Capítulo 16

SAINT

—¿Qué haces aquí? — le pregunto en estado de shock— ¿eres tú mi acosador? — le pregunto sin comprender todavía lo que está pasando.

—Hola Saint, ¿acosador? , me gusta más admirador— me dice el muy cínico.

—Lhong, dime de una vez que es lo pasa aquí. Hace años que no nos vemos, desde mi primer curso de universidad. ¿A qué viene esto? — le interrogo intentando hacer tiempo.

Veo que se ha ido acercando a mí poco a poco y yo no tengo donde esconderme realmente.

—Por favor no te acerques a mí— le pido con una voz más débil de lo que pretendía.

—¿Qué a qué viene? — me pregunta con un tono irritado.

—Viene Saint a que yo siempre te he amado, desde que éramos niños y jugábamos en tu casa.

—¿Qué?, de eso hace mucho tempo Lhong, por favor déjame salir de aquí—le imploro, estoy al borde de las lágrimas, pero no quiero darle el gusto de verme llorar.

—Si te dejo salir volverás corriendo a los brazos de ese gorila hormonado que tienes por novio, y ya te hice la promesa de que serías mío o de nadie.

—Zee y yo no somos novios— le digo en un intento de que se piense lo de dejarme marchar.

—No me tomes por tonto Saint, he visto todo lo que has hecho con él en tu apartamento— me escupe sus palabras con una ira que me hace temblar. Joder, ¿desde cuándo nos vigila?, tengo que pensar algo rápido o esto se va a poner feo.

—Lhong, él ya sabe a lo que me dedico y me ha abandonado. Pero eso ya lo tienes claro ¿verdad?, porque has sido tú quien se lo ha hecho saber— le digo con cara de odio.

—Él no te merece amor, lo he hecho por ti— me dice con toda naturalidad.

La ira estalla en mi pecho, quiero golpearlo hasta la muerte, pero es mucho más fuerte que yo. Debo ser más listo que él, hacerle hablar para que Zee tenga tiempo de encontrarme.

—¿Por qué me haces esto? Nunca he sabido de tus sentimientos por mí, pero sabes que no puedo corresponderlos.

—¿No puedes o no quieres? — me pregunta con una tranquilidad que me da escalofríos.

—Al principio pensé que era un enamoramiento pasajero y que cuando nos hiciéramos mayores te olvidaría, pero fue peor cuando fuiste creciendo y te convertiste en el hombre más hermoso que yo haya visto jamás—me relata.

Cuando tu madre murió y tú desapareciste de mi vida me quedé vacío sin nada por lo que vivir.

Pero a los pocos meses tu padre me llamó para que le ayudara a encontrarte, quería que volvieras para hacerte entrar en razón y siguieras con la empresa familiar.

Yo me negué, sabía que tu padre quería cambiarte y tú eras perfecto tal y como eras. Pero un día te vi en el campus, ibas tan distraído y Perth casi te atropella con su bicicleta. No me podía creer que tuviera tanta suerte, allí estabas en mi misma universidad.

Me acerqué a ti y tú me recordaste rápidamente, parecías contento de verme, pero no era verdad estabas enamorado de Perth. Aquello casi acaba conmigo, pero me dije a mi mismo que tenía que luchar por tenerte otra vez en mi vida.

Un día haciendo prácticas en Kan Security nos encargaron vigilar un sitio web con películas de adultos que operaba en la red oscura, por si estaban haciendo algo ilegal como abusos de menores. Es ahí donde encontré tus películas, me quedé horrorizado en un principio. Pero poco a poco pude ver la belleza que había en ellas. Era lo más cerca que había estado nunca de tenerte de alguna forma. Conozco tu cuerpo mejor que ese guardaespaldas tuyo.

Ahora sólo quedaba deshacerme de Perth, él no te merecía, sabía que si le hacía saber lo de tu trabajo te abandonaría sin pensarlo dos veces.

Un día le dejé una nota diciéndole donde podía encontrar a su novio y que no le gustaría saber a lo que se dedicaba. Y como yo había supuesto salió corriendo de tu vida sin mirar atrás.

Lo que no vi venir es que tú entraras en depresión por haberlo perdido y me echaras de tu vida sin más. Dejaste de llamarme o enviarme mensajes, no me hablabas y rechazabas todas mis ofertas para salir.

Me obligué a ser paciente y a esperar por ti como he hecho toda mi vida. Llegado el momento empecé a mandarte mensajes como Rabbit Hunter, pensando que así era más fácil llegar a ti. Pero otra vez me equivocaba, tú nunca me verías realmente.

