Capítulo 4: Cuidador

Ha pasado 1 semana desde lo ocurrido con las niñas, donde ambas descubrieron que sasuke era el héroe del escudo y donde rifana le propuso a sasuke que la tomará como esposa.

Las cosas han estado tranquilas en el grupo del héroe del escudo, si no contamos las mañanas con las que comienzan.

Sasuke  tenía todos los días un sueño y siempre era el mismo sueño.

"Eres débil sasuke, te hace falta odio", era siempre la imagen de su hermano humillandolo hace 3 años.

La impotencia que sentía al no poder hacer nada, al tener al causante de la masacre uchiha y no poder si quiera dañarlo y la razón por la que dejo konoha en busca de poder.

Pero siempre el sueño era interrumpido antes de que el odio en su corazón empezará a acumularse.

Sintió como junto a él había una pequeña pelea, logrando que el uchiha se despertará.

-Rifana chan, ya te dije que esa es la cama de sasuke sama, no puedes estar ahí, decía raphtalia mientras sacudia a la niña en cuestión.

-No quiero, este lugar es cómodo, además cuando nos casemos siempre dormiremos juntos, dijo rifana mientras se aferraba a las cobijas.

Sasuke dejo salir un suspiro y procedió a levantarse de la cama de la habitación que rentaba donde había dos camas específicamente para que las niñas durmieran en una y el en otra, pero al parecer desde que rifana se enteró sobre sasuke siendo el héroe del escudo, todos los días la niña se colaba en su cama, algo que si bien no le importaba al peli negro, en cierta parte le fastidiada el estar pagando una cama extra, al menos raphtalia la usaba.

-Prepárense ya que hoy empezaremos el verdadero entrenamiento, tomo una semana el entrenamiento físico para acondicionar sus cuerpos pero creo que al Fin dejaron atrás esos cuerpos débiles y al fin serán de ayuda. Así que cambiense y las veo en 10 minutos en la recepción para ir a la tienda de armas.

Las niñas asintieron y comenzaron a cambiarse a la ropa que sasuke terminó comprandoles a cambio de esa clase de ropa hecha de costal que parecía que usaban.

Flash back.

Podemos ver un grupo compuesto por un joven peli negro y dos niñas demi humanas, estos caminaban por las calles de la ciudad en dirección de la puerta que siempre usaban para salir al campo de entrenamiento que sasuke hizo para el acondicionamiento de las niñas. han pasado 4 días desde que las compro a tal extraño hombre, a lo que por cierto pocos días después se entero que el hombre lo engañó y resulto ser que los esclavos no son tan ilegales como el decía, pero aún así con su posición de héroe del escudo sería mal visto usar uno, algo que sasuke tomaba como una idiotez ya que las armas son para ser usadas.

Sasuke era una persona que poco le importaban los demás, no es algo que ocurrió después de la masacre, el siempre fue así, sólo buscando la atención de su hermano, pero últimamente se a relajado más y aunque no sea su obligación cuándo las niñas nesecitan algo se los consige,  el dia anterior les corto el cabello tras haber leído un libro acerca de ello, no era muy difícil para un uchiha el aprender cosas nuevas, y si asi podía ahorrarse ese dinero, lo haría.

Ellas quedaron complacidas algo que relajo al uchiha ya que sería un fastidio si se quejaban hasta que les volvería a crecer.

Actualmente sasuke noto algo, no era como si le importará pero en cierta parte le recordó a cierto rubio que vivió una vida difícil, esto lo molesto ya que seguía recordando cosas innecesarias para su objetivo pero dejando eso de lado ya no quería ver a las niñas con esa ropa de costal de papas.

Sasuke miro en busca de la tienda de la mujer que con anterioridad había ido a comprar en su local, y al percatarse de este, fue directamente sin siquiera preguntarle a las niñas que lo siguieron sin preguntar.

Ya en la tienda.

-Sasuke sama ha sido un tiempo desde que vino, ¿en que le puedo ayudar?, pregunto la joven empleada.

-Nesecito ropa para ellas, que no sea muy vistosa y qué sirva para actividades físicas, dijo sasuke mientras procedía a ir sentarse a esperar a que la joven hiciera su trabajo.

