó con una sonrisa y lo abrazó. Él le correspondió de inmediato.

-Perdón por preocuparte.

En eso, sonó su teléfono. Se separó un poco de Marinette para revisarlo y la respuesta le hizo soltar un respiro.

«De acuerdo. Espero que estén bien. Hablaremos cuando regreses. Esto nunca pasó. Mensaje borrado»

-Que linda -dijo Marinette, observado el mensaje y Adrien ladeó la sonrisa por el apoyo que estaba obteniendo de Nathalie.

-Bueno... -guardó el teléfono y miró a Marinette -¿En qué estaba? ¡Ah! -volvió a abrazarla.

Ella se rio y respondió, abrazándolo de nuevo.

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Y la casi enferma fue Marinette...

Ayer les había comentado que en otro reto, fue en el LadyNoir, que me tocó enfermar a alguien, que en esa ocasión fue Adrien, así que le tocaba ahora a Marinette.

Lo curioso de este capitulo es que me lo he podido imaginar tan clarita la escena cuando él se da cuenta que se salió del colegio, como si fuera a pasar en realidad.

(Menos lo de Nathalie, solo porque aquí no quiero que ellos lo jodan todos con sus Akumas)

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¡Espero que les haya gustado!

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Mañana viene Siesta y nos acercamos al final...

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¡Nos estamos leyendo!

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Aquatic~

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26 de Abril 2020