Han pasado 3 semanas desde que (T/N) llegó a la casa de la diosa Artemisa y para este punto ya sabe muchas cosas sobre el mundo en el que se encuentra gracias a las explicaciones de Artemisa y Rethusa, actualmente (T/N) se encuentra equipado con su armadura Mjolnir la cual fue mejorada y reparada por el Huragok gracias a varios materiales que sacó de los restos del Phantom.

Al bajar al primer piso se encontró con Artemisa sentada en la sala, Artemisa tenía una expresión seria a la vez que parecía pensar en algo.

Con lentitud (T/N) se acercó a ella y cuando estuvo a unos metros procedió a hablar.

-Diosa Artemisa, ya me encuentro totalmente recuperado y aún no me ha dicho como pagarle por su ayuda. Me gustaría pagarle antes de irme.- dijo (T/N) con algo de calma mientras miraba a Artemisa.

Artemisa por su parte salió de sus pensamientos y luego dirigió su vista hacia (T/N) antes de hablar.

-Dime (T/N) ¿Crees que mi familia esta conformada únicamente por Rethusa?.- pregunto Artemisa con algo de tristeza a la vez que evitaba llorar.

-A juzgar por los retratos que he visto no lo creo, diosa, ¿Donde esta el resto?.- pregunto (T/N) con algo de seriedad.

-¡Están muertos! Me creía fuerte y creía que mi familia era fuerte pero nos equivocamos por lo que mi estupidez mató a mi familia.- dijo Artemisa triste mientras derramaba algunas lágrimas.

(T/N) solo respiro hondo antes de dar una respuesta.

-Se lo que se siente, he vivido la mayor parte de mi vida en la guerra, he visto a mis compañeros, a mis amigos e incluso a mi propia familia morir sin yo poder hacer algo. He Sido testigo de la destrucción de cuidades enteras, al menos tu tienes la oportunidad de pasar por un duelo. Yo jamás tuve esa oportunidad.- dijo (T/N) serio aunque estaba algo triste por dentro.

Eso sorprendió de sobre manera a Artemisa la cual solo se le quedó viendo a (T/N) pero antes de decir algo el hablo primero.

-Conozco el deseo de la venganza, de querer matar a todo lo que se mueva. Si quieres venganza yo puedo ayudarte. Después de todo aunque muchos dicen que es algo malo siempre es bueno liberar lo que sientes. Así fue como termine dónde estoy ahora, puede que sea bueno, puede que no. Todo gracias a ese deseo de vengarme de los que mataron a mi familia a sangre fría cuando yo tenía solo 6 años. Mientras más reprimas lo que sientes más daño te hará.- dijo (T/N) serio y algo enojado mientras recordaba su pasado.

Ante tales palabras Artemisa se puso de pie y camino hasta el para después abrazarlo a la ves que comenzaba a llorar más fuerte para poder desahogarse de todo lo que sentía.

-Por favor, se parte de mi familia. No hay forma de que regreses a dónde perteneces, por favor quédate.- dijo Artemisa triste y en un tono algo suplicante.

Luego de unos segundos (T/N) correspondió el abrazo y luego precedió a hablar.

-Esta bien, no iré a ningún lado. Me uniré a tu familia.- dijo (T/N) en un tono de voz suave y tranquilo.

Tras estar unos cuantos segundos abrazados ambos se separaron y después Artemisa se fue a hablar con Rethusa mientras que (T/N) salió a tomar un poco de aire al patio de la mansión la cual era bastante grande.

Sin esperar nada se sentó en el suelo y observó con detenimiento el cielo mientras que, por primera vez en mucho, mucho tiempo se concilió con todos sus recuerdos.

Pasadas varias horas Artemisa y Rethusa salieron al patio donde se encontraron con (T/N) el cual aún seguía viendo el cielo mientras se conciliaba con todos sus recuerdos.

-Es hora (T/N), ven para que pueda ponerte el sello de mi familia, luego hablaremos sobre la venganza hacia el que mató a mi familia.- dijo Artemisa con algo de seriedad.

(T/N) no dijo nada, solo se puso de pie rápidamente y luego se dió la vuelta para después asentir con la cabeza y luego seguir a ambas al interior de la casa.