Pero todo explotó cuando me di cuenta de que te habías enamorado perdidamente de ese guardaespaldas tuyo. No iba a consentir que nadie más te tuviera, se acabó esperar ahora serás mío para siempre o no serás de nadie.

Dejé que Lhong hablara, me cuenta todo con la mirada perdida y yo sólo quiero gritar y salir corriendo de esta habitación. Este hombre está loco del todo, está obsesionado conmigo hasta un punto demencial.

ZEE

Max y yo salimos del apartamento de Saint, fuera está Tine, Tul y Sammy esperándonos.

—Sammy ¿qué haces aquí? — le pregunto mientras me acerco a darle un beso en la mejilla.

—Hola a ti también Zee— me responde con una sonrisa.

—Para tu información soy la mejor opción que tienes para encontrar a Saint— me espeta.

—¿Cómo sabes lo de Saint? — la interrogo.

—Cariño, yo lo sé TO—DO— me dice recalcando estas últimas palabras.

—Muchas gracias Sammy por venir a ayudarme— le digo casi llorando.

Sammy nunca dejó de luchar incluso después del incidente. Ella era cabo experta en comunicaciones cuando estábamos en el ejército. Después no dejó que la silla de ruedas condicionara su vida y se había especializado en delitos informáticos. Trabajaba con la policía, pero también ha colaborado con Kan Security en algunas ocasiones. Es muy buena en su trabajo, es implacable y siempre cogía al malo.

—Ahora deja de lloriquear y pásame la aplicación de localización de la pulsera GPS. Tengo pinchadas las cámaras de tráfico de la zona. Necesitaría un lugar donde trabajar— me pide con un guiño.

—Creo que la oficina de seguridad del edificio de Saint será un buen lugar, le diré a Jenny que te eche una mano— le contesto.

La dejo instalándose con Jenny y llamo a Kao para saber si tienes novedades.

—Zee estaba a punto de llamarte— me responde enseguida— he conseguido identificar a nuestro hombre, se llama Lhong Kaewcharoen, nació en la misma ciudad que Saint, sus familias eran muy cercanas. Hizo prácticas con nosotros cuando estaba en la universidad y le ofrecí un puesto fijo después. He mandado a Sammy foto y matrícula de su coche, también te la he mandado a tu móvil. Voy al aeropuerto a buscar a Mew, acaba de regresar de un viaje de trabajo y está de los nervios desde que se ha enterado de lo de Saint. Coordinaré con la policía el rescate de Saint, tienes que ir con cuidado Zee ese tío está chiflado. Hemos descubierto en su ordenador miles de fotos de Saint, sólo le envió unas cuantas, está realmente obsesionado.

—Iré con cuidado, nos mantendremos en contacto, en cuanto Sammy encuentre la ubicación exacta de Saint montaré el operativo y recuperaré a Saint, lo juro.

Con esto finalizo la llamada y reúno a todos en la oficina de seguridad.

Abro la foto que me ha mandado Kao y lo reconozco al instante, es el hombre que perseguí el otro día. Sus ojos son inconfundibles, ese lunar en el ojo izquierdo lo reconocería en cualquier parte.

—Lo tengo— dice Sammy con seguridad— salió de este edificio rumbo norte, la pulsera nos da la localización en Ayutthaya, he podido reducir el radio de localización, pero hay varias opciones donde podría estar Saint.

—Este tío no es un aficionado seguro que tendrá el lugar vigilado y si nos ve llegar podría hacer alguna tontería— les digo a todos.

—Bien, entonces debemos separarnos y entrar en las viviendas que Sammy cree que puede estar Saint y entrar en todas a la vez. Eso no le dará pistas a ese chiflado y en cuanto alguno de los equipos encuentre a Saint dará el aviso al resto— plantea Max.

Cuando todos tenemos claro cómo vamos a actuar llamo a Kao y lo pongo al tanto. Él se encargará de llamar a la policía local y mantener el área despejada para nuestra intervención. Le pido que sean discretos para que ese chiflado no se dé cuenta de nuestro plan.

Bien, Tul irá con Max, Tine vendrá conmigo, además Kao me ha mandado a dos de sus mejores hombres de confianza, Charles y Pete, dos ex marines con mucha experiencia en ataques con rehenes.

Salimos hacia la ciudad donde ese loco tiene retenido a mi ángel. Saint, mi amor, ya voy por favor aguanta. Espero que ese lunático no le haya tocado un pelo porque si no le arrancaré el corazón con mis propias manos. Dios, necesito otra oportunidad para intentar merecer el amor de Saint, por favor ayúdame a encontrarlo sano y salvo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top