INCOMODIDAD
Cabeceo y me compongo rapidamente, nuevamente la falta de sueño casi hace que me quede dormido, miro por la ventana para confirmar que aún seguimos en ruta a la ciudad militar de Tanagra. Dicha ciudad es una de las establecidas en puntos claves en territorio de las Tierras del Vacío para centralización y distribución de tropas y recursos, es como una Phlius en miniatura.
Se me ha reportado que durante la última semana ha habido un incremento significativo de actividad de Esbirros y apariciones de fisuras, en realidad en todo el mundo en general desde la invasión fallida del Regente hace un año en Agius, pero en esta es mucho mayor. Siendo mi deber y responsabilidad velar por estos casos fuera de lo normal ahora me dirijo en un tren bala por levitación magnética, estos solo son empleados para el uso militar en Tierras del Vacío desde su implementación hace cuarenta años, apenas recientemente se comenzaron a implementar dentro de algunas naciones.
El viaje en si es rápido y placentero, siquiera se siente el andar, Wis se retiró al Limbo a trabajar en algún proyecto, sin embargo he notado que desde hace dos semanas está actuando algo extraño, las pocas veces que he intentado hablar el tema lo desvía. Cierta incomodidad se instala en mi pecho al intentar comprender que pasa por su mente, cuando Wis toma una actitud así de reservada suele ser porque necesita concentración en algún proyecto importante o sabe algo que puede tener consecuencias y no sabe cómo decirlo, espero sea lo primero.
- Bien, ya tengo el itinerario apenas lleguemos a Tanagra
La puerta del camarote se había deslizado dando lugar a esa voz que bien conozco, giré mi vista y vi como una clásica hiena con uniforme militar con bordes rojo se adentraba con un paso y cerraba la puerta. Sostenía una tabla con unas hojas sujetas a ellas, giro algunas agujas y ojeo rapidamente su contenido.
- Lasgar cambio nuestra estadía a último momento, al principio nos quedaríamos en el cuartel central de Tanagra pero parece que ahora nos quedaremos en la residencia personal de algún comandante -me miro un momento- me huele a favor político si me preguntas -volvió a mirar el papel- según Lasgar se enteraron de nuestra visita y no quieren que seamos tratados sin la distinción correspondiente
- Claro -suspiré- malditos políticos
Kaftar, es decir la hiena, se sentó en un mueble frente a mi cruzando sus piernas marcando su apretado ya de por si bulto, el muy estúpido sabia lo mucho que me gustaba. Lo mire con una sonrisa y ceja alzada, este me miro y me devolvió la sonrisa, por más provocaciones que nos causáramos durante el servicio teníamos bien claro nuestros roles, durante el trabajo no fraternizábamos mas allá de lo profesional hasta haber cumplido nuestros deberes diarios.
La primera vez que escuché su nombre, en especial su apellido, estuve a punto de convocar el Conclave y decirles el mal del que se iban a morir exceptuando a Gera, mi padre y Aetha que no estuvieron de acuerdo en lo absoluto. Fue hace ocho meses cuando se había convocado un Conclave de rutina, yo estaba en un sitio sin cobertura y no estuve presente, aun no se ponía en funcionamiento la red satelital Link para los dispositivos móviles.
La reunión establecido que un individuo de alta prioridad como yo no podía estar vagando por el mundo de sitio de riesgo a otro sin el cuidado adecuado, propusieron ponerme un guardaespaldas, es decir, un edecán personal. Se sometido a votación y la mayoría se impuso a favor, el asunto que quedaba era el quien sería el designado, mi padre propuso inmediatamente a Duma para evitarse el problema pero algunos se opusieron por conflictos de intereses, el edecán debía ser alguien ajeno a mi circulo interno.
En algún punto desde el Link de Desserent comenzó una disputa entre el monarca y otro más, incluso se ausento pero en el audio se podía escuchar la pelea de fondo, los miembros del Conclave estuvieron más interesados en escuchar que continuar la reunión. Minutos más tarde el monarca volvió con una propuesta que tomo a más de uno por sorpresa, propuso a su propio hijo como candidato de edecán, es decir al príncipe de su nación, a su único hijo y heredero, Yieltos Kaftar.
Este contaba con un rango militar equivalente al de capitán, rango más que suficiente para desempeñar el papel, cuando se le pregunto el por qué de su propuesta simplemente dijo que lo quería lo más lejos posible de su nación por el momento. Según información de Gera y mi padre que más tarde recopilamos no era secreto para nadie que hijo y padre eran como agua y aceite, mientras el padre era un monarca dictatorial el hijo tenía ideas muy contrarias como libertades y democracia, un cambio de gobierno que podría suponer el fin de su monarquía.
El Conclave no teniendo mejores propuestas voto y aprobó que el sería el nuevo edecán de Garoin, una semana más tarde cuando llegue a casa lo encontré en la sala de nuestra casa hablando con mi padre. Este con una cara de no poder creer aun que estuviera ocurriendo me lo introdujo explicándome lo acontecido en mi ausencia.
Tanto Wissen como yo estábamos muy molestos y lo sacamos de la casa, literalmente lo saqué por la puerta principal con mi Lux Domain muy civilizadamente y cerré la puerta. La idea de que primero me impusieran un edecán sin mi consentimiento no tenía cabida en mi mente, era como si me hubiesen asignado una niñera, guardia, vigilante, simplemente no podían, para rematar era hijo de ese tan despreciable ser.
Ese día literalmente me bloqueé con mi padre o cualquiera, estaba de tan mal humor que me fui a la habitación con Wissen y nos encerramos a trabajar en más proyectos pendientes, siquiera descansamos esa noche del coraje que teníamos. Dormimos toda la mañana siguiente y al bajar a la hora de almuerzo allí estaba otra vez, antes de que lo mandara a volar otra vez pero esta vez por la ventana fue mi madre quien me detuvo, me llevo junto a mi padre a su estudio donde me dio una explicación más detallada de lo sucedido y supe que si bien el no estuvo de acuerdo con la medida tampoco tuvo el poder para impedirla.
Un poco más calmado, tanto Wissen como yo, decidimos comenzar desde cero sin mandarlo a volar, se hicieron las respectivas presentaciones e inmediatamente comenzó a hacer sus funciones muy parecidas a las de Duma. Mi padre le asigno una habitación en la casa, que de antemano le advertí que casi no usaría pues desde hace meses que me la paso viajando fuera de Agius por asuntos variados.
Wis y yo estábamos muy exenticos con su presencia y no confiábamos para nada en él, por lo tanto el en secreto vigilaba sus signos biométricos en todo momentos buscando patrones de comportamientos extraños. Como sabía que iba a ser algo rápido decidí fingir hacer las paces con el colocando algunas condiciones a nuestra relación profesional.
Estas eran bastante simples, si yo debía trabajar en asuntos científicos o mágicos el debía estar en una habitación diferente a la que me encontraba, los secretos entre Wis y yo quedaban solo entre nosotros, cosa que hasta el día de hoy se mantiene. Otra era que en cualquier momento podía abandonarlo, ya fuese por un asunto personal o emergencia de cualquier naturaleza, él estaba amarrado a mí, sí, pero yo no a él, no debía entorpecer mis asuntos.
La hiena no tuvo ningún problema en acatar estas simples condiciones, habían otras pero no tan importantes, al poco tiempo estas comenzaron a ponerse en práctica cuando tuve que marchar a Borgen a realizar una inspección al Árbol sagrado de su capital. La primera semana después del funeral de Vicent viaje a cada Árbol principal de cada capital para plantar el sello de Refuerzo Gaztainondoera en estos reforzándolos, excepto en Auno por su hermetismo, a ellos les facilite el plano del sello y que ellos mismos se encargaran de ponerlo a funcionar.
Durante este tiempo la hiena respeto al pie de la letra cada condición y nuestro espacio vital, este parecía querer aprender todo de mí y hacerme sentir cómodo, cosa que solo elevaba mi sospechas de él. Hasta ese momento Wis aun no encontraba algo sospechoso de él, salvo su risa que parecía ir contra la naturaleza de la especie.
Usualmente las hienas tenían un risa muy característica, escandalosa, llamativa, era la firma de su especie, las pocas veces que Kaftar se había reído había quedado claro que su risa era muy diferente, si bien era característica y llamativa no era escandalosa o siniestra como suelen ser. En cambio era algo gruesa, muy masculina pero armoniosa, cuando estábamos rodeados de gente y el reía muchos se le quedaban mirando con curiosidad.
Intentamos investigar al respecto de por qué esa risa tan diferente, lo único que nos dijo es que simplemente era así de nacimiento, nada raro había ocurrido para que fuese así. Wissen constato que era verdad, incluso analizo sus cuerdas vocales con su consentimiento y confirmo que eran naturales pero con una pequeña diferencia en una formación que parecía producir ese notorio cambio.
Las semanas empezaron a pasar y nuestra convivencia se hizo un poco más llevadera con el tiempo, Wissen concluyo que no habían nada extraño que destacar y no parecía tener malas intenciones con nosotros, sin embargo dijo que estaría pendiente ante cualquier conducta sospechosa. A partir de ese punto nos volvimos un poco más coloquiales integrándolo más a nuestra dinámica, hablábamos sobre asuntos militares en su mayoría pero luego sobre cualquier tema que se nos ocurriese.
Antes de ese punto era muy raro escucharlo reír, luego de ese punto lo escuchaba reír todos los días con mucha frecuencia, su risa comenzó a volverse un sonido grato para mis orejas a decir verdad, empezar a disfrutar su presencia. tres meses se habían cumplido desde que inició su servicio, estábamos en Beza y mi ciclo de celo había empezado, Kaftar intento consignar un servicio profesional en la ciudad para mí pero me negué, el único que me gustaba era el de Athos pero estaba muy lejos.
Sin mucho remedio me tome uno de los supresores personalizados que mi madre me preparaba, si bien su efectividad física era casi del cien por ciento igual quedaban efectos secundarios, en especial los de temperamento. Mi humor el día en que se suponía el celo estaba en su apogeo era insoportable, hasta Wissen se fue corriendo con Aetha ese día dejándome solo en la habitación de hotel con mi mala leche como solían decirle a ese estado en esa nación.
Me dispuse a fumar de mi pipa en el balcón esa noche, solo vestía ropa interior negra, quería que el frio de la noche combinada con la brisa marina del mar me bajaran el horrible calor que corría por mi cuerpo pero sin mucho éxito. Kaftar toco la puerta anunciándose, traía consigo comida y uno que otro remedio casero para intentar bajar las síntomas, sabiendo que nada de eso funcionaria de antemano comí de mala gana con los te de hierbas y los dulces, esto último pareció aliviar mi humor.
Kaftar ceno conmigo esa noche pero lo noté un poco cohibido, incomodo, primera vez desde que lo conocía que tenía ese tipo de expresiones, fue cuando me di cuenta que estaba prácticamente desnudo ante él. Me pareció un poco extraño ya que la cultura de Desserent era de llevar muy poca ropa por el calor de la región, uno pensaría estaría acostumbrado a la desnudes, al menos entre personas del mismo género.
Unos comentarios de Wissen llegaron a mi mente en ese momento, mientras realizaba la vigilancia de Kaftar los primeros dos meses reviso la información recopilada por Gera sobre la hiena. Descubrió que uno de los principales conflictos que tenía con su padre era por el de aun no haber concebido un heredero, es decir darle un nieto.
En su expediente no hablaba casi de su sexualidad dado que era un país muy restringido en este aspecto, muy arcaico, ser homosexual está muy mal visto, de hecho cualquier sexualidad diferente a la heterosexual lo era. ¿Como seria para un príncipe de este país serlo?, eso sumado a sus ideas discrepantes con su padre puede que fuesen el combustible de sus conflictos.
Mi mal humor se redujo considerablemente en ese instante y una sonrisa amplia apareció en mi rostro, no me imagino de qué forma abre sonreído para hacer a Kaftar tragar en seco y guardara silencio respecto a cualquier cosa que hablaba y yo no prestaba atención. Me levante de mi silla aun con pipa en mano y rodee la mesa quedando cerca de su sillón, me senté en el posa mano y acerque mi rostro a él, aspire la pipa y echa en cara el humo de hierbas, este siquiera parpadeo, solo me miraba paralizado.
Mi cola se movió por debajo del sillón y acaricio la suya suavemente, esta se tensó pero no se apartó en ningún momento, poco a poco la enrosque en la suya maximizando el rose sin darle escape. Este parecía querer decir algo pero solo tartamudeaba incoherencias, en ese instante me pareció bastante lindo.
Me preguntaba realmente si era virgen, sería extraño, era unos tres años mayor que yo, quizás no tenía mucha experiencia, o quizás simplemente yo lo ponía nervioso. Esto último no me sorprendería, después de lo de Nashor desarrolle una lado bastante intuitivo para hacer que otros se dejasen dominar por mi fácilmente, se me daba natural.
