24. Confinamiento

[ 25 años atrás ]

Se encontraba cortando vegetales para la cena de esa noche cuando sintió como jalaban su falda mientras una tierna voz la llamaba "mami", dejó el cuchillo a un lado y miró al pequeño niño de cabello negro y ojos grises que la llamaba.

- ¿Qué ocurre, QiQi

- Uh - hizo el sonido mientras mostraba a su madre la portada de uno de los discos que recordaba haber dejado en su habitación. 

El disco en sí era uno de los viejos vinilos de Queen que había sido de las pocas cosas que pudo salvar de las cosas que había comprado mientras vivía en Londres, específicamente, era uno de los que... esa persona... le había regalado. Sonrió un poco mientras se ponía de rodillas junto al pequeño de 3 años y revolvía su cabello.

- ¿Quieres escuchar música, cariño?

- ¡Música!

- Esta bien. Deja que mamá termine en la cocina ¿sí?

El pequeño asintió con una enorme sonrisa. A pesar de lo dicho, vió como su pequeño hijo se sentaba en la mesa, moviendo sus pies de un lado al otro, haciendo pucheros, bajando de la silla para correr a algún lado y luego regresaba corriendo de nuevo. Cuando al fin se desocupó, el niño de 3 años fue corriendo hacía la habitación, donde se encontraba su viejo tocadiscos, limpió el vinilo y lo colocó con cuidado. Vió como la mirada de su hijo se iluminaba mientras trataba de pronunciar alguna de las palabras desconocidas de la canción que escuchaba. 

[ 13 años atrás ]

- Me gustas... 

La confesión había sorprendido al Yue Qi de 15 años, el chico quien le había dicho eso era de otro salón, lo había visto muchas veces antes, un par de veces le había dado algún bocadillo cuando se encontraban a solas, había recibido una que otra nota anónima de su parte (lo sabía por la única vez que lo vió dejando la nota en su escritorio antes durante una hora en la que se encontraba fuera de su salón). Quizás era extraño... pero ese chico le parecía tierno. 

Esa tarde, detrás de la escuela donde aquel chico de lindos ojos le había citado, compartieron su primer beso. Un inocente beso que apenas fue el roce de sus labios, una cálida sensación que invadió sus pechos... y que todo se vió opacado cuando escucharon el grito de uno de sus profesores. Recordaba ser golpeado por su profesor, arrastrado a la oficina del director, escuchar los gritos de su padre y el director, amenazas de expulsión, la discusión entre su padre y el padre del otro chico. No recordaba las palabras, pero recordaba a su padre tomando su cabello y arrastrarlo fuera de la escuela.

- ¡Déjalo ya! - gritaba su madre - ¡Zhao! ¡Zhao, déjalo!

- ¡Papá! ¡Déjalo ya! - gritaba su hermana - ¡Por favor, papá!

- Papá... duele - se quejó llorando, en todo ese tiempo lo había sujetado con tanta fuerza del brazo que era doloroso - l-lo siento... duele... 

- ¡Todo esto es tu culpa! ¡él no estaría enfermo si no fuera por tu culpa! - gritaba su padre mientras señalaba a su madre, hasta ese momento no lo había soltado de su brazo, le dolía, por fin lo soltó, tirándolo contra el frío y duro suelo de su habitación - ¡No eres capaz de educar adecuadamente a un hombre! ¡No dejaré que mi único hijo se convierta en un asqueroso homosexual! 

- ¡No! 

El grito de su madre fue lo último que escuchó antes de sentir de nuevo los golpes de su padre, a penas logró cubrir su rostro con sus brazos, el dolor de su brazo era insoportable, sintió golpes y patadas, a penas podía hablar, no podía respirar. 

- ¡Emi, llama a la policía! - escuchó el grito de su madre. 

- ¡Él no sería defectuoso de no ser por ti! ¡Todo esto es tu culpa! ¡Tu lo enfermaste!

No recordaba mucho más. Perdió el conocimiento poco después de eso.

Cuando Yue Qi despertó, se encontraba en el hospital, apenas podía respirar, uno de sus brazos estaba inmovilizado. Llevó una de sus manos hacía su rostro para saber porque no podía respirar bien, pero su mano fue detenida por otra, miró a un lado... su mirada estaba nublada, no podía abrir los ojos por completo. Reconoció el rostro de su madre, su cabello negro caía sobre su rostro, parecía como si hubiera envejecido varios años en pocos días. 

- No te muevas - susurró ella, sintió la mano de su madre rozar su frente, quizás había acomodado su cabello - tu padre... se propaso

- mn...

- No hables, cariño - lo detuvo, parecía a punto de llorar - sé que... ese beso te hizo feliz ¿no? pero... a veces... a veces hay cosas que nos hacen felices que no... que no son correctas - Yue Lan trató que su voz no se rompiera - por eso... a veces es mejor... mostrar una cara a la sociedad, algo que... que todos vean como aceptable. En secreto... quizás puedas encontrar algo que... que realmente te haga feliz. 