Al llegar a la habitación que ahora pertenecía a (T/N) este se retiró la armadura con la ayuda de el Huragok y después se acostó boca abajo sobre su cama, hecho esto Artemisa se sento sobre su espalda y luego procedió a colocar su marca en la espalda de (T/N).

-Sus estadísticas son increíbles, es más de lo que esperaba.- pensó Artemisa feliz y sorprendida.

Una vez terminado el proceso (T/N) sintió una corriente eléctrica recorrer toda su espalda

Cuando está sensación se detuvo (T/N) sintió como Artemisa se alejó y luego se bajó de la cama por lo que el se levantó de la cama también.

-Perfecto, eso es todo. Mañana irás junto a Rethusa al gremio para que te registres.- dijo Artemisa feliz.

-Esta bien diosa, no hay problema.- dijo (T/N) tranquilamente.

Sin nada más que decir ambas se marcharon de la habitación de (T/N) mientras que este se quedó revisando su armamento durante un rato y en cuanto acabo se puso a leer un libro que encontró en su habitación.

Llegada la hora (T/N) bajo al comedor para cenar junto a Artemisa y Rethusa para después irse a dormir.

Al día siguiente

(T/N) se levantó temprano como ya era una costumbre para el y como ya se encontraba totalmente curado se puso algo de ropa cómoda y luego salió al patio de la mansión para poder entrenar tranquilamente.

Tras unas cuantas horas entrenando (T/N) dió por finalizado su entrenamiento y luego fue a darse un baño.

Para cuándo terminó de vestirse el sol ya se encontraba en su punto alto dando señal de que el día apenas empezaba.

Con tranquilidad bajo al primer piso donde se encontró con Artemisa la cual tenía puesta una playera que le quedaba bastante grande y unos shorts además de que estaba algo despeinada.

-Buenos días diosa.- dijo (T/N) tranquilamente.

-Buenos días (T/N), toma asiento. El desayuno estará listo pronto.- dijo Artemisa alegre.

(T/N) solo asintió con la cabeza y luego fue a sentarse, al poco tiempo apareció Rethusa la cual también estaba en pijama.

-Buenos días.- dijo Rethusa tranquila para después bostezar.

Tras tomar asiento y mirar detenidamente a (T/N) se percató de que este ya no estaba usando pijama.

-¿A qué hora te levantas?.- pregunto Rethusa curiosa.

-No se a que hora me levanté hoy, pero de dónde vengo normalmente me despertaba entre las 3 y las 5 de la mañana, todo dependía de lo que tuviera que hacer y en algunas ocasiones no dormía por días.- dijo (T/N) tranquilamente.

Para este punto este tipo de cosas no le resultaban tan sorprendentes aunque si les daba curiosidad el como una persona podía aguantar todo eso durante años.

Poco después llegó Artemisa con el desayuno por lo que los 3 se dispusieron a desayunar tranquilamente.

20 minutos después los 3 ya habían terminado de desayunar por lo que (T/N) y Rethusa regresaron a su habitación para prepararse para salir.

Con (T/N)

Aunque pensó en llevarse su armadura al final descartó esa idea y mejor tomo únicamente su Magnum junto a unos cuantos cargadores además de su espada de energía.

Antes de salir de su habitación tomo un par de balas de cada una de sus armas, ya que tuvo todo se fue a buscar a Artemisa y tras buscarla por un rato la encontró en el patio acostada bajo un árbol.

Una vez que se acercó hasta ella procedió a hablar.

-Hola diosa.- dijo (T/N) amablemente.

-Hola (T/N) ¿Que pasa?.- pregunto Artemisa tranquilamente mientras se levantaba.

-Las armas que utilizo necesitan munición para funcionar, ¿Sabes dónde puedo obtener más?.- pregunto (T/N) en un tono neutro mientras le entregaba las balas a Artemisa.

-Bueno, jamás había visto algo como esto y tampoco he oído de la existencia de algo similar. Sin embargo, conozco a alguien que podría fabricarlas para nosotros.- dijo Artemisa con algo de seriedad mientras veía detenidamente las balas.

-Esta bien diosa, me avisas después, debo irme, te dejare las balas aquí para que las revises- dijo (T/N) más tranquilo mientras dejaba las balas para después darse la vuelta e irse.

-Nos vemos. Que tengas un bonito día.- dijo Artemisa alegre gritando para que (T/N) la escuchara.