Hice flotar mi pipa hasta la mesa y llevé una de mis garras de mi mano al cuello de su camisa atrayéndolo nuevamente hasta mi rostro, sus pupilas estaban muy dilatadas y su respiración se había entrecortado, reconocía una persona que quería ceder su voluntad cuando la veía. Acerque mis labios entreabiertos a su hocico y exhale un poco de aire caliente en ellos, estos se abrieron en respuestas terminando de cederme lo poco que le quedaba de voluntad, termine de jalar un poco su cuello por la camisa e inicie un suave y tímido beso con él.
Esa noche use por primera vez mi Lux Domain en el de otra forma que no fuera hacerlo volar fuera de una casa, lo use para rasgar y cortar su uniforme dejándolo completamente desnudo como yo. Nos hice flotar hasta la cama sin prisa mientras le daba la invitación para que tomara confianza en mi cuerpo, esa noche marco un antes y un después en nuestra relación profesional, el inicio de otra más emocional.
Al día siguiente el pobre despertó saltando de la cama cubriéndose con las sabanas arrepintiéndose de según el, abusar de la confianza que había depositado en él, además asevero que renunciaría a su cargo inmediatamente. Después de tener que callarlo con un beso que lo desconecto lo calme vendiéndole la mentira que solo cumplía su deber de ayudarme a pasar el celo, recordándole que un edecán estaba a total disposición de su protegido, en cualquier ámbito.
Cuando Wissen llego de improvisto a la habitación y nos observó con una ceja alzada, literalmente se las dibujo en la portada, le dije la verdad solo causándole más vergüenza a la hiena dándome más risa. Los días comenzaron a pasar, si bien no era distante conmigo si estaba nervioso más de lo normal, lo intente hacer sentir cómodo, curioso que los roles ahora se habían invertido.
Efectivamente el príncipe si era homosexual, uno de los principales problemas con su padre, si bien era experimentado hacerlo con su protegido era algo que iba contra de las normas de su cargo. Sin embargo como le resalte tenían ese pequeño vacío legal que explotamos esa noche.
Además de ese conflicto estaba el hecho de que desde el momento que me conoció le parecía atractivo, pero que con mucho esfuerzo y pensamientos fríos pudo sepultar muy bien. Muy bien hasta esa noche que me vio con mi pipa en ropa interior en el balcón donde según él todo se fue a la mierda.
Poco a poco nuestra relación profesional no tardo en volver a lo que era, Wissen aún estaba dudoso de que fuese lo mejor, le dije que no volvería a repetirse pero me equivoque, no fue una mentira pues de verdad pensaba que sería una única vez. Hubo otra, otra, y otra, curiosamente era yo cuando detectaba su sumisión el que lo iniciaba desatando una velada bastante apasionada, mi humor mejoro considerablemente, nuestra relación que inicio como de odio y desconfianza dio lugar a una de amistad y cariño.
El tiempo empezó a pasar, me di cuenta que lo que estaba teniendo con él era muy diferente a lo que tuve con mis dos primeras relaciones, como el conocía quien era realmente no debía tener secretos, o al menos casi ninguno. Esto ofrecía ya de por si una base completamente diferente a las anteriores, no había mentiras de por medio y hacia más natural nuestra convivencia fuera de horas de servicio, en un momento pasamos de dormir separados a dormir en la misma cama, habíamos iniciado una relación contra todo pronóstico al cuarto mes.
Mi familia no estaba muy de acuerdo pero lo acepto, su padre se volvió loco y exigió el cese del servicio y regreso a Desserent, sin embargo la votación en el Conclave salió a nuestro favor y segura siendo mi edecán aun si eso iba contra el reglamento. Tenía cierto favoritismo, además, me lo habían impuesto contra mi voluntad, algún beneficio tenía que darme ahora que me había gustado.
- Nos quedaremos en la residencia---
- Me interesa más saber el reporte de los incidentes que mencionaron -lo interrumpí- ¿Algo que destacar?
Kaftar volvió a revisar las hojas y al cabo de unos segundos señalo una sección que llamo su atención.
- Además del incremento significativo de las apariciones de las fisuras del Vacío, lo que más les inquieta es la cercanía, normalmente suelen aparecer a partir de los diez kilómetros de Tanagra, pero hay informes de algunos a solo cinco kilómetros, como si se estuvieran abriendo cada vez más cerca
En ese momento el Limbo fue abierto por Wissen, este emergió seguro por lo interesante del reporte, no era muy usual que estuviera pendiente de percibir información de este plano estando en el Limbo pero lo hacía de vez en cuando.
- «Eso no es para nada normal, Tanagra cuenta con un árbol Gaztainondoera central bastante grande, no como el de Agius pero si considerable, debería ser una área muy estable como para que se abran fisuras tan cerca y en esa cantidad» -se acercó a la tabla pasando las páginas con su luz- «Si algo así está pasando deberíamos revisar primero el árbol sagrado»
- Concuerdo contigo Wis -atraje la tabla con mi luz revisando el informe- pudiera ser algún nuevo intento de entrar en nuestro mundo por parte del Regente -alce la mirada preocupado- apenas lleguemos que alguien más se encargue de llevar las maletas a la residencia, debemos ir a revisar el árbol tal como dicen Wissen y ganar tiempo
Sin más de importancia que discutir nos dispusimos a pasar lo poco que quedaba de viaje discutiendo asuntos triviales, Wissen y yo teorizábamos que pudiera perturbar la estabilidad de la zona además de la interferencia de la magia de gravedad pero sin nada claro. Una hora más tarde pudimos divisar una ciudad en el horizonte rodeada por altas murallas negras, estábamos llegando a la ciudad militar de Tanagra.
En si a ciudad militar de Tanagra, como todas las demás que bordeaban las Tierras del Vacío estaban inspiradas en la mismísima Phlius, esta según las evidencias e historias fue la última ciudad habitada por los dragones antes de desaparecer de nuestro mundo. Phlius es una especie de ciudad fortaleza gigante, en medio del desierto con el árbol sagrado más grande del mundo, convirtiéndolo en un símbolo de resistencia contra el Vacío.
Cuando las naciones se establecieron en sus inicios a pesar de sus diferencias coincidieron en que esta ciudad debía permanecer por el bien de todos, así que entre todos acordaron su protección y resguardo hace unos cuatrocientos, al final de los cien años obscuros. Esta fue la primera ciudad militar en Tierras del Vacío, la que inspiro luego la creación de otras a lo largo y ancho del territorio para salvaguardar las fronteras de cada nación, acertaron, pues por esa fecha volvieron a reaparecer los Esbirros en nuestro mundo después de cien años de ausencia.
Si bien cada ciudad era abastecida y apoyada por todas las naciones estas eran autónomas políticamente hablando, cuando un soldado era asignado a esta su único objetivo era defender el territorio circundante para que nunca llegasen al territorio de las naciones. Claro que a veces habían casos aislados que escapaban de su control y se adentraban en territorio adentro, como en Dunak hace muchos años, o ahora cuando una fisura se podía abrir por el apoyo de una interferencia.
El tren descendió su velocidad a medida que nos acercábamos, las murallas tenían alrededor de trescientos metros de alto, eran de concreto armado por fuera y estructura de acero por el interior. En la parte más alta tenían artillería ligera y pesada de corto y largo alcance, adicional tenía puntos estratégicos donde podían colocarse usuarios elementales y artilleros, en especial magos expertos en técnicas de destrucción a distancia para que pudiera lanzar sus ataques con ventaja sobre los enemigos.
Pasamos por un corto túnel hasta que la luz volvió a iluminar la cabina, la ciudad tenía mucha de la arquitectura Eriana y Anciana antigua, perfectamente distribuida para el personal militar, si bien la ciudad estaba militarizada igual residían civiles que ofrecían servicios básicos a estos. En el centro de la ciudad se alzaba el árbol de forma magistral como siempre, sin embargo con solo verlo supe que algo no estaba bien.
El tren se detuvo y salí rapidamente con Wissen oculto y Kaftar atrás de mí, afuera ya me esperaba un automóvil militar seguro para escoltarnos a la residencia, me monte de copiloto seguido por la hiena y le indique que nos llevara hasta el árbol sin objeción. Este sabiendo que no podía contradecirme me llevo lo más rápido que pudo y unos cinco minutos más tarde en los que nos comimos muchas señales de tránsito ya estábamos a los pies del árbol.
Baje del auto y camine rapidamente hacia este, un grupo de guardias que custodiaba el árbol quiso cortarme el paso, seguro seguían el protocolo, solo basto detenerme para abrir mi gabardina y sacar la placa especial para mostrarla. Estos verificaron su autenticidad y con un asentimiento me dieron paso, me acerque rapidamente poniendo mis manos en el árbol.
- No está bien, no está bien -murmuré-
- «No detecto ninguna interferencia gravitacional...»
Nuevamente abrí mi gabardina y saque unos lentes de visión ajustados para ver el espíritu del árbol, al hacerlo me preocupe al verlo ligeramente apagado y carente de vitalidad. Extendí mi mano y abrí un Limbo, las ramas espirituales tardaron en reaccionar e ir hacia el para cerrarlo con dificultad confirmando así que este árbol no estaba bien.
- Es como si estuviera enfermo Wissen -lo miré preocupado- nunca había visto o leído algo como esto
- «Yo tampoco, y eso que he leído mucho sobre él, necesito verlo completamente a ver si detecto algo extraño»
Sabiendo a que se refería nos envolví en un velo insonoro y abrí el Limbo, apunte mi mano hacia él y el Clavis descendió como suele hacerlo, sus anillos giraron y se pusieron en reposo mientras lo tomaba y decía nuestra consigna a la vez que me sincronizaba con Wissen.
- «Dame un momento, ver la frecuencia del espíritu del árbol es algo que aún se me dificulta»
- Tomate tu tiempo, te enviare magia por si acaso
Apunté mi mano al frente y manifesté el sello grado uno haciendo girar el primer anillo del báculo, cuando Wis estuvo listo me pidió tocar el árbol y hacer fluir mi magia en él. Los siguientes treinta minutos estuve enviando magia de forma continua al árbol, canalizando y explorando, no sentía esa conexión que podía sentir con cualquier árbol de cualquier otro sitio, se sentía mal e incorrecto.
- «Termine de mapear las raíces y ramas espirituales» -se desacoplo del báculo- «Es bastante grande, me llevara un buen rato estudiarlo»
- Kaftar -me gire a verlo- envía un mensaje al General encargado de Tanagra de mi parte, dile que comenzamos a estudiar lo reportado lo más rápido posible pero que no nos gusta el panorama, que refuerce la vigilancia en el árbol y alrededores
- Entendido
La hiena se retiró mientras sacaba su Link de su gabardina, abrí una nueva ventana al Limbo con preocupante facilidad y deposité el báculo en su interior.
- Esto no me gusta nada -murmuré- me pregunto si de esto trata esa incomodidad que llevo días sintiendo
- «¿Incomodidad?» -Wis se acercó a mi- «No me habías dicho nada ¿Te sientes mal?»
- No, no es ese tipo de incomodidad, no es malestar -intente explicarle- es como un sentimiento de que algo no está bien y me hace sentir incomodo -lo miré algo molesto- bueno, tampoco es que te deba una explicación, tu llevas raro como dos semanas y ni me dices porque
Wis pareció flotar meditando su respuesta, quizás ahora se iba a sincerar conmigo.
- «Necesito que me des tiempo...» -escribió por fin- «Aun estoy comprobando algunos datos y reuniendo información como para que sea un hecho irreversible, no me gusta exponer las cosas a media y lo sabes»
Ante mí se manifestó su forma presencial de luz con un rostro bastante apagado, este extendió sus manos hacia mí.
- ¿Confías en mí? -me preguntó-
Su pregunta me tomo algo desprevenido, por supuesto que confiaba en él, si bien era algo travieso y juguetón a su manera nunca haría algo que me hiciera daño, algo importante debe estar haciendo como para hacerme esa pregunta.
- Sabes que lo hago con mi vida -le sonreí mientras lo tomaba y cargaba como un cachorro- siento si fue algo duro lo que dije, solo que entre esa incomodidad y tu actitud algo apartada estos días me tiene algo nervioso
- Disculpa por eso, prometo compensártelo en su momento -igual me dio una sonrisa-
Lo lance fuertemente hacia arriba mientras reía y se descomponía en luz dando lugar a mi Grimorio, este floto a mi alrededor y se ocultó en el velo a la vez que yo bajaba el mío, en este momento Kaftar volvió.
