Capítulo 20

—¿Podemos llevar esto para comer en el camino? —Taehyung levantó una bolsa de gomitas de oso en su mano derecha. Jungkook se acercó a él empujando el carrito del supermercado

—¿Ositos? —Jungkook miró la bolsa y Taehyung la agitó sonriendo —Bien.

Muy feliz, el mayor dejó las gomitas en el carro y siguieron viendo otras cosas en el pasillo. Ya casi estaba todo listo para su viaje, solo debían comprar algunas cosas para comer.

—¿Y esto? —Preguntó Taehyung.

Jungkook se volteó mirando la caja de preservativos que el pelinegro sostenía con una sonrisa divertida, sacó la bolsa de gomitas lanzándosela a la cara.

—¡Era una broma! —Taehyung fue tras el menor cuando éste apresuró su paso empujando rápidamente el carrito doblando al siguiente pasillo.

A las seis de la mañana Taehyung estacionó la camioneta frente al edificio de Jungkook. Cuando tocó el timbre el menor salió en pijama y frotándose los ojos, apenas vio a Taehyung frente a él recordó el viaje.

—¡Me quedé dormido! —Salió corriendo a su habitación buscando el bolso con su ropa que había dejado listo desde anoche, llegó a la cocina y sacó un paquete de galletas.

Taehyung se acercó con una sonrisa y tomó su bolso —¿Irás en pijama?

Jungkook se miró a sí mismo y cubrió sus piernas avergonzado —I-Iré a cambiarme.

Pasaron quince minutos y el castaño salió de la habitación listo para irse, cuando iba a sacar comida Taehyung lo detuvo.

—He traído todas las cosas que compramos en el supermercado —Dijo el mayor, él era el encargado de llevarla.

—Bien —Dijo y Taehyung no se movió, él alzó la mirada —¿Qué ocurre?

—Es que ni siquiera me has saludado —Sonrió Taehyung.

Jungkook rodó sus ojos y dejó un beso en la mejilla del pelinegro.

—¿Cuántas veces te debo decir que así no es un saludo? —Entrecerró sus ojos mirando al menor, el cual dejó un casto beso en sus labios. Taehyung rió —Vamos.

Taehyung pasaba su brazo por los hombros del contrario, abrazándolo, mientras salían del edificio y caminó hacía el vehículo.

—Pensé que iríamos en tu auto —Comentó Jungkook mirando la camioneta estacionada.

—Se la pedí a mi papá —Habló Taehyung desde la parte trasera guardando el bolso del pequeño.

—¿Saben que nos iremos de viaje?

—Sí, le comenté sobre mi secuestro a un bonito chico.

—¿Y qué dijo?

—Que me apoyaba totalmente —Le sonrió al menor —Mi mamá me dijo que te cuidara. ¿Tus padres no saben?

—Lo saben —Mintió —Ya vamos o se hará más tarde.

Pasaron dos horas y Jungkook trataba de dormir, aún seguía con sueño pero era imposible. El asiento era tan incomodo, no se podía comparar con una blanda y cómoda cama, a su cama. Había olvidado lo horrible que era dormir en autos.

Además se sentía engañado, según Taehyung el viaje duraba cuatro horas, irían a un pueblo muy turístico donde se quedarían tres días pero cuando estuvieron lo suficientemente alejados de la ciudad como para ya no poder regresar a ella, el mayor le dijo que había encontrado un lugar mejor, eso estaba bien para Jungkook, pero el viaje se extendería a veinte horas y se quedarían una semana.

—Qué incómodo —Se quejó el menor —¿No puedo pasar para atrás y acostarme? —Normalmente en las camionetas puedes ver qué hay en los asientos traseros y en la parte del portaequipajes pero había una manta, la cual estaba bien afirmada, que no le permitía ver nada.

—Atrás no hay espacio —Dijo Taehyung mirando el camino.

