III. El mentiroso
En el capitulo anterior...
- Capitán - dice Shachi abriendo la puerta - Voy a poner el nuevo rumbo, enseguida saldremos - añade
- Perfecto - digo sin levantar la vista de los textos del libro
Shachi se va, y oigo al poco tiempo los motores encenderse. Y un ligero movimiento indicando que el barco ya no esta anclado en el puerto y seguidamente noto como el Polar Tang se hunde en las profundidades del océano.
Cuando vuelvo en mi, me he dormido con el libro encima de mi cara. Como tantas veces antes la verdad. Me muevo incomodo en la silla donde estoy y noto mi espalda dolorida.
Decido que así no hare nada y salgo. Me voy al comedor, donde parece que están el resto. Y efectivamente están jugando a un juego de cartas todos juntos.
- Penguin - le llamo - ¿Me puedes poner un café cuando puedas?
- Oído capitán - dice rápidamente
Me siento en el sofá detrás de donde ellos juegan a cartas. Observo la nueva partida que hacen sin Penguin. Parece un juego practico y dinámico, por lo que veo consiste en quitarse todas las cartas y mentir sin que el resto te pille.
- ¿Cómo se llama el juego? - pregunto
- El mentiroso - dice Bepo - Aquí hay tres 4 - dice
Estando detrás de Bepo veo perfectamente las cartas que saca, y como dice, esas tres son 4. Pero cuando la ronda vuelve a el, es imposible que el siga teniendo mas 4. El pobre coge un 5 y lo intenta colar por 4. Pero Bepo no sabe mentir, y el resto se aprovechan de ello, y termina cogiendo el buen puñado de cartas que había en el centro.
- Es muy divertido capitán - dice Penguin trayéndome mi café - ¿Quieres probarlo?
Cojo mi café y le doy un sorbo bajo la atenta mirada del resto. Niego con la cabeza lentamente después de eso. Prefiero verlos jugar a ellos, y volver a estudiar cuando me canse.
Después de un rato viéndoles jugar decido ir a buscar mi libro y volver al comedor. Los 4 siguen jugando al mismo juego.
- Voy a hacer la cena - dice Penguin de repente - Law, juega por mi, al menos termíname la partida - dice dándome sus cartas
A pesar de no querer, cedo.
- Aquí hay un dos - digo mientras tiro una carta que tiene el numero 5 al centro de la mesa
- Aquí hay otro 2 - dice Shachi tirando otra carta al centro
- Aquí hay otro - dice Bepo
- Y aquí esta el dos que falta - dice Ermine
- Yo digo que mientes - digo cogiendo la carta que Ermine ha tirado, y efectivamente no era un 2 si no un 9 - Pues ala, coge las cartas. Vuelvo. Aquí hay tres 9.
- Aquí hay tres 9 - dice Sachi sabiendo que puede salirle muy mal
Si tu destapas la carta y piensas que ha mentido y tienes razón, el que miente se lleva todas las cartas que hay en el puñao. Pero si te equivocas tu y destapas y el jugador anterior no ha mentido, tu coges todas las cartas. Es un juego bastante sencillo.
Bepo vuelve a poner mas cartas encima. Y así partida tras partida. Terminamos jugando los 5 mientras cenamos algo fácil y sencillo que no requieren las dos manos ni cubiertos para coger.
Cuando finalmente se cansan decido tomarme otro café y volver al estudio a analizar el nuevo libro que le leído previamente. Decido centrarme en sacar apuntes de todo lo que tengo, pero al poco rato un ruido proveniente de la puerta me desconcentra.
- ¿Siempre pareces tan aburrido? - dice Ermine apoyada en el marco de la puerta - ¿Te ha gustado el juego al menos?
- Es entretenido - digo volviendo a escribir - ¿Quién te lo enseño?
- En mi raza es un juego popular. Todos conocemos el juego del mentiroso, y todos sabemos jugar. - dice - Es algo muy importante para nosotros
- Es verdad, aun no me has dicho nada de ti - digo dejando de escribir
Apoyo mi espalda el respaldo de la silla y la miro.
- ¿Qué quieres saber? - dice ella un tanto vacilona
- Tus apellidos, tu objetivo, tu raza, por que te busca el gobierno. Todo, en resumen - digo simplificando
- Bueno va, me llamo Ermine Aiello. Mi objetivo es descubrir que hay en el siglo vacío. Soy humana, y no se por que me busca el gobierno - dice ella rápidamente
- ¿Aiello? - digo - ¿En que idioma esta eso?
- Es uno que había en mi isla, no le des importancia - dice quitándole peso
- ¿Y el siglo vacío? ¿Cómo harás eso? - pregunto
- No se, ya me las apañare, ¿Tanto te importa Law? - dice burlona
- No, me da igual - respondo, ella solo sonríe de oreja a oreja y un escalofrió recorre todo mi cuerpo bajo su mirada
- Me voy - dice mientras se da la vuelta y desaparece del marco de la puerta hacia otro lado del Polar Tang
¿Así que con que el siglo vacío? Interesante, me gusta. Pero mi mayor prioridad es derrotar a Doffy, luego ya me preocupare de como narices leer los poneglyphs.
Cierro la puerta cuando les oigo alzar la voz por seguir jugando al juego ese que Ermine les ha enseñado. Me centro en pensar una estrategia contra Doffy, donde salgamos mejor, valorando todas y cada una de las opciones.
Pero solo consigo calentarme la cabeza. Por ahora lo dejare correr, voy a ver si me puedo tomar otro café.
El barco esta sumido en el inmenso silencio del océano. Oigo ruidos en la sala de comando, probablemente es Shachi revisando el rumbo, o incluso durmiendo. En el comedor, Ermine esta tumbada en el sofá, con un libro encima del rostro. Me voy a la concina intentando no hacer mucho ruido, por si duerme y me preparo mi café.
- ¿Qué hora es? - dice Ermine al escuchar el ruido de la maquina del café
- Puesss... las tres de la madrugada - respondo sin mirarla - Sigue durmiendo, te ira bien
- ¿Y a ti no? - dice, por el rabillo del ojo veo como se quita el libro de la cara
- Estoy acostumbrado - digo
- Eso suena triste - dice ella sentándose en el sofá para estirar los músculos
- Puede - respondo sin muchos miramientos - Pero es mi deber como capitán
- Ellos te valoran mucho, si un día decides descansar no les molestara en absoluto - dice ella - Es mas, seguro que les hace ilusión que disfrutes de tu día como un joven de.. ¿Cuántos años tienes?
- 24 - respondo mientras compruebo que mi café esta bien echo
- Pues eso, si disfrutas tu día como un joven de 24 años, ellos también lo disfrutaran - dice ella mientras me siento al otro lado del sofá
- Lo se, pero para disfrutar de eso primero tengo que cumplir mi venganza - digo después de darle un sorbo a mi café - Después ya lo disfrutare
- Eres raro Law - dice así como para dar terminada la conversación
Ermine coge su libro y desaparece del comedor. Me quedo solo con mi café y mis pensamientos, tengo que encontrar la forma de vencer a Doffy.
- Tu también Ermine-ya, eres rara. - susurro para mi mismo terminado la conversación del comedor
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