- Listo, ya pasé el mensaje y tomaran medidas -señalo el auto donde llegamos y ahora se alejaba- lo mande a por nuestro equipaje, le dije que pasara en una hora por acá, así nos da tiempo de buscar algo que comer y nos vamos a la residencia del Comandante
Sin nada que agregar me dispuse a seguir con el plan de mi pareja, o edecán según la hora del día, este pidió indicaciones a los mismos soldados que custodiaban el árbol de donde podíamos almorzar y nos dieron algunas recomendaciones. Caminamos unas dos calles hasta llegar a un agradable restaurante donde nos atiborramos de comida, no habíamos probado bocado desde la mañana que habíamos abordado el tren.
Exactamente una hora después el mismo auto y chofer nos recogió en la plaza del árbol sagrado para llevarnos a otro extremo de la ciudad apartado de los centros de actividad militar. Doy un vistazo al descender a la residencia, demasiado grande y ostentosa para mi gusto, incluso parecía más grande que la residencia Reinhart en Agius, suspire pesadamente y prometí vengarme luego de Lasgar.
El auto se fue y nosotros avanzamos con nuestras maletas en mano hasta la puerta doble que estaba decorada con un tallado bastante bonito de unas espadas cruzando un escudo, había algo que se me hacía familiar en él.
- «Oh oh...» -escribió Wissen en la puerta- «Reconozco este escudo de armas, Argo te recomiendo que salgamos de aquí ¡Pero ya!»
Estaba a punto de preguntar la razón cuando la puerta se abrió apresuradamente revelando una figura que nunca se me olvidaría a pesar del poco contacto que tuve con ella.
- Lo estaba esperando desde hace rato, me tenía preocupado el retraso, estaba a punto de salir a buscarlos -dijo el individuo ante nosotros- bienvenidos sean a la residencia Deldran -hizo una reverencia- mi nombre es Dasam, seré su anfitrión mientras mi hijo llega en una hora más, por favor pasen
El rinoceronte de mayor edad se apartó invitándonos a pasar, por un momento me resistí a dar un paso dentro de ese lugar pero Kaftar se me adelanto antes de que pudiera detenerlo, esto estaba muy mal, la residencia era de la familia Deldran, la familia de mi expareja. Maldiciendo mentalmente mi incompetencia me adentré a una sala de estar muy elegante, Kaftar había depositado su maleta en un sitio donde no estorbara y yo puse la mía junto a él.
- «¿Quieres que inicie un incentivo en la cocina como distracción para poder escapar?» -Wissen-
- Me siento muy tentado a aceptar tu ofrecimiento pero no sería correcto -dije sin voz-
- «Correcto mi trasero que creo que se sitúa por la parte baja de mi contraportada» -señaló con una flecha sobre la cabeza al rinoceronte- «Este imbécil siquiera recuerda lo que te hizo aquel día que fuiste a buscarlo a su casa»
Kaftar al estar hablando con Dasam no ha notado nuestra conversación, de hecho la hiena no tiene idea de que su hijo es mi ex, relación que termino en muy malos términos. Quizás deba contarle a la brevedad posible lo que está sucediendo.
- Es un placer tenerlo aquí joven Reinhart -se acercó a mi- cuando el Alto Maestro Lasgar le pidió el favor a mi hijo no pude negarme
Por el creador, había tantas mentiras en esa frase que no necesitaba que Wissen me las señalara.
- El placer es mío -lo pensé un poco- creo que mi edecán y yo nos retiraremos de momento a nuestra habitación, debemos tratar unos asuntos personales concernientes al asunto que nos trajo en primer lugar ¿Nos podría indicar el camino?
El paquidermo estuvo a punto de responder cuando la puerta principal fue abierta nuevamente de forma violenta llamando nuestra atención. Por esta una diminuta figura corría en dirección a Dasam soltando risas, este se aferró a la pierna del mayor y este se agacho para recogerlo y sentarlo en sus brazos exhibiéndonoslo.
- Esta pequeña tormenta de energía es mi primer y por los momentos único nieto -lo señalo- les presento a Kevlin Deldran
Esto tenía que ser una broma de muy mal gusto, esa cría debía tener unos cuatro años al menos, mis ojos examinaron sus rasgos faciales, el color de su piel, su escaso vello, su cuerno diminuto, todo, era una copia suya en miniatura.
- «Argo... esa cría...» -escribió débilmente frente a mi»
- Losé -dije sin voz-
- ¡Un placer, mi nombres es Kaftar! -saludo alegre la hiena- ¡Y esta pantera de acá es Argoitz!
- ¡Hola! -sonrió con algunos dientes faltantes- ¡Soy Kevlin!
Intenté sonreír lo mejor que pude, esa criatura no tenía ni idea de lo que estaba a punto de ocurrir en esa casa.
- ¿¡Kevlin!? -escuché su voz- ¡Te dije que no corrieras en la casa, este piso es absurdamente liso y te puedes resbalar otra vez!
- Oh, a buena hora, llego mi hijo temprano, así lo pueden conocer de una vez
- ¿Todavía puedes incendiar la cocina? -murmuré-
- «Tu solo dame la señal...»
Durante años evitamos entrar en su casa durante nuestra relación, durante tres días intente entrar en su casa para pedir una explicación, y ahora años más tarde entre en su hogar sin saberlo y me lo consigo de frente.
- Hijo llegaron los invitados que te mencione -su padre se apartado dejándonos en su visión- el Capitán y príncipe Desseriano Yieltos Kaftar y su protegido el Alto Asesor del Conclave en temas del Vacío Reinhart Argoitz, estimados, él es mi hijo el Comandante Deldran Nashor
- Un placer conocerlo -Kaftar hizo una pequeña reverencia- gracias por recibirnos en su hogar
En ese momento ambos quedamos frente a frente, tenía años sin verlos pero seguía casi igual a la última vez que lo vi, un rinoceronte blanco realmente grande y corpulento, vestía el uniforme militar con bordeado verde, sinceramente le quedaba igual de ajustado y bien que lo que mi mente recuerda. Este al verme se quedó paralizado como intentando contener el aire que escapaba de sus pulmones, casi como si hubiese visto un fantasma, y parece que era eso, tantos años evitándome y ahora entendia un poco la razón.
Mire a su hijo nuevamente, las cuentas decían la verdad, Kevlin ya debía haber nacido para cuando nos habíamos vuelto pareja, nunca menciono nada al respecto, nunca llego a involucrarme con su familia, nunca me dio explicaciones sobre su partida, ahora todo tenía más sentido. Saque mi mejor actitud hipócrita de mi arsenal y embocé una sonrisa sincera al paquidermo, hice una pequeña reverencia hacia él y luego me compuse.
- Un placer volver a verlo Comandante -dije- gracias por su hospitalidad y permitirnos quedarnos en su hogar cerca de su familia
- ¿Se conocen? -el viejo rinoceronte sonrió con sorpresa-
- Hace algunos años coincidimos varias veces en reuniones de beneficencia entre nuestras familias, no creo que se acuerde, suelen ser algo aburridas, pero yo suelo tener buena memoria para recordar nombres y rostros
- Ya veo -asintió Dasam- me avergüenza decir que nunca lo vi en estas reuniones, quizás ya me estoy poniendo viejo y la vista y la memoria me empiezan a fallar -se rió-
- No se avergüence -le palmee el hombro- todos llegaremos a esa edad algún día, debemos ser comprensivos con los mayores, además ¿Por qué crees que se desarrolló el hechizo de Vigoramiento Masculino? -sonreí-
- ¡Oh! -se rio fuertemente- No puedo decir que estoy tan viejo para necesitarlo pero es un alivio que existe algo así si llegase el momento
Nashor se acercó con cautela e hizo igualmente una reverencia a manera de saludo, tomo a su hijo en brazos antes de hablar.
- Me entere de las recomendaciones de refuerzo preventivo a la ciudad -Nashor- nos informaron que venían del Alto Asesor en temas del Vacío del Conclave, nunca hubiese pensado que eras tu Argoitz -intento sonreír- fue una sorpresa inesperada
- ¿Exactamente que fue una sorpresa? -cuestione manteniendo mi sonrisa- ¿Las recomendaciones o el cargo que desempeño?
- No las recomendaciones, la verdad me parecen bastante sensatas -intervino su padre- hemos estado algo nerviosos por el incremento de actividad de los Esbirros y fisuras, pero no deja de sorprenderme que un Reinhart, en especial uno tan joven ostente tan privilegiado cargo, se podría decir que el Conclave te tiene en alta estima, quizás tanto como Garoin
Los ojos del viejo brillaban, pero no de buena forma, era codicia pura, solo me veía como un escalón más en su meta de ganar más influencia para su familia, con los años solo había empeorado.
- Desde joven me dedique al estudio de fenómenos del Vacío poco estudiados, no es secreto que mi familia tiene ciertos vínculos con Garoin ¿Para qué negarlos a estas alturas? -me reí de mí mismo- este se interesó en mi campo de estudio y empezamos una cooperación de mutuo beneficio, el me daba apoyo y yo a él resultados, de hecho les diré un secreto -sonreí con malicia- si llegaran a revisar el plano original de desarrollo de los detectores de Esbirros descubrirán mi nombre junto al suyo como cocreador
El escándalo que hizo Dasam por semejante información fue como para grabarla y luego burlarnos, obviamente lo que le dije fue una mentira, en la patente solo figura el nombre de Garoin, algo que nunca confirmaría ya que estas estaban bajo llave y solo se podían mostrar con consentimiento del dueño y el Alto Consejo. El motivo del porque es simple, quería alimentar su codicia, elevarla lo más que pudiera para luego cuando se diera cuenta de quien fui yo para su hijo en realidad se estrellara contra el suelo y no se pudiera levantar.
- Luego si quiere le cuento más anécdotas pero por ahora quiero descansar -dijé- ¿Podría indicarnos nuestra habitación?
- ¡Claro! -apunto a las escaleras- en el segundo piso preparamos dos habitaciones contiguas para ustedes, espero sean de su agrado ¿Los ayudo con el equipaje?
- No -negué- nosotros las llevamos, y solo ocuparemos una sola habitación, la otra no la tocaremos
- Oh -nos miró intrigado- ¿Es por la obligación del edecán de estar siempre a su lado?
En ese momento no pude evitar reír sinceramente un poco intrigando aún más a los rinocerontes, incluso intrigue a Kaftar a mi lado.
- No, de hecho es muy normal que el edecán duerma en una habitación contigua, sin embargo Kaftar además de ser mi edecán es mi pareja -sonreí ampliamente- durante el día, mientras trabajamos es mi edecán, en las noches, o cuando ya no tenemos trabajo es mi pareja, y bueno, ya que terminamos nuestros pendientes y estamos cansados queremos descansar juntos
El mayor asintió no muy convencido de lo que acaba de decir pero no puso excusas, así que decidí agregar algo más.
- No es usual que un edecán y protegido sean pareja, va contra el reglamento de estos -abrace por la cintura a Kaftar pegándolo a mi- como ya deberá saber tengo cierta influencia sobre el Conclave que me da ciertas libertades que otros no pueden tener -le guiñe el ojo al Dasam-
Este pareció entender el mensaje perfectamente, el cual era que soy alguien con mucha influencia y podía hacer lo que me diera la gana, incluso en el Conclave, cosa que quizás era un poquito cierto pero nunca haría al no considerarlo correcto. Ante sus ojos yo era como una puerta hacia un mundo superior del estatus político, social y militar, la amistad perfecta que iba derribar todos sus obstáculos y engrandecer su apellido.
Con esto último dicho me había asegurado en el bolsillo sin muchos problemas al paquidermo anciano, estaría a mi servicio por mera codicia y necesidad hasta que me fuera, para personas de su tipo no tendré ningún tipo de consideración sinceramente.
- No les quitare más tiempo entonces -señalo un pasillo- por allí esta el comedor, en unas horas los llamaremos para la cena, hasta entonces están en su casa y relájense -me guiño el ojo de vuelta-
No pude evitar mirar a Nashor que parecía tener un tic nervioso en el ojo, tuve que contener la risa mientras me retiraba con Kaftar a nuestra habitación con equipaje en mano, no iba a dejar que nuestra historia pasada me ensombreciera mi estancia.
- «Tomare nota para el libro que estoy escribiendo, eso fue... malvado pero espectacular, eres mi ídolo y soy tu fan»
Llegamos a nuestra habitación designada y cerramos la puerta con seguro, era casi como una habitación de lujo, no me extrañaría que fuese la principal de la casa y en vez de usarla solo fuera para invitados de alto cargo.
