Bueno como lo prometido es deuda aquí esta el segundo capitulo que espero les guste n_n

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Capítulo 2.

El juicio.

Al entrar Milena pudo ver que por dentro el lugar era muy espacioso ya que era gigante (en palabras de Milena), en las paredes había muchos retratos diferentes y supuso que eran de los habitantes del teatro ya que no reconocía a ninguno, en ese momento los cuatro llegaron a un lugar en donde había una puerta enorme cerrada la mujer del cementerio la abrió y Milena pudo ver que había una gran cantidad de personas esperando; en ese momento Milena pudo ver en el medio de la sala a una joven de cabellos azul y ojos del mismo color, y un vestido verde, en pocas palabras también era hermosa, en su rostro se notaba que era indiferente y fría hacia los demás que estaban con ella, al ver a Milena la joven en medio de la sala golpeo con su mazo de jueza el estrado para después hablar.

-QUE EL JUICIO EMPIEZE-Anuncio con voz alta la joven.

Todos se levantan de sus lugares y voltean a ver a los dos niños que traían a la joven "intrusa" que estaba invadiendo su teatro, todos cuando Milena ya estaba en el lugar del acusado se sentaron en sus lugares y empezó el juicio, todos le hacían preguntas y Milena solo las respondía a cómo podía ya que muchas de esas preguntas eran un poco confusas; ya después de mucho la muñeca dio el veredicto.

-Eh decidido que ella es culpable, y debe ser ejecutada cuanto antes-Anuncio la muñeca con voz fría y seria.

Milena estaba asustada ya que la mujer del cementerio junto a los dos niños que eran sus sirvientes (e hijos adoptivos) se empezó a acercar de forma amenazante hacia ella, pero en ese momento alguien más hablo.

-Disculpe señoría, pero yo necesito a alguien que me ayude con las tareas del teatro, ¿me seria concedida que esta joven me ayudara?-Hablo una chica con traje de sirviente y una sonrisa.

-MMM, No lo sé, ¿no que ya tenías a alguien que te ayude?-Pregunto confundida la muñeca mirando a la sirviente.

-Si así es, pero el pobre tiene mucha carga sobre los hombros y me gustaría que tuviera un poco de ayuda-Comento con una sonrisa la joven.

-MMM, Esta bien, puede quedarse-Dijo finalmente la muñeca, para después mirar seria a Milena-Tu ayudaras al engranaje a sustentar la torre del reloj-Dijo la muñeca mirando a la joven con una mirada fría.

Milena solo sonrió con un poco de miedo esas miradas de la muñeca la ponían nerviosa, pero al final hizo una reverencia y hablo.

-Como usted ordene, su señoría-Hablo con respeto a la muñeca.

Después de eso todos se retiraron dejando sola a la muñeca, cuando ya estaba fuera de la sala del tribunal de la muñeca todos le dieron la bienvenida al teatro pero noto que en el lugar donde decía Engranaje no había nadie así que decidió preguntar.

-Oigan no quiero ser entrometida en cosas que no son de mi incumbencia, pero, ¿quién es engranaje?-Pregunto la joven con curiosidad.

-Ah eso, bueno él es el guardián de la torre del reloj, tú lo vas a ayudar a sustentar la torre ya que el pobre no puede solo, pero que su actitud pasiva no te engañe, cuando está enojado puede ser peligroso-Hablo una mujer con un monóculo en uno de sus ojos y fumando una pipa.

-Bueno amiga, te llevaremos con él para que lo conozcas, pero creo que está enojado ya que cuando él se enoja le da por no asistir a los juicios-Comento el pequeño Axel con una sonrisa.

Los dos niños condujeron a Milena hasta la torre del reloj donde tenía que estar para empezar con su trabajo, cuando llegaron los dos niños se despidieron de ella.

-Bueno, hasta llegamos nosotros ya que tenemos trabajo también, pero no te preocupes, solo sube las escaleras y sigue derecho hasta llegar a una puerta al fondo de un pasillo-Dijo la joven Alice con una sonrisa, para después irse junto a su hermano.

Milena se despidió de ellos con la mano hasta que ya no los pudo ver y subió las escaleras de la torre, eran muy largas y ya estaba cansada pero siguió adelante hasta que por fin llego hasta arriba; ahora tenía que seguir derecho por el pasillo que tenía delante de ella para llegar a la habitación que los gemelos le habían indicado, siguió adelante hasta que por fin llego a dicha habitación, como los niños le habían dicho la puerta estaba cerrada y por miedo no se atrevió a tocar pero armándose de valor toco la puerta.

-¿Quién es?-Pregunto la voz de un hombre.

-Soy Milena, la nueva empleada del teatro-Respondió la joven con un poco de nervios.

En ese momento la puerta se abrió y jalaron a Milena hacia adentro de la habitación, la joven pudo ver que quien la había jalado era un joven de su misma edad, con ojos color azul, cabellos del mismo color, y su ropa era la de un soldado solo que en tonos azul y blanco, con botas negras; en ese momento la empezó a mirar muy detenidamente casi comiéndosela con la mirada, en ese momento la mirada de aquel joven se dirigió a la ventana de la torre y miro que el día ya estaba próximo a terminar.

-Sera mejor que descanses, mañana será un día pesado, y más para ti, puedes dormir en la cama si lo deseas yo dormiré en otro lugar-Dijo el joven en tono de voz serio.

-Gracias, pero tengo un poco de frio-Dijo la joven temblando por el viento que estaba soplando.

-Era más que obvio, no estas acostumbrada a estar aquí viviendo en una torre-Dijo el joven serio mirando como la joven tiembla.

Después de decir eso se acostó en la cama, para después abrir las sabanas para que Milena se acostara con él.

-¿Qué es lo que haces?-Pregunto Milena mirando confundida al joven.

-Dormiré contigo, no puedo permitir que mueras congelada-Dijo el joven de azul con tono de voz serio.

La joven se sonrojo pero igual se acostó a un lado de él, el guardián de la torre la tapo con las sabanas y Milena pudo sentir el calor del cuerpo de aquel joven y se acurruco más cerca de el para poder estar más calientita, después de eso los dos se quedaron dormidos.

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Espero que les guste, ya que me esforcé para que quedara bien cuando lo escribí, bueno como sea los dejo y nos vemos mas tarde n_n