Yue Qi no entendió sus palabras en ese momento. Aquellos días en el hospital pasaban demasiado rápido en su memoria, recordaba a su madre a su lado, tarareando de vez en cuando, peinando su cabello con cuidado. Días después se enteró que tenía algunas costillas rotas por lo que le dolía respirar, su nariz y pómulo estaban rotos, los huesos de su mano habían quedado prácticamente destrozados. La primera vez que se vió en el espejo, días después de despertar, no pudo reconocer el rostro amoratado e hinchado que veía en el espejo. Su padre había le hecho todo eso. Nunca lo perdonaría. 

Para su suerte, después de ese día su padre se quedaba menos tiempo en casa, apenas lo veía una o dos veces por semana, había noches en las que no regresaba a casa, sus últimos años de escuela fueron tranquilos, en su último año se comprometió con la hermana de su mejor amigo cuando escuchó que esta había tenido un problema similar a él con una chica en su escuela y como había sido enviada a un internado para señoritas al extranjero, cuando Liu MingYan regresó hicieron un trato, un compromiso falso que haría felices a sus familias. Cuando entró a la universidad se mudó a Beijing. 

Cuando salió del hospital se enteró que el otro chico con quien había compartido su primer beso había sido cambiado de escuela, nunca volvió a saber de él... ni siquiera podía recordar su nombre o su rostro. Solo podía recordar el bonito color de sus ojos. 

[ Presente ]

Yue Qi sentía que su sangre hervía, sus manos se volvieron puños mientras veía al hombre en la puerta.

- ¿Qué haces aquí? - preguntó.

- ¿Qué pregunta tonta es esa? Es mi casa.

- ¿Lo es? Hasta donde recuerdo no vives aquí desde hace años - se burló Yue Lan - ¿Tu amante volvió a correrte del apartamento que pagas?

Nada de eso era un secreto. Yue Qi y su hermana habían vivido muchas discusiones de sus padres, a pesar que Yue Lan evitaba mencionar cosas sobre los amoríos del padre de sus hijos, Yue Xuan no parecía importarle y muchas veces le había gritado a su esposa frente a sus hijos sobre porque sus amantes eran mejores mujeres que ella. Eso cuando los hermanos Yue tenían apenas 16 y 12 años, ahora eran adultos, no iba a ocultar el sol con un dedo.

- Pff... como si te importara. No estaría aquí si supieras hacer tu trabajo.

- ¿Mi trabajo?

- Joder... pensé que lo entenderías. Ya no soporto más el chiste en el que vive. Cuando la señorita Ming me llamó diciendo que la echaste supe que estabas apoyando al fenómeno de tu hijo - escupió.

- Ella resultaba molesta - respondió Yue Lan encogiéndose de hombros - y Qi-er trajo a alguien a casa... no iba a ser mala anfitriona.

- ¿Traer aquí a su... esa cosa con la que se acuesta...? ¿¡Quieres que sea él hazme reír otra vez!? ¡Me ha avergonzado suficiente cuando estaba en la escuela!

- ¿Yo? ¿Te he avergonzado a ti? - se burlo Yue Qi - ¿Por besar a un hombre cuando estaba en la escuela? ¿¡Eso fue lo que te dió derecho de casi matar a tu hijo!?

- ¡Hubiera sido mejor que murieras! ¡Si tu madre no hubiera intervenido te hubiera enderezado a golpes, maldito enfermo!

- ¡El único enfermo aquí eres tu!

- ¡No te atrevas a levantarme la voz!

Yue Lan y la hermana de Yue Qi tuvieron que interferir antes que ambos comenzaran a pelar. Afortunadamente el cuñado de Yue Qi y Shen Jiu aparecieron justo a tiempo, Shen Jiu sujeto a su pareja mientras el cuñado de Yue sujetaba a su suegro que incluso estuvo a punto de apartar y tirar a su hija que lloraba asustada. Shen no tuvo que preguntar, de hecho, él y Roger habían escuchado parte de la conversación cuando regresaban a la sala, el extranjero regresaba para informar que no había encontrado ningún vuelo disponible, Shen Jiu regresaba después de hablar con Shen Yuan.

- Yue - llamó a su pareja en voz baja, sujetando su muñeca - ¿estás bien?

- Lo estoy - susurra Yue Qi en voz baja.

- ¡No quiero ver a ese par de enfermos en mi casa! - grito aún siendo sujetado por Roger, luchando, tratando de soltarse.

- ¡Esta ya no es tu casa! - exclamó Yue Lan en respuesta.

- ¡Yo pagó este lugar! ¡Tu sigues siendo mi esposa y deberías hacer lo que yo te ordeno que hagas!

- ¡Maldito cerdo! - insulto Yue Qi - ¡No tienes derecho de hablarle de esa forma!

- Tu... ¡Tu no vas a decir qué tengo o no tengo derecho de hacer en MI casa a MI esposa!

- ¡Vete a la mierda! ¡Esta no es tu casa!

- ¡CÁLLATE, MALDITO ENFERMO!

