Un nuevo día comenzaba a hacer acto en la Ciudad Milagro, y en una casa se veía que en una habitación empezaba a sonar la alarma de un despertador.

Y de entre las sábanas de la cama se veía que estaba saliendo un brazo que moviéndose con pereza para así poder apagar el aparato.

Quien se comenzaba a despertar era un muchacho de piel morena y cabello castaño, su cabello era rizado y tenia una especie de cicatriz que le pasaba por el ojo izquierdo.

Este muchacho se llamaba Manuel Pablo Gutiérrez O'Brian Equihua Rivera, también mejor conocido solamente como Manny Rivera.

En realidad, el se hacia conocer con un alias al ojo de vista de la gente de Ciudad Milagro, un individuo con temática de felino, el se hacia conocer como...

El Tigre.

Muchos dirían que con eso le seria tal vez un superhéroe o un supervillano, pero la cosa esta en que ni el sabía que era lo que el quería respecto a eso.

Porque en mas de una ocasión el mismo se ha sentido presionado a elegir entre dos camino: el camino del bien como su padre Rodolfo quien es el ya semi-retirado héroe White Pantera, o elegir el camino del mal como su abuelo Jorge o como el le dice, Gran Papi quien es el villano conocido como "Puma Loco".

Su padre siempre ha sabido como darle consejos sobre hacer el bien, mientras que su abuelo siempre lo ha instado a andar en malos pasos hasta ha llegado al punto de meterlos en problemas a los dos.

Debía de admitir que, en serio ambas elecciones tenían sus puntos tanto buenos como malos a su punto de vista.

Por un lado, ser villano sabía que no iba a hacer mas que traerle problemas a su vida, y eso era algo que ya lo tenia mas que harto.

Pero por otro, el ser héroe tampoco era un camino que realmente lo hacia sentirse, si bien no le gustaba ver como los criminales lastiman a otros sentía que, el camino que eligió su padre era demasiado restrictivo y que no era suficiente para detener a los malhechores.

Y a causa de eso, es que hace tan solo unos días el tomo una decisión y esa era... que el Tigre ya no se apareciera por la ciudad durante un tiempo.

Al menos, hasta que sienta que finalmente ya haya encontrado un camino que sintiera que el en serio podría seguir.

Pensar en eso hizo que el menor de la familia Rivera dejara salir un suspiro medio pesado que vino desde lo mas profundo de su ser, realmente llegaba a ser un fastidio para el tener que recordar todo eso que rondado a lo largo de su mente.

-Ah, solo quisiera que hubiera algo, una señal que me ayude a saber que camino es el que en serio debo tomar. -dijo Manny con lo ultimo a la vez que bajaba su mirada directo hacia el suelo.

-¡Manny, te llaman al teléfono! -se escucho el grito de Rodolfo desde el piso de abajo de la casa.

Al escuchar el grito de parte de su padre, el chico solamente atino a salir con rapidez de su habitación para luego ir hacia la planta de abajo y ver que pasaba.

-¿Que pasa papa? -pregunto Manny a la vez que terminaba de bajar las escaleras.

-Es el Capitán Suárez, el papa de Frida. -dijo Rodolfo con cierto tono de seriedad en sus palabras.

Lo dicho por su padre dejo confundido al chico, pues el sabía que el padre de su mejor amiga lo odiaba ya que Frida siempre llegaba a correr peligro cuando estaba presente en sus aventuras como el Tigre.

Pero ademas de eso, empezó a tener un no muy buen presentimiento al respecto porque si de algo el estaba seguro era de que si el capitán Suárez le llegaba a llamar, era porque sin duda era algo realmente importante.

Por lo que sin mas y tras ver que su padre le estaba extendiendo el teléfono, rápidamente el atina a tomarlo para luego ponerlo en su oído.

-Buenos días Capitán Suárez, ¿en que le puedo ayudar? -pregunto Manny tratando de sonar lo mas formal posible.