—Tengo frío —Acarició sus brazos desnudos —¿Podemos detenernos para sacar algo de mi bolso?

—No me puedo estacionar en esta parte de la carretera bebé, no hay espacio.

—Bebé —Murmuró enojado —No estás cuidando a tu bebé.

Cerró sus ojos mientras que su cuerpo temblaba del frío, una chaqueta de cuero cubrió su cuerpo y abrió los ojos.

—Te enfermarás —Se sentó derecho devolviendo la chaqueta.

—Ocúpala, no tengo frío.

Jungkook lo miró y parecía decir la verdad, así que se acomodó en el asiento y trató de dormir. A las dos horas, la camioneta se detuvo en la carretera, despertó y Taehyung no estaba a su lado, al bajarse se colocó la chaqueta y encontró al mayor en la parte de atrás buscando algo.

—Tengo hambre —Dijo Jungkook al escuchar a su estómago rugir, no había comido nada y ya era hora de desayunar.

—Sí, sobre eso, olvidé traer la comida —Habló con algo de miedo —La deje sobre la mesa de la cocina pero no la guarde aquí.

—¿No comeremos nada en cuántas horas más? —Preguntó enojado y Taehyung no respondió —Me quiero regresar a mi casa, este viaje no fue buena idea.

Caminó a la carretera esperando que un auto pasara en el sentido contrario pero solo veía árboles, todo estaba tan solitario que solo hizo que se molestara más.

—Bebé —Lo llamó Taehyung y el menor lo miró frunciendo el ceño —Jungkook —Corrigió —Seguramente en el camino nos encontraremos con un lugar para comer.

—Me dijiste que está parte era solitaria, que nadie vivía por aquí ¿cómo encontraremos algo?

—Está bien, asumo mi responsabilidad, quede yo en traer la comida y se me olvidó.

—Es bueno que reconozcas tus errores —Se cruzó de brazos.

—Pero ya estamos aquí, alejados de la ciudad.

—¿Se supone que no comeremos en dieciséis horas más? ¿Éstas loco? Me sacaste de la cama a las seis de la mañana, he tenido que dormir incómodo con frío y ahora no hay nada para comer, no Tae.

—Revisaré de nuevo —Se devolvió al vehículo revisando cuidadosamente todo mientras Jungkook lo miraba desde la orilla de la carretera.

—¡Jungkook! —Lo llamó y el menor se acercó metiendo sus manos en los bolsillos —Hay dos sándwiches, los guarde en el bolso de la ropa, los había olvidado.

El castaño tomó uno y empezó a comer inmediatamente, Taehyung cerró todo y se quedó ahí mirándolo comer.

—¿Tú no tienes hambre?

—No mucha —Dijo ofreciendo el otro sándwich —Tómalo, para más tarde por si te da hambre.

—No, es tuyo.

—Tómalo —Se lo entregó y Jungkook lo guardó en uno de los bolsillos de la chaqueta.

Cuando Taehyung subió un brazo a su cabello mirando a los alrededores, Jungkook vio su piel erizada, tenía frío, y como no si andaba con una camisa de mangas cortas.

—Ya vamos, que aún falta para llegar —Se giró para seguir con el largo viaje.

—Tae, espera —El mencionado se volteó y Jungkook lo abrazó con fuerza —¿Te quieres congelar?

—No —Le devolvió el abrazo subiendo las manos hasta la espalda del pequeño.

—Abriste tu bolso de la ropa y no sacaste un suéter.

—Buscaba comida, no ropa.

Jungkook levantó la camisa del mayor por los costados metiendo sus manos bajo la ropa para darle calor humano, Taehyung se exaltó —Mis manos están calientes, no pienses otra cosa.

—Se siente bien —Cerró sus ojos sintiendo las delicadas manos de Jungkook pasear por su espalda.

—Ponte ropa abrigada por favor.

—Lo haré, lo haré pero quedémonos un ratito así.