Al llegar a la entrada de la mansión se topo con Rethusa la cual ya estaba lista por lo que sin más ambos salieron de la mansión y se encaminaron hacia el gremio.

Durante el camino hacia el gremio (T/N) se encontraba en silencio viendo y analizando detenidamente el tipo de edificaciones que había en el lugar además de sorprenderse levemente con los diferentes tipos de razas de las personas que se movían por las calles de la cuidad.

-Quien diría que algo así podría existir, si no lo hubiera visto pensaría que la diosa me había mentido.- pensó (T/N) sorprendido y algo emocionado.

-Realmente parece que nunca has visto nada como esto. Pareces un niño curioso que nunca había salido de su casa.- dijo Rethusa con algo de burla.

-Obviamente esto es nuevo para mi, mucho de lo que estoy viendo ahora de dónde vengo son solo cuentos y leyendas o mitos.- dijo (T/N) en un tono animado mientras le dedicaba una media sonrisa a Rethusa.

Luego de aproximadamente media hora ambos llegaron al gremio y tras ingresar en este (T/N) pudo sentir algunas miradas sobre el pero prefirió no darle importancia como siempre ha hecho.

Teniendo en cuenta lo anterior, (T/N) solo se limitó a seguir a Rethusa en silencio mientras veía el lugar con detenimiento.

Tras llegar al mostrador y esperar unos segundos, una chica se acercó a ellos, la chica en cuestión tiene el pelo castaño corto que se encuentra justo debajo de la barbilla. Sus ojos son de un tono similar. Su vestido es de color verde oscuro con un delantal blanco en la cintura. Cubriendo sus piernas hay medias negras y a sus pies hay zapatos de tacón azul real. Sus brazos también están cubiertos con el mismo material que sus piernas con puños de color verde oscuro terminados en un borde blanco justo por encima de sus codos.

-Hola Rethusa ¿Cómo estás?.- pregunto la chica algo preocupada.

-Ya estoy un poco mejor, aunque aún me duele la muerte de mis amigos, pero no estoy aquí por eso. Vine a aquí para registrar a mi nuevo compañero ya que es nuevo en la cuidad.- dijo Rethusa algo seria.

En ese momento la chica con la que Rethusa estaba hablando posó su vista sobre (T/N)

-¿Es el? Me sorprende que Artemisa haya conseguido a alguien tan pronto.- dijo la chica con sorpesa y curiosidad.

-Si, es el y digamos que su aparición y reclutamiento fue demasiado repentino.- dijo Rethusa un poco más calmada.

-Entiendo, bueno, dejame llamar a una amiga para que se haga cargo, y en cuanto a ti, mi nombre es Lola Metrose, si necesitas algo puedes avisarme en caso de que no encuentres a tu asesora.- dijo la chica amablemente.

Entendido y es un gusto conocerla señorita Lola, mi nombre es (T/N) (T/A).- dijo (T/N) en el mismo tono amable.

La chica solo sonrió antes de irse, pocos minutos después de que se fue, regreso acompañada de una chica que tiene cabello rosado y ojos rosados. Ella usa el uniforme del Gremio.

-Mira Misha, el es (T/N) y quiere registarse, encárgate por favor.- dijo Lola amablemente.

-Esta bien, no hay problema, hola (T/N). Yo soy Misha Flott y seré tu asesora así que por favor sígueme.- dijo Misha amablemente.

Misha tiene cabello rosado y ojos rosados. Ella usa el uniforme del Gremio.

Luego de decir esas palabras Misha sacó de debajo del mostrador unos papeles y una pluma para después salir del mostrador y caminar junto con (T/N) hasta que ambos entraron en una pequeña habitación en la cual había una mesa de madera y 2 sillas, las cuales estaban una frente a otra.

Luego de tomar asiento Misha procedió a hablar.

-Muy bien, te haré un par de preguntas, después llenarás estás hojas y luego te explicaré brevemente algunas cosas básicas ¿Estás bien?.- dijo Misha amablemente.

-Por mi está bien, empecemos con esto.- dijo (T/N) tranquilamente mientras veía a Misha a los ojos.

-Muy bien, primera pregunta ¿A qué te dedicabas antes?.- pregunto Misha seria.