Antes que el hombre mayor pudiera abalanzarse para golpear a Yue, en un abrir y cerrar de ojos, había terminado boca abajo en el suelo, siendo sujetado por un brazo en su espalda. Se giró para gritar a la persona que lo sujetaba, pero se quedó congelado al ver una fría y filosa mirada de ojos verdes, aquella mirada... era como ser apuñalado mil veces con estacas de hielo, las palabras se atoraron en su boca. Shen Jiu lo soltó al darse cuenta que no iba a volver a atacar de forma precipitada... al menos no era tan idiota como para tratar de tocar a su pareja mientras él estuviera presente.

- Jiu - llamó Yue ayudando a su pareja a ponerse de pie.

- ¿Artes marciales? - pregunto Yue Lan.

- Sé defenderme - respondió encogiéndose de hombros, no iba a presumir.

- Impresionante. XiaoJiu, ¿podrías llevar a QiQi a su habitación para que mi esposo y yo podamos hablar a solas?

- ¿Xiao...?

- Mamá...

- Emi - llamó a su hija mayor que estaba temblando en el sofá - también deberías descansar, en tu estado no deberías estar viendo estas cosas.

- Pero...

- Dejen que hable con su padre y solucione esto. No necesitan escuchar esto.

- No te voy a dejar hablando a solas con ese sujeto - respondió Yue Qi.

- Esta bien... no importa. He tratado con él por 30 años. Ya estoy acostumbrada a eso.

Antes que Yue Qi pudiera decir algo más, Shen Jiu tomo la mano de su pareja, casi termino arrastrando al otro hasta la habitación al final de pasillo, los otros también regresaron a la habitación, dejando a sus padres a solas en la sala de la cama. Yue Qi se dejó caer en la cama soltando un largo suspiro.

- Yue - llamo de nuevo Shen.

- Estoy bien... es solo... ha pasado tanto tiempo desde la última vez... casi no pude contenerme cuando lo vi... en especial por...

No completó la frase. No estaba listo para decirle la verdad a su pareja, ni siquiera había terminado de aceptar todo. Siempre había pensado que su familia no funcionaba, veía a sus padres como dos personas que eran completamente desconocidas entre ellos, no había nada que uniera a sus padres más que un anillo de bodas. Todo tenía sentido ahora... como todo había sido una completa mentira todo ese tiempo.

Sintió el tacto de su pareja en su rostro, Shen Jiu limpiaba las lágrimas que caían por las mejillas de Yue con sus dedos, rió al darse cuenta que había comenzado a llorar sin darse cuenta. Tomó la mano de su pareja y besó sus manos, Shen se acercó y beso el rostro de Yue, sus mejillas, los rastros de que las lágrimas habían dejado.

- No tienes que decirme - susurro Shen, juntando sus rostros - lo sé... es... doloroso...

- Lo es - respondió, su voz se quebró - duele...

- Deja que... sea tu soporte... Qi.

- Lo eres, Jiu - rió un poco, abrazando con fuerza a su pareja - lo eres... te amo...

Volvió a besar los labios de su pareja. Lo beso lentamente, saboreando sus delgados labios, mordiendo el labio de su pareja y bajando por el cuello, Shen sonrió un poco al sentir las manos de su pareja en su cintura, delineando su figura y recostarlo lentamente en la suave cama donde estaban sentados. Cerró los ojos.

Yue sintió como Shen Jiu lo abrazó con fuerza hasta que los rayos del sol entraron por la ventana de la habitación. 

*

Shen Jiang había ido al jardín. Después de la noticia que Shen Lei les había dado, había recibido más de una docena de mensajes en el chat del grupo de doctores del hospital y la clínica privada donde trabajaba. Al parecer todos habían escuchado la noticia y estaban preocupados. Algunos estaban más alterados ya que se encontraban en Hubei visitando familiares, otros reportaban que se había armado un poco el caos en emergencias con personas que llegaban preguntando por el cierre y otros simplemente decían que debía ser una farsa. A estos últimos Jiang terminó bloqueando a algunos por cabeza hueca.

La mayoría estaban de acuerdo que, aún si la enfermedad no salía del área de cuarentena, iba a ser un problema. Ya muchos habían recibido mensajes de pacientes preocupados, muchas personas ya estaban tratando de huir del área de cuarentena y eso podría generar contagios. El pánico generado por la noticia no era mejor. Estaba leyendo los mensajes del chat grupal cuando recibió uno por privado.

"Vendrás al hospital?"

El mensaje privado era de WangFei.

"No. Algunas pacientes
han contactado
conmigo, supongo que
otras lo harán pronto."

"No creo que necesiten
a un bata rosa ahora
en emergencias "

"Estaré disponible si
me necesitan"

"Cómo están tus
pacientes? 😷"

"Algunos han contactado
conmigo preguntando x
la situación"

"Uno quedó atrapado en
casa de sus suegros cerca
de Wuhan. RIP."

"Avisaron a psico x
posible pánico
colectivo 😖"

"Sabes que es?"

