Después de una ducha y de comer unos deliciosos postres me encontraba en los pasillos buscando a Leya, ella era la encargada de confección de ropa. Sin duda Leya era una persona difícil de encontrar, camine unos pasillos más y por ultimo baje de nuevo al segundo piso, no me encontré con Leya pero si con Edgar.

_ Rey Edgar – dije, el estaba de espaldas así que giró para ver quien la llamaba.

_Oh, Catrina, mi nieta, ¿Qué deseas? – dijo en un tono paternal.

_Yo quería hablar algo con usted – dije tímidamente.

_Claro, ¿De qué se trata?

_Hem... bueno me entere de que el reino Drácula no le está yendo bien a su pueblo.

_Si, lamentablemente así es.

_Pues se me ocurrió, que si tal vez podemos ayudar.

_ ¿Ayudar? – Arqueo sus cejas en señal de confusión- ¿Cómo podíamos ayudar?

_Pues allá no hay muchos animales que digamos, nuestro renio tiene muchas riquezas, porque no mandamos algunos animales a su reino, así la gente tendrá algo que beber y comer ¿No? - dije ingenuamente.

Edgar se quedó pensativo un momento.

_Por supuesto, es una buena idea – dijo al fin – mandare a mis guardias ahora mismo que realicen el plan.

_Gracias – dije con una sonrisa de satisfacción, había sido fácil. Gire para retirarme, pero Edgar me llamo a tan solo unos pasos de avanzar.

_Catrina – su voz era potente.

Me gire lentamente para encararlo.

_Si rey Edgar.

_ ¿Porque la decisión tan repentina? -.

Me demore unos segundos en responder.

_ Siempre hay que ayudar a tu semejante, algo que me enseño Johanna – mentí, pero no del todo, Johanna si me había enseñado algo parecido.

_Tienes razón mi nieta, es hora de que los dos reinos vivan en plena paz y armonía.

_ Así es - mostré' una sonrisa inocente.

Esta vez sí me retire.

Recorrí otra vez el bosque hechicero, como era de costumbre, tal vez Leya este por acá. Mientras intentaba buscar a Leya, quien parecía desaparecida como si la tierra se le hubiera tragado, unas flores me llamaron la atención. Eran de color rojo oscuro, ya casi para guinda, me acerque y lo palpe con cuidad y curiosidad.

_ Princesa – escuche una voz que me asusto, me había tomado de la nada, desprevenida Disculpa ¿la asuste?

Era Hans, sus ojos verdes jugaban con el color turquesa a los rayos del sol.

_ No, no, yo suelo ser muy asustadiza – dije tímidamente.

_ Le estado buscando – inquirió'.

_ ¿Buscando? ¿Para qué? – pregunte.

_Hem... el rey dijo que será una buena idea comenzar con las clases de magia hoy.

_ Excelente.

_Bien, acompáñame. – Hans me llevo al rio que había visto desde el árbol.

El lugar no era lejos del castillo pero tampoco era cerca. Me pareció un excelente lugar para comenzar unas clases de magia.

_Lo primero que tiene que saber princesa es que la magia de un vampiro es muy diferente a la magia de un hechicero.

Vampiros y hechiceros, esta clase me iba a gustar y mucho.

_ ¿Cómo cuales diferencias? – pregunte interesada en el tema.

_La magia de un vampiro no consiste en nada de esferas de energía ni bolas de fuego, ellos solo utilizan la telepatía y la hipnotización, una mirada fija e sus ojos basta para...

_ Que te hipnoticen – termine la oración.

_Así es – dijo un poco sorprendido tal vez – Cada uno de los hechiceros tenemos un energía en nuestro interior, una magia que está esperando salir al exterior y eso es lo que vas hacer hoy. Vas a sacar toda esa magia que tienes adentro y sé que una magia potente.

_ ¿Sacar al exterior?

_Así es, siéntate- dijo mientras él ya se sentaba,

Obedecí.

