Solo sabía cagarla! De verdad que no era capaz de hacer otra cosa! Finalmente Freezer estaba cómodo con su presencia y por aventador tenía que hacer pedazos todo su plan. Se maldijo a su mismo para sus adentros. No entendía que había hecho mal! Freezer lo quería como novio? Él se portó como si fuera su novio!

Y aún así fallo miserablemente... Pero había algo mucho más extraño en el asunto, la forma en la que lo vio... Fue casi de pánico. Entendía que no le gustaran las sorpresas pero eso no había sido un acercamiento agresivo ni nada por el estilo. Juguetea con la copa de vino que tenía en sus manos antes de dejarla sin cuidado sobre la mesa. Necesitaba descubrir que era lo que estaba pasando allí, que era lo que le ocultaban.

Miro la puesta de los susodichos pasillos, decidiéndose adentrar en lo desconocido de estos. Sus guardias no estaban respirándole en la nuca como de costumbre, ellos siempre se mantenían a una distancia considerable cuando era su tiempo con Freezer. Hay múltiples puertas, que cubren hasta lo más alto hasta donde la poca luz ya deja de alcanzar. La silueta de una mujer se manifiesta saliendo de una de esas puertas.

Su pelo lila, su piel azulada y ese corte anticuado de Edna Mods solo me deja saber que se trata de una persona en concreto. Una que Freezer parecía conocer bastante bien. Ella nota la presencia del pequeño demonio y su mirada parece afilarse como la de un felino enfocado en su presa. Flota con fluidez en su dirección antes de comunicarle con su baja voz.

Berryblue: Veo que eres tú. En qué puedo servirte querido?-. Rasposa pero cariñosa, se esfuerza en parecer amigable, después de todo lo quiere espantar al otro. Frost da una pequeña sonrisa quizás esta sería quien le dé las respuestas que necesitaba.

Frost: Nada en particular, se que Freezer no se encuentra en su mejor momento así que me dispuse a conocer un poco este lugar, aunque me temo que la iluminación no ayuda del todo-. Respondió con la misma amabilidad falsa pero encantadora, pero la micro expresión que perturbó la calma sonrisa de la mujer fue capaz de prender todas sus alarmas, no lucia contenta con su simple excusa, sin embargo aún pretende engañarlo manteniendo su expresión contenta.

Berryblue: Eso es encantador de tu parte, pero concuerdo que no es la hora más adecuada para circular. Pero no te preocupes cualquiera de estos días uno de tus escoltas estará encantado de presentarte el lugar-. "Sus escoltas" de eso se trataba, la mujer no estaba para nada conforme con el deliberado paseo que él "estaba dando" quizás por que no quería que conociera mas de las verdades que ocultaban las paredes de ese palacio fue lo primero que pensó el lagarto.

Frost: Es maravilloso saberlo-. Celebró de la manera más forzada que era capaz de realizar. La consejera pareció estar conforme con esa respuesta por lo que estuvo dispuesta a alejarse, brotando el pánico del más pequeño que se apresuró a detenerla- D-Disculpe!-. Consiguió llamar su atención, y rápidamente cambió su voz consternada por una tonada mucho más calma que le ayudara en su actuación- No se si sea apropiado de mi parte preguntarlo pero quisiera hacerle una consulta que tuve desde el momento en que la vi-.

Berryblue: Pues no perdamos más aire y tiempo, dime que quieres saber-. El demonio tomó aire, tenía que utilizar toda la información que tenía en su poder para ser capaz de conseguir lo que quería.

Frost: Usted es aquella que cuido de Freezer como una madre?-. La mujer se regocijó en sí misma sabiendo que había sido una de las personas de las que Freezer le habría hablado a su pareja, un poco de alimento para su ego nunca venía mal.

Berryblue: No me hagas sonrojar jovencito, nuestro vínculo es fuerte aún que no se puede andar comentando de esa manera tan dulzóna sobre el tema, no es la mejor para la imagen-.

Frost: Ya veo, no tengo problemas en hablar con usted con el papel de cuidadora incluso si ambos sepamos la verdad-.