"No me he enterado de
mucho"

"Variante del SARS"

"Inició en el mercado por
noviembre, idk"

"No +info. Ya van algunas
muertes"

"Joder"

"Yep"

"Consigue munición.
Se viene Walking Dead
China 🧟‍♀️💀 jaja"

"Sin tantas temporada
Espero 🙄"

"Not funny 😒"

"Amargado"

"BTW. Mantente en contacto
si tú o tu familia necesitan
hablar llámame 🤗"

"Better call WangFei~
😘💕💕💕"

"Tú también"

"No te aísles como
siempre haces"

"Cuídate"

"Awwwwww 💖💖💖"

"Amargado-gege se
preocupa por FeiFei💖"

"FeiFei happy!💖"

"Cambio de opinión "

"púdrete 😒"

"😭😭😭"

"FeiFei no happy💔"

Dejó los mensajes de su amiga en visto y estaba a punto de regresar dentro de la casa, aún estaba oscuro, la noticia había llegado por la madrugada y no había podido dormir. Iba hacia la puerta cuando se fijó en un bulto abrazando sus rodillas entre los arbustos del jardín. Lo miro extrañado por unos minutos, las luces del jardín a penas iluminaban un poco la forma, se acercó hasta reconocer a Ming que jugaba con el pasto entre sus dedos.

Ming había tenido esa costumbre desde que era un niño, cada vez que algo no salía como él esperaba terminaba escondido entre los arbustos del jardín jugando con el pasto, un par de veces lo regañaron por hacer grandes círculos en el césped, casi parecía una especie de mini círculo de cultivo, de esos que se supone son evidencia de visitas alienígenas o algo así.

- Ming - llamó - ¿Qué haces?

- Uh... n-nada - mintió poniéndose de pie de un salto.

Aún tenía algo de sangre seca en la cara y su ropa aún estaba llena de lodo de la pelea de antes. También noto que sus ojos estaban hinchados y rojos, al parecer había llorado en su habitación y después movido al jardín para retomar su costumbre de cuando era niño. Jiang trató de no reír al darse cuenta que su segundo hermano seguía siendo un niño pequeño.

Limpio con la manga de su suéter algo del lodo mezclado con sangre que estaba pegada en la mejilla de su hermano.

- Deberías tomar un baño. Parece que alguien te dio una golpiza.

- Ca-cállate - bufó - ni siquiera duele... golpeas como gatito.

- Si... ya me dijeron algo similar. Aunque estoy seguro que no quisieras que XiuYa te golpeara.

Permanecieron en silencio un rato. Jiang tratando de limpiar una mancha en la mejilla de su hermano que se había secado con la manga de su suéter mientras Ming mantenía un puchero, vio que no iba a decir nada más, así que estuvo a punto de irse, pero Ming lo detuvo.

- Jiang-ge... - llamó - yo... Uh... fui... fui un idiota. Lo siento.

- ¿Es todo lo que-?

Iba a actuar de forma orgullosa y hacer que Ming se disculpara adecuadamente, pero cuando se giró se encontró con su hermano en un mar de lágrimas y mocos. Se quedó paralizado por un segundo, si había una cosa a la que era débil era a sus hermanos menores llorando, lo había sido cuando ellos eran niños y aún lo era, quizás incluso peor que antes. ¡Eso ni siquiera parecía un hombre adulto llorando! 

- ¡Pero no llores de esa forma! - exclamó asustado mientras buscaba un pañuelo que obviamente no tenía en su pantalón de pijama - te perdono, te perdono, ¡no llores!

- ¡Lo siento! - se disculpó de nuevo llorando - ¡soy un hermano horrible! ¡Dije cosas horribles! ¡No pienso nada de eso! ¡Soy una persona horrible por decir eso de ti! ¡Merezco que me odien!

- ... - soltó un largo suspiro, puso una de sus manos sobre la cabeza de su hermano y dio un par de palmadas en su cabeza, como si consolara a un niño pequeño - ya... ya... en serio, no estoy enojado. No eres una persona horrible... No te odio.

En su vida pensó que se encontraría en el jardín en mitad de la madrugada consolando a su hermano de 35 años que lloraba como un bebé. Terminó por abrazar a su hermano que continuó llorando a moco suelto en su hombro, al parecer el alboroto había llamado la atención de los demás en la casa, terminó con Shen Lei y Shen Yuan asomados por la puerta del jardín, observando la escena verdaderamente confundidos.

Shen Jiang soltó un largo suspiro, hizo a sus hermanos menores una señal para que ellos también se acercaran. En un par de segundos Ming ya tenía a sus tres hermanos consolándolo, mientras lloraba. Tardaron casi una hora consolando a Ming hasta que se calmó por fin, después de disculparse una decena de veces por lo que había dicho y con una taza de chocolate caliente.

*

Cuando amaneció, era una fría mañana de enero, la fría luz de la mañana entraba por su ventana. No sabía cuanto tiempo había dormido, Shen continuaba dormido en sus brazos, lo abrazaba con fuerza, observó algunas marcas rojizas en sus brazos, en la blanca piel de su pareja en sus brazos también se marcaban algunas pequeñas marcas rojizas en su cuello y hombros. Besó la frente del durmiente Shen en sus brazos, Shen Jiu soltó un quejido mientras lo abrazaba con más fuerza. 

