El inicio de algo nuevo
Hii <3
Espero le guste el cap :)
Nos leemos al final
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-Ahora que ya lo sabes, lárgate- dijo un fastidiado pelinegro
-Ehh espera... por todo lo que me has contado he llegado a la conclusión de que ya te cansaste de las mujeres ¿no es así?- dijo Yamamoto sonriendo divertido
-Me cansé de que sean tan molestas, me cansé de que no entienden que lo único que tenemos no es más que simple sexo, odio que se pongan a lloriquear o que me llamen insistentemente aunque les deje bien claro que no quiero absolutamente nada con ellas. No entiendo porque piensan que somos novios o algo parecido si nunca les he dado a entender eso.
-Por eso, estás ya hastiado de ellas- Yamamoto miró su reloj- son las 7:30 pm- tengo la solución para eso Hibari, ven conmigo, hoy te llevaré a un lugar que al igual que a mí te aseguro te encantara
-No tengo ni la más puta gana de ir a beber, Yamamoto
-No es eso, ya verás- el moreno se levantó del sofá- vamos de una vez
-Si no me agrada me largaré inmediatamente- tomó sus llaves de uno de los cajones del escritorio para luego levantarse de su siento y salir junto al moreno de su oficina, sin saber que muy pronto conocería a la persona que cambiaría su vida.
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-Llegamos- dijo un rubio sacando un juego de llaves de su bolsillo para luego abrir la puerta
-E-Este lugar- Lambo miraba a su alrededor desorientado
-No te preocupes, ya adentro te explicaremos todo- dijo Fuuta sonriendo amablemente
-Pasen- dijo Colonello
Tras entrar al edificio, el menor se quedó bobo al ver la elegancia que había allí dentro, nunca había estado en un lugar así.
Luego de subir las escaleras, llegaron al quinto piso del lugar, Colonello y Fuuta llevaron al chico a la última habitación del pasillo de ese piso ya que era una de las que no se usaban para dar "servicios nocturnos".
-Entra, chico- Colonello abrió la puerta de la habitación
-Ehh...gracias- respondió el menor
Tras ingresar, el rubio le indicó al adolescente que se sentara en una de los pequeños sofás de la habitación, luego él y Fuuta hicieron lo mismo frente a Lambo, comenzando a hablar el rubio.
-Bueno iré al grano, Lambo- Colonello lo miró fijamente- entramos por la puerta trasera del edificio y usamos las escaleras de emergencia porque este lugar es un burdel y yo soy el dueño
-¿Ehh? – el adolescente se exaltó- ¿u-un burdel? es que acaso ustedes...- la mirada llena de temor del chico era notoria
-Cálmate por favor – dijo Fuuta- no es lo que estás pensando, nosotros...
-Nosotros no tenemos malas intenciones- habló Colonello interrumpiendo al castaño- tan solo te ayudamos porque simplemente no podemos dejar a nadie en la situación como en la que te hallamos
-Lo que dice Colonello-san es verdad, Lambo- Fuuta sonrió- tan solo queremos que pases la noche aquí y ya mañana decides que hacer ¿estás de acuerdo?
-Yo...- agachó la mirada- disculpen por pensar mal de ustedes y muchas gracias por darme un techo para pasar la noche
-No te preocupes, ahora acomoda tus cosas en el closet y date un baño de agua caliente, lo necesitas
-Sí, C-Colonello-san- respondió el chico
El rubio sonrió amablemente y se paró del sofá.
-Es hora de que me vaya, ya son más de las ocho y tengo que estar en el recibidor junto a los demás chicos
El castaño se levantó junto con Colonello y se dispuso a seguirlo hasta la puerta, cuando fue detenido por una voz.
-Tú quédate, Fuuta, acompaña a Lambo y ayúdalo en lo que necesite, puedes dormir en la habitación de al lado
-Pero Colonello-san, mi cliente, él...
-Shhh-el rubio colocó su dedo índice sobre los labios del castaño- Yo me encargo de todo, hoy no trabajarás
El rubio se acercó al rostro del de ojos verdes haciendo que este se sonrojase fuertemente.
-Buenas noches- susurró para luego separarse y con una sonrisa salir de la habitación dejando al adolescente y a un sonrojado castaño en esta
-Fuuta-san- habló Lambo
-¿Ehh?- el castaño estaba como en otro mundo- t-te ayudaré con tus cosas, mientras tanto, puedes ir a darte una ducha
-G-Gracias- el chico sonrió dulcemente para luego dirigirse al baño
Colonello-san
El castaño delineó sus labios con dos de sus dedos
Si usted supiera que yo....
Bajó su mano, sonrió tristemente y negó con la cabeza.
Nunca se fijaría en mí, en alguien como yo
Fuuta prosiguió a abrir la maleta de Lambo y comenzar a ordenar su ropa en el closet de la habitación, esperando así poder dejar de pensar en cierto rubio alto de ojos azules del cual estaba perdidamente enamorado.
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-Al fin llegamos, Hibari- dijo el pelinegro de gran sonrisa
-Te dejé manejar porque no sabía a donde querías traerme- Kyoya observó el gran panel de luces parpadeantes en donde se leía "El túnel de la ambrosia" y abrió grande los ojos
-Yamamoto, acaso este lugar es...
-Exacto, es uno de los burdeles más famoso de la ciudad
-He escuchado sobre este lugar y por lo mismo sé que en este burdel solo se ofrecen hombres ¿te autoproclamas mi amigo de la infancia y no me dijiste que eras gay?- Hibari sonrió de medio lado
-No lo hice porque no lo creí muy importante, si mi padre no le dijo al suyo "soy heterosexual" no entiendo porque debo aclarar que soy homosexual, para mí es prácticamente lo mismo ¿no crees?
-Te daré la razón en esta ocasión
-Bien- sonrió
-Aun así, Yamamoto, te dije que estaba harto de las mujeres, pero eso no significaba que me gustasen los hombres
-¿Nunca te ha atraído ninguno?
-Puedo reconocer cuando alguno es atractivo, pero nunca me han entrado ganas de tirarme alguno, con eso puedes deducir fácilmente que no soy gay ¿o no?
-Sí, pero Hibari, tú mismo me dijiste que querías probar algo nuevo y te aseguro que los chicos de este lugar son los mejores, al menos entra y echa un vistazo, te aseguro que te sorprenderás al ver la belleza de ellos y también lo harás cuando veas a las personas que son clientes usuales de este burdel
-Créeme, ya estoy sorprendido- respondió mirándolo fijamente- está bien, Takeshi, entraré pero te aseguro que no estaré más de 5 minutos allá adentro
-Bien -el moreno sonrió- pero antes una última cosa
-¿Ahora qué quieres?
-Puedes mirar a quien tú quieras, excepto a un hermoso peliplata, su nombre es Gokudera Hayato- Yamamoto cambió su tono de voz a una más gruesa y su expresión se tornó seria- él es solo mío
-Uhm...- Kyoya sonrió burlesco- como quieras
-Bien, entonces no perdamos más tiempo- el moreno volvió a su actitud cotidiana y bajó junto a Hibari del auto para dirigirse a la entrada del edificio
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Gracias a las personas que leen y votan esta historia :)
Me hacen muy feliz <3
Espero actualizar pronto el siguiente cap.
Besos!!!!
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