Los nuevos ya habían ingresado, su mejor amigo vió a la mayoría de reojo pero ninguno le interesó.

Normalmente Chanyeol, un chico de la clase "élite" de la escuela, buscaba a un chico o una chica guapa y facil para entretenerse durante el transcurso de su ultimo año. Aunque esta vez sería díficil. El no quería alguien decente, quería a alguien que supere sus expectativas.

Sehun tenía que aguantar los caprichos de su mejor amigo. El era más reservado y prefería no meterse en el circulo de amoríos y "amistades" de este. Sin embargo, su intento de permanecer en el anonimato fue en vano. Ya desde el primer año lo tenían fichado como el "El amigo del rompecorazones.", no tardó mucho en cambiarse la etiqueta cuando vieron la cara que le habían dado con mucho amor su padres. Ahora el chico "Super chico guapo de Preparatoria". Muy original ¿no?

Esto no le iba ni venía a Sehun, simplemente ignoraba las constantes pláticas que forzaban sus compañeros con este. Según el, era solo por su belleza, estaba casi seguro que si no fuera por ello, prácticamente su existencia sería igual de ignorada que el chico que se encontraba sentado en la esquina alejada de ese salón. 

-Que bonito...- murmuró parandose derrepente en el pasillo para observar al joven de cabellos negros.

-¿Quien?- ciego.- Oh... si que es lindo.- Chanyeol sonrió y le dió un suave golpe a su mejor amigo agradeciendo por encontrar a su nueva presa.-¿Entramos?-

-Como quieras.- aunque el chico sea bonito, no podía hacer nada contra la cazería que se llevaría a acabo.

Ambos ingresaron al salón haciendo caso omiso al sonido de campana que anunciaba el inicio de clases. El más alto circulaba hasta el banco donde se encontraba el borrego leyendo con aires de grandeza, su compañero se limitaba a seguirlo con un ojo delante y el otro en su telefono jugando alguna porquería adictiva.

-Hola.- saludó el pelirrojo. Su voz gruesa hizo que Jungkook diera un respingo en su asiento.

-H-hola...- dijo el menor incomodo, seguramente le iban a preguntar sobre su capucha.

-¿Sabés...? Eres muy lindo.- Chanyeol apoyó sus codos sobre el banco y miró fijamente a Jungkook. Sehun rodó los ojos irritado por la actitud de su compañero, de alguna forma sentía que el chico estaba asustado, aún cuando se supone que este debería estar saltando de alegría o nervioso en ese sentido al menos.

-G-gracias...- dijo el azabache intentando encontrar una salidad.

-¿No quieres almorzar con nosotros, bonito?- en ese instante Jeon entendió la situación, alguien le estaba ligoteando y entró en panico. Vió al acompañante del chico detras de este, si que ambos eran guapos, pero le gusta más la soledad.

Jungkook envío una mirada nerviosa a este, el cual recibió el mensaje. Sehun mentiría si dijera que no le dió un pena increíble, solo por esta vez salvaría al pequeño de la garras de la bestia a la que llama mejor amigo.

-Chan, debemos volver...- insistió tocando su hombro, pero este seguía en la misma posición esperando una respuesta con una sonrisa seductora que mojaría a un desierto.

-¡Jovenes!- gritó la profesora delante del pizarrón. Los dos se girarón sorprendidos. No se habían percatado cuando se había llenado el salón y menos cuando comenzarón las lecciones.-¿Podrían retirarse a sus aulas?-

-Claro, profe.- el pelirrojo se retiró lanzandó un beso al joven y a la docente, quien bufó por lo bajo, era su primer día y como el sexto piroponopiropo que se come.

Luego se fué Sehun, no sin antes palmear el hombro de Jungkook en señal de lo que tendría que esperar y que lo apoyaba, desde lejos y sin palabras, pero lo apoyaba. Este se sonrojo por haber sido tocado y Sehun sintió mucha ternura y más pena.

"Pobre niño, Chan te comerá vivo."

Ya saben, voy a estar corrigiendo errores, así que perdónenme y gracias por esperar♥

Este fic está siendo muy... cliché ¿no? Sean sinceras. Luego digamos que era la idea para que no me sienta mal(?)