Killer despertó con una sonrisa.

No necesitó ningún tipo de alarma ni despertador.

Silencioso, salió de su habitación y cerró la puerta a su paso, intentando no despertar a su hijo que al día siguiente cumplía un año.

Al dejar atrás el cuarto, no evitó que la emoción tomara su alma y lo llenará de excitación, con la sonrisa de un niño y su único orbe brillando, bajó las escaleras rápidamente, corriendo, para llegar a la sala principal.

Obviamente no había nadie despierto, así que decidió hacerles el desayuno a los Star Sanses, hoy estaba de muy buen humor.

Dio vuelta a las tortitas en la sartén como un verdadero profesional, todas ellas depositadas en diferentes platos cuidadosamente para que queden alineadas, finalmente regando sirope sobre algunas, crema de chocolate sobre otras y miel en la de Honey.

Lo sirvió en la mesa, devoró las suyas, que tenían chocolate y se puso ropa decente para salir, quitándose su pijama de conejos.

Ya preparado, echó un pequeño vistazo al vestíbulo y abrió la puerta para empezar su impresionante viaje a alguna tienda para comprar los materiales necesarios para hacer a su hijo feliz.

Había estado ahorrando durante mucho tiempo y ahora tenía dinero de sobra como para no tener que preocuparse de que se gastara, esto se lo recordó a sí mismo entre los pasillos de una tienda de la superficie en la que había todo tipo de cosas que comprar, globos, confeti, juguetes para su pequeño...

Decidió que el regalo perfecto para Crescent era un conejito y decidió también quitarse un viejo collar cuyo peso su cuello había soportado muchos años y ponérselo al animal falso.

Una preciosa luna descansaba sobre el pecho peludo del muñeco.

Comprados todos los materiales que necesitaba se dirigió a una tienda de alimentación, para los ingredientes de un pastel.

Haría el pastel más grande y hermoso que nadie hubiera visto, solo para su hijo.

Ya en casa, todos habían despertado y al ver la grandes bolsas que colgaban de sus manos se acercaron a ayudar. Excepto Honey. Él no se mueve ni aunque quiera. Y Crescent, claro, pues estaba atrapado en su trona para poder comer a la altura de la mesa.

Killer agradeció e Ink y él dejaron las bolsas en la cocina mientras los demás presentes se volvían a sentar en la mesa de la sala principal y seguir desayunando las tortas que el ex-asesino había preparado. Al volver de la cocina le dieron las gracias por ello.

La tarde rápidamente se escurrió entre las falanges huesudas del de lágrimas oscuras, quien había estado haciendo los preparativos para fiesta, organizando a los invitados, las actividades que se llevará a cabo, preparando la comida...

Y finalmente, en la noche, con una sonrisa decidió recoger a su hijo en sus brazos y llevarlo a su cama para dormir allí los dos juntos, como padre e hijo.

...

...

...

Habían buscado durante un año y medio y no habían encontrado nada.

La última pista fue en Epictale, cuando una vez que entraron atacaron a todos los presentes, pero parecían haber perdido la memoria. Epic era el único que recordaba a Killer y aunque le doliera, los Star Sanses habían utilizado alguna especie de magia para borrar de las mentes de todos a el pequeño esqueleto de lágrimas negras.

El de ropas moradas solo se hizo el tonto, fingiendo no conocer a nadie llamado "Killer" y, para hacerlo tambien más creíble se burló un poco del nombre.

Los Bad Guys aprovecharon para atacar el AU, siendo detenidos por los Star Sanses. Agradecieron a Epic por no haber dicho nada y se fueron.

Eso había estado cerca.

Al volver, tras aquello, el ser de negatividad dejó salir un grito de frustración, estaba tan enfadado que cualquiera que se acercara a él sería mandado a volar.

NECESITABA a Killer a su lado.

NECESITABA sentir su presencia.

NECESITABA que le preguntara si estaba bien después de cada ataque.

NECESITABA que entrara en su oficina con una taza de café amargo y con una sonrisa.

NECESITABA     A     KILLER.

Ante esos pensamientos, el jefe del malvado grupo se golpeó mentalmente.

Solo era un estúpido subordinado, ¿por qué se preocupaba por él?

Pero, aquel día... Se sintió tan bien...

Sintió algo dentro de él despertarse.

Tal vez... Tal vez era amor.

¡NO!

¡NO PODÍA SER AMOR, ES UN MALDITO SER DE NEGATIVIDAD, NO PUEDE SENTIR AQUELLO!

Pero, aunque tratara de autoconvencerse de que no era amor lo que sentía, la realidad no era tan bonita como esperaba, pues no sólo se había enamorado, se había obsesionado.

Todos lo integrantes del grupo echaban de menos enormemente a su compañero, amigo y hermano.

Sin ninguna excepción.

Le habían contado a Fell y a Swapfell y ambos se habían sentido apenados.

Es decir, son unos insensibles e incluso ellos han sentido algo por la desaparición de Killer.

El único problema, es que tras buscar y buscar no habían encontrado nada.

Todos ellos, excepto uno.

El monocromático se encontraba en crisis en su habitación asignada, no sabía qué hacer. Él sabía donde estaba Killer y sabía el por qué de su desaparición además de su trato con los Star Sanses.

Pero estaba mintiendo a todo el grupo, quienes eran una familia y estaba mintiendo a Dust y a Horror, los más cercanos al asesino.

¿Realmente estaba bien ocultarlo?

Bajo la presión de saber algo muy importante, mas no deber decirlo, sentía que sus huesos crujían, se aplastaban y fracturaban, el frío sudor recorría su frente, provocando escalofríos y su corazón bombeaba con excesiva fuerza y rapidez.

Se aplastaba ante ese gran peso cada vez que veía a los dos asesinos trastornados del grupo, lastimándose por no haber encontrado a Killer, quería hablar, quería contarlo.

¿Por qué no podía?

Solo a ellos dos, solo a ellos.

No se lo diría a nadie más, pero al menos quería que ellos lo supieran.

Pero...

No, no debe, pero... No, no peros.

PERO...

En medio de sus pensamientos, mientras estaba sentado en su cama abrazándose a si mismo, brindándose apoyo, comenzó a hablar en voz alta.

—A quién engaño, ¿por qué soy tan inútil? No puedo ni mantenerme sólido en cuanto a esto. Soy un amigo horrible. Killer...

—¿Killer qué?— Dos orbes bicolor brillaban en la oscuridad de la habitación, siendo respaldado por una gran bola roja, color sangre.

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Holi >:)

Pensaron que había abandonado pERO no JAJAJA

AYUDA SE ME PEGÓ UNA CANCIÓN VOCALOID REVIENTA OÍDOS oie pero tampoco bonita la canción e ME SANGRAN LAS OREJAS AAAAAAAAAAAA

AHEM

Na más decirles que ni he empezado con el preguntas y respuestas y que tal vez nunca lo haga🤠👍

Ahorita me voy a la vrg

*se despide en ARO*

Ciao~

Lamadrequemeparióesla1am💀

1124 palabras.