_Ahora solo cierra los ojos y concéntrate, ve lo que hay dentro de ti y solo así podrás sacar la magia que tienes dentro.

Y así fue, cerré los ojos e intente concentrarme lo más que pude, al saber que no sucedía nada los volví a abrir.

_No sucede nada – reclamé.

_Es cuestión de practica – inquirió'.

Lo mismo pensé al trepar el árbol, me demore a llegar a la copa pero al fin y al cabo lo logre.

Intente una vez más y los resultados fueron cero, otra vez mas y ocurrió lo mismo.

_ Debes mirar dentro de ti Catrina, tu interior- indico'.

Al escuchar mi nombre no es que me hay sorprendido sino que simplemente me puso a gusto.

_ Mirar dentro de mí – susurre'.

¿A qué se podría referir? ¿Cómo podría yo mirar dentro de mí?

_ Tus miedos, tus deseos, todo lo que te cause felicidad, tristeza, enojo, tan solo un sentimiento basta para que demuestro un poco de tu poder, para que se sienta tu magia.

¿Que podría sentir en este momento?, los recuerdos de mi madre y la hermana Johanna estallaron en lo profundo de mi memoria, como extrañaba a Johanna desde el fondo de mi corazón, cuanto hubiera daría por tener a mi madre junto a mí, los recuerdos cuando yo estaba en el orfanato peleando con Jazmín y de pronto todo dio un giro inesperado, Cristina que me había explicado quien era, verdaderamente quien era. Al recordar eso me llenaba de un sentimiento inexplicable, como una combinación entre la tristeza y la alegría, la nostalgia y la soledad. Solo un recordatoria me llenaba de enojo, ira, cólera, y tenía un nombre, ese nombre era ONEM. La causante de todo esto, si ella no hubiera hecho todo un infierno, si ella no hubiera hecho absolutamente nada todo Lamborjay estaría en paz, y mis padres estarían conmigo.

Sentí una energía en todo mi cuerpo, una vibración, abrí los ojos y una bola de energía y magia se había formado entre mis manos. Di una sonrisa de satisfacción.

_Genial – escuche susurrar a Hans – Aprendiste rápido – siguió diciendo.

De pronto me sentí mareada y la luz que estaba entere mis manos se fue desvaneciendo. Me decepcione al notarlo.

_ ¿Por qué desapareció? - pregunte'.

_Tan solo tienes que aprender a controlarlo.

Y así lo hice, o al menos lo intente. Practique con Hans un par de horas más. Hicimos unas pausas cuando nos agotábamos. Este entrenamiento cansaba mucho en poco tiempo.

Terminamos de entrenar y él me acompaño hasta el castillo, después él se fue con unos compañeros de armadura a entrenar y yo me acorde que tenía que buscar a Leya. Fui a mi habitacion para preguntar a Heydi si sabía dónde la podía encontrar.

_Está en la sala de confecciones de vestidos – me informo'.

_ ¿Por dónde esta eso? – pregunte, aun había habitaciones del castillo que no conocía.

_Si quiere yo la puedo llevar.

_Me encantaría – respondí rápidamente.

Heydi me llevo por unos pasillos del tercer piso, intente grabarme el camino, lo cual fue un poco complicado. Llegamos a una habitacion, la puerta estaba cerrada. Heydi toco 'despacio y de inmediato Leya salió a responder.

_Ahh princesa, Heydi, son ustedes – Leya hizo una señal para que pasáramos.

Adentro se encontraban muchas costureras que estaban trabajando con ruecas.

_Vamos, más rápido – alzo la voz Leya de una forma moderada.

La habitacion era mediana.

_ ¿Y a qué se debe su visita princesa? – pregunto' Leya.

_Necesito que me confecciones prendas, pero no vestidos, sino algo más cómodos, pantalones podría ser – dije un poquito nerviosita.

_ ¿Pantalones?, - pregunto confundida – Señorita Catrina, en todos mis año de confección muchas princesas me pedían que les fabrique hermosos vestidos, pero usted me pide pantalones.