Berryblue: Eres un joven astuto ¿Me pregunto si eso resultará en una amenaza?-. Maldición está mujer no le dejaba bajar la guardia. No dejaba de probarlo, nisiquiera los generales gordo y estirado de Freezer eran tan tensases en su misión de perseguirlo y dejarle sin aire. Trago saliva recuperando su compostura, soltando una risa divertida para responder con la poca confianza que le quedaba.

Frost: Sólo para aquellos que sean tan rebeldes y tontos para entregarnos sus bellos y ricos planetas en buenos términos y desdichosamante sólo les quede como tráfico destino la completa eliminación-. El ver la cara de la mujer le confirma lo que ya suponía, su respuesta fue perfecta y eso le incomoda a su compañía, ambos saben a que están jugando, pero alquien ya no está tan dispuesta a seguir con la diversión.

Berryblue: Asumo que está conversación no es algo salido de la mera casualidad, quizás sea idea mía pero noto qué hay algo más detrás que deseas consultarme-. Su mirada se vuelve más penetrante al tiempo que su rostro se torna recto como una piedra, es intimidante.

Frost: E-Eso es correcto señora. Tengo una duda más importante que hacerle sobre mi... Mi pareja-. Si no fuera suficiente con tener que tratar de mantener la cabeza en alto a la interrogación de la dama, también tiene en la suma el deber hablar tan "amorosamente" de su emperador.

Berryblue: Lo que vuestra escurridiza mente deseé-. Debe recuperar la confianza, ella no debía ser quien obtuviera verdades de él cuando él era quien buscaba encontrar la verdad, su pecho parece inflarse con valentía lo que le permite hablar.

Frost: Freezer es alguien muy poderoso, eso todos lo sabemos, incluso le tengo algo de envidia... No parece que hayan muchas personas capaces de hacerle daño, alquien así no tendría por que vivir con miedo no le parece? Entonces hay algo que no me cuadra... Si jamás tuvo que tener miedo o al menos hasta conocer a los asquerosos saiyans terrícolas, sin miedo a lo que otros le pudieran hacer por que eran demasiado débiles... Por que reacciona casi en pánico cuando recibe algún tipo de contacto con otra persona?-.
Berryblue se tensa, los roles finalmente se han invertido, era el tema que más buscaba evitar y fue el primero al que su rival intelectual apuntó. Pero no sería ella si fuera a mostrar algún tipo de inseguridad en su habla.

Berryblue: Deberás entender que como cualquier otro guerrero de gran velocidad es normal tener esa clase de reacciones ante un estímulo inesperado-. Buscó engañarle sin creer realmente en su habilidad de responder. No tardo mucho en saber que se había equivocado.

Frost: Pero lo que yo vi no fue un reflejo veloz. Los reflejos son automáticos, no poseen emoción, sólo son acciones sin pensar diseñados para actuar en una determinada situación que uno ya conoce. Sucede algo similar con los traumas pero estos están guiados por el miedo, un instinto de supervivencia mayor-. Es mucho más asertivo, no mira a la mujer con miedo, quiere conocer la verdad, le mira directo a los ojos, antes de interrogar: ¿Qué es lo que me están ocultando?-.

Ya no está nada contenta, para nada contenta, pero por eso no le iba a dar el privilegio de tener lo que el demonio quería. Por suerte para ella, tornar la realidad en contra de sus enemigos era algo de todos los días.

Berryblue: Querido estas seguro que no estás proyectandote un poco en el señor Freezer?-. Eso descoloca a Frost.

Frost: No entiendo lo que me está sugiriendo, me temo que yo estoy muy seguro de lo que vi-. La risa engreída de la mujer no tarda en volver a inestabilizarlo.