Esta Llevo a las niñas junto a un vestidor y procedió a buscar entre todas sus cosas, ropa que cumpliera con lo dicho por sasuke, tenía que ser algo útil pero a la vez que se viera bien en ella.

La verdad es que era una tarea difícil cumplir con esas dos condiciones ya que su tienda se especializa en ropa de moda pero ya que era un pedido del héroe del escudo lo cumpliría.

Tardo casi unos 15 minutos en lo que la empleada sacaba varios conjuntos de ropa en busca de algo adecuado, mientras hacia que las niñas se lo probarán hasta que al final encontró 2 prendas que a su parecer cumplían con los puntos dados por el héroe del escudo.

-Tengan esta ropa y pruebensela, dijo la empleada a las niñas que tomaron el nuevo conjunto de ropa.

No pasaron más de 5 minutos desde que raphtalia y rifana entraron al vestidor, cuando las cortinas fueron abiertas y se dejaron ver.

-Sasuke sama, creo que encontré la ropa adecuada, dijo la empleada acercándose al peli negro que abrió los ojos al escuchar que su pedido fue realizado con éxito.

Vio en dirección de ambas niñas para ver que llevaban una prenda similar solamente cambiando los colores, esta era un vestido algo corto para su gusto, la tela era algo rígida pero bastante flexible para el movimiento asegurando resistencia, con una camisa interna de tela más suave para evitar incomodidades, la prenda de raphtalia era café con rojo que hacia resaltar su cabello castaño naranjizo y por su parte rifana usaba un color crema con lila resaltando su cabello blanco, realmente las niñas se veían adorables en el y podía considerarse ropa adecuada para el uso que tendría.

Sasuke dio un asentimiento en visto bueno y procedió a sacar una bolsa con dinero.

-supongo que con esto bastará, dijo sasuke sacando algunas monedas.

-por supuesto. Dijo la empleada.

-sasuke sama, que tal nos vemos, dijo rifana.

-rifana chan, no seas grosera, reprendió raphtalia.

-acaso no quieres saber también.

-no, sasuke sama ya fue lo suficientemente amable por comprarnos esta ropa, no seas engreída.

-vamos, no seas así, entonces sasuke sama que tal me veo.

-no me importa, si ya estan satisfechas vamos a entrenar.

Ya con la ropa nueva, el grupo salió en dirección del bosque donde sasuke entrenaba a la niñas, de manera física.

Fin del flash back.

Ya las niñas estaban usando la ropa comprada por el uchiha y se disponían a ir a la recepción cuando rifana se detuvo en el espejo de la habitación.

-¿Ocurre algo rifana chan?, pregunto raphtalia al ver a su amiga detenerse.

Pero la niña peli blanca ignoro el llamado de su amiga concentrándose en peinar su cabello suavemente.

Raphtalia noto que su amiga no la habia escuchado así que la sacudió ligeramente del hombro.

La niña noto eso y miro a su amiga.

-¿Que pasa?, pregunto rifana.

-Eso te pregunto yo, ¿por que te detienes?,  dijo raphtalia.

-Ya sabes, me peinaba para estar presentable para sasuke sama, dijo rifana mientras peinaba el último mechón de cabello que estaba fuera de su lugar.

-¿Por que?, sasuke sama no se va a molestar si tienes el cabello despeinado, dijo raphtalia.

-No lo entenderías raphtalia chan, aún eres una niña, dijo rifana mientras sacudia su cabeza en negación.

Raphtalia hizo un puchero por las palabras de su amiga más cercana.

-¡¡Tenemos la misma edad!!, dijo raphtalia.

-Si, eso es verdad, pero tu mente aún es la de una niña, dijo rifana antes de dejar el peine que fue comprando por sasuke el día que les corto el cabello.

Raphtalia hizo nuevamente un puchero pero comenzó a seguir a su amiga.

Ya en la recepción.

Sasuke se encontraba contando el dinero que aún tenía, haciendo cuentas de lo que podía gastar para equipar a las niñas.

