Nuestra historia comienza en las territoriales aguas de Berk, una de las naciones de vikingos más fuertes que ha existido hasta el momento pues su gran fuerza y determinación para el combate ha sido inigualable, pero ese tema no es lo importante ahora.

Es este mar que se puede apreciar un clásico barco vikingo moviéndose por las turbulentas aguas, desafiando el mar y la corriente como si no fueran absolutamente nada en especial. En este barco se encuentra una pequeña tripulación de 5 hombres y todos se encuentran en la cubierta del mismo, guiando el barco hacia su destino; la isla de Berk.

En la parte delantera de este navío que a simple vista parece no importarle la tormenta que amenaza con hundirlo se encuentra un joven de aproximadamente 14 años aproximadamente el cual tiene la mirada perdida en el océano mientras su rostro muestra una seguridad inamovible. Este joven no es nadie más ni nadie menos que (T/N) Landvik, hijo de la familia Landvik, que es una de las familias fundadoras de Berk más importantes gracias a las grandes aportaciones que hicieron a lo largo de los años.

Volviendo con (T/N), este aún se encuentra observando el mar mientras es presa de sus pensamientos y recuerdos. Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que había estado en casa junto a sus padres, amigos, su hermana....

El hecho de volver a casa, lo ha mantenido de muy buen humor desde que dejó la isla privada que pertenece a su familia y que siempre ha sido muy difícil de encontrar para cualquiera que no pertenezca a la familia Landvik.

Los pensamientos de (T/N) se vieron interrumpidos, debido a la repentina voz de uno de los hombres que eran parte de la tripulación. Una vez que el reaccionó, se apresuró a hablar.

-¿Sucede algo?.- pregunto (T/N) tranquilamente.

-Nada grave joven Landvik, solo quería informarle que llegaremos a Berk pronto, de hecho deberías de ser capaz de verlo por ti mismo en unos minutos.- dijo el hombre en un tono tranquilo.

-De acuerdo, gracias por avisarme de eso. Estaré al pendiente.- dijo (T/N) en un tono animado.

El hombre solo asintió con la cabeza e inmediatamente después se alejo de el para poder volver con sus labores en la embarcación. Y (T/N) por su parte regreso su mirada al mar.

-Ya falta poco. Solo un poco más y estaré en casa.- pensó (T/N) bastante animado mientras sonreía.

Por algún motivo, (T/N) no podía dejar de observar el mar y más raro aún, al menos para la tripulación, era el hecho de que lo hacía en total silencio. El solamente estaba ahí parado, sintiendo como el aire frío y la brisa del mar golpeaban su rostro y cuerpo.

No sabía por qué pero, había algo diferente en el aire. El mar parecía más agotado que de costumbre y el aire soplaba en otra dirección, como si el presente se viera alterado por la gracia de Odín. Una sensación rara se apoderó complemente de su cuerpo y solo Odín sabía que es lo que le esperaba tras su regreso a su hogar, por lo que solamente le quedaba esperar que Odín tuviera misericordia con el.

Tal y como dijo aquel miembro de la tripulación, al cabo de aproximadamente 15 minutos, (T/N) pudo ver a lo lejos una gran isla, una isla que conocía bastante bien, tanto como la palma de su mano.

Tiempo después

Aquel pequeño barco finalmente había tocado el puerto de Berk, por lo que actualmente todos se encuentran descargando tanto las pertenencias de (T/N) como otros tantos objetos que pertenecen a una entrega especial de suministros que solamente pueden obtenerse en la isla Landvik.

(T/N) estaba por empezar a descargar los diversos objetos que habían traído, uno de los miembros de la tripulación le acercó nuevamente.

-No se preocupe por la carga joven Landvik, nosotros nos encargamos. Usted vuelva a casa y disfruté de su reencuentro con su familia, nosotros llevaremos todo esto hasta Estoico el vasto.- dijo el hombre con total tranquilidad y seguridad.

-Se lo agradezco mucho, me aseguraré de que se lo compensen de la manera adecuada. Muchas gracias por el viaje.- dijo (T/N) en un tono amable.

Sin nada más que decir, (T/N) tomo sus cosas e inmediatamente después comenzó a caminar, alejándose cada vez más y más del barco que lo había traído desde tan lejos.

Mientras caminaba con relativa tranquilidad por el puerto, varios recuerdos llegaban a su mente, buenos recuerdos de su infancia y que siempre habían estado presentes en su mente, incluso cuando paso por malos momentos en la isla Landvik. Los recuerdos estaban tan frescos en su mente que incluso por momentos podía jurar que veía una versión pequeña de el jugando y ríendo en diferentes partes del puerto y otras partes de Berk.

-Me pregunto como estarán todos aquí, ¿Cuánto habrán cambiado todos mientras no estaba?.- pensó (T/N) bastante curioso mientras apresuraba el paso

Al estar tan metido en sus pensamientos, no se percató de la velocidad a la que iba y, para cuando se dio cuenta, ya había dejado el puerto. Sorprendido y orgulloso de sí mismo, siguió su camino a través del pueblo mientras miraba con alegría como la mayoría del lugar no había cambiado en todos estos años. Eso le hacía sentir una calida sensación de hogar y felicidad. En pocas palabras le daba una muy buena espina acerca de como sería el re integrarse en Berk después de tantos años.

Los minutos pasaban y (T/N) seguía pasando por el pueblo de Berk mientras que continuaba su camino hacia su hogar, mismo que por cierto se encontraba ubicado un poco lejos de el resto de las casas en Berk, ¿El motivo de esto? Simple, la casa tenían un buen tamaño, tampoco era una mansión pero si tenía un tamaño mayor al tamaño estándar de todas las casas en Berk.