Berryblue: Yo no estaría muy segura de eso. Tengo entendido que pasaste un tiempo como un criminal intergaláctico en tu universo, del tipo "vagabundo" si no me equivoco-. "Vagabundo" como odiaba que le llamaran así! Era jodidamente humillante, más aún para un príncipe, más aún para un antiguo "héroe" del universo, cuando estaba en las calles lo trataron peor que los perros sarnosos de la basura y era tan patético que nisiquiera tenía el poder para contratacar por que no buscaba llamar la ante nación de las autoridades. Ella sabía que lo haría perder la compostura con esas palabras, no fue casualidad haberla escogido. - El sentimiento de persecución constante, debió afectarle a la larga lastimosamente-. Eso... Era bastante cierto, incluso Hit le había mencionado cómo se habían agudizado sus sentidos tras su tiempo de fugitivo.- Lamento mucho que hayas pasado por tales acontecimientos pero no creo que la manera apropiada de tratar esos traumas sea proyectandolos en otras personas-. Pero el hecho de que fuera cierto no significaba que estaba proyectándose! Él sabía lo que había visto, esta mujer solo quería hacerlo dudar hasta de sus propios ojos.- Pero no que preocupes querido, siempre hay tiempo para mejorar. Oh! Casi lo olvido, que distraído soy, noto que no tienes ninguna compañía en este momento, permanece aquí unos minutos más y traeré de inmediato alguno de tus guardias para que te acompañe a tu recámara, eso te parece bien, lindo?-. Ella había ganado, tanto que ya se disponía a marcharse con una sonrisa encantada con la amargura del hombre.

Frost: No podría ser mejor-.

Ahí está en su palacio de cristal, donde todo es perfecto, donde todo es calmo, los tapices, los candelabros, los pisos, las flores e incluso su robusto trono, todo esta hecho de un cristal tan pulcro como el vidrio más fino pintado tenuemente por la luz celeste que nacia desde cada objeto. Su fortaleza inmaculada no es un lugar solitario o al menos en apariencia no lo es, hay criaturas, personas que el conoce, Príncipes, colegas, un par de amigos, Sus sirvientes todos en frente de el en forma de estatuas de cristal , son réplicas exactas, pulidas y brillantes que parecen celebrar el hecho de que el este al mando.

El está en su trono disfruta de aquella imagen perfecta de lo que hace mucho que era su único sueño, ser el único gobernante del universo, respetado, apreciado, temido pero valorado, en esos sueños no sólo reconfortaba sus anhelos, sino que le daban la satisfacción que sabría que sabía que jamás tendría, un suelo tonto e ilusorio pero era eso para lo que los sueños estaban hechos.

...Pero este sueño no era tan perfecto como los otros, y no por que fuera exigente. Una pieza fundamental estaba faltando y comenzaba a ponerlo ansioso. Sus ojos estaban en su escuadrón blindado, sus mejores hombres, sus más leales soldados eran de las estatuas que siempre se posaban al frente cuando te‐ nía esos sueños. Eran incondicionales, nisiquiera podía pensar en un escenario en donde no se encontrarán.

Pero ese mismo caso era lo que estaba ante sus ojos ahora mismo. Entre los dos gigantes, el anfibio Neiz y el titán Dore, faltaba su pequeño Brench. ¿Donde podía encontrarse Salza?
Se levantó de su sillón tratando de encontrarlo entre el resto de la multitud de su salón del trono pero no podía encontrarlo por ninguna parte. La incomodidad lo invadió, un sentimiento de ahogamiento se
hundió en su garganta. No estaba bien, camino un par se pasos ni podía estar tranquilo hasta saber que pertenecía a su realidad, que estaba con el, que celebrará con la misma alegría que todas las otras estatuas poseían en sus miradas.

Más pasos y nada, ni estaba ahí pe4o no podía dejar de buscar, ni con todas las sonrisas y aplausos del mundo sería capaz de reemplazar aquello que el quería. Se desliza más entre las estatuas cristalinas, su transparencia le permite ver lo que estaba en el fondo de aquel salón, un pasillo negro, oscuro y penetrante.
Camino a través de el preguntándose el por qué de la ausencia de su capitán pero no tardó mucho en llegar a la dura respuesta. ¿Era su culpa haberlo alejado? Por su puesto que si lo era, no le dolía admitirlo lo que le dolía era ser consciente de lo que hizo. Al final del oscuro pasillo nace una luz, en donde un gran espejo aguarda a su llegada.