- Bien -Kaftar- ¿Hay algo que deba saber? -me miro confundido- eso de allá abajo no fue normal, digo, tu nunca alardeas tu posición o influencias, y me usaste como comodín aunque no entiendo por y para que
Con un suspiro e invitándolo a tomar asiento en la cama comencé a relatar de forma resumida mi historia con Nashor y el porqué de mi extraña conducta momentos antes. La hiena literalmente se golpeó la frente al darse cuenta del error que cometió al nunca mencionar el apellido de con quién nos quedaríamos cuando estábamos en el tren.
- No fue tu culpa, tú lo ibas a decir pero yo te interrumpo -suspire- es casi karmatica esta situación
Me saque mi gabardina y la colgué en un perchero, Kaftar se me acerco y me ayudo a desvestirme, no es que la necesitara, pero sabía que me gustaba esa atención de su parte. Wissen saco del equipaje una ropa más informal, como las que uso en casa y me las ofreció, una vez ya cómodo ayude a mi pareja a cambiarse.
Wissen aprovecho de sacar un pequeño pedestal de sobremesa que le regalo nuestra abuela Zuzen, pues si, Wissen la reconocía como su abuela y ella como otro nieto más. Lo desplego en una mesa cerca de una ventanal y se acomodó allí avisando que procesaría la información recopilada del árbol,
- «Hay una cría inocente presente, es decir yo, no hagan cochinadas en mi presencia» -avisó-
- ¿Como puedes decir que eres inocente? -Kaftar- quedé ligeramente traumado después de leer tu ultima publicación -noté como un escalofrió recorrido su cuerpo-
- «No entiendo cómo, tú y Argo hacen cosas peores de vez en cuando, ni te molestes en contradecirlo, los he visto, no intencional, por accidente al salir del Limbo»
Aparentemente todos teníamos algo de culpa en el asunto, sin ánimo de discutir quien tenía razón Wissen se fue a su rincón a trabajar mientras yo y Kaftar nos recostamos en la cama a descansar. La hiena saco un pequeño cuaderno donde hacia dibujos, usualmente cada vez que llegábamos a una ciudad comenzaba alguno nuevo, era su pasatiempo y era bastante bueno en ello.
Yo por mi parte saque mi Link y desplegué una pequeña pantalla donde revise algunos mensajes que me habían llegado durante el día y no había revisado, leí cada uno encontrándome con cosas bastante habituales. Una actualización de avance de proyectos de Boga, recordatorios de mis padres, bendiciones de buen día de Gera, videos de combates de Duma y videos de técnicas de tortura casera de Kaira que me estremecían, mejor borrar este último antes que Wissen los viera, había desarrollado proximidad a estas prácticas, según el podrían sernos útiles en algún momento.
Al no haber más que revisar simplemente puse el Link a un lado y me puse cómodo junto a Kaftar, este me abrazo como pudo sin dejar de dibujar mientras yo poco a poco me quedaba dormido. Unos golpes a la puerta me despertaron, me estiré sin sentir a Kaftar a mi lado, al abrir los ojos y enfocar mi visión lo pude ver abriendo la puerta de la habitación, en esta se apreciaba Nashor hablando con Kaftar, este último fingía muy bien que aún no sabía de nuestro pasado.
Cuando este cerraba la puerta pude mirar la pesada mirada de Naso sobre mí, lejos de reaccionar simplemente bostecé, mi cerebro no podía dar para más cuando apenas recién despertaba de una siesta hasta unos minutos después.
- Oh despertaste -se sentó en la cama mientras acariciaba mi mejilla- Nashor vino a avisarnos que la cena ya será servida, aunque pude notar que su vista solo te estaba buscando a ti -frunció el ceño como molestia- no me gusta cómo te mira
- ¿Son celos los que huelo en ti? -sonreí- tranquilo, sabes que no tengo ojos para nadie más que para ti
Acerco su rostro al mío dándome un profundo y suave beso de esos que me gustan, al cabo de unos segundos se separó dejándome con una terrible erección.
- «¡Vamos!» -Wissen se interpuso entre los dos- «Dejen sus homosexualidades para más tarde, ahora quiero seguir viendo el tic nervioso de Nashor durante la cena»
Siguiendo el consejo de Wissen salimos de la cama y nos dispusimos a bajar al salón donde cenaríamos, al entrar todo estaba extremadamente elegante, los platos estaban servidos pero tapados esperando nuestra llegada. En el comedor ya estaban Nashor, su hijo y Dasam en uno de los extremos de la mesa, apenas Kaftar y yo tomamos asiendo uno al lado del otro frente a Naso y su hijo el personal de servicio se acercó retirando la cubierta de los platos revelando la comida.
- Pedí que cocinaran algo de ave asada en jugo cítrico, con algo de puré y ensalada de la región capital -Nashor me sonrió- si no mal recuerdo era tu plato favorito
- Uno de mis tantos favoritos, pero no el único -tome un primer bocado- bastante bueno -mire a Kaftar- ¿Qué opinas amor?
- Exquisito -asintió sonriéndome- me recuerda a ese que comimos en tu casa hace un mes que tu madre me invito -siguió el juego- fue muy considerado en preparar este menú de carnívoro para nosotros Comandante -miro a Nashor- entiendo que puede causarle problemas a la cocina tener que servir dos menú diferentes
- En absoluto -intervino Dasam- siempre estamos preparados para recibir invitados de distintas especies y gustos -señalo una botella en el centro- ¿Gustan vino?, es de los videos de Vandalas, el mejor de su tipo
- Debo decir que tiene buen gusto -tome la botella para observarla- la Madre Gera siempre me trae uno de estos cada vez que me visita en Agius, o cuando coincido con ella en su Bastión en Vandalas, ella es la culpable de desarrollar mi gusto por el vino fino, antes ni me gustaba
Destape el vino a lo que Kaftar inmediatamente tomo una copa vacía y me la ofreció, automáticamente comencé a llenar su copa muy lentamente, mientras hacía esto miré por el rabillo del ojo a Nashor quien otra vez miraba todo con un tic en el ojo de la molestia. No era para menos, usualmente si el vino se servía sin compromiso lo hacía algún personal a cada individuo, pero si un invitado tomaba la botella y se la servía a otro con sus propias manos indicaba un gesto de mutua confianza, en muchos casos sin interpretaba como una seña de amor.
- Pese que solo conocerías a la Madre Gera por tu relación con el Conclave, pero hablas de ellas como si fuesen conocidos de toda la vida -nuevamente me miro con esa sonrisa codiciosa-
- La conozco desde que tengo unos doce años, bueno ella me conoce a mi desde antes solo que nunca lo supe -Kaftar tomo la botella y me sirvió a mí de igual forma- soy algo así como un hijo adoptivo para ella, me tomo cariño desde temprana edad, le gusta consentirme mucho
La conversación continuo, seguí endulzándole las orejas al rinoceronte mayor, con algunas vagas verdades y algunas mentiras que nunca sabría que lo son realmente. Kaftar se acoplo muy bien a nuestra conversación resaltando de vez en cuando algunos hechos exclusivos que involucraban a la realeza Desseriana o a Garoin, Nashor opto por un perfil más limitado mientras se aseguraba que Kevlin comiera todo su plato, a decir verdad esa cría era adorable, espero no sea como su abuelo o padre.
- ¿Cuánto tiempo piensan quedarse en Tanagra? -Pregunto Nashor viéndome-
Nashor había vuelto a hablar después de un buen rato en silencio, habíamos ya terminado de cenar y la botella de vino se había vaciado hace rato, incluso Kevlin fue escoltado por uno de los de servicio a su habitación.
- Eso depende de lo que encontremos -respondió Kaftar por mi- me gustaría decir que poco, eso significaría que el problema en Tanagra es simple y de solución rápida, pero aún no estamos seguros de ello, quizás mañana tengamos un mejor panorama, se lo haremos saber de inmediato
- Con el debido respeto le preguntaba a Argo, no a ti -Nashor me volvió a mirar con una sonrisa- después de todo él es el especialista en temas del Vacío
- Kaftar respondió perfectamente su pregunta, el maneja toda la información referente a mi trabajo, es mi edecán después de todo, debe saberlo todo de mi -lo mire seriamente- esperamos no encontrar algo que requiera una intervención mayor, es todo lo que puedo decir, y otra cosa Comandante Deldran, mi nombre es Argoitz, no Argo, no le he dado la confianza para llamarme por mi diminutivo, solo personas muy cercanas a mi puede hacerlo -mire a Kaftar con una sonrisa- ¿Nos retiramos?, debemos madrugar después de todo
Antes que alguno de los dos rinocerontes pudiera agregar algo nos levantamos de la mesa con una reverencia y nos retiramos. al poco llegamos a nuestra habitación y cerramos la puerta con seguro, apenas hicimos esto Wissen salió de su velo.
- «Eso último que le dijiste debido dolerle hasta en la próstata a Nashor» -se recostó en su base acolchada- «Cuando nos íbamos pude ver una mirada muy molesta de su papa hacia él, estoy seguro que lo va a reprender»
- Como diría Vizka -reí- tan grande y con pelo en las bolas pero hay que tratarlo como cachorro pequeño
- ¿Qué edad tiene a todo esto? -pregunto la hiena-
- «Veintisiete primaveras» -le respondió Wis-
- ¡Pero si es mucho mayor que tú! -me miro horrorizado- ¡Siete años para ser precisos!
- La edad para mí nunca fue un problema, bueno nunca lo fue para los dos en aquel entonces, conectamos muy bien -lo miré con malicia- tampoco tuvimos muchos problemas en la cama ambos éramos bastante versátiles, una vez---
- ¡No no no! -me interrumpió- ¡No quiero escuchar o te juro que salgo y lo mato!
Me tomo por la cintura y me arrojo a la cama para luego posicionarse sobre mí y meter su hocico en mi cuello olfateando para luego morderlo suavemente, clásico de los caninos.
- Ya perro celoso -lo abrase mientras enroscaba mi cola a la suya- solo quería molestarte un poco
- «Recuerden, cachorro inocente presente» -se señaló con una flecha-
Después de reírnos un rato sobre cosas que solo Wissen noto y nos contaba nos dispusimos a irnos a dormir temprano, aun seguíamos cansado del día y debíamos efectivamente madrugar. Unas horas más tarde me desperté estrangulado en un abrazo de la hiena, poco a poco me sabe de la cama y fui al baño rapidamente, al salir y ver donde Wis debía estar no lo encontré, recorrí la habitación y lo encontré flotando en el pequeño balcón.
- Alguien te puede ver allí -le dije bostezando-
- «Tranquilo, puse un velo por todo el borde» -se giró hacia mi- «Deberías volver a la cama con tu hiena»
- Se me paso el sueño la verdad, supongo que a ti también -acaricie su portada-
- «Un poco, así que me puse a analizar la información del árbol, algunas cosas no encajan...»
Tire la vista al cielo descubriendo un vasto firmamento, era de esperarse, en las ciudades militares de noche se apagaban todas las luces para tener mejor visión a largo alcance sin la contaminación lumínica estorbando, protocolos estándares.
- Vi que había un jardín ¿Te apetece pasear y discutir la información?
Con un asentimiento de su parte me puse una bata y la ajuste por la cintura, saque el seguro de la puerta y salimos al pasillo, bajamos las escaleras y camine hacia lo que parecía ser una puerta que daba al jardín trasero. Este no era tan espectacular como el de la abuela Zuzen pero era bastante decente, camine un rato con Wissen a mi lado cubierto por su luz mientras discutíamos de lo extraño de los síntomas del árbol.
Una media hora después decidí sentarme en un banco, Wissen hizo una proyección del análisis que hicimos del árbol, en esta me señalo los puntos que más llamo su interés, como que las raíces espirituales parecen haber perdido casi la mitad de su energía. Como consecuencia directa las ramas que usualmente son las encargadas de prevenir y sellar las fisuras también perdieron gran parte de su energía, algunas incluso se veían muy débiles.
- Wis, mira aquí -señale una sección casi vacía a excepción de una gran raíz espiritual- normalmente todos los arboles sagrados siguen un patrón de esparcimiento en el espacio siguiendo la serie del número de oro pero aquí no se respeta, esta vacía, pero esta única rama aquí se mantiene, es extraño
- «Ciertamente, no lo había notado» -acerco la proyección en esa zona- «La energía de esta raíz igualmente es algo extraña, no es como la del resto del árbol, parece perturbada»
- ¿Sabemos en qué dirección va esa raíz?
Wissen alejo el árbol construyendo la ciudad y proyecto hacia donde se dirigía aquella rama, se perdía a unos diez kilómetros hacia adentro en las Tierras del Vacío.
- Parece que ya tenemos nuestro siguiente movimiento -murmuré-
- «Tienes compañía...»
Alce mi vista y descubrí a Nashor caminando lentamente por el jardín en mi dirección, vestía una bata similar a la mía, solo que esta era de color verde y la mía de color negro.