Mientras recorría Berk (T/N) escucho a 2 vikingos hablando y aunque normalmente los ignoraría y seguirá con su camino, está vez el tema si era de su interés por lo que rápidamente se oculto cerca de ambos para poder escuchar la conversación

En la conversación

-Entonces, ¿Que es lo que va a pasar con la hija de Estoico?.- pregunto el primer vikingo algo curioso

—Dicen que mañana llegarán varios representantes de otras islas para pedir la mano de la hija de Estoico en matrimonio, aunque gente de Berk también puede intentar.- dijo el segundo vikingo en un tono bajo y con algo de morbo.

—Vaya, así que ya es hora, he? Bueno, era de esperarse ya que Berk es bastante fuerte y los tratados de paz son más eficientes cuando hay una boda de por medio. Por cierto ¿Cuales son los requisitos para pretender a la hija de Estoico?.- dijo el primer Vikingo con un tono neutro y algo de curiosidad.

—Tu obviamente no vas a poder, si es lo que estabas pensando.- dijo el segundo vikingo con burla mientras comenzaba a reír frenéticamente.

Fin del la conversación

(T/N) había escuchado lo suficiente por lo que sin más se alejo de ahí sin ser visto o escuchado por ambos vikingos. Mientras retomaba su camino, aquellas palabras seguían pasando una y otra vez en su cabeza, no podía quitárselas de encima y, al mismo tiempo, un nuevo pensamiento surgía dentro de su mente.

-Parece ser que llegue a tiempo.- pensó (T/N) algo confiado mientras sonreía levemente.

Pasados casi 10 minutos, (T/N) había logrado alejarse de dónde se encontraban la mayoría de las casas y negocios de los habitantes en Berk, mientras seguía un sendero de grava, la imaginación de (T/N) voló al imaginar todas las formas en las que sería recibido en casa, desde las más positivas hasta las más negativas.

Para cuando se dio cuenta, ya estaba en la puerta de su hogar y es entonces cuando comenzó a sentirse bastante nervioso, preocupado y algo asustado. No sabía que iba a pasar y eso no era bueno a la forma de ver de (T/N)

Sabiendo que tenía que entrar en algún momento, (T/N) respiro profundamente un par de veces para calmarse y reunir valor. En cuanto estuvo listo, tocó la puerta un par de veces.

Poco después pudo oír una voz femenina del otro lado de la puerta y segundos después varios pasos acercándose a la puerta.......

Finalmente, la puerta de abrió revelando a una mujer de complexión delgada, cabello rubio, ojos azules y piel pálida. Lleva un pañuelo blanco, una capa roja corta y un traje blanco y verde claro.

La mujer al ver a (T/N) se quedó muda y el por su parte hizo lo mismo. El silencio se apoderó rápidamente del lugar mientras ambos miraban fijamente al otro, como si se comunicarán con la mirada.

La mujer, al no aguantar más abrazo rápidamente a (T/N) mientras varias lágrimas se resbalan por sus mejillas hasta llegar al suelo.

-Mi hijo, mi hermoso y pequeño hijo está de vuelta.- dijo la mujer bastante feliz mientras sollozaba y aplicaba más presión en el abrazo.

(T/N), aunque sorprendido y con dificultades respiratorias provocadas por el fuerte abrazo de su madre, solamente se limito a sonreír y a corresponder aquel abrazo lleno de amor maternal, amor de una madre que estuvo lejos de su hijo mejor durante mucho, mucho tiempo.

-Tranquila madre, ya regresé. Y esta vez te prometo que me quedaré mucho tiempo.- dijo (T/N) en un tono suave mientras animaba a su madre.

Pasado un minuto, ambos se separaron del abrazo e inmediatamente después, la madre de (T/N) lo invito al interior de su hogar.

Una vez dentro, (T/N) fue a lo que solía ser su habitación para poder dejar sus cosas e instalarse. Ni bien llegó hasta su habitación, no pudo evitar mirar todo con nostalgia. Sin embargo, no se dejó vencer por aquella emoción y comenzó a acomodar todas sus cosas de una manera que le resultará bastante comoda.

Aproximadamente unos 15 minutos después, (T/N) ya tenía todo listo, por lo que, tras ponerse algo más cómodo, salió de su habitación y posteriormente se encamino hacia el comedor, donde ya lo esperaba su madre.

Una vez ahí, su madre le sonrió mientras dejaba un plato de comida caliente sobre la mesa.

-Adelante, come. Estoy seguro de que debes de tener hambre luego de tu largo viaje.- dijo la madre de (T/N) con una calida sonrisa.

(T/N) no dudo y rápidamente se sentó en la mesa para después lanzarse sobre el plato de comida. Al ver qué su hijo comía como una bestia hambrienta, Helga; la madre de (T/N) solo pudo sonreír nerviosamente mientras preparaba más comida.

De pronto, (T/N) voz una pequeña pausa para poder hablar con su madre.

-Dime mamá, ¿Dónde están papá y mi hermana?.- pregunto (T/N) curioso y algo confundido al no verlos en la casa.

-Tu papá salió en viaje de exploración hace 3 días por órdenes de Estoico y tú hermana salió a recolectar algunas flores y otras cosas que necesitamos así que volverá dentro de unas horas.- dijo Helga tranquilamente y con su sonrisa.

-Oh, está bien madre. Sabes, me da gusto estar en casa de nuevo.- dijo (T/N) bastante alegre para después volver a devorar su comida.

-Y a nosotros nos da mucho gusto que estés de vuelta, te extrañamos mucho, todos estos años.- dijo Helga feliz.

Cuando Helga finalmente termino de cocinar, sirvió todo en la mesa y posteriormente se sentó para poder comer juntos a (T/N).

Fin del capitulo