Sasuke desde que llegó a este mundo se seguía preguntando el por qué hacia cosas que el normalmente nunca haria, desde acabar con un problema que a el no le importa, hasta perdonar a esa mujer que intento traicionarlo y ahora recientemente el hecho de estar cuidando a una niñas que compró, la verdad es que todo estaba siendo una mierda, pero el hecho de que no le molestará cuidarlas lo molestaba más ya que interferia en su objetivo original de matar a itachi y restaurar su clan.

Pero antes de que pudiera seguir perdido en sus pensamientos vio bajar a ambas niñas que venían discutiendo cosas que no eran de su importancia.

-Si ya están listas pongámonos en marcha, dijo sasuke guardando su dinero y comenzando a salir de la posada,  siendo seguido por las niñas que se posicionaron a sus costados.

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En la tienda de armas.

-Así que quieres armas a estas niñas, dijo el hombre con una ceja levantada.

-Si, nesecito que sean de utilidad ya que al parecer no puedo sujetar ninguna otra arma que no sea este escudo y aún que odie admitirlo si no pudo atravesar alguna cosa con mis puños no podre avanzar con mi objetivo, dijo sasuke con un suspiro en lo último.

-Ya veo, entonces que quieres que les de, pregunto el hombre.

-Una espada corta estaría bien, aunque creo que una daga larga tampoco estaría mal, dijo sasuke.

-Esta bien si eso es lo quieres, puedo darles lo que necesitas para las señoritas.

El hombre procedió a buscar entre lo que podía darles para comenzar y saco 2 espadas cortas, estas eran adecuadas con respecto al tamaño de las niñas así que las guardo en una funda y se las entregó a las niñas.

-Tengan señoritas, esto no es un juguete así que sería prudente usarlas sólo contra enemigos, dijo el hombre mientras que las niñas tomaban entre sus manos ambas espadas cortas.

-Supongo que por el momento es suficiente, dijo sasuke.

-Espera, no les compraras alguna armadura o algo más, dijo el hombre con exaltación.

-No lo necesitarán, ya que estaré ahí para protegerlas de cualquier peligro, dijo el uchiha abandonando el lugar junto a las pequeñas.

-(Ese mocoso, puede que sea algo malo pero en El fondo se preocupa por esas niñas).

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En la pradera a las afueras de la ciudad

Sasuke se encontraba junto a las niñas que lo miraban con expectativa ya que El peli negro sujetaba un globo naranja entre sus manos y no sabían con que función lo hacía.

-Haber presten atención, ustedes de ahora en adelante serán mis espadas, si les digo que acaben con un monstruo lo harán, si les pido que protejan lo harán, no hay tiempo para respuestas tontas ni para dudar, así que como mis espadas acaben con esta cosa, dijo sasuke mientras sujetaba el globo frente a las niñas que retrocedieron al tener a tal monstruo frente a ellas. -Entonces que harán,  nesecito que sean mis espadas, así que acaben con el globo.

Rifana y raphtalia se miraron a los ojos indecisas de que hacer, no querían desobedecer a sasuke, pero el hecho de matar aunque fuera un monstruo les aterraba.

-¿Están dudando?, dijo sasuke con una voz gélida.

Las niñas lo miraron y la primera en actuar fue rifana que desenfundo la espada pero comenzó a dudar nuevamente, raphtalia vio esto y de igual forma saco la espada pero como su amiga no supo como actuar a continuación.

Sasuke noto eso y sabía que tenía que presionar más para que las niñas actuarán, aunque era verdad que tenía sus jutsus para resolver sus problemas también era cierto que por su desorden de chakra era un problema durante el combate y no podría luchar mucho tiempo con enemigos que no pudiera atravesar con sus puños.

-Entonces que ocurre, siguen dudando, ¿saben que?, olvidenlo,  las regresare con el esclavista y veré que puedo obtener que si sirva, dijo sasuke.

Las niñas dejaron atrás su estado anterior para entrar en pánico a la declaración del peli negro.

Ellas no querían alejarse de el, de hecho querían permanecer el mayor tiempo posible junto a el, mientras temblaban sujetaron con mayor fuerza el mango de la espada y al mismo tiempo embistieron hacia enfrente atravesando al globo que explotó al instante.

Frente a las niñas apareció 1 punto de experiencia, algo que simbolizaba  que eran parte del grupo del uchiha.