- Despierta - susurró -  un viaje de 11 horas nos espera. 

- Si mis opciones son un viaje de 11 horas y quedarme atrapado con tu madre y hermana... lo segundo ya no se escucha tan mal - se quejo con voz ronca. 

Soltó una suave risa. Shen por fin lo dejó levantarse, aunque se giró y cubrió su cabeza con la manta de nuevo. Yue se levantó, buscando la ropa que estaba tirada en el suelo para vestirse. Vió su teléfono buscando noticias acerca de lo que ocurría en las ciudades vecinas, las redes sociales estaban llenas de noticias en ese momento, hablando de un virus que había surgido en un mercado, había muchas noticias de personas que huyeron antes del cierre. Pensó que realmente tenía un mal presentimiento sobre todo eso. 

- No pude preguntarte ayer. - comenzó cuando vió que Jiu al fin decidió sentarse en la cama - ¿Shen Yuan te dijo algo?

- No mucho. No sabía más de lo que tu y yo sabemos, le pregunté a mi antigua terapeuta y ella me dijo que por ahora hay pocos casos fuera de la zona cero... pero los desplazamientos pueden ser un problema... ellos no saben que esperar por ahora. 

- Uh... esto suena mal... 

- Yue... ocurre algo. ¿Puedes hablarme de eso? 

- Creo que... aún no estoy listo para darte demasiados detalles - susurró - por ahora... solo te diré que me reconcilié con mi mamá... las cosas... son muy diferentes a lo que creía. 

- Me sorprendió un poco cuando me llamó de esa forma - rió - supongo que... tengo su aprobación.

- La tienes - besó la mejilla de su pareja - Así que... no quisiera dejarla sola con ese sujeto ahora... 

- Entiendo... ¿qué quieres hacer? 

- ¿Qué puedo hacer? 

No respondió. Realmente no sabía que podía decirle a su pareja, quedarse en ese lugar podía convertirse en un problema, regresar haría que Yue se sintiera preocupado, llevar a su suegra a Beijing... comenzando porque no sabía si ella lo aceptaría, siguiendo porque no sabía como iba a explicar que hubiera personas entrando y saliendo de su sótano con ropas antiguas, cabello de comercial de shampoo y que uno de ello es un congelador gigante y musculoso que llega junto a un hamster... y que su sótano parecía salido de Harry Potter. O pensaba que era una especie de prostíbulo gay o estaba en una secta y hacían rituales en el sótano... que era el caso... ¡pero no iba a decir eso a su suegra!

Antes que pudiera decir algo más a Yue, ambos se sobresaltaron al escuchar un grito desde la sala del apartamento, se pusieron de pie y salieron corriendo de la habitación, Yue había tomado la escoba en su camino y Shen su abanico. Preparados para atacar a cualquiera que estuviera ahí... encontraron a Emi sobre una silla señalando una cucaracha en la esquina, mientras Yue Lan golpeaba la cucaracha con un zapato desde la seguridad atrás del sofá. Shen y Yue intercambiaron una mirada, lentamente fueron a refugiarse atrás del sofá. 

- ¿Enserio, Emi-jie? - pregunto Yue - ¡casi me da un infarto tu grito! 

- ¡Si tan valiente te crees entonces ve y mátala tu!

- ¿Qué? - Yue perdió todo el color del rostro. 

- ¿Shen? - se dirigió al de ojos verdes, Shen Jiu sintió un escalofrío. 

- Normalmente... XiuYa las mata... 

- . . . 

Ambas mujeres veían a los dos hombres que estaban a su lado, ambos escondidos en el pequeño espacio atrás del sofá. Incluso cuando estaba en Cang Qiong no era capaz de matar a uno de esos pequeños asquerosos seres del mal, terminaba llamando a Shang QingHua o a Ming Fang. Tuvo suerte que Feng Wu estuviera con él mientras limpiaba el apartamento porque ese lugar era un nido de insectos, cuando ordenaron la librería ambos descubrieron su fobia mutua por las cucarachas y tuvieron que llamar a Liu MingYan para que los ayudara, podía con los ratones, podía con serpientes, había matado diferentes bestias del doble de su tamaño en toda su vida... pero esos pequeños seres del mal... Agradecía que su pequeña hija fuera lo suficientemente valiente para acercarse y atacar a aquellas criaturas... Aún si se las comía después.  

- ¿¡No se supone que son hombres!? ¡Es su deber matarlas! - exclamó Emi casi a punto de llorar.

- ¡Igualdad! ¡Igualdad! - exclamó Yue Qi - ¡Si yo puedo cocinar tu puedes matar un bicho! 

- ¡Eso no es un bicho! ¡Es un ser del averno! 

- ¡Es un bicho!

- ¡Si es un bicho entonces ve y mátalo tu! 

- . . . uh... creo en... el respeto a la vida... 

- ¡No me jodas! 