Pov Cooler:
En aquel espejo reflejante aparece una figura, pero no es la de mi propia persona. La silueta de un hombre, aún borrosa por mi mala visión, una altura menor que la mía, con hombros fuertes y endurecidos que caen en cascada hasta transfigurarse en una cintura fina
y delicada, carne azul cual el cielo y la cabellera igual que el mismo sol amarillento que lo ilumina. Solo hay alguien así en mi mente con tal forma.

Mis pasos se sienten más pesados con cada paso que doy en su dirección, no me suelen considerar un cobarde, pero eso no evapora el miedo que comienza a burbujear en mis venas y aún así trato de ocultar. ¿Miedo? ¿Acaso eso existe en la mente de los peores dictadores? Por supuesto que lo hace, es lo que nos sigue poniendo en nuestro lugar como meros mortales que jamás alcanzarán la más mínima divinidad sin importar nuestras acciones, yo soy la prueba de ello, yo soy otro que no puede escapar de su temor.

¿A que le temería alguien como yo? ¿La caída de mi reino, de mi poder? Todo eso no es más que el producto de paranoias circunstánciales, no mi miedo va más allá de eso. ¿Mi posición como un mero mortal? Solo un niñato engreído y desquiciado con temor a convertirse en nada como mi hermano tendría miedo a la característica más básica de todo ser viviente. Mi miedo... Va más allá de mi.

Cuando incluso no eres más que un ser vivo que todo el mundo contempla como un dios, comienzas a temer perder a aquellos que te ven de la forma más humana posible... Temo perder aquel que el capaz de ver la persona que hay en mi más allá de las publicidades, más allá de la imagen, debajo de la superficie...Temo perderlo a el.

Mis ojos caen en el rostro que se manifiesta en el espejo, es tan cerca o y tan distante al mismo tiempo, es la mirada de mi juzgamiento aquella a la que me debo enfrentar. La tensión que nace en mi pecho siguen en acenso así como un nudo aparece en mi garganta. Sepa Dios quien me dio las fuerzas como para poder hablar.

Cooler: No tienes idea de como me arrepiento Salza-. Confiese cobardemente al espejo como si eso fuera a cambiar el mundo real, las pequeñas y débiles lágrimas se acomodan arrogantes entre las cuencas de mis ojos. - Sólo pensé en como yo me sentía, mi dolor cuando desapareciste, cuando conocí la verdad y perdí la cabeza, pero jamás me puse a pensar que era lo que pasaba por tu mente, el grado de terror que sentías de enfrentarte a Freezer si regresabas, como tuviste que ocultar todo para sentirte a salvo... el daño que te hice cuando tu quisiste remediar las cosas, sólo empeore todo y nisiquiera fui capaz de volver a consolarte antes de que fuera demasiado tarde...-. La primera lágrima tuvo la osadía de deslizarse por mi mejilla, me postraba con la mayor vulnerabilidad que podía llegar a poseer, supongo que un reflejo de mi pasado, en aquellos momentos en donde él era la única persona con la que podría mostrarme débil sin ser juzgado como un paria- Eres de las pocas personas que me han tratado como una persona aparte de un dictador o un todo poderoso, y yo nisiquiera fui capaz de tratarte de la misma manera- Era tan injusto, tan dispar, que él me tratara con tanta amabilidad y yo sin merecerla, que él tolerara todos mis desperfectos mientras que yo estallara por el más minúsculo de los asuntos, que él atravesara todo el universo buscando una forma de encontrar mi perdón mientras que yo sin mover ni un dedo lo desechara como si no fuera nada. Pero aún tengo esperanza, de que las cosas puedan mejorar, solo era cuestión de tiempo, tenía que seguir poniendo mi esfuerzo por reconstruir lo que alguna vez compartimos -...Las cosas no seguirán siendo así... Te lo prometo-.

Colocó mi mano sobre el vidrio helado, metafóricamente tomando su mano, como mi deseo de recuperar nuestra unión pero en ese momento el vidrio se fractura en la zona de su mano.
AAAARGHH!!

