Locuras y más locuras

— oi, loca de anteojos.

Bakugou bufo con molestia, aquella chica extranjera era bastante extraña para sus ojos. Valentina se encontraba toda desparramada en el sofá del Salón principal, estaba durmiendo hace más de dos horas.

— ¡despierta de una puta vez!.— la jaló del brazo y la tiró al suelo, la chica abrió sus ojos y miraba a todos lados con una hilera de saliva en la comisura de su boca.— duermes más que un Oso, eres muy extraña mujer.

Katsuki la miraba de brazos cruzados, Valentina se levanta del suelo y se limpia la boca con el dorso de su brazo.

— Pues que esperabas, tenemos muchas horas de diferencia entre tu país y el mío. Además que es lo que quieres, acaso no respetas el sueño ajeno?.— el explosivo chico la mira con un deje de decepción, la joven extranjera se estira y suelta un sonoro bostezo.

— tus amigas no están, las extras se ofrecieron a llevarlas para conocer el Instituto pero tú estabas aquí babeando el sofá.

Valentina lo mira curiosa por referirse así de sus compañeras de piso, bakugou se percata de la mirada de la Latina y frunce el seño.

— por sierto, no me dijiste tu nombre rubia. El mío es Valentina y tu cómo te Llamas?.— katsuki solo se limita a responderle.— bakugou katsuki y tengo 16.

— para tener 16 años eres muy apuesto katsuki, apuesto a que debes tener novia.— mencionó con Picardía típica de un chileno, el rubio extrañado por que había usado su nombre de pila se sienta en el sofá.

— no tengo tiempo para esas mierdas de amor y tener novia, mi meta es ser el número uno eso es todo, además no te di permiso para que me llames por mi nombre.

Sin evitarlo, Valentina suelta una carcajada extraña y señala a bakugou tratando de hablar sin conseguirlo.

— DE QUE MIERDA TE RÍES!?.— la chica de gafas se limpia una lágrima imaginaria.— no tengo por que pedir tu permiso para decir tu nombre, quizás eso te funciona con los que viven aquí pero de donde vengo esas weas raras no corren perrito.

Katsuki hace pequeñas explosiones con intensión de intimidarla, cosa que no funciona. El rubio estaba cabreado ya que jamás se habían burlado de el a tal magnitud, sin duda esa mujer era extraña.

— weón, relaja las tetas y hablame de tí.— el chico se avergüenza.— no se que mierda significa eso, pero algo me dice que es ofensivo.— la chica se toca los senos con ambas manos.

— tetas, significa senos oh también pechos, también puedes decir pechonalidad en caso de que te avergüenze hablar sobre el tamaño de una mujer.— le explicó sin pudor y vergüenza alguna.— weón, si gustas puedo enseñarte todas las palabras extrañas de mi país.

Katsuki sin aguantar más, apenado y sonrojado por la poca vergüenza de la chica solo le grita.

— ¿¡¡QUE TE PASA, MALDITA LOCA PERVERTIDA!!?.— en medio de aquella extraña discusión, se abre la puerta del Salón principal y aparecen sus dos mejores amigas junto con las demás estudiantes.

— ¡YO ME LARGO!.— exclamó un furioso bakugou, las presentes miraban curiosas por la situación. Menos Dafne y Josefa que veían a su amiga riendo escandalosa mientras que se tocaba el estómago.

— JAJAJAJAJA, su amigo es muy gracioso... Pff.

La joven de lentes no paraba de reír por la divertida cara de katsuki, luego de un rato se calmó y respiró volviendo a la normalidad.

— oye floja de mierda, mientras vo estavai raja durmiendo nosotras fuimos a conocer el lugar.— la pelirroja piel Nivea se acerca a Valentina y le da un golpe en la cabeza.— las niñas nos mostraron el Instituto, cosa que ahora te toca así que anda a lavarte la cara y te vai de aquí.

Dafne empujaba a su amiga a los baños, la Morena de rizados cabellos las veía con diversión.

— sus amigas son extrañas senpai.— comentó Yaoyorozu, las demás chicas asintieron.— si, es verdad pero sin ellas no sería lo que soy ahora.— sonrió con nostalgia a las otras adolescentes.— son locas y muy tontas, pero así las quiero.

— ¡senpai! Por que no nos cuenta como son las cosas en su país?.

Sugirieron ashido y uraraka.— ¡sí! apuesto que los chicos de allá son agradables.— comenta alegre tsuyu.— no realmente.— susurra para si misma Josefa.

— entonces, traigan bebidas y mucha comida que esto va pa largo.—

Las aspirantes a héroes asintieron, llevaron comida y bebidas, también almohadas donde se sentaron algunas al rededor de la morena.

— bueno, las cosas en Chile... — meditó un poco antes de continúar.— son muy diferentes y cuando digo diferentes, es por que es muuuyyy diferente.— alargó el "muy" para dar más enfasis a la historia.

— de donde vengo, las cosas son más o menos así.

Comenzó a relatar las múltiples locuras y "aventuras" Como solian decir ella y sus otras dos amigas.