Un golpe seco interrumpió la discusión de los dos hermanos, se giraron para encontrar al cuñado de Yue matando al ser maligno con un zapato. Emi corrió para abrazar a su esposo y agradecerle por haberlos salvado, Yue y Shen soltaron un largo suspiro, Yue Lan los miró a ambos. 

- En verdad... ¿dejan a su hija matar las cucarachas? - pregunto a ambos, decepcionada.

- Ella es la única lo suficiente valiente para acercarse a... 

Yue se detuvo a mitad de la frase. Por la impresión no se había fijado en el hematoma alrededor del ojo de su madre. 

- ¿Él te hizo eso? - preguntó enfadado. 

- Olvidalo... no le gusto que lo sacara de casa. Hubo algunos gritos hasta que un vecino dijo algo de llamar a la policía, luego se fue. 

- Pero... no escuchamos nada - hablo Emi también sorprendida - ¿QiQi? ¿Tu o Shen escucharon algo? 

- Nosotros...

- Claro que no escucharon nada - interrumpió Yue Lan en un suspiro - siempre que discutíamos cuando eran niños salíamos al balcón, no se escucha nada cuando cierras la puerta. 

- ¿Qué sucedió después de eso? - pregunto Yue Qi.

- Nada... me arrojó un adorno del estante y dijo que tenía hasta finalizar este mes para buscar donde vivir porque si no era capaz de seguir sus ordenes, entonces no seguiría viviendo en su casa... dijo más cosas sin importancia... no importa. 

- ¿Te dijo que tenías que irte de esta casa? - pregunto Yue Qi. 

- ¡No puede hacer eso! - exclamó la hermana de Yue - ¡No puede sacarte de tu casa!

- De hecho puede... él tiene razón, esta es su casa, él ha pagado por ella. Además... yo... no quiero quedarme aquí más tiempo. 

Los hermanos Yue se miraron entre ellos. No podían dejar a su madre sola en esos momentos, pero Emi vivía a kilómetros de distancia en un país extranjero junto a su esposo y Yue no sabía cómo iba a explicar a su madre porque había hombres musculosos con cabello de comercial y túnicas antiguas que entraban y salían del sótano de su casa... o porque el sótano parecía la casa de Sabrina Spellman o sacado de un episodio de Supernatural. 

- ¿Encontraron un vuelo para regresar a Madrid? - pregunto Yue Lan a Roger quien no había dicho nada desde que apareció. 

- No hay vuelos disponibles hacia Madrid, además... el aeropuerto de Wuhan esta cerrado, tendríamos que ir hasta Beijing para tomar un vuelo en dos días. 

- Supongo que QiQi y XiaoJiu podrían llevarlos ¿no? - pregunto mirando a los otros dos. 

- Nosotros... 

- Sí aún tienen dos días... quizás podríamos quedarnos un día más - sugirió Shen Jiu. Yue Qi sonrió, tomó la mano de su pareja y le dió un apretón como agradecimiento. 

- ¡Sí! - exclamó Emi con una sonrisa - después de todo, es Año Nuevo, deberíamos celebrar junto a la familia al menos esta noche. 

- Si quedan atrapados aquí conmigo no quiero quejas - suspiro Yue Lan. 

- ¿Qué tan mal puede ponerse esto en un solo día? 

*

Shang QingHua no sabía si debía sentir pena por sus amigos o reírse de ellos. 

Shen Yuan y Shen Jiu habían terminado encerrados en el mundo moderno por culpa de un virus que se había propagado de forma incontrolable en los últimos días. Solo habían pasado un par de semanas desde que se había anunciado la cuarentena y parecía que ambos estaban a punto de matara todos y a ellos mismos. 

- Te dije que era mejor quedarse en Cang Qiong y pasar Año Nuevo, Hermano Pepino - le recordó Shang QingHua a Shen Yuan. Si las miradas mataran, Shang hubiera sido apuñalado por mil flechas en ese momento. 

- Cállate... - gruño Shen Yuan. Se encontraba en el jardín de su casa y se escuchaba a Luo Jin jugando de fondo - maldición... amo a mi familia... pero sí continuó escuchando las discusiones de Ming y su ex creo que voy a volverme loco. 

- Ja... tu no estas atrapado a 60 kilómetros de Wuhan con tu suegro homofóbico llamando todos los putos días para gritar sobre el desalojo y pasan personas en trajes blanco fumigando las calles - añadió Shen Jiu, él se encontraba sentado en el alfeizar de la ventana de la habitación de Yue, su cabello recogido en una cebolla y lo que parecía ser una playera que usaba como pijama. - Además que tu casa es un puto palacio comparado con esta caja de zapatos... sin ofender. 

- No ofendido - se escuchó la voz de Yue Qi de fondo. 

- Por cierto ¿saben algo de eso? del desalojo, digo...

- Shen Ming está ayudando con eso... 