Retrocedo espantado, la figura de mi capitán parecía haber cobrado vida, solo para retorcerse del dolor sujetando su propia mano, aquella que yo toque. En ese instante un detalle siniestro reluce entre la oscura imagen, el brillo de la sangre líquida y espesa se hacen presentes, un rojo vibrante cae por la muñeca de su brazo, que parece poseer distintos cristales rotos provenientes del mismo espejo.

Estoy espantando tonta y consternadamente me abalanzo sobre el cristal quizás como un reflejo natural e ilógico por ir a revisar su estado, evidentemente mis palmas al tocar , incluso sin fuerza el vidrio, producen mil grietas en el. Su grito desgarrador quiebra mis oídos, mis ojos se abren cuál platos solo para contemplar la sangre que fluye por el resto de su cuerpo, el vidrio se entierra en sus piernas, sus brazos, su trozo y otros han llegado a su rostro. Su cara solo refleja un dolor tan profundo que podría compararse con la profundidad del mar.

"¿¿Por que me hace tanto daño monsieur??"

Se lamenta entre lágrimas  tratando de mantenerse erguido y no desvanecerse ante el dolor. Las grutas comienzan a expatriarse más arriba, atraviesan su pecho y su frente hasta que finalmente llegan al tope del espejo. Su grito desgarra su garganta cuando en el momento de silencio el cristal se rompe por completo.
Liberado de su prision, su cuerpo ensangrentado cae ante mis pies, cientos de vidrios perforan su piel y la atraviesan sin compasión. Caigo de rodillas a su lado tomándolo en mis brazos con el cuidado de no enterrar ningún cristal más abajo. Llamó su nombre una y otra vez pero no da ninguna respuesta.

...: Bien Hecho hijo mío-. Esa voz, esa repulsiva voz que conozco desde el día que nací nace a mis esplendas. Giro mi cabeza rápidamente para encontrarme con su figura.

Cooler: Tu!-. Le brame a la silueta de mi padre , que solo parecía aparecer para atormentarme, su sonrisa sadica se inclina hacia un costado al ver que poseo en mis brazos, acercó el cuerpo de Salza más a mi pecho como si eso fuera suficiente para protegerlo- Alejate de el en este instante!! NO PERMITIRE QUE LE HAGAS DAÑO!!-. Le escucho reír de una manera tan sinica y tan cruel, es tal y como la recuerdo.

Cold: No necesitas de mi ayuda para causarle daño, por lo que veo ya eres bastante capaz de hacerlo por tu cuenta-. Camina a mi alrededor sin quitar la vista de Salza, su burla ni tarda en llegar a mi- Miralo, yo no fui quien hizo pedazos su corazón, su espíritu, su cuerpo incluso, todo esto es obra tuya-. Y pensar que a pesar todos los años que pasaron este monstruo no pierde su eficiencia en atormentarme, en lastimarme.

Cooler: F-Freezer comenzó todo, el jamás hubiera huido si ese sangano no fuera una bestia deseosa de sangre, lo hizo creer que volver tras el fracaso sería su pena de muerte!!-. Mi cabeza cae con vergüenza volviendo a tener a la vista el rostro de mi soldado sintiendo una tristeza que jamás había llegado a sentir- El nos separo, nos rompió-.

Cold: No me hagas reír, Freezer pudo haber hecho muchas cosas pero no es el responsable de su dolor real. Freezer no te obligó a gritarle para librarte de tu enojo, Freezer no te obligó a ser tan cruel para desquitarte de su supuesto dolor por la "traición" que pensaste haber sufrido, Freezer no te obligó a destrozar su regalo...-. A una velocidad inimaginable mi padre tiene un mano enterrada en el pecho de Salza dejando un cráter en su caja torácica, el se retuerce de dolor, el levanta su mano y del pecho extrae una pequeña cosilla brillante y reluciente, con un tono azul marino que solo me da una respuesta de lo que puede ser - Son gemas muy difíciles de encontrar, pero incluso el trabajo de investigación que hizo de nuestra cultura es de admirar, pero no pareció importarte mucho-.