- Argoitz -dijo con tono bajo- vi una luz desde la ventana de la habitación de mi hijo y quise venir a ver que era -miro la proyección- impresionante -susurré- siempre se te dio bien las proyecciones de luz -sonrió-
- Aja -asentí- ¿Algo en lo que lo puede ayudar Comandante ?
La sonrisa de su rostro desapareció dando lugar a una mueca algo afligida, mi indiferencia aparentemente le dolía.
- No me llames así, no tu por favor -negó suavemente- llámame como lo hacías antes
- ¿Te refieres a Nash? -arrugué la nariz- no lo creo, me parece que ese apodo ahora solo debe salir de los labios de tu esposa, Brila, así se llama ¿No?
- Por favor, déjame explicarte
Dio un paso hacia mí pero lo detuve con un gesto de mi mano derecha para que no avanzara más.
- No me debes explicaciones Comandante , no me las dio en su momento, no me las debe ahora -chasqueé los dedos borrando la proyección- cuando vi a tu hijo muchas cosas tuvieron sentido -lo miré molesto- que descaro de tu parte haber iniciado una relación conmigo entonces teniendo un hijo con otra -negué- y más aún ocultarlo
- Debes entender que te amaba mucho, tenía miedo de perderte si te enterabas -intento explicar- Kevlin es el producto de uno de los juegos de mi padre, en los cuales Brila y yo caímos, fue solo una noche y ella quedo embarazada, no me entere hasta su nacimiento, la excusa perfecta de mi padre para casarnos
- Lose lose -giré los ojos- llegaron bastantes invitaciones a nuestra casa, mi madre respondió la última, aun no sé qué le dijo pero dejaron de llegar después de esa -lo volví a mirar- poca vergüenza de tu parte de invitarnos a la boda
- Todo eso lo manejaba mi padre, yo no tenía ni voz ni voto -se masajeó la frente- si no nos casábamos amenazó con desconocer a Kevlin y desaparecerlo de nuestras vidas, Brila y yo estábamos asustados así que cedimos
Mire al cielo pensativo, parece una jugada bastante esperable de una persona como el hacer algo tan bajo.
- Sabias que yo hubiese hecho todo por ti en ese momento ¿No? -pregunté sin mirarlo- sabias que tenía los medios, los recursos, las influencias, para ponerle un alto a tu padre, no confiaste en mí, estas son las consecuencias
Lo volví a mirar mientras me ponía de pie y reajustaba mi bata, di unos pasos hacia el para quedar bastante cerca.
- A pesar de ser un adulto, un Comandante , solo eres un cachorro asustado de la sombra de su padre, te recomiendo que crezcas, por tu propio bien, pero sobre todo el de Brila y Kevlin, en especial Kevlin, que puede verse arrastrado como tú lo hiciste
- Brila y yo solo somos esposos por título y conveniencia de nuestras familias -murmuró- no nos amamos, apenas y nos toleramos el uno al otro por Kevlin, yo te he seguido amando todo este tiempo a ti Argo -me miró suplicante- dame una oportunidad de enmendar mi error
- Debes tener unos testículos muy grandes para decirme y pedirme eso, de hecho los tienes si no mal recuerdo -lo mire suavemente- estuve tres días intentando llegar a ti, tres días enteros, el cuarto día tu padre salió a echarme con sus guardias y a amenazarme, el pobre infeliz siquiera me recuerda -reí un poco- cuando gire una última vez y te vi asomado en la puerta sin siquiera intentar hacer algo por mí, en ese momento deje a amar a Nash y mi amor por el paso a ser algo del pasado
Llevé mi mano a su mejilla y le di una suave palmada en ella antes de avanzar por el jardín, curiosamente un poco mejor por haberle hecho frente a un asunto pendiente del pasado, pero antes de seguir avanzando una fuerte mano agarro mi muñeca y me hizo girar.
- Te ame, aun te amo, sé que cometí un error pero quiero que sepas que luchare por recuperarte -resoplo- aun si debo sacar a esa hiena del camino
Fue casi instintivo, deshice el agarre y flexioné mis piernas al mismo tiempo que habilitaba el Relaxat Coactus en mis manos, entre en Accel uno y sin mediar palabras asesté varios golpes por debajo de su cintura en varios puntos de sus piernas. El rinoceronte cayo inmediatamente al suelo sobre su parte trasera mirándome sin entender nada , me puse erguido ante el de manera relajada.
- Cuida tus palabras Comandante -dijé- tu fuiste mi pasado, él ahora es mi presente, tú no tienes nada que buscar en mi vida, aprende tu lugar, aprende de tus errores, cuidado me llego a enterar que intentaste algo contra Kaftar o si no iré a por ti como si fueras un Esbirro -me gire dándole la espalda- el efecto pasara en unos treinta minutos, que pase buenas noches Comandante Nashor
Me fui de allí a paso tranquilo, apenas pude escuchar mi nombre de su hocico como un susurro suplicante pero no le preste atención, volví a la habitación y me acosté junto a mi hiena, este aun dormido se acurruco contra mi pecho, lo abrace quedando dormido. Pude sentir como Kaftar ser levanto primero que yo, siempre se levantaba una hora antes que yo para comenzar con sus funciones de edecán.
Wissen me obligo a levantarme antes de que la hiena viniera a hacerlo, me empujo a la ducha de la habitación y me hizo tomar un baño, ya más despierto por el agua termine de asearme y vestirme con mi uniforme militar. Sali de la habitación consiguiéndome con Kaftar subiendo justamente a despertarme, me invito a tomar desayuno donde tomamos cena la noche anterior coincidiendo con el resto de la familia, incluso Kevlin quien vestía un adorable uniforme escolar.
Salude cordialmente y me dispuse a comer lo que me ofrecían, algo de huevo, pan tostado, tocino y jugo, un clásico desayuno ligero para iniciar el día, al terminar Kaftar y yo nos fuimos a la salida de la residencia mientras este me podía al corriente con lo que había hecho, todo partiendo de la información que Wissen le dio apenas despertó.
- El todo terreno que solicite ya debe estar estacionado afuera -continúo hablando- dado que el terrero es bastante llano podremos andar sin problemas lo cual es raro, en la mayoría de estas ciudades usan caballos ferales o motocicletas por ser irregulares
- ¿A dónde irán? -Dasam nos alcanzó- si se puede saber claro
- Iremos a las Tierras del Vacío -respondí sin mirarlo- el origen de las anomalías de Tanagra se sitúan allá
- Entonces ire con ustedes
Tanto Kaftar como yo detuvimos nuestro avance hacia el vehículo y nos giramos a mirar al rinoceronte que igualmente vestía su uniforme militar.
- Informé al General que me tomaría el día para acompañarlos, no puso excusas -Nashor-
- Pero yo si -respondió Kaftar- esto es un operativo solo de Argoitz, y solo yo puedo acompañarlo como su edecán personal, es la forma en la que él opera
- Eso no lo decides tu -le respondió con molestia- Argoitz es un individuo de máximo interés militar y se debe velar por su bienestar y seguridad, así que lo escoltare personalmente
- ¿Insinúas que yo no lo protegeré de ser necesario? -gruñó la hiena- cuide sus palabras, Comandante
- ¿Me estas gruñendo perro? -se acercó a el- te recuerdo que tengo más rango que tu
Me interpuse entre los dos y los separe con las manos fuertemente, mire a Dasam advirtiéndole que no se metiera y me gire hacia Nashor.
- Agradezco su preocupación, pero sus servicios no serán requeridos -señalé con cuidado a Kaftar- tal como informo mi edecán yo trabajo por mi cuenta, solo, él es la única compañía que necesito, le aconsejo respete o me veré obligado a usar ahora mi rango que es muy superior al suyo
- No puedo permitir que vallas en solitario a las Tierras del Vacío -me miró igual de molesto- hay demasiada actividad de Esbirros, demasiadas fisuras últimamente, eres un Mago de Luz, no puedes hacer---
Antes que siguiera por donde iba active el refuerzo de fuerza y lo tome del cuerno, jale hacia abajo al mismo tiempo que subía mi rodilla conectándola con su rostro mandándolo a volar unos metros atrás. Este apenas se estabilizo me miro sin poder creérselo, entre en Accel cero y corrí hacia él, este se puso en posición de ataque y comenzó moverse en mi contra, sus lentos golpes nunca me tocaron, aproveche una de sus tantas aberturas y conecte un fuerte golpe en un costado fisurando una costilla, luego otro al estimado reduciéndolo al piso sin aire.
- No permitiré que denigre a los Magos de Luz en mi presencia Comandante -lo miré tranquilo- Garoin y mi persona hemos trabajado duro por años para que sean reconocidos por todos -me agaché hasta su altura y tomé su rostro con ambas manos- por dos años fuimos novios, pero no te molestaste lo suficiente en conocerme a fondo, cuando no estábamos juntos yo pasaba la mayor parte de mi tiempo libre en Tierras del Vacío rebanando Esbirros con mis dagas en solitario, recopilando información y ayudando a desarrollar todas las técnicas de las que ahora gozan los usuarios de luz en general, ahora me doy cuenta que siempre me vistes como alguien débil e inferior a ti por solo ser un Mago de Luz -me volví a levantar- me alegro de que me terminaras hace años sinceramente
Extendí la palma de mi mano y cree un orbe de Recuperación Dividida, lo apunte hacia él y este se trasladó a su hombro comenzando a curarlo. En menos de un minuto el tambaleante rinoceronte estaba de pie viéndome sin poder reconocerme.
- ¿U---usted y mi hijo? -tartamudeó Dasam-
- Si -lo miré inexpresivo- fuimos pareja, es decir es mi expareja -lo miré con una sonrisa ahora- ¿Nunca le dijo que el hijo de los Reinhart era su pareja? ¿Ese mismo que estuvo tres días afuera de su casa intentando hablar con él?
En ese momento parece que el viejo rinoceronte conecto todos los puntos en su mente y su memoria recordó esa situación ocurrida años atrás, su rostro se deformo totalmente.
- Si, yo soy esa pantera que usted mando a sacar tan vilmente del frente de su hogar como si fuese maleza mientras su hijo miraba desde la puerta -reí- y luego nos molestó con sus estúpidas invitaciones de boda, aun me pregunto que mi madre le respondió para que dejara de hacerlo -me giré hacia Kaftar- en marcha, hay mucho que hacer, creo que padre e hijo se tiene que poder al día
Chasquee los dedos desapareciendo el orbe de curación del rinoceronte, Kaftar se montó en el lado del piloto, cuando estuve a punto de subirme los mire una última vez.
- Comandante -le volví a sonreír- no olvide que un Mago de Luz lo dejo fuera de combate hoy -le guiñé un ojo- para que no cometa el mismo error en el futuro
Terminé de entrar y cerrar la puerta, me puse el cinturón de seguridad y Kaftar aceleró a fondo levantando una enorme nube de polvo alejándonos del lugar.
- Eso fue cruel -lo miré con una ceja alzada-
- «¿Lo dice el que lo ataco desprevenido y luego lo derribo?» -Wissen se reveló en los asientos traseros- «Creo que fue la cereza del pastel, buen trabajo Kaftar»
- Me alegro que ya cortaras el juego que tenían, me tenía de mal humor como te miraba a todo momento -gruñó- y al insinuar que no podía protegerte o tu a ti mismo, fue la gota que derramo el vaso
La conversación sobre Nashor se extendió hasta que salimos por un pequeño túnel al norte de la ciudad, seguimos un camino de tierra adentrándonos en Tierras del Vacío hasta que incluso el camino de tierra se perdió. A partir de allí el camino se volvió algo inestable pero soportable, me coloque mis lentes especiales y pude divisar la raíz espiritual bajo nosotros, le pase los lentes a Kaftar para que la siguiera mientras Wis y yo intentábamos ver si veíamos algo sospechoso en el camino.
Aproximadamente cada dos kilómetros nos topábamos con una fisura y Esbirros a sus alrededores, debíamos detener el vehículo y limpiar la zona para sellar y seguir, de cuando en cuando nos desviábamos un poco siguiendo los detectores para luego volver a la ruta original. Hora y media más tarde ya habíamos viajado los diez kilómetros, de hecho ahora íbamos por el kilómetro quince antes de que el terreno cambiara a uno mucho más irregular, por fortuna la raíz finalmente llegaba a su fin tras un pequeño cerro de rocas.
Bajamos del vehículo y caminamos con paso firme observando los alrededores pero sobre todo los detectores en caso de que apareciera algo, sin embargo nada aparecía a medida que escalábamos la pequeña montaña y llegábamos a la cima. Al fijar nuestra vista abajo no pude entender que era lo que mis ojos veían.
- Por el Creador -murmuró Kaftar- ¿Que paso aquí?