Si había algo que Shen Yuan podía confirmar de su segundo hermano es que era un buen abogado... y en ese caso ambos Shen agradecían que su especialidad fueran los divorcios. Después de explicar toda la situación a través de una video-llamada y hablar con el dueño del apartamento había llegado al acuerdo de no desalojar a Yue Lan (quien ahora prefería volver a su nombre de soltera: Wang Lan) además de comenzar con los trámites del divorcio, Shen Ming pensaba que podía tener un buen acuerdo para Wang Lan en donde ella terminara en una buena posición debido al maltrato físico y psicológico, las lesiones y la denuncia que Yue Qi había sufrido tantos años atrás era un buen precedente para comenzar. 

- Es bueno saber que los hermanos del Hermano Pepino son buenos en sus trabajos - rió Shang QingHua. 

- Sí... aunque espero no necesitar los servicios de Jiang nunca más en mi vida - suspiro Shen Yuan. 

- jaja, quien sabe, Hermano Pepino, digo... ahora que no pueden hacer mucho es posible que le des un hermanito a XiaoJin muy pronto~

- Recuerda que tienes que reemplazar un harem entero, tienes mucho trabajo para dar herederos, Yuan. - se burlo Shen Jiu. 

- JAJAJAJA ¿¡VES!? ¡Incluso el Hermano Villano esta de acuerdo conmigo! - exclamó Avión riendo a carcajadas. 

- ¡JiuJiu! ¡No apoyes a Avión! - bufó - Para tu información... las paredes de esta casa son delgadas, no puedes hacer nada aquí sin que todo el mundo lo sepa.

Shen Yuan no iba a mencionar que la noche anterior Ming había entrado furioso a su habitación mientras estaba en pleno papapa con Binghe porque no podía dormir por el crujir de la cama y los gemidos... Le parecía extraño que nadie más se hubiera quejado del ruido en todo ese tiempo, incluso cuando pregunto a Shen Lei y Shen Jiang y habían habían dicho que no habían escuchado nada, estaba seguro que no hacían tanto ruido. 

- Extraño mi librería... extraño a XiuYa... - se quejó Shen Jiu - ¿Estas cuidando bien de mi hija, cierto? 

- Ella está bien - Shen Yuan cambió la perspectiva de la cámara, mostró a la gata que se encontraba durmiendo bajo el sol en las escaleras del jardín - creo que también te extraña... el otro día había robado mi abanico. 

- Sí... suena a algo que ella haría - escucharon la voz de Yue Qi, pronto lo vieron en la pantalla de Shen Jiu, al parecer se había acercado para ver a su hija de cuatro patas. 

- Oh... Hola Yue - salud Shang con la mano. Yue devolvió el saludo con la mano. 

- ¿No se supone que estás en una reunión, QiQi? - preguntó Shen Jiu a su pareja. 

- Es muy aburrido... y quería ver a mi hija... también la extraño. - se quejó. 

- Regresa al trabajo - regaño, Yue Qi se fue después de quejarse un poco.

- ¿QiQi?  - pregunto Shen Yuan tratando de no reír - no creí que fueras de los que ponía motes cariñosos, JiuJiu

- Cállate... al menos no termino con alcohol en el culo por llamar a mi pareja de una forma cariñosa. 

- ¿Algún día vas a superar lo del alcohol? 

- Nunca. 

- Cambiando de tema - volvió Shang a llamar la atención, para ese momento tenía a dos niñas que le habían quitado el moño que siempre llevaba y comenzaban a hacer trenzas con su cabello - ¿tienen idea de cuándo podrán salir de ahí? En Cang Qiong comienzan a preguntarse por Mu shidi y Shen QingQiu. 

- No has dicho nada, ¿cierto? - la pregunta fue de ambos Shen. 

- Nope. Les he dicho que tienen algunos problemas para regresar, pero no he dado muchos detalles... aunque Shangmeng-shixiong está preocupado por ambos. 

- Ese tonto siempre se preocupa por todo - suspiró Shen Jiu - dile la verdad... y asegura que estamos bien. 

- De hecho... creo que podrías decir la verdad a todos - añadió Shen Yuan - Jiang-ge teme que esto no termine pronto y pueda empeorar... aún no saben mucho del virus. Ni siquiera saben bien cómo prevenir más contagios.

- Aquí prácticamente tienes que bañarte en la puerta cada vez que entras o sales... si tienes la suerte de poder salir siquiera. Algunos apartamentos vecinos han sido completamente sellados... tchs... la hermana de Yue ha estado enferma los últimos días, no es el virus... pero se niega a salir de su habitación. 

- Las cosas no están tan mal en Beijing... deberían regresar cuando tengan la oportunidad. - recomendó Shen Yuan. 

- Quizás ambos deberían regresar a Cang Qiong si las cosas empeoran - aconsejó Shang QingHua. 

Shen Jiu soltó un largo suspiro. A pesar que en una situación como esa se escuchaba como algo verdaderamente tentador... seguía sin sentir a Cang Qiong como un verdadero hogar. Empujó con el pie a Yue Qi que parecía estar quedándose dormido en la reunión que tenía, gracias al cierre había recibido la noticia que iniciaría su capacitación de su nuevo trabajo en línea, ya había escuchado a su novio quejarse que sería aburrido estando presente, pero al parecer eso se duplicaban estando en línea. Yue tomo su pie y beso sus dedos de forma juguetona, Shen trato de no reír con aquel gesto. La falsa tos de Shen Yuan y Shang QingHua le revelaron que no había sido tan discreto. 