-Antes era un soldado de élite clase Spartan 3 bajo el mando de la UNSC y la ONI. Me he dedicado a eso desde los 6 años.- dijo (T/N) en un tono neutro.

-¿Desde los 6 años? ¿Que es la UNSC y la ONI? ¿Que es un spartan 3? ¿Quien es este chico?.- pensó Misha curiosa, confundida e intrigada.

-Muy bien, segunda pregunta ¿A qué familia perteneces?.- pregunto Misha seria.

-A la familia Artemisa, me integre hace unas semanas luego de que la diosa Artemisa salvará mi vida.- dijo (T/N) serio.

-Muy bien, de momento con eso es suficiente así que te entregaré estás hojas las cuales debes contestar honestamente.- dijo Misha de manera tranquila mientras le entregaba las hojas y la pluma.

Luego de unos cuantos minutos (T/N) termino de llenar las hojas y luego de entregárselas a Misha está le explicó que la moneda de la cuidad era el vali así como todo lo que necesitaba saber acerca de la torre babel y del calabozo que había debajo de este. También le explicó otras cosas que ella considero importantes.

Terminada su explicación ambos salieron de aquella habitación y regresaron al lobby dónde luego de que (T/N) se reuniera con Rethusa estos salieron del gremio y se dirigieron directamente al calabozo.

En el calabozo/ piso 15

Ambos se encontraban descansando en uno de los pasillos mientras platicaban un poco.

-Esto está siendo más fácil de lo que creí, ni siquiera he necesitado mi Magnum, con la espada de energía ha sido suficiente.- dijo (T/N) algo animado.

-He de admitir que me sorprendes, no cabe duda de que eres bastante hábil. Además creo que estamos haciendo un buen equipo.- dijo Rethusa de buen humor y con una sonrisa.

-
-Estoy de acuerdo, creo que estamos bien sincronizados para ser nuestro primer trabajo juntos.- dijo (T/N) de la misma manera y con una sonrisa.

-Bueno, creo que ya fue suficiente ¿Estas listo para seguir?.- pregunto Rethusa alegre y con una sonrisa.

(T/N) solo asintió con la cabeza y luego ambos retomaron su paseo por el calabozo.

Varias horas después

(T/N) y Rethusa acaban de llegar a la superficie por lo que se sorprendieron un poco al ver que estaba comenzando a atardecer, sin perder tiempo fueron directamente al gremio dónde después de cambiar las piedras mágicas por valis fueron a buscar un lugar para comer.

Una vez comieron algo, compraron algo para Artemisa y luego (T/N) se compró algo de ropa nueva para finalmente regresar a la mansión de la familia Artemisa.

En la mansión

Apenas llegaron a la mansión se encontraron con Artemisa en la sala por lo que tras saludarla le contaron todo lo que les había pasado durante el día y después se pasaron al comedor donde acompañaron a Artemisa mientras comía.

-Diosa, considero que lo mejor sería recuperar los restos del Phantom, si lo hacemos quizá el Huragok podría repararlo y de ser así nuestra habilidad para desplazarnos de un lado a otro seria más rápido y no tendría muchos límites.- dijo (T/N) en un tono tranquilo y ligeramente emocionado.

Artemisa lo pensó por un momento hasta que finalmente se decidió.

-Esta bien, te creo, vallan a prepararse mientras yo alistó una carreta y a los caballos para que puedan transportar las piezas.- dijo Artemisa con algo de emoción para después irse.

-Nos vemos aquí en 20 minutos.- dijo Rethusa tranquilamente.

(T/N):solo sonrió en respuesta y luego se retiró a su habitación, una ves ahí silbó un par de veces y a los pocos segundos el Huragok apareció. Tras acariciarle la cabeza un par de veces le pidió ayuda para ponerse la armadura Mjolnir y este acepto sin problema.

-Sabes, deberíamos construir un soporte para que sea más sencillo el quitar y el ponerme la armadura.- dijo (T/N) mientras pensaba un poco en la situación y veía fijamente al huragok.

Una vez listo dejo su pistola sobre la mesa y luego tomo su DMR y su rifle de asalto junto a su respectiva munición.

Sin nada más que hacer salió de su habitación y regreso al comedor donde se encontro con Rethusa y luego salieron al patio delantero donde Artemisa ya los esperaba.