Sin embargo, conforme el hombre le hablaba al otro lado de la línea telefónica, el menor de la familia Rivera sentía como todo a su alrededor se empezaba a detener a la vez que dejaba caer el teléfono que como en cámara lenta hasta que da en el piso.

...

En este momento, Manny estaba viendo algo que sin duda lo hacia tener en su rostro una expresión de total shock.

Lo que el estaba viendo justo ahora sin duda iba a estar impreso en su memoria durante el resto de su vida, para su total desgracia.

Frente a el, viendo a través de una ventana en la sala de urgencias del hospital de Ciudad Milagro, a su mejor amiga Frida Suárez... muy mal.

La chica de cabello azul estaba en una cama del hospital, conectada a una maquina de oxígeno a la vez que un monitor dejaba ver como seguía su ritmo cardíaco.

Físicamente, la chica no se encontraba para nada en buen estado físico, pues en su rostro tenia sin duda varios moretones pero uno que era de los mas notorios era el que estaba en su ojo derecho, ademas de que la nariz se veía que estaba sin duda quebrada de tantos golpes que había recibido.

A un lado de el, estaba el padre de Frida, el capitán de la policía Emiliano Suárez quien sin duda tenia una expresión de abatido muy marcada en su rostro, y entre sus manos llevaba los que eran los googles de Frida que la verdad estaban bastante rotos y maltratados.

-¿C-Como fue que paso? -pregunto Manny quien apenas y podía salir del shock en el que se encontraba.

-Ella y yo fuimos a hacer unas compras al mercado, todo iba bien hasta que salimos, un grupo de vándalos aparecieron de la nada, eran una pandilla a la que yo encerré hacia mas o menos un par de años, pero escaparon hace poco de prisión y uno me ataco por la espalda y me noqueo. -decía Emiliano con lo ultimo a la vez que empezaba a apretar sus puños con mucha fuerza a la vez que lagrimas empezaban a acumularse en sus ojos. -Y esos malditos aprovecharon y sin piedad golpearon a mi Frida. -termino de decir el hombre ya no resistiendo y dejando que las lagrimas terminaran por salir de sus ojos.

Con lo que ya acababa de escuchar, Manny empezaba a sentir que un enorme y fuerte sentimiento de rabia comenzaba a formarse dentro de su ser.

Realmente esos tipos se pasaron de la raya, ir tras el capitán Suárez era una cosa, pero el haberse ensañado con Frida...

Vaya que esos sujetos no tienen consideración, ni remordimiento algo.

-Y, ¿porque es que me llamo a mi? -pregunto Manny a la vez que volteaba a ver al hombre con una ceja alzada.

-Dejare esto en claro Rivera, a pesar de que no me agradas por el hecho de que mi niña puede siempre acabar en peligro, como padre mi misión es siempre estar ahí para ella y esta vez falle, no soy de decir esto pero... -decía Emiliano hasta que toma algo de aire y lo termino soltando. Necesito tu ayuda, para encontrar a los desgracias que hirieron a mi hija y hacer que paguen por eso. -termino de decir el capitán con lo ultimo a la vez que volteaba a ver directamente al muchacho.

En ese momento, Manny se quedo con una expresión pensativa.

Realmente era algo sorprendente que el padre de su mejor amiga le pidiera algo así, pero...

A la vez era para el muy comprensible la razón, ademas de que en el fondo el también deseaba hacer pagar a esos desgraciados.

Ya era hora, ya erq hora de que el Tigre... regresé.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí el capitulo espero que les guste.

Aquí se me ocurrió esta idea, una que la verdad ya tenia de estrenar y que espero ustedes disfruten.

Es todo por ahora, los invito a que dejen su voto si les gusto el capitulo, ademas de que también los invito a que escriban sus opiniones en los comentarios sobre el capitulo, nos vemos.

Bye.