Ostra 1: La extraña isla.
Nos alejamos de la gran fosa.
Dejamos a Namjoon en una isla muy lejos de la Indias donde supuestamente lo dejaríamos, pero como el moreno rebalsó la paciencia de Jungkook; éste lo terminó abandonando en la primer isla que cruzamos.
-¿Estas seguro de dejarlo Jungkook?.- Pregunté.
-Nunca estuve tan seguro en mi vida.- Lo dijo tan seguro y tan feliz de abandonar al otro, que no sabía que pensar; me daba gracia la situación.
Nos alejamos del lugar. El cuerpo de Namjoon se hacía cada vez más lejano hasta que desapareció en el horizonte.
-¿Y si muere?.-
-No lo hará.-
-¿Cómo estás tan seguro?.-
-Yerba mala nunca muere, lindo.- Con eso último Tae se sonrojó.-Tiene los objetos mágicos en su poder, si recuerda para que sirven logrará salir de ahí.-
Los días pasaron y Tae no había tocado el agua por ende su cuerpo se afiebró y su cola comenzó a deshacerse provocando un gran dolor al joven. Jungkook nunca se acostumbraría a ello, odia ver sufrir a Tae.
Luego de 15 días en el mar una tormenta los desvió de su camino hacia Egipto, el barco terminó desviándose muy hacia el sur.
Una mañana Jungkook despierta con los gritos de Tae.
-Jungkook!!! JUNGKOOK!!!.-
-Queeee....- Dijo adormilado saliendo de su camarote.
-MIRAAAAA.- Dijo emocionado señalando hacia afuera del barco.
Jungkook se asoma y se asombró con la hermosa plaza y la frondosa vegetación del lugar.
-WOOOO.-
-Quiero ir allí!!!.- Tae estaba por saltar del barco hacia el agua, que lo convertiría en tritón otra vez.
Jungkook alcanzó a tomarlo del brazo antes que saltara. -Espera Tae, no conocemos el lugar puede ser peligroso.-
-Pero yo quiero tocar esa arenaaaa, mira tiene un color hermosamente claroooo.- Dijo haciendo un puchero y haciendo ojitos de perrito.
Jungkook frunció el ceño.-¿Dónde aprendiste a hacer eso?.-
-Mi amigo Jimin me enseñó cuando estaba en Qina, dijo que con Hoseok tenía efecto y lograba lo que quería.-
-Mierda!!! Estoy jodido....- Murmuró Jungkook.
-¿Qué?.-
-Que podemos ir dijeeeeee.-
-SIIIIIII.- Tae saltó de felicidad.
-Pero sacaremos el bote de allí. Si mojas tus piernas no podrás correr en la arena.- Dijo Jungkook.
Tae frunció el ceño. –No había visto ese bote.-
Luego de unos minutos el barco fue anclado. Bajaron el pequeño bote y Jungkook remó hacia la orilla, apenas tocaron arena Tae saltó de éste y comenzó a correr.
-Tae!!!! Esperaaaa. NO TE ALEJES!!!!.-
-ALCANZAMEEEEE.- Gritó Tae ya bastante lejos de donde estaba Jungkook.
-Mierda!!! VEN AQUÍ!!!!.- Dijo saltando del botecito y tratando de atrapar al otro.
Tae sonreía complacido, la arena era muy suave en sus pies y su cuerpo le respondía muy bien a la jugarreta de correr en ese lugar. Jungkook se estaba cansando pero antes de abandonar la carrera iba a atrapar a Tae si o si, así que de un momento a otro incrementó la fuerza en sus piernas y se abalanzó hacia Tae; ambos rodaron mientras se reían por la arena.
-AJAJAJA.- Se reía Tae.
-Te atrapé pequeño.- Dijo Jungkook. Su cuerpo había quedado sobre el de Tae, sus brazos a cada lado del rostro del contrario.
Ambos dejaron de sonreír y se miraron a los ojos, quedaron hipnotizados y perdidos en las esferas del contrario.
Sus rostros iban acercándose lentamente, el corazón de cada uno parecía salirse del cuerpo. Ninguno entendía el tipo de atracción que estaban sintiendo.
Los orbes de Tae se desviaron y enfocaron hacia atrás de Jungkook, y su respiración se paró.
-Ju-Jung....JungKook.-Dijo Susurrando.
-mmh.- Solo dijo el pirata, estaba perdido en esos labios que quería probar.
-Jungkook!!.- Llamó la atención susurrando un poco más exaltado. El tono que uso Tae atrajo su atención. Los ojos de Tae le indicaban que había algo detrás de él. –Solo date vuelta lento.....muy lento.- Cosa que Jungkook no hizo ya que saltó del cuerpo de Tae, tomó su mano y comenzó a correr adentrándose en la gran selva llevándoselo de tiro.
-QUE MIERDA ES ESOOOOO!!!!.- Gritaba Jungkook.-VA A COMERNOS!!! ES ENORMEEEE!!!.-
-NO LO SEEEEEE, NUNCA HABIA VISTO ALGO ASIIIII.-Le contestaba Tae mientras corrían con la criatura casi pegada a sus talones.
La criatura tenia aproximadamente unos tres metros de alto, era totalmente negra. Su cuerpo era una mezcla rara de algo que no lograban reconocer. Parecía ¿una víbora? Tal vez ¿un tiburón? ¿Un pescado? No lo sabían.
Jungkook y Tae llegaron a un precipicio. El pirata frenó pero el cuerpo de Tae venía con fuerte envión, golpeó con el cuerpo del contrario haciendo que ambo cayeran a la fosa.
-Aaaaaaaaa!!! Lo sientoooo!!!.- Y solo un PLAF!! Bien grande se escuchó de ambos cuerpos caer al agua.
La criatura los siguió.
Tae pensaba usar sus poderes ya que al caer al agua se transformó automáticamente en tritón, pero la bestia atacó a Jungkook que estaba bastante retirado de Tae. La cola del monstruo lo azotó contra las paredes de la fosa.
Jungkook perdió el conocimiento y su cuerpo inconsciente comenzó a hundirse rápidamente.
Tae nadó hacia el pirata tomándolo en brazos mientras la bestia se acercaba más a ellos, ésta abrió la boca dejando ver varias hileras de dientes que poseía en su extensa boca. El tritón estiró una de sus manos y creó una gran lanza de hielo atravesando a la bestia, quien desaparecía en la oscura fosa, no podía saber si solo la había herido o la había matado.
El tirón nadó lo más rápido que podía hacia la superficie, dejó el cuerpo de Jungkook sobre las rocas y allí se dió cuenta que un gran rastro de sangre era dejado a su paso hasta llegar al cuerpo del pirata. La cabeza de Jungkook había azotado contra las paredes de la fosa produciéndole una gran herida.
-Jungkook....oh! dios mío! Hay mucha sangre.-
Tae apoyó sus manos en el pecho del pirata y absorbía el agua que éste había tragado a través de sus poderes, cuando sus pulmones comenzaron a recibir aire Jungkook aspiró ondo pero no despertaba.
No podían alejarse de la fosa, las piernas de Tae no aparecerían hasta dentro de tres días si no tocaba el agua. ¿Cómo haría para llevar a Jungkook a un lugar seguro o de regreso al barco?
Las horas pasaban y Jungkook no despertaba. El tritón había vendado la cabeza con una de las mangas de la camisa del pirata, se recostó en el pecho de Jungkook escuchando como su corazón latía tranquilamente y se durmió con el sonido dejando escapar una lágrima.
-Nada de eso hubiese pasado si yo no hubiese pedido bajar a la isla. Lo siento Jungkook.-
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top