-Por favor, tengan cuidado.- dijo Artemisa un poco preocupada.

Ambos asintieron y luego abordaron la carreta la cual era controlada por Rethusa mientras que (T/N) iba en la parte de atrás para proteger esa parte.

-Si sucede algo ahí adelante avísame, estoy seguro de que podré con la mayoría de las cosas que puedan pasar.- dijo (T/N) tranquilamente.

-Ok, si pasa algo prometo que te avisaré.- dijo Rethusa en el mismo tono.

Sin nada más que decir o hacer salieron de la mansión e iniciaron su viaje hacia la parte del bosque en la que se estrello el phantom.

Hora y media después

Rethusa había parado la carreta un poco alejada de la zona de colisión por lo que (T/N) se bajó de la carreta y luego se acercó a Rethusa.

-Yo iré al frente, el casco tiene visión nocturna.- dijo (T/N) en un tono neutro para después empezar a caminar.

Tras caminar un par de minutos ambos llegaron al claro donde estaban los restos, de pronto (T/N) sacó rápidamente su DMR y le retiro el seguro para después apuntarle una mujer cuya parte inferior era de serpiente y la superior de mujer, osea, una lamía.

Sin dudarlo (T/N) apunto su arma pero justo al momento de disparar Rethusa golpeó el arma haciendo que el disparo fallara y la lamía se alertara.

La lamía se dió rápidamente la vuelta para ver a un sujeto con una rara armadura y a una chica de pelo negro.

Por otra parte ambos chicos vieron detalladamente a la lamía percatandose de que tenía ojos rojos y cabello del mismo color, así mismo su cola también era de color rojo. Vestía una blusa amarilla y una falda azul.

-Tranquilo, no es una amenaza, ¿Que te pasa?.- dijo Rethusa un poco molesta.

-Pero en la mañana dijiste que las lámias no eran buenas.- dijo (T/N) molesto y ahora un poco confundido.

-Esas son solo las del calabozo, no todas son iguales, fíjate bien en ella.- dijo Rethusa molesta.

(T/N) no dijo nada y solo se limitó a apuntar con su arma a la lamía.

-Disculpa a mi amigo, no es de aquí. Es raro ver a una Lamía por aquí ¿Quien eres y que haces aquí? Y tranquila no te haremos daño.- dijo Rethusa en un tono calmado.

La lamía por su parte dejo de ver al sujeto de rara armadura y dirigió su vista hacia la chica.

-No tengo por qué contestarte, no creo que sea buena idea confiar en ustedes. Tu amigo trato de matarme.- dijo la lamía enojada.

-Bueno, ella tiene razón, la lamía que nos encontramos en el calabozo no hablaba, solamente se lanzó a atacarnos.- pensó (T/N) serio.

-Perdón por eso, como ya dijo mi compañera no soy de aquí y no había interactuando con una Lamía, la primera vez que ví una me atacó sin dudarlo. No es necesario que nos digas tu nombre, solo estamos aquí para llevarnos esos pedazos gigantes de metal a nuestra casa.- dijo (T/N) en un tono serio pero, que a su vez reflejaban serenidad y paz.

-Me he es difícil creerte cuando aún me apuntas con esa cosa.- dijo la lamía molesta.

(T/N) analizó la situación, no era la primera ves que se veía envuelto en una escena similar así que ya sabía cómo actuar ante este tipo de imprevisto.

-Voy a acercarme un poco, cúbreme.- dijo (T/N) serio en voz baja.

Sin dejar que Rethusa respondiera (T/N) se encamino hacia la lamía mientras guardaba su DMR en su espalda, cuando estuvo a poco metros de la lamía se detuvo de golpe para después quitarse el casco y luego colgarlo en una de sus piernas con un imán.

-Soy (T/N) (T/A), como ya dije no soy de aquí. Lo que tienes detrás de ti es un objeto valioso que quiero intentar reparar, prometo que después de eso me iré y no volveré jamás.- dijo (T/N) de la forma más calmada que pudo.

-¿Cómo se que puedo confiar en ustedes?.- dijo la lamía aún con desconfianza.

-No es necesario, me basta con que me dejes hacer mi trabajo, Rethusa ve por la carreta, las piezas son tantas que seguramente haremos varios viajes.- dijo (T/N) un poco serio, pero su tono reflejaba más neutralidad que otra cosa.