El pequeño cerro no bajaba y continuaba llano como de donde procedíamos, seguía a una depresión, depresión rodeada por otros cerros como el que acabábamos de escalar, sin embargo lo que llamaba la atención era que por todos estos cerros había cientos de cadáveres de Esbirros desmembrados. La tierra y rocas, las que apenas se podían llegar a ver estaban bananas en esa sangre obscura purpura de ellos, viajando hacia el centro de la depresión, acumulándose haciendo un gran charco de esta sangre, me lleve la mano a mi nariz intentando protegerme del olor.
- No reportaron una batalla de esta magnitud esta mañana -continuó la hiena-
- Esto no es una batalla -le corregí- es una masacre pero -miré el lugar- es muy extraño -me puse los lentes y observe de nuevo la raíz- la punta de la raíz termina justamente en el centro de ese charco de sangre, no puede ser coincidencia
- «Detecto una ligera interferencia de magia de gravedad viniendo en esa dirección» -señalo Wissen- «Pero no es como la de hace un año provocada por el Regente, es mucho más débil, creo que su origen es el mismísimo charco ese...»
Intentamos descender sin mucho éxito, la superficie estaba completamente resbalosa por la sangre y carne putrefacta, sin más remedio cree una pequeña plataforma de luz para mí y Kaftar acercándonos al charco a una distancia prudente. Apenas estuvimos a unos tres metros del borde sentí un pequeño escalofrió recorrer mi cuerpo, un malestar al cual me había acostumbrado hace años, similar a como cuando se creaban las grietas, esa cosa distorsionaba la luz de manera similar solo que con un efecto prolongado.
- Veamos -dijé-
Hice una pequeña lanza de luz y la acerqué al charco, a medida que la punta se acercaba esta parecía volverse inestable pero no desaparecer.
- Afecta la luz, así que efectivamente hay algo de magia de gravedad en esa cosa, pero no es muy fuerte -dijé- ¿Puedes ver algo más Wissen?
- «No puedo penetrar la superficie con mi magia, ayúdame»
Manifesté mi sello grado uno y toque su portada para pasarle mi magia de forma constante, Wissen no dijo nada los siguientes minutos, lo que quería decir que había encontrado algo de su interés y lo estaba analizando.
- «Creo que entiendo...» -habló por fin- parece que se está usando la sangre para canalizar y catalizar magia de gravedad, detecto una pequeña acumulación de esta en el fondo del charco, esta a su vez es dirigida a toda la superficie de la rama espiritual del árbol, por eso no siento casi interferencia aquí afuera, toda se dirige hacia el fondo, por donde pasa la rama, es la razón por la cual observamos una perturbación en la energía espiritual de esta anoche, esta cosa, esta envenenando con magia de gravedad el árbol Gaztainondoera de Tanagra a través de esta rama»
- El árbol se debilidad, con ello toda la zona cercana se vuelve vulnerable a apariciones de más fisuras y por ende Esbirros -continuó Kaftar- ¿Pero esto no es muy elaborado?
- Ya quedo más que demostrado que los Esbirros operan tras cierto nivel de inteligencia -miró preocupado el charco- están desarrollando nuevas tácticas militares para seguir con su misión de destruirlo todo, ahora me preocupa como detener esto -pensé un momento- fácil es destruir el núcleo de gravedad en el charco o el charco mismo que lo canaliza y cataliza, sin embargo eso implicaría tener que salir a buscarlos, más recursos, más tiempo, más riesgos, debemos enfocarnos en prevenirlo desde el propio árbol
Todos guardamos un minuto de silencio pensando en alguna posible solución hasta que Wis giro rapidamente sobre sí mismo, tenía una idea.
- «Si esto está actuando como un veneno solo debemos poner un filtro que evite que llegue al árbol, una vacuna general que actuara desde el mismo árbol» -dibujo un símbolo que bien reconocía- «Ajustaremos la Runa de Palabra Sagrada, en lugar de buscar elementos físicos nocivos y destruirlos, buscara magia de gravedad y la anulara»
- Simplemente brillante Wissen -asentí satisfecho- visto así, solo queda destruir esta cosa e ir al árbol para poner a prueba tu idea
Alce mi mano al aire creando muchas lanzas de luz listo para saturar todo el volumen del charco, aleje la plataforma del lugar y balance mi mano disparándolas todas contra su objetivo, sin embargo chocaron contra una barrera obscura que muy bien reconocía. Alce mi vista instintivamente y flotando sobre una cima de una de las montañas se encontraba un Emisario del Vacío con su bastón apuntando el charco.
Inmediatamente abrí el Limbo y el Clavis salió, apenas lo tome sincronice con Wissen y este se acoplo en su extremo opuesto, el Emisario había creado varias esferas negras que disparo contra nosotros pero Wissen contrarresto con varias barreras.
- ¿¡Por qué el detector de Esbirros no lo detecto!? -Kaftar-
- «La interferencia del charco debe haberlo encubierto, los detectores buscan anomalías gravitacionales muy específicas correspondiente a los Esbirros»
Con el Lux Domain puse a Kaftar en una zona segura, inmediatamente el Emisario empezó a canalizar otro ataque pero Wissen fue más rápido recubriéndolos con luz y anulándolos. Generé mi sello grados dos y lo rodee con varias lanzas de tipo cortante, con un movimiento de mi mano hice que todas hicieran un movimiento horizontal contra su centro, este intento protegerse con una barrera pero impuse mucha más magia en la lanzas venciendo su barrera y cortando su núcleo de múltiples formas matándolo.
El cadáver comenzó a caer hacia el charco pero lo tome como mi Luz Domain y lo arroje lejos, no correría el riesgo, volví a saturar el cielo con lanzas punzantes y las arroje contra el charco sin perder tiempo.
- Ese Emisario vigilaba este charco -susurré- esto es más grave de lo que pensábamos
- «Argoitz...» -Wis llamo mi atención- «Ahora que el charco no está activo la interferencia de este no está, pero siento otra interferencia, es muy débil, viene de... ¡En dirección de Tanagra!»
Me gire rapidamente hacia Kaftar y extendí mi mano para volverlo a envolver con mi Lux Domain, no podía dejarlo allí, comencé a volar a la mayor velocidad posible, lamentablemente no podía acelerarme trayendo a la hiena conmigo y no lo dejaría en un área con tantos Esbirros.
- «Apuesto que es una técnica para intentar debilitar los arboles sagrados lo más posible y sea más fácil una incursión a mayor escala»
- No me cabe la menor duda -dijé- y ahora Tanagra -gruñí- espero que no sea tarde
Nos habíamos alejado mucho en auto, me tomo unos cinco minutos poder divisarla nuevamente en el horizonte.
- Hay humo -Kaftar- ¡La artillería de las murallas parecen estar disparando al interior! -gritó- ¡Déjame allí, ayudare a los soldados que pueda, tu encárgate de proteger el árbol y evitar una catástrofe!
Tal como dijo lo deje al lado de uno de los cañones que estaba siendo operado por otro soldado, a este se le acercaba un Esbirro Campeón peligrosamente, Kaftar sacó a relucir sus espadas gemelas de su cintura y sin esfuerzo alguno lo rebano. Satisfecho seguí rumbo al centro de la ciudad, tal cual me tenía una gran cantidad de fisuras se habían formado y de ellas un pequeño ejército de Esbirros emergía en todas direcciones, pero particularmente la mayoría contra las defensas del árbol.
Me recubrí en una esfera de luz para guardar mi identidad y manifesté mi sello grado dos totalmente abierto, los anillos giraron haciendo su característico sonido.
- Wissen, busca y mata a los Esbirros, luego sella las fisuras
- «Ya estoy en ello»
La interferencia no era tan fuerte como aquella vez que asediaron nuestras ciudades, por lo tanto Wissen no tuvo problemas en encontrarlos, inmovilizarlos con el Lux Domain y decapitarlos instantáneamente, acto seguido empezó a sellar todas las fisuras de manera simultánea. Abrí una ventana al Limbo considerablemente grande sacando las barras estabilizadoras, Wissen las iba tomando de a grupos de tres dirigiéndolas a las fisuras asegurando el sellado.
Una vez terminado me dirijo a una altura central del tronco del árbol y plante un sello de Refuerzo Gaztainondoera, quizás si lo hubiese plantado anoche esto no hubiese ocurrido, maldije mi ingenuidad al creer que algo así no volvería pasar.
- «Por si acaso»
Wissen dibujo la runa de Palabra Sagrada en el centro del sello del refuerzo, me coloque los lentes especiales de Visión notando como la Raíz envenenada poco a poco pasaba a un aspecto más saludable.
- Parece que el refuerzo y tu idea de la Palabra sagrada es todo un éxito, ahora -revisé la ciudad-
- «Ya me adelante, estoy curando los heridos de gravedad, pero lamento informarte que hay algunos muertos de forma irreversible, he sanado los viables para resurrección y los estoy dirigiendo a los puntos médicos donde hallan Magos de luz certificados para resucitarlos» -Wissen me hizo girar en una dirección- «Mierda, Kevlin es uno de estos, el jardín infantil donde estaba fue atacado, Nashor está siguiendo en este momento el cuerpo muerto de Kevlin mientras lo traslado al punto más cercano pero están saturados, debes ir»
Deje que Wissen me mostrara el camino, cambie rapidamente a un velo para que no me notaran llegar, justo al descender el cuerpo venia llegando en mi dirección con un Rinoceronte llorando a mares. Baje mi velo con cuidado que nadie me viera a la vez que guardaba el báculo, el punto de medico estaba saturado así que Wissen lo deposito en una banco exterior cerca de mí, inmediatamente me acerque a él listo para iniciar el proceso.
- No te acerques más -le puse un alto a Nashor- necesito concentración
- ¡Es mi hijo! -me gritó acercándose con furia-
- Tu hijo está muerto -lo mire tranquilo- pero aun puedo salvarlo, así que mantente a raya
El paquidermo empezó a correr contra mí con la intención de embestirme pero Kaftar apareció de la nada antes de que yo lo inmovilizara. La hiena aplico una llave bastante simpe inmovilizándolo en el suelo mientras el quedaba sobre este.
- ¡Rápido Argoitz mientras yo lo retengo! -me grito-
- ¡Suéltame! -rugió Nashor- ¡Es mi hijo!
Ignorando sus quejas empecé el procedimiento, despeje mi mente y olvide la poca empatía que sentía por el niño, debía ser frio y verlo como un desconocido, si no violaría el Precepto de "No estar vinculado de forma emocional con el occiso", anulando el procedimiento. Respire profundo y active mi Visión, su alma ya estaba saliendo de su cuerpo y su espíritu se desvanecía.
- Deldran Kevlin -murmuré- aun no es tu momento pequeño
Envolví con cuidado su alma deteniendo su partida y la guie con sumo cuidado a su cuerpo, este ya había sido terminado de restaurar por Wissen en el camino. Una vez ya dentro de su cuerpo cree una esfera de luz introduciéndola y estimulando el espíritu a volver a abrazar el alma del pequeño infante, funciono.
Kevlin abrió los ojos violentamente soltando un bramido lleno de dolor, posiblemente recordando los momentos antes de su muerte, el miedo, el golpe mortal. Saque un vial que tenía en mi gabardina de Fulgis Memory líquido. Wissen al ver el problema que tendría me ayudo a abrir su boca con cuidado mientras introducía el contenido del vial en su hocico y lo estimulaba a tragarlo.
Wissen deshizo su agarre y yo sostuve su rostro con mis manos con mucho cuidado y lo hice mirarme fijamente.
- Kevlin, Kevlin -mírame- eso, así, ya todo paso, ya estas a salvo
- ¡Los monstros! -alcanzo a decir- M---Me--- Me dañaron con sus garras
- No Kevlin, no lo hicieron -negué mientras acariciaba su rostro- solo fue una pesadilla, ya estas a salvo
Lo acerque a mí para abrazarlo, este con mucho miedo aún se aferró a mí, su respiración era muy agitada pero poco a poco se fue calmando, el Fulgis Memory estaba empezando a hacer efecto.
- Olvida esa pesadilla, relájate y vuelve a dormir -acaricie su cabeza- mañana será un nuevo día cachorro, todo estará bien
- Quiero a mi papá -susurro con un bostezo- me dio mucho miedo
Me gire viendo hacia el Nashor quien parece se había calmado, mirándonos con su hocico abierto y un rostro lleno de lágrimas, le sonreí para tranquilizarlo.
- Él ya está en camino -le asentí a la hiena- para cuidarte mientras duermes
Kevlin no respondí, su suave respiración en mi cuello confirmo que había caído dormido, dormiría al menos unas seis horas antes de despertar, tiempo suficiente para limpiarlo, cambiarle la ropa por otra y hacerle creer que durmió hasta tarde. Kaftar se retiró lentamente de Nashor y este se levantó con algo de prisa y corrió hasta mi posición, apenas llego a mi le ofrecí a su hijo dormido, ni una guerra lo despertaría mientras estuviera bajos los efectos del Fulgis Memory.
