Había una mesa llena de armas y de muñecos. Estaba ahí Marcus, me entró la curiosidad ya que era la primera vez que veía tantas armas. Papa suele tener varias armas escondidas en casa, por si de caso nos entran a robar algún día.
- Ven Lu.

- Ni se te ocurra acercarme a esas cosas, yo miro, pero no hago eso.

-¿El que? ¿Disparar? Vaaa, no te va a pasar nada, sabes que nunca te haría hacer algo peligroso, te subirá la adrenalina y te quitará ese pequeño estrés que llevas.- me sonrió.

- Ni se te ocurra, yo no mato ni hago nada de eso.

- De acuerdo, pensaba que cuando tocaba te convertías en un asesino , me habré confundido.- dijo riendo.

- No tiene gracia Marcus- tenia curiosidad por probar, pero eso no estaba bien.
-¿ Entonces que propones hacer?- preguntó un poco malhumorado.

- Se me ocurre hacer algo en nuestra antigua habitación......

Subíamos las escaleras mientras nos desnudabamos,la pasión entre nosotros no cambiaba.
Cuando me desperté, tuve la curiosidad de bajar a ese sótano, probé con una pistola pequeña, y seguí hasta que alguien me tocó las  manos y me susurró al oído:
- Si tienes las manos rectas, dispararás mas rápido.
- De....de....de acuerdo - se me puso la piel de gallina. Noté un pequeño escalofrío cuando apretamos en gatillo los dos juntos. Vi el reloj y era las tres de la madrugada.

-Mierda Marcus, mi madre me va a matar, llevame a casa y tengo examen a primera hora.

- Tranquila Lu, estábamos genial dejame llevarte, y hablaré con tu madre.

- No, ni se te ocurra hacer eso. Me matan , hoy me matan.

Cuando llegué a casa mis padres no estaban. Llamé a Marcus y les dije que estaba sola pero que bien. A la mañana siguiente mi madre me despertó:
- Luuu, cariño hoy tienes examen.

- Si mamaaa, ya voy .

Corrí al instituto. Como si la vida me fuese en ello, realicé el ultimo examen, cuando salí recibí un mensaje de Marcus:
"Cariño, estoy fuera , sube al coche negro que está en frente de la puerta de salida."
Cuando salí ahí lo vi, apoyado en el capó del coche, con su traje y un ¿cigarro? No tenia ni idea que Marcus fumase , la verdad, me resultaba bastante raro.

- Sube- me ordenó.

Le hice caso ,no sabia que íbamos o dónde íbamos.
- Marcus, tenemos que hablar. Estas dos semanas son las mas importantes para mi, por favor, necesito un poco de distancia.- él no me hacia caso, seguía conduciendo. Y cuando me cuenta, aparcamos en frente de mi casa.
- ¿Que hacemos aquí?- pregunté un tanto desorientada.

- Vamos a entrar y a decirles a tus padres que estas saliendo con un hombre de negocios, quedan dos semanas, tu misma lo has dicho, y después, ese mismo día, nos iremos de viaje.

- Yo... Yo... ¿estas seguro? No se cómo podrán tomárselo.

- Pues mas les vale tomárselo bien, en algún momento serán mis suegros. ¿No?
- No se que decirte a eso Marcus, no me hagas pasar por este mal trago. Por favor.
- Tranquila nena, no les voy a hacer nada. Ni les vamos a mentir,porque en cierto modo, si que soy un hombre de negocios. No miento.

- De acuerdo, vamos.

Bajamos del coche , me cogió la mano,y tocó la puerta.

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Buenasss, veo que poco a poco hay gente que si me manda algunos mensajes por directos. Poco a poco la novela está siendo leída. Y deciros que me encanta escribir. He empezado a escribir otra novela : confesión adolescente. Trata de cinco adolescentes que se conocen y .... El primer capitulo ya esta colgado, si queréis pasaos , esta en el perfil. Graciasss