Rethusa solo se retiró en silencio del lugar y regreso a los escasos minutos con la carreta, luego de dejarla en una posición mas cómoda para subir las cosas (T/N) ignoró a la lamía y comenzó a cargar algunas piezas y subirlas a la carreta.

Cuando sintieron que ya habían cargado suficiente Rethusa regreso al frente para poder conducir la carreta mientras que (T/N) volvió a sentarse en la parte de atrás.

-¿A dónde van?.- pregunto la lamía ahora con curiosidad.

-Como dije, solo vamos a llevarnos las piezas, son demasiadas así que tendremos que hacer varios viajes.- dijo (T/N) serio a la vez que se ponía el casco.

2 horas y media después

Una vez más Rethusa y (T/N) habían llegado al lugar solo que ahora llevaban 2 carretas para poder llevar más cosas, al momento de bajarse se llevaron la sorpresa de ver qué la lamía seguía ahí.

Por otra parte cuando la Lamía se percató de su presencia se acercó a ellos ya que en esta ocasión no sentía miedo o hostilidad, si no que más bien sentía curiosidad por ellos, sobre todo por el chico de armadura extraña.

-Hola veo que sigues aquí.- dijo Rethusa tranquilamente mientras se alejaba un poco de la carreta.

(T/N) por su parte, solo se apuro a recoger y guardar todas las piezas que pudo hasta que solo quedaron las más grandes.

-Rethusa, las partes que quedan son bastante grandes ¿Me das una mano?.- pidió (T/N) amablemente mientras se aseguraba de que las piezas que ya había subido estuvieran bien sujetas.

-Yo te ayudo.- dijo la lamía un poco más animada.

Sin esperar a que (T/N) dijera algo, la lamía se acercó hasta donde se encontraba para después levantar con su cola una parte de la pieza mientras que el tomo la otra parte y luego la llevaron a la segunda carreta.

Luego de unos cuantos minutos lograron cargar todo en las carretas, cosa que sorprendió un poco a (T/N).

-Me sorprende que las carretas estén soportando el peso de los restos.- dijo (T/N) un poco sorprendido.

-Artemisa las reforzó usando un poco de su fuerza divina luego de notar que la carreta anterior casi se rompe debido al peso.- dijo Rethusa seria.

-Entiendo, bueno, es hora de irse. Empieza a bajar la temperatura y aunque el traje me protege hasta cierto punto, tampoco quiero ser una paleta.- dijo (T/N) a modo de broma mientras suspiraba en señal de satisfacción.

Rethusa fue la primera en regresar a su carreta y prepararse para partir, cuando (T/N);estaba por irse a la suya fue detenido por la lamía la cual lo había sujetado con su cola aunque lo soltó tras unos cuantos segundos, debido a esto (T/N) se dió la vuelta encontrándose con la lamía.

-Te agradezco mucho la ayuda, como prometí no volveré aquí jamás, fue un placer. Ten una linda noche- dijo (T/N) amablemente a la vez que le extendía la mano.

Algo indecisa la lamía estiró levemente su cola hasta que está hizo contacto con la mano de (T/N), en cuanto esto paso el agitó levemente su mano y después soltó la cola de la lamía para después darse la vuelta y encaminarse hacia la parte delantera de la carreta.

En ese momento la lamía se quedó en silencio durante unos segundos pensando en que hacer hasta que finalmente se decidió por abordar la carreta de (T/N) y hablar con ellos en cuanto llegarán a su destino.

Tiempo después/ mansión Artemisa

Apenas llegaron a la mansión ambos se bajaron de las carretas y se reunieron con Artemisa la cual estaba justo enfrente de ellos.

-¿Cómo les fue?.- pregunto Artemisa curiosa.

-Todo salió bien, ahora solo falta descargar todo y luego le pediré al Huragok que lo revise.- dijo (T/N) tranquilamente.

-Muy bien, entonces vamos a bajar todo y a llevarlo al patio trasero.- dijo Rethusa algo animada.

Sin más que decir los 3 fueron a la parte trasera de las carretas dónde se llevaron la sorpresa de ver a la Lamía que (T/N) y Rethusa se habían encontrado en el bosque.

Fin capitulo 2