Este lo tomo en sus brazos como si fuese de cristal, y es que eso era para él, una copa de cristal que había sido rota por los Esbirros. Apenas lo tuvo en su pecho lo envolvió ampliamente contra su cuerpo soltando otro montón de lágrimas mientras sollozaba.
- Lo siento tanto hijo -murmuró- lo siento tanto, te he fallado
- Tu hijo está vivo, es lo que importa -acaricié su cabeza- llévalo a casa, báñalo y cámbiale de ropa, al despertar no recordara nada, ni siquiera como una pesadilla, el Fulgis Memory destruye la memoria a corto plazo, para el esto nunca ocurrió -miré a Kaftar- hay mucho que hacer, ve a ayudar a quien puedas, yo me pasare por los centros médicos a ofrecer ayuda
Con un asentimiento Kaftar se perdió de mi vista corriendo mientras yo dejaba un Nashor aferrado a su hijo, me hubiese quedado con el pero el tiempo límite de resurrección de otros que Wissen había curado estaba llegando a su fin, serían unos minutos muy estresantes.
- Aquí vamos -murmuré-
Entre al centro médico, efectivamente los cuerpos curados por Wissen estaban acostados a varios metros unos de otros, algunos Magos de Luz los estaban resucitando pero igual faltaban muchos más. Entre en Accel uno para tener más tiempo y comencé por el que casi no le quedaba, nunca había practicado una resurrección en veinte segundos, era un tiempo récord sinceramente.
Una enfermera que se había dedicado a acamparme administraba el Fulgis Memory apenas despertaban, apenas terminaba saltaba al siguiente, en dos minutos en Accel uno había resucitado a todo los posibles. Sali corriendo del centro, entre en Accel cuatro y volé al siguiente más cercano, mismo panorama, mismo procedimiento, tarde dos minutos en este en Accel uno antes de ir al siguiente, el tiempo límite se acaba.
En el tercero y último que podía visitar había una cantidad muy superior a los otros, dedique unos cuatro minutos en Accel dos esta vez, resucite a doce, Wissen me aviso que era el tiempo límite, si había más cuerpos en los otros centros ya no se podrías resucitar, el alma ya habría abandonado el plano.
- Que día -respiré cansado-
Sali que tomar un poco de aire, la ciudad estaba muy agitada, totalmente militarizada, los pocos civiles que residían en ella fueron dirigidos al cuartel central para su resguardo, lo que me recordaba que lo siguiente era ir a este y convocar el Conclave. Saque mi Link y envié un mensaje a Kaftar notificándole mis intenciones, el respondió que me alcanzaría allí apenas pudiera, de ese modo me puse en marcha pero caminando, de esta forma si veía algo en lo que pudiera ayudar me detenía y lo hacía.
Solo basto mostrar mi placa para que me dejaran pasar el muy bien resguardado cuartel, un edificio bastante sobresaliente y mejor fortificado que el resto, uno de los soldados llevo un mensaje al General avisándole que ocuparía la sala de reuniones con carácter de urgencia y requería su presencia. Apenas llegué a la enorme sala me dirijo al Link central e introduje un comando que solo yo o miembros del Conclave conocíamos, este literalmente conectaría con los Links personales de sus miembros de manera obligatoria, solo se usaba para casos de emergencia.
- La ciudad ya está un poco más calmada -escuché a Kaftar entrar- se están reforzando las murallas y el árbol central, no hubo bajas civiles, solo algunos militares
- Ya veo -le asentí-
Pude notar como tras de él venia un especie de zorro negro y un perro mestizo, me acordaba de ellos por el reporte de Kaftar, eran el Capitán General y Coronel de Tanagra.
- Quédense atrás -les indiqué sin seguir viéndolos- el Conclave está por comenzar
Presione el botón de aceptar en la pantalla del Link mientras enviaba la invitación forzada, inmediatamente el Link creo un circulo perfecto en la sala de donde se desplegaron de forma equitativa pantallas con los nombres respectivos de cada nación. Poco a poco en cada pantalla fueron apareciendo los dueños de cada uno de sus Link, los miembros del Conclave habían aparecido.
- Necesito que agreguen a esta conferencia a los Capitanes Generales de cada ciudad en Tierras del Vacío -dijé cortante- es urgente
Los miembros del Conclave no pusieron objeción, tras un minuto nuevas pantallas más pequeñas se desplegaron en un hilo superior, muchas más, hasta que la habitación quedo parcialmente recubierta por proyecciones más pequeñas los cuales supuse eran todos los Capitanes Generales.
- Iré al grano -empecé- Tanagra acaba de ser atacada por un nuevo método de las fuerzas del Vacío y casi cae, afortunadamente pudo ser detenido a tiempo, descubrí la causa de las anomalías del árbol sagrado y di aviso a Garoin quien inmediatamente vino a prestar su apoyo a la ciudad mientras yo me encargue de la fuente del problema
Los murmullos no tardaron en escucharse en la sala, Gagor impuso su poderosa voz mandándolos a callar a todos, aprovechando el momento de silencio procedí a relatar lo descubierto en las últimas horas. Explique de forma resumida los síntomas de envenenamiento del árbol y la naturaleza del charco encontrado, como se procedió a su neutralización y para sorpresa de todos como tuvimos que pelear contra un Emisario para poder neutralizarlo.
- Esto demuestra que la guerra contra el Vacío comenzó realmente -Gera suspiró-
- La razón por la que convoque a los Capitanes Generales es para darles las siguientes instrucciones con permiso del Conclave, dado que esto no puede esperar
Procedí a explicar como debían instruir a los Magos de Luz capacitados para detectar anomalías en el espíritu de los árboles, de notarlo debían plantar un Refuerzo Gaztainondoera y una runa de Palabra Sagrada modificada que Wis proyecto por mí. Todos parecieron tomar nota, les avise que el plano detallados con las modificaciones sería enviado al terminar la reunión.
- ¿Qué hace ese civil en esta reunión? -preguntó Nemor algo molesto-
Confundido me gire mirando hacia atrás, allí estaba Kaftar que igualmente se giró, aun mas atrás se hallaba el Capitán General, el Coronel, algunos Comandantes incluido Nashor y junto a él su padre. Mire molesto inmediatamente a Nashor quien alzo los hombros negando su responsabilidad, en eso el Capitán General dio un paso al frente.
- Él es Deldran Dasam -comenzó a explicar el zorro- es un alto funcionario de Agius residente temporal de Tanagra que se vio envuelto, solicito estar presente y---
- Un funcionario o civil no puede estar presente en temas militares -esta vez fue Neba quien intervino con voz severa- menos en temas del Conclave
- Salga inmediatamente del salón -gruño mi padre reconociéndolo-
- Con el debido respeto estoy aquí en representación de los civiles afec---
- ¡Salga de aquí! -ahora fui yo quien rugí molesto- Capitán General Morel, escóltelo fuera, inmediatamente -dijé con todo bajo y amenazante-
El zorro pareció temblar ligeramente mientras respondía con un asentimiento, aparentemente los favores de Dasam le saldrían bastante caro.
- Adicionalmente quédese afuera de una vez -Crowne tomo la palabra- luego hablaremos de su sanción por esta grave infracción por su parte, hasta entonces el Coronel Vislow cubrirá sus funciones
Una vez los dos mencionados abandonaran la sala se retomaron los asuntos, se repasó el daño sufrido por la ciudad y algunas puntos críticos a considerar acerca de cómo proceder con esta nueva amenaza. Sugerí la idea de desarrollar un nuevo tipo de detector que identificara anomalías en general excluyendo Esbirros y Fisuras con Garoin, pero advertí no saber cuánto tiempo me llevaría tal tarea.
Con un indicativo de los Altos Maestros todos los presentes en la sala salieron a excepción de Kaftar, cada representante igualmente se despidió a los Capitanes Generales dejándonos solos y en más confianza.
- Las tácticas usadas por los Esbirros se están volviendo más complejas y efectivas -tomé la palabra- ¿Algo de esto es mencionado en tu información rescatada por los antiguos Vandalianos Madre Gera?
- Nada de lo que ha ocurrido hoy me es familiar -miró unos papeles en sus manos- echare un vistazo de todas formas
- Hay que recordar que la guerra que tuvieron con los dragones fue más de fuerza bruta -señalo Gagor- dos grandes fuerzas opuestas que colisionaron de la noche a la mañana sin previo aviso con todas sus fuerzas, no hubo tiempo para tácticas complejas, solo fuerza y destreza a la antigua como se dice, además que duro poco tiempo
Hablamos un rato más hasta que no quedo nada pendiente que tratar, con un agradecimiento de mi parte por su atención me dispuse a dar por concluida el Conclave, estos con un asentimiento y una reverencia fueron cortando sus Links. Sin embargo le había pedido a los Altos Maestros que se quedaran un poco más, había un asunto que me molestaba y quería tratar de una vez.
- Alto Maestro Lasgar -me dirigí a el- la próxima vez que considere otorgarle un favor a alguien como Dasam para hospedarme en su residencia espero que lo piense con mucho cuidado
- ¿¡Qué tú qué!? -mi padre miró a su derecha-
- El muy, con el debido respeto, imbécil Alto Maestro Lasgar, cambio mi itinerario a última hora, para que me hospedara en la residencia de la familia de mi expareja, y efectivamente allí estaba mi ex que me abandono, con su hijo que nunca supe que tuvo antes de salir conmigo y su padre que me había echado de su casa cuando lo busque y siquiera me recordaba -lo miré molesto- no vuelva a tocar mi itinerario, o yo me las arreglare para cambiar el suyo
- ¡Lasgar te voy a arrancar todas las plumas!
Fue lo último que escuche de mi padre antes de cortar el Link, seguramente estarían un buen rato peleándose en el Consejo, muy posiblemente evitando que mi padre cumpla su palabra.
- Mierda -gruñí- y apenas es medio día
- «Hace tiempo que no me sentía así de estresado» -Wissen salió de su velo- «Quiero apagar mi mente un rato...»
- ¿Podemos asumir que Tanagra volverá a la normalidad con su intervención? -pregunto Kaftar-
- Si el árbol vuelve a recuperar su vitalidad, si -lo miré un momento y negué- pero si siguen desarrollando tácticas de este tipo ya nada es seguro, donde, cuando o como atacaran es un misterio, esto solo es una advertencia de que debemos permanecer alertas
Salimos de la habitación donde fuimos interceptados por el Coronel Vislow poniéndose a mi servicio y disculpándose por lo ocurrido dentro del Conclave. Sin ánimos de buscar algún conflicto solo le pedí que cumpliera sus obligaciones sin caer en favoritismo como lo hizo su superior, o antiguo superior, posiblemente le den de baja.
Kaftar me consiguió una oficina aislada para poder trabajar en solitario, debía enviar los planos de la Runa modificada lo más rápido posible, durante esa hora Wissen y yo trabajamos enfocados hasta enviar el correo a los miembros del Conclave y estos a su vez a sus respectivos militares. Ya terminado Kaftar me indico que lo mejor sería reponer energías comiendo en el cuartel, me ofreció traer comida a la oficina pero rechace la oferta yendo al comedor general.
Allí hice mi respectiva fila junto a los otros soldados de cualquier rango sin ningún tipo de distinción, estos al verme querían hacerme pasar adelante, me habían reconocido, quizás por la ayuda en los centros médicos o alguien en la reunión del Conclave menciono mi presencia, sí que eran chismosos los militares. Tuve que rechazar muchas ofertas de adelantar fila hasta que fue mi turno de elegir algo del menú, Ambos nos sentamos en una mesa donde algunos soldados rasos comían, estos nos miraban extrañados.
- ¿Les molesta si nos sentamos aquí? -pregunté-
Con una sonrisa nos invitaron a acompañarnos, en vez de irse parecieron comer lento para hacernos compañía, en un punto algún valiente se atrevió a comentar como había ayudado a resucitar a más de dos docenas de soldados corriendo de un centro a otro. Otro soldado menciono los rumores de como habían reprendido al Capitán General y a Dasam, allí completaron con más chismes de como el rinoceronte se creía dueño del cuartel y lo feliz que se pusieron al ver como lo humillaron.
Al final el almuerzo termino siendo más ameno de lo esperado y me ayudo a despejar y desestresar mi mente, sin importar el oficio o rango al final todos éramos soldados combatiendo al mismo enemigo. Con un apretón de mano nos despedimos de cada uno antes de ponernos en marcha, ahora debíamos ir a la residencia Deldran a buscar nuestro equipaje cosas que me ponía de mal humor nuevamente.