Cuando finalmente se separaron, Jungkook abrió el bolso de Taehyung sacando un suéter, pudo ver lo que había en la parte trasera de la camioneta, estaba lleno de bolsas las cuales no tenían comida, eso lo tenía claro, había dos sacos de dormir, una caja de primeros auxilios, sogas, una tienda de campaña guardada, pudo ver que era por el dibujo que estaba afuera, un extintor y dos bolsos con ropa junto a una mochila.

No quiso preguntar por qué no lo había dejado dormir en la parte trasera, a pesar de que estaba lleno de cosas, había espacio para él y pudo haber dormido allí, no sabía si era porque tal vez Taehyung pensó que revisaría todo o porque quería tenerlo a su lado durante el camino.

A medio día Jungkook dividió el sándwich en dos y le tuvo que dar pedazo por pedazo a Taehyung en la boca, ya que éste seguía manejando.

Pasaron así siete horas mientras ellos conversaban, Jungkook trató de sacarle información sobre a dónde llegarían pero no logró nada, mientras más avanzaban, más árboles diferentes y flores de distintas especies aparecían.

La tarde fue cayendo, al igual que los párpados de Taehyung, no tenía sueño exactamente pero su vista estaba cansada.

—¿Por qué no nos detenemos un momento para que duermas? —Preguntó Jungkook, él no podía manejar porque no sabía el camino y terminarían en otro lado.

—No tengo sueño y aún faltan siete horas más para llegar.

—No manejarás en la noche —Internamente Jungkook sacó la cuenta y si iban así, llegarían a las dos de la mañana, ¿que harían a las dos de la mañana? Lo mejor era dormir ahora y llegar más tarde a su destino.

—He manejado antes en la noche.

—Tae, detén el auto —Ordenó y el mayor buscó un espacio en la carretera para hacerlo, ya todo está oscuro. El camino estaba alumbrado por las luces delanteras del vehículo.

—Vi una tienda de campaña atrás, podemos armarla y dormir allí o dormir aquí también —Sugirió el pequeño.

—Estos asientos son incómodos —Dijo Taehyung abriendo la puerta para bajarse —De pequeño en los viajes de mis papás trataba de dormir y jamás pude.

—Y ahora lo dice —Murmuró Jungkook bajándose de la camioneta —¿Deberíamos entrar un poco más al bosque?

—¿No te da miedo?

—¿Piensas que puede aparecer un asesino, un animal salvaje o perdernos? Será solo un poco, lo digo porque la camioneta es de tu papá y estar estacionados en la orilla de la carretera no me agrada.

—Bien —Buscaron una entrada al bosque, como dijo Jungkook fue solo un poco y no quedar tan expuestos.

Taehyung comenzó a bajar algunas cosas mientras Jungkook limpiaba el suelo donde armarían la tienda de campaña.

—Necesito algunas rocas grandes —Dijo Taehyung —¿Puedes buscar algunas?

Jungkook lo miró —¿Quieres que entre más al bosque? Está bien, si me da algo de miedo estar aquí, más aún si me mandas solo.

—No te alejes tanto, las necesito para atar las sogas y que no se desarme todo —Explicó tomando la tienda de campaña.

—Bien —Se dio la media vuelta, encendió la linterna en su celular y comenzó a caminar. Lo peor es que no entraba ninguna, el suelo estaba lleno de hojas y flores. Estuvo atento a cualquier ruido, si escuchaba algo extraño como un animal saldría corriendo.

Regresó con seis piedras en sus manos, se sentía avergonzado por ellas, porque eran tan pequeñas que no sujetarían nada pero no pudo encontrar algo mejor.

El camino de regreso no se le hizo difícil aunque se había alejado más de lo que tenía planeado, unas luces a lo lejos lo guiaron.

Cuando llegó Taehyung estaba de espaldas acomodando unos cojines en la parte trasera de la camioneta, en ese espacio habían mantas y luces amarillas. No estaban los sacos de dormir, solo un montón de mantas haciendo una especie de colchón.