-Así que esa es su respuesta, dijo sasuke.

Las niñas lo miraron con determinación.

-Si, sasuke sama, seremos tus espadas y te juramos servir, dijeron ambas.

Sasuke tuvo una ligera sonrisa que desapareció al instante, -ya veo, entonces ahora acabemos con la mayor cantidad de globos que podamos.

-si, dijeron ambas muy motivadas.

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Algunos días después.

-A tu izquierda, se escuchó la voz del uchiha.

-Es mío, gritó rifana mientras apuñalaba un globo haciéndolo explotar, sin darse cuenta que a su espalda se aproximaba otro.

Pero antes de que pudiera herir a la peli blanca fue apuñalado por raphtalia.

-Jejeje, ya tengo otro, dijo la castaña.

Rifana hizo un lindo puchero ya que raphtalia había matado a más globos que ella.

-Raphtalia chan, no creas que me dejaré vencer por ti, el amor de sasuke sama será para mi, dijo rifana buscando más globos.

Raphtalia se sonrojo ya que su intención no era esa, ella sólo quería ser útil para no ser abandonada por sasuke.

Sasuke suspiro ya que era molesto que rifana insistiera en que ella sería su esposa.

Las niñas seguían persiguiendo globos mientras que el uchiha veía el crecimiento de ambas, el hecho de que el supiera como blandir un arma sirvió para instruirlas, además que sus niveles seguían aumentando bastante bien siendo Las niñas de un nivel bastante bueno a comparación de las personas normales, pero eso se debía al pertenecer al grupo de un héroe y sobre todo al gran entrenamiento y farmeo de globos naranjas.

-Esta bien, terminamos por hoy la caza de globos, dijo sasuke.

Las niñas dejaron huir a los globos restantes y comenzaron a ir hacia sasuke que se encontraba viendo sus estadísticas algo fastidiado que a este ritmo de sólo matar globos sus niveles no incrementarán más rápido, para las niñas era útil, pero para el era otra historia, el subió muchos niveles mientras estaba sólo y ahora los monstruos cercanos a la ciudad no eran suficiente.

-(Supongo que debemos empezar a movernos ya que sólo quedaron en esta zona no será ayuda), pensó el peli negro cerrando la ventana de Estados.

-Como estuve hoy sasuke sama, dijo rifana pegándose a la pierna del uchiha.

-Estuvo bien, respondido el peli negro sin interés.

-Entonces ya estoy lista para ser tu esposa.

-Rifana chan, ya te e dicho que no moléstes a sasuke sama con tus bromas, hablo raphtalia que comenzó a despegar a la peliblanca del uchiha aunque esta se negaba.

-No, raphtalia chan, no me hagas esto, dijo rifana pegándose más al uchiha.

Sasuke había obtenido mucho autocontrol durante el tiempo que había estado en este nuevo mundo y de hecho estaba seguro que si llegaba a matar a itachi, podría regresar a konoha sin problemas aunque sólo pensaba eso para elogiar su nivel alcanzado, aunque eso era imposible en estos momentos.

El uchiha sólo se separó de rifana sin muchos problemas y comenzó a caminar rumbo a la ciudad.

-Vamos a comer y les diré el plan de mañana, dijo sasuke.

Las niñas como siempre caminaron junto a el.

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Ya en la posada.

-Haber niñas, el plan de mañana será ir rumbo al pueblo más cercano y de ahí comenzar a entrenar sus niveles, ya que tendremos que estar listos para las olas además de que nesecitaremos más dinero, aunque es suficiente lo que tenemos por ahora,  pero me gustaría estar preparado por si algo pasará, así que venderemos medicina y otras cosas, ¿entendido?, dijo el uchiha a las niñas que estaban mas ocupadas comiendo su menú infantil.

Al ver que no lo escucharon dejo salir un suspiro pero lo dejo pasar para dar inicio a su comida.

-(Mañana será un día problemático, además no se que sorpresas tendrá este mundo, y el hecho de que este escudo sigue siendo un completo misterio me esta emocionando maldición ya estoy comenzando a hablar como el dobe), pensó el uchiha antes de darse un golpe mental por dejarse llevar por sus emociones.

Fin del capítulo.

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