Unos minutos más tarde ya habíamos llegado, curiosamente la residencia no sufrió ningún ataque por parte de los Esbirros, nos adentramos como si fuera nuestra casa y fuimos directamente a nuestra habitación. Wissen rapidamente con su luz recogió toda nuestras cosas y las empaco, también quería irse de allí lo más rápido posible.
Cada uno tomo una maleta y nos dirigimos a la escalera, al bajar nos encontramos con un Nashor de pie, nos veía de forma serena, le indique a Kaftar que se adelantara al vehículo, este era nuevo, el anterior lo abandonamos cerca del charco.
- Ya mi edecán y yo nos retiramos -empecé a hablar- mis asuntos en Tanagra llegaron a su fin, debo atender otros asuntos
- Entiendo -asintió- disculpa lo ocurrido durante la reunión del Conclave, de un momento a otro apareció allí
- No fue tu culpa -negué- la responsabilidad esta vez recaerá con fuerza sobre Morel, creo que su carrera militar está acabada -lo miré seriamente- ese pudiste haber sido tú, Comandante
El rinoceronte asintió pesadamente ante mi última palabra, si él hubiese sido el responsable de su intromisión ya estaría acabado, parece que el destino aun le sonríe.
- Permiso para hablar con libertar Señor -pidió-
- Concedido -asentí-
- Gracias por lo de mi hijo, cuando lo vi todo cubierto de sangre con el costado abierto en el jardín infantil todo mi mundo se derrumbó -empezó a contar- cuando de repente su cuerpo empezó a flotar y moverse corrí tras el sin entender lo que pasaba, solo quería tenerlo en mis brazos -negó- cuando vi que estabas junto a él y me quisiste apartar solo me enfurecí más -giró su rostro avergonzado- ahora agradezco que Kaftar me sometiera, de lo contrario no hubieses podido resucitarlo y tener el detalle de borrarle la memoria -sonrió débilmente- ya lo bañaron y cambiaron, ahora duerme -me miró confundido- pero no entiendo cómo es que termino justamente donde estabas tu
Medite un poco mi respuesta antes de responderle, Nashor era en fondo una buena persona pero no muy perspicaz.
- Como dije en el Conclave Garoin vino por mi petición a la ciudad a ayudar -comencé- cuando neutralizo los Esbirros y fisuras se concentró en los heridos mortales y restaurar los cadáveres de aquellos que podían ser resucitados, los traslado a los centros médicos más cercanos, pero de entre todos le llamo la atención el de una cría, me aviso que lo enviaría a donde yo estaba para que lo resucitara, amarga sorpresa ver que era Kevlin -bajé las orejas- debió ser terrible para él, pero afortunadamente lo pudimos revertir
Pase a su lado y luego me volví a girar para verlo, esta vez le dedique una genuina sonrisa.
- Piensa en esto como un segunda oportunidad de vida, no solo para ti
- La tomare, sinceramente lo hare -sonrió- seguiré tu consejo, saldré como sea de la sombra de mi padre, no me importa si pierdo el apellido en el proceso, también debo disculparme contigo por lo que dije sobre los Magos de Luz, tu -pareció pensarlo- tenías razón, siempre los vi como el eslabón más débil en la milicia, y tú en un momento me hiciste ver lo contrario, además -se acercó a mí un poco- lamento mucho lo que dije esa noche, sobre sacar a Kaftar del camino, no fue correcto, estaba molesto, estaba celoso, de hecho aún lo estoy -intento sonreír pero no pudo- respetare su relación, pero esperare, esperare por ti, aun te sigo amando
- Igual de terco que siempre -negué suavemente- como dije, eres parte de mi pasado, no soy del que da segundas oportunidades, al menos no en ese ámbito emocional, en el amor, una vez roto ese amor no puede volver a ser lo que una vez fue -palmee su hombro- te darás cuenta con el tiempo, quizás podamos ser amigos, pero nada más, hasta ese momento, cuídate mucho y a Kevlin, es un encanto como tú, adiós, Nash
Antes de girarme pude ver como una cara de sorpresa se dibujaba en su rostro seguida de una suave sonrisa, avance hacia la puerta atravesándola, Kaftar ya estaba en el vehículo esperándome para partir a la estación. Sin embargo un último obstáculo se interponía en mi camino a la salida de Tanagra, Dasam.
- No me queda mucha paciencia el día de hoy Deldran -dijé- lo que tengas que decir dilo rápido
Este pareció tragar en seco, su postura estaba rígida, temblaba un poco pero pudo mantenerse firme antes de comenzar.
- Lamento los inconvenientes causados en la reunión del Conclave, lamento también como lo trate hace años aquel día, no recordaba en lo absoluto tu rostro -se intentó excusar- pero sobre todo lamento lo que paso con su relación con mi hijo, no tenía idea de quien eras entonces y cometí un error imperdonable -sonrió- lo enmendare, sé que mi hijo aun lo ama, los escuche -lo miré molesto- ¡Pero también estoy seguro que usted aun lo ama! -intentó corregirlo- así que hablare con mi hijo para anular su matrimonio con Brila ¿Sabía que en solo se casaron para mantener ocultar el embarazo accidental de Kevlin? -fingió tristeza- nunca debieron casarse por obligación -negó- un error que se corregirá ahora y podrán volver a estar juntos -volvió a sonreír- ¿No le parece increíble que aun después de tanto tiempo su antiguo amor pueda retomarse?
Suspire pesadamente al tener que tratar con esta clase de persona, sin mucho que hacer, lleve mi mano a su cuello y presione suavemente enviando un poco de magia para relajar casi todo su cuerpo y hacerlo caer al suelo.
- Me das asco -dije viéndolo- realmente me das asco, espero que Nashor realmente cumpla su promesa a partir de ahora -di unos pasos pero me detuve para volver a mirarlo- si vuelvo a escuchar de usted, de que hizo algo contra Nashor, Kevlin, o incluso contra Brila, me encargare de sepultarlo política y socialmente, el apellido Deldran desaparecerá de los registros y memorias de Erion, usted sabe que puedo, no tome mi amenaza en vano, gracias por recibirme en su residencia por cierto -le sonreí con maldad- me divertí mientras duro
Me gire nuevamente y aborde el vehículo con rumbo al terminal, una hora más tarde ya estábamos rumbo a Erion, el viaje al igual que el de venida fue tranquilo y sin contratiempo, unas horas más tarde estábamos bajándonos en la estación de la ciudad fronteriza Eriana de Scylce, punto de partida original. En lugar de subir a otro que nos llevaría a Agius decidimos pasar la noche en una posada bastante sencilla y pintoresca, sin formalidades, estaba ya cansado como para seguir jugando a ser militar.
Después de cenar en el centro de la ciudad de manera tranquila nos fuimos de regreso a nuestra posada, Wissen decidió retirarse al Limbo con la excusa de trabajar en su próximo libro titulado "Sombras de la luz". Cuarta entrega de una serie de libro de drama, acción y misterio que se había hecho muy popular a nivel mundial bajo el seudónimo de "Wissen Hertzirt A.". El muy descarado uso su nombre y el apellido de Garoin para llamar la atención y crear la ilusión que Garoin tenía un familiar, al menos eso sirve para despistar a más de uno.
Sin el cachorro inocente, como se define Wissen, rondándonos, Kaftar y yo pudimos relajarnos de la forma que solo él y yo sabíamos, y de verdad que lo necesitábamos, los sucesos en Tanagra nos habían dejado bastante deseosos por decirlo de alguna forma. Iniciamos nuestras sesión a eso de las diez de la noche, como de costumbre la hiena se entregó a mí de forma subliminal, sabía cuál era su papel, no se lo impuse, el solo lo asumió y yo lo disfrutaba en todo su esplendor.
Al descargar un cuarto órgano dentro de él y provocarle a él un quinto con mi luz en su nudo ya no podíamos más por esa noche, siquiera teníamos fuerza para irnos a bañar así que solo nos acostamos tal cual estábamos. En un punto de mi sueño siento que algo me sacude el hombro con insistencia, pienso que es Kaftar pero me equivoco al abrir los ojos y descubrir a Wissen flotando cerca de mí.
- Despierta, despierta Argo -susurró con su voz-
- ¿Wis? -apenas pude decir-
- «No hables, sígueme» -escribió ahora-
Confundió termine por sacudir mi rostro intentando despertarme, mire a mi lado y no vi a Kaftar por ninguna parte, tire mi vista al baño y vi la luz encendida, posiblemente era él dentro.
- ¿Qué sucede Wis? -lo mire confundido y con sueño- siquiera es de mañana, vuelve a dormir
Estuve a punto desplomarme en la cama pero nunca pude sentirla, Wis me había envuelto con su luz y me saco volante de la cama con cuidado, vi como desplego un velo, abrió la ventana con cuidado y me saco por ella.
- ¿¡Wissen!? -grité- ¿¡Que mierda estás haciendo!? ¡Estoy desnudo!
- Hace unos días te pide que confiaras en mí y lo hiciste ¿Recuerdas? -dijó- llegó el momento de decirte lo que pasaba, y no puede esperar
Sorprendido por lo que dijo no quise seguir reclamándole, deje que me guiara a unos cientos de metros sobre la posada donde nos hospedábamos, era extraño, Wissen odiaba estar en lugares así, literalmente no había algo a su alcance que le permitiera ver y eso le daba miedo, a excepción de cuando estaba acoplado al Clavis Rotan que podía ver mucho mas allá.
- Bien -tomo su forma presencial- hace unas tres semanas comencé a notar unas señales de Link con encriptación militar, dado su naturaleza no pude ver su contenido o procedencia pero si donde llegaban, me parecía sospechoso pero no podía hacer nada, así que comencé a vigilar prudentemente al receptor a la vez que intentaba encontrar la forma de desencriptar los mensajes, a medida que trabajaba los mensajes se hicieron más frecuentes, incluso algunas llamadas, lamentablemente nunca pude acercarme lo suficiente para escucharlas, sabían de mi presencia, lo hacía cuando tu dormías y yo estaba en el Limbo, por eso comencé a alterar mis horarios entrando al Limbo cuando usualmente no lo hago y saliendo de noche sin avisarte -me miró seriamente- hoy lo volví a hacer y pude no solo desencriptar la llamada y grabarla, si no recuperar alguno de los mensajes del Link receptor
Una vez más esa incomodidad que venía sintiendo días atrás volvió a apoderarse de mí, pensé que estaba relacionado con lo de Tanagra y me mentí a mí mismo cuando todo acabo al afirmarme que ya había pasado.
- Muéstrame la grabación -dije-
- Lo siento mucho Argo -dijó mientras desaparecía-
Apenas termino de desaparecer su forma presencial desplego tres pantalla tipo Link, en ella aparecieron tres individuos que muy bien conocía, no pude siquiera decir algo cuando comenzaron a hablar dos de ellos. El tercero estuvo en silencio todo el rato de forma seria hasta que le dirigieron la palabra haciéndole algunas preguntas, este explico su situación actual para ese momento, es decir el día de hoy, lo que escuche literalmente me descompuso totalmente obligándome a llevarme la mano al pecho.
Una vez termino Wissen desplego a mi alrededor los mensajes que había recuperado de forma cronológica, aparentemente algunos estaban perdidos pero se podía entender de sobre manera lo expresado en ellos, aun en palabras clave, con lo conversado en la llamada. Después de un rato leyendo los mensajes troné los dedos disipando la luz y desapareciendo aquellos horribles mensajes, me lleve las manos a la cabeza intentando contener un dolor que no podía expresar, lagrimas se escaparon de mis ojos cerrados y un gruñido nacía en el centro de mi pecho.
No, no simplemente no podía darles ese gusto, no lloraría más, no les dedicaría siquiera un rugido de dolor, no lo permitiría simplemente. Pasaron los minutos, mi agitada respiración poco a poco se normalizo, Wis apareció ante mí, quieto, como si tuviera miedo de agregar algo más, ahora entendía la actitud que tuvo las últimas semanas, tenía miedo de hacerme daño.
Me acerque a él y lo abrace contra mi pecho, este solo repetía una y otra vez que lo sentía, yo lo calme diciéndole que esto no era culpa suya, que por el contrario se lo agradecía por haberse dado cuenta. Al cabo de otro minuto me separe de él y tire mi vista a la posada.
- Supuse que querrías irte de inmediato a Agius después de que te lo dijera -tomó su forma presencial a mi lado- deje una nota con tu letra diciendo que surgió una emergencia y tuviste que volar a tu casa, así te daría tiempo de decidir cómo actuar
- Gracias Wis -apenas pude decir- gracias en verdad -lo miré con una sonrisa- vallamos a casa, tenemos unas cosas que hacer por lo visto, mañana será otro largo día
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