Cooler: F-Fue un error!! Tuve que haberla aceptado!! Estaba ciego, sólo volví todo peor-.

Cold: Y rompiste su corazón... Y nadie te obligó a hacerlo. Me cuesta decirlo pero no puedo negar que me sorprendiste. Siempre pareciste más débil que Freezer, el jamás tuvo una relación si con alguno de sus soldados, ninguno fue una persona para el, sólo números, peones... Pero tu? Te apagaste demasiado rápido a ese gatito rubio que tienes de capitán, una relación muy poco apropiada para mi gusto. Eran amigos no es así? Y Quizás algo más profundo que eso, pero es bueno que llegará a su fin-. Me dedica una última sonrisa sosteniendo la Tanzania cerca de mi rostro- Jamás volvera a haber nada de eso por tu culpa-. Y en un mordimiento limpio cierra su puño, transformando la bella gema en solo fragmentos rotos.

Cooler: YO J-JAMAS BUSQUE HACERLE DAÑO!!-. Siendo el calor fluyendo por mi abdomen, miro hacia abajo y de su pecho y de su boca flotan grandes flujos de sangre espesa, ahí fue que me di cuenta, la gema era su corazón y cuando estaba se rompía el también lo hacía, sus ojos se apagan, su cuerpo ya no quiere pelear más, comienzo a perder la cabeza, no puedo detener la sangre, no puedo reparar su pecho, está próximo a su muerte, mi mente eufórica entra en negación, abrazo su cuerpo con fuerza, no quiero volver a decirle adiós, y mis últimos arrepentimientos salen de mi boca entre mis sollozos- NO, NO,NO,NO,NO BASTA POR FAVOR, ME ARREPIENTO, M-ME ARREPIENTO, L-LO LAMENTO!-.
Cold: Es muy tarde para eso-.

Entonces desperté, me corazón latía mil veces por minuto, mis ojos espantados corrieron por toda mi recámara tratando de entender su nueva realidad, todo había sido un sueño o más bien una terrible pesadilla, no solía tener sueños como esos con mucha regularidad pero sin duda mi cerebro se esforzaba en hacerlos lo más terribles posibles cuando sucedían, naciendo directamente de mis mayores miedos. La tensión se extendía por todo mi cuerpo, mis manos temblaban cual cuidad bajo el ataque de un terremoto.

Entonces un escalofrío viajó por mis huesos, la última imagen de mi pesadilla se repetía en mi mente, su rostro cortado por el vidrio y la sangre brotando con la fuerza de una cascada, era horrible, tan horrible. Un instinto nervioso me obligo a abandonar mis sábanas, estaba inestable, abrumado, reconozco cuando siento aquellas emociones ni sentía que podría dormir tranquilo sin poder verle la cara en perfecto estado, sin daño sin dolor, pero rápidamente mis ilusiones se fueron por el caño cuando fui capaz de recordar.

Esta misma madrugada mi grupo élite estarían viajando hacia un sistema solar cercano, se suponía que su actividad militar como equipo volvería a la normalidad lo que me dejaba solo una vez más.

Y así es como permanezco quieto, ya no hay nada por lo que luchar, y aún con eso soy incapaz de recuperar mi tranquilidad, mi cola permanece contraída como producto de mi estrés. El dolor de mi cabeza ya no es únicamente un sentimiento o una exageración, es una realidad, y bastante molesta. El palpitar en mi frente oculta bajo mi casco natural es absurdamente tortuoso, mi cuerpo jamás fue diseñado para manejar las emociones fuertes sin sufrir las consecuencias, quizás por eso me había alejado de mis sentimientos hace ya bastante tiempo, pero recordar esas pequeñeces no eran mi prioridad ahora.

Necesitaba tranquilizar tanto a mi cuerpo como a mi mente, mi cerebro tan emocional como absurdo demandaba por tener alguna garantía de su bien estar, era tan ridiculo y aún así era eso lo que sentía con más urgencia.
Me acerco a mi mesa de luz, entre la privacidad de mis cajones se encuentra mi comunicador, lo cojo entre mis manos para comenzar a introducir el código de mi llamada.