_Exacto, yo no soy una princesa Leya – explique – soy diferente, además ya comenzaron mis clases de entrenamiento y yo no puedo practicar teniendo puesto n vestido. Necesito algo más cómodo.

Leya se quedó unos segundos en silencio que para mí fueron como años de una eternidad.

_Bien – acepto' al fin – le fabricare unos pantalones.

_Gracias Leya – quería abrazarla pero sabía que no era el estilo de ella - ¿Y para cuándo estarán listos?

_ Mañana, estarán listos para mañana.

_ Genial – dije satisfecha, algo característico de mi es que consigo lo que quiero.

Me despedí de Leya y regrese a la habitacion con Heydi, intente grabarme el camino por donde regresamos.

_ ¿Y qué tal su entrenamiento de magia mi lady? – pregunto Heydi

_No solo de magia Heydi, Dreik también vino hoy para entrenarme – dije mientras me sentaba en la cama.

_ ¿Dreik?, ¿El príncipe del reino Drácula? – Heydi se veía sorprendida - ¿Tiene permiso de estar en estas tierras?

_Así es, es difícil y muy cansado tener dos entrenamientos en un día – dije en un tono fatigado.

Heydi asintió.

_ Pero más rápido aprenda, podre ir más antes a salvar a Johanna y a todos los que están atrapados – seguí diciendo.

_ Eso espero mi lady, por otro lado no entiendo como logro el rey Edgar para convencer a la reina Selene que su hijo vaya también a la travesía.

_Él tiene sus métodos, es astuto a pesar de todo- dije, una sonrisa se deslizo en mi rostro al recordar lo cuan molesta se encontraba Selene en ese entonces.

_ Sí, eso lo se mi princesa.

_ Heydi, ¿Cómo sabias que hoy tuve entrenamiento con Hans? - interrogue.

_El joven Hans vino a la habitacion, le dije que no estaba y me comento que te buscaba porque hoy empezaba tus entrenamientos de magia.

Así que Hans vino a buscarme en la habitacion, en ese entonces estaba entrenando con Dreik, o de repente estaba buscando a Leya. Hans era un buen chico. Una idea se me vino a la mente.

_Necesito que me respondas una pregunta.

_La que usted quiera mi lady – dijo haciendo una reverencia.

_ ¿Porque no podemos traer a la familia de Hans al castillo? O tal vez la familia de los demás guardias, guerreros, caballeros.

El rostro de Heydi mostraba confusión.

_El rey Edgar no lo permitiría mi princesa, aunque su madre ya había hecho esa propuesta.

_ ¿Mi madre? ¿Y qué paso?- interrogue sorprendida.

_Los aldeanos no quisieron, prefirieron vivir en sus propias casas. Dijeron que era mejor dejar solo a su hijo en el castillo.

Ellos tenían razón, no se sentirían cómodos viviendo en un lugar extraño, como cuando yo llegué aquí, no me sentía cómoda y hasta ahora no me siento del todo bien que digamos.

_ Ya veo.

Me quede pensativa unos segundos y después cambie de tema, le pregunte a Heydi que había sido de su vida y la de sus padres, me conto que su madre también trabajaba como mucama, y no era más ni menos que la mucama de Leya. De lo contrario su padre había muerto en la gran batalla histórica, la pelea con Onem, solo ahí fue donde me di cuenta que en esa batalla murieron varias personas inocentes, familias destrozadas.

De algo estoy segura, su muerte no será en vano, porque un día Onem va a pagar y tal vez ese día llegue muy pronto.

***

Lema del hoy:

El armas mas mortal es el amor, porque no importa a donde apuntes, siempre te dará en el corazón. _ Frases inventada por mi 

Ok ok lo se, es mi regreso....no he actualizado desde un buen tiempo pero necesito que me ayuden con sus votos, eso me ayudaría demasiado , espero que comenten y voten porque cada cap es muy dedicado y trabajoso..

Los quiero, nos leemos hasta la próxima actualización.