Soltó las piedras de sus manos haciendo que el mayor se volteara a verlo.

—Dime que si las necesitabas o estás muerto —Dijo Jungkook.

Taehyung se acercó y recogió las piedras del suelo con una sonrisa en sus labios —Son perfectas, las necesitaba.

—¿Para qué exactamente?

—No queremos que esto se mueva en la noche —Se alejó dejando las piedras en las ruedas traseras del vehículo y Jungkook negó con la cabeza sin dejar de sonreír.

Se acercó observando lo bien ordenado que estaba todo, los bolsos de ropa y las demás cosas estaban en los asientos delanteros dejando todo el espacio para ellos.

—Esto lo habías planeado —Comentó el menor.

—Lo estaba, cuando llegáramos a nuestro destino pero tuve que usarlo antes.

—¿Dormiremos ahí dentro?

—Es cómodo, se siente como una cama, créeme.

—Y las luces...

—Es para que no te de miedo.

—Se ven preciosas —En realidad lo que quería decir era que se veía tan romántico que le encantaba pero no lo dijo.

Taehyung parecía estar rendido a sus pies hace unos meses atrás, ahora sentía que él estaba a los pies del mayor.

Y es que era imposible con todos sus detalles.

De un segundo a otro sintió una mano alrededor de su cintura y un beso en sus labios —¿Dormimos?

—Sí.

Ambos se acostaron cubriendo sus cuerpos con las mantas, Taehyung le había dicho que cuando él se durmiera cerraría todo pero no apagaría las dulces.

Para Jungkook fue tan cómodo estar allí, Taehyung apoyaba su cabeza en una mano mientras que con la otra acariciaba el cabello del bajito mirándolo con dulzura.

Jungkook se acercó al cuerpo del mayor para sentir la calidez de su pecho y se quedó tranquilo ahí.

Sintió la mano en su mejilla, dando lentas y relajantes caricias.

—¿Aún me sigues mirando? —Preguntó Jungkook con los ojos cerrados.

—Te miraré hasta que te duermas.

Jungkook abrió los ojos mirando al mayor cerca de él. Taehyung bajó un poco su cabeza besando la punta de su nariz.

Eso no fue suficiente para el menor por lo que levantó su brazo llevando su mano hacia la nuca de Taehyung haciéndolo bajar y así poder besarlo.

Taehyung bajó su mano a la cintura del pequeño y se entretuvo allí, acariciando mientras que las manos de Jungkook se enredaron en su cabello.

Jungkook abrió su boca profundizando el beso y el mayor se apropió de sus labios como si fueran suyos.

De un beso apasionado se volvió a uno más perezoso y sin prisas. Podían estar horas y horas así, ambos lo sabían, ambos sabían cuánto aman sus besos, cuánto se gustaban pero solo Taehyung se atrevía a decirlo en voz alta.

Hasta el momento.

—Te amo tanto —Dijo Taehyung sin querer. El menor lo alejó con las manos en sus hombros.

—Tae —Lo regañó en voz baja, era demasiado pronto para algo así.

—¿No debí decirlo? lo siento —No quería disculparse pero aún así lo hizo —Pero lo hago por los dos, hasta que te des cuenta que también me amas.

Jungkook rió y buscó la mano del mayor entrelazando sus dedos. Se volteó pasando la mano de Taehyung por su cintura para que lo abrazara y cerró sus ojos.

Taehyung se acomodó atrás del pequeño y cerró sus ojos, no pasaron ni siquiera diez minutos y ambos estaban profundamente dormidos.



Nota:

1-Lo siento por tardar en actualizar y hacerlos esperar tanto:(
2- Estaré subiendo más adaptaciones en los próximos días, al igual que un libro de one shots que llevo tiempo planeando, así que estén pendientes ^^.

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