Encuentra a su reflejo en el espejo, luce mejor que antes eso es evidente pero aún así no logra sentirse disforico al respecto. Salza pasó sus manos por sus costados, sus costillas ya no se sienten tan prominentes como tiempo atrás, sus pómulos aún eran un algo sobresalientes pero de todos modos eso era más normal, el Doctor le había explicado que habían partes del cuerpo de podían perder o ganar peso con más facilidad, podía notar el segundo caso en su abdomen e igualmente este le provocaba inconformidad, pero eso ya no era una cuestión de masa muscular.

En el centro de su cuerpo estaba una cicatriz circular, como un cráter, que cambiaba de color y textura dependiendo de donde apoyara sus manos, era la herida del disparo que casi acabó con su vida meses atrás... No era que estaba poco acostumbrado a las cicatrices, todo su ser estaba cubierto por al menos una por sector, era cosa común entre las grandes élites o los más antiguos del ejército, ni siquiera era por la forma o el tamaño de la herida, ya había tenido una similar después de su muerte antes de volver a la vida con un cuerpo nuevo, lo que realmente le perturbaba... era la forma que había llegado ahí.

No lo entendía, como todo su deseo por luchar y sobrevivir se había ido tan rápido en tan poco tiempo, aún conociendo los horrores del infierno igualmente estaba dispuesto a volver a él. Su vida le importó tan poco que ni siquiera se detuvo a pensar que sucedería cuando desapareciera, simplemente.

Eso era lo verdaderamente escalofriante, el ni haber sentido miedo ni angustia, ni siquiera incomodidad con la idea de desaparecer de la faz de la tierra... Aunque para ser honestos no había sido la primera vez que se había sentido así. En otros momentos las ideas de desaparecer no era más que eso. Ideas estupidas, nacidas por el mero aburrimiento de una vida deprimente y vacía.

Pero ese día todas esas ideas revivieron para convertirse en una realidad, ni siquiera podía entender como había llegado a una conclusión así, no lo pensó en lo absoluto, el simplemente...Sintió que era lo correcto, lo que merecía... ¿Y por que?

Su rostro se amargó al recordar el motivo, si "No merecía nada" entonces tampoco merecía la vida como tal habrá interpretado su desesperada mente, aunque si lo miraba al día de hoy era un razonamiento absurdo pero cuando la persona que más admiras en el mundo, a la única que buscas complacer y enorgullecer, te dice aquellas palabras , realmente serías capaz de decirle a tu cerebro que no es verdad?

Su mente viaja más atrás en sus recuerdos, su jefe era conocido por ser mucho más tranquilo que el señor Freezer, lo cual era en su mayoría cierto, pero eso no significaba que tenía demasiada paciencia como tal. Si bien permanecía como un mar calmo la mayoría del tiempo, si realmente conseguías fastidiarlo su ira provocaría un maremoto que te destrozaría en pocos minutos.

No le era necesario matarte ni torturarte ni mutilarte para destruirte por completo, una humillación y degradación suya sería lo suficientemente eficiente como para transformarte en un mísero gusano que aceptaría que le aplasten. Con pocas palabras atacaba a tus puntos más sensibles para hacerte pesados solo con su lengua, todo el respeto con el que te podría haber tratado se iría por el caño en ese mismo instante en el que su ira estallara.

Llegó un punto en el que ya no sabía diferenciar si su señor en verdad creía todas esas cosas horribles o solo era la forma en la que sacaba su furia sin tener que reducir su personal con un asesinato. Solo sabía que su ira lo llevaba comportarse de una manera escalofriantemente siniestra.

Hasta ese día el jamás había sido una víctima de esos arranques suyos, casi siempre era él quien terminaba por calmarlo siendo quien jamás le traía problemas, quien jamás fallaba, quien jamás le provocaba, era casi un muñeco de confort permanente, que sin importar las condiciones siempre lo encontraba perfecto.
Quizás esa supuesta impunidad fue lo que hizo que las crueles palabras de su señor le partieran el alma.

