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Primer año
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-Legalmente esta niña es tuya, tiene el nombre de Elioreth Denali, nacida en 1992-Tanya sonreía con una felicidad indescriptible, nunca imagino ser madre-Esta todo hecho

-Gracias, Gustav, nunca olvidaré esto-Tanya sonrió agradeciendo al vampiro que habia viajado desde nueva York para ayudarle con el asunto, Tanya
explicando su situación, comprendió y la ayudo, además se lo debía por los viejos tiempos.

-No es nada, Tanya. ¿Estás segura de tu decisión?

-Completamente, y esto no debe salir de aquí, eres el único que conoce de Elioreth, si te llame, es porque se de tú relación con los humanos-Gustav arrugó el entrecejo -Supuse que entenderías.

-Lo entiendo, y entiendo tu posición, tienes que tener cuidado. En mi caso, ser padre de humanos es una cosa, está su madre para ellos, pero tú estás sola, esto es completamente diferente. Te deseo suerte y que Elioreth resista.

-Lo hará.

-Nos vemos-Salio por la puerta a una gran velocidad.

Tanya se centro en su hija que tomaba el biberón con deseo-¡Ya soy tu mamá!-Celebro.

Elioreth sin entender celebro de igual manera con fuertes carcajadas-¿Quien está feliz?-Pregunto Kate entrando seguido de Irina.

-¿Vino Gustav, verdad?-Se sumo Carmen.

-Ahi están los papales, Loreth oficialmente es una Denali.

Carmen dió un grito, seguido de unos aplausos de Irina, ambas dando saltos y gritos de emoción-Que buena noticia, ¿Le avisaremos a los Cullen?

Tanya dejó de sacudir los bracitos de Loreth para ver a Carmen-Por supuesto que no, a nadie, Elioreth no saldrá de la casa.

-¿Si los Vulturis se enteran?

-Les recuerda que es humana, además no creo que se tomen el tiempo de espiarnos.

-De todas formas, es mejor prevenir. Si consideras que es mejor no decir nada.

-No olvides que tienen un nuevo integrante reciente, Jasper, no quiero que esté cerca de Loreth, sería una desgracia.

-Tienes razón, consideremos que es lo mejor.

-Lo es.

Se mantuvieron en silencio celebrando cada uno, Irina aprovecho el momento para enseñar los nuevos conjuntos que había comprado.

-¡Son adorables!

-Al fin tenemos una buena excusa para gastar el dinero.

Tanya sonrió agradeciendo, aún recordaba cuando hace menos de una semana Eleazar le había le había llevado una cuna, la cual aún Loreth no aceptaba del todo, estaba muy acostumbrada a dormir en brazos de cualquier integrante de la familia.

Sería una niña que crecería con mucho amor de su familia.

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-¡Pera mira que linda se ve!-Irina con ojos de amor, alzo a su sobrina con el vestido floreado.

-No podemos tenerla con vestidos, hace mucho frío-Intervino Tanya.

-No queremos que enferme.

Aunque la casa siempre estaban caliente por la bebé, no querían arriesgarse a qué enfermara siendo tan pequeña.

-Tenemos que ir a cazar.

-Pueden ir primero, me quedaré con Elioreth-Irina se apresuro en cambiarla, se sentó en el sofá con la pequeña en brazos.

-Cuidala bien-Solicito.

Sin más sea más marcho junto a su hermana, Eleazar y Carmen.

Irina sintió un flechazo al corazón luego de conocerte a la bebé, el calor que desprendía le gustaba, sus sonrisas diminutas y sus abrazos. Por primera vez en mucho tiempo, deseaba ser humana para poder abrazarla como corresponde y darle todo el calor que merecía, pero lo único que se podían permitir era calentar la casa para ella.

Al principio le costó mantener su sed, pero se controlo siguiendo las indicaciones de Tanya.

-¿Tienes hambre?-Pregunto levantándose con la pequeña en sus brazos-Vamos a tomar el biberón -Lo tomo con su mano derecha, lo acercó a Loreth que empezó a tomar sin dudarlo-Tenías hambre, pobrecita.

Los ojos de la rubia menor se clavaron en los suyos -¿Qué te digo?, que tienes enamorada a toda la casa.

Elioreth cerró los ojos lentamente, el sueño comenzaba a llegar a ella. Irina se sentó en el sofá frente a la chimenea.

Elioreth se durmió, y el cuerpo de Irina se relajo.