"Deja de perder el tiempo Salza"

El pensamiento atravesó su mente haciéndole sacudir la cabeza, tenía que mantener la cabeza fría para el día de hoy, estaba por volver al campo de batalla de gran nivel, otra vez en las grandes ligas. El peligro era presente pero era lo que había estado esperando después de todo este tiempo. Quería volver a estar en los cielos, liderando a sus compañeros y liberando todo su poder, quería sentirse útil después de tanto tiempo, quería sentirse vivo y no debía dejar que ningún pensamiento deprimente le arruinara ese momento.

Rápidamente volvió a colocarse su camiseta, seguida de su armadura, sobre su litera se encontraba su comunicador, lo único que le faltaba para estar listo para el combate. Cuando se acercó a ella, casi que da un brinco cual felino sorprendido al escuchar el sonido estridente de la llamada entrante.

Hace una mueca disconforme, no entiende quien podría estarle fastidiando a estas horas, juro en su intención que si se trataba de uno de sus compañeros de equipo sería la primera cosa que patee al bajar de la nave por querer hacer esas bromas con el. Pero en definitiva no se trataba de una broma.

Reconoció la secuencia alfanumérica del emisor de la llamada. Se trataba de Lord Cooler, el aparato siguió vibrando en su mano, el brench no era capaz de tomar una deducción sobre que hacer con ella. Estos días había estado evitando a su señor lo más posible, no lograba sentirse completamente cómodo a su alrededor, para no decir que estaba "enojado" con el. Incluso si esa era una verdad que no quiciera afrontar.

Con un movimiento torpe lanzó el aparato directo a la cama, dejando que sonara hasta el cansancio. Si de verdad fuera algo importante su jefe se comunicaría directamente con el barco, era lo que solía hacer, las llamadas personales entre ellos era más que nada para trivialidades o para comunicarse información o temas que solo podrían manejar entre ellos.

Pero de verdad que no tenía ninguna intención de comunicarse en este momento. Sabía que los intentos de comunicación terminarían dentro de poco, cuando no le contestaba al primer o segundo intento su jefe solo asumía que no estaba en condiciones de hacerlo y lo dejaba para otro momento, así que se dispuso a abandonar el aparato hasta que fuera el momento de desenbarcar en el planeta en donde volvería a por el.

Se disponía a dejar la habitación para no tener que escuchar el canto del aparato. Pero al intentar atravesar la puerta un rápido sentimiento de culpa llegó a su ser. Él estaba molesto con su jefe si... E igualmente no podía pensar en lo desagradable que se estaba portando el mismo, se sentía mal cuando lo ignoraba, cuando lo evitaba. Incluso después de todo lo que le había hecho, aún era alguien que había apreciado por décadas y actuar de esa manera... Se sentía tan incomodo y grosero. No se sentía bien tratarle con la misma frialdad que el otro lo había tratado durante su enojo sabiendo el dolor que le generaba. Se regaló mentalmente por ser tan blando... tan falto de dignidad al respecto.

"Nadie creería que soy un asesino si me vieran actuando así"

Con esa última idea en orden se dispone a abandonar su recámara, sin saber un pequeño detalle. Que el intento de llamada duraría mucho más que solo un par de minutos, hasta que la angustia del demonio se fuera por sí sola y le dejara de atormentar.
____________________________
-5486 palabras-
Joder esto salió más largo de lo que esperaba emmm Bueno gente esto ha sido el capítulo que muy probablemente se dividirá en más de una parte a causa de su extensión;;
Berryblue sin duda es una amenaza mucho más fuerte que los demás hombres de Freezer al parecer, quizás sea por ser de las pocas con más de una neurona funcionando xD Esperemos que no le cause muchos problemas a nuestro Frost. Mientras tanto Cooler parece estar cada vez más angustiado cuando piensa en un futuro sin su capitán, que a la vez parece distanciarse cada vez más de él, podrán resolver sus asuntos a tiempo o quizás sea demasiado tarde? Lo veremos en el próximo capítulo! Bye bye ✨