- Parece que quien dé un heredero a la familia Yue será el hermano Villano a este paso - se burlo Shang QingHua, Yue Qi no pudo evitar soltar una carcajada mientras Shen Jiu soltaba un '¡Cállate!' - oye... ¿por qué Yue Qi escucha nuestra conversación si se supone que esta en una junta y tu tienes audífonos? - preguntó, de hecho... Shen Yuan también tenía curiosidad. 

- Porque es un niño al que le gusta escuchar conversaciones ajenas cuando esta aburrido... - se quejo mientras Yue Qi se recostaba de la pared cerca de la ventana y Shen Jiu comenzaba a acariciar su cabello, por suerte eso quedaba fuera de la pantalla de los otros dos - tomó el otro audífono... 

Los otros dos transmigradores rieron un poco. No era extraño que sus parejas estuvieran mientras hablaban entre ellos... realmente no había nada que ocultar de aquellas conversaciones... además... tampoco era como si Shen Jiu tuviera muchos lugares donde tener privacidad en esos momentos. Las veces que necesitaban completa privacidad para una llamada usaban o el baño del apartamento o el balcón.

En la pantalla de Shen Yuan se escuchó una voz lejana que parecía llamarlo. 

- Tengo que irme. Hablamos otro día. - se despidió. 

Cerraron la llamada. Shang QingHua soltó un largo suspiro... realmente le alegraba no haber viajado al mundo moderno esa vez. 

Ahora... era mejor que terminara de ordenar el papeleo de An Ding antes que se siguiera acumulando... la ausencia de dos Señores de Pico realmente había multiplicado su trabajo. Cuando Shen QingQiu regresara... realmente lo haría pagar... o al menos haría que lo invitara a unos fideos. 

- Muy bien - se puso de pie y miró a sus dos hijas - ¿quién quiere ayudar a su papá a ordenar papelería?

Las gemelas se vieron la una a la otra, tanto LiXue como Shui salieron corriendo de la oficina de su padre, dejando a Shang solo de nuevo. 

*

Shen Jiu bajo del alfeizar de la ventana y se sentó recostó en la cama de nuevo. Yue continuó jugando con los pies de Shen Jiu en silencio mientras fingía prestar atención a la conferencia en la que se encontraba. 

La rutina que llevaban era bastante aburrida, pasaban parte del día en la habitación, tanto Yue como su cuñado habían regresado al trabajo recientemente, Yue había tenido suerte porque le habían permitido recibir la capacitación por medio de videoconferencias en las que a veces terminada dormido si Shen Jiu no estaba atento a su pareja, las estrategias de Yue para no dormirse en mitad de algo aburrido iba desde hacer garabatos en algún cuaderno hasta molestar a Shen, desde hacer trenzas en su cabello, masajear sus pies hasta... otras cosas... debía admitir que había sido divertido. 

Algunos días comían todos juntos en el salón (excepto por Emi, que llevaba días sin salir de su habitación) y otros días preferían comer en la habitación o ver una serie junto a Wang Lan en la sala. Terminaron adictos a una telenovela latinoamericana, al punto que el fin de semana pasado se habían quedado hasta la madrugada, habían acordado solo ver 2 o 3 capítulos por las tardes... aunque a veces Shen Jiu y Wang Lan olvidaban que hora era, cuando Yue Qi o Roger les decían que ya llevaban más de 10 capítulos. A Yue le alegraba que su pareja y su madre se llevaran bien... pero ahora estaba celoso de una telenovela. 

- Yue, presta atención - volvió a regañar a su pareja. 

- Ya va a terminar - susurró besando el pie de Shen - es muy aburrido... 

- Si te comportas... tendrás un premio. 

Yue sonrió. Si había algo que descubrió durante ese tiempo encerrados... fue que Yue se comportaba como un gato en celo. Hasta el momento... seguía siendo bastante placentero.

Cuando la conferencia termino, Yue a penas había cerrado la computadora y dejado a un lado de la cama antes de saltar a besar a su pareja, Shen casi se arrepintió de prometer una recompensa... Aunque... no había nada mejor que hacer.




[ Mini extra (ノ◕ヮ◕)ノ*.✧ ]

No podía dormir.

Shen Ming había tenido mucha paciencia con su hermano y su cuñado, su habitación estaba al lado de la de Shen Yuan, durante la adolescencia soporto noche tras noche de su hermano gritando mientras veía un anime o leía alguna novela, había soportado los gritos de frustración de su hermano maldiciendo las obras o sus autores, sus exclamaciones de cómo tal cosa no estaba bien hecha, no tenía sentido o porque los personajes eran todos idiotas... ¡Pero nunca pensó llegar al día en que tuviera que soportar los gemidos de su hermano! ¿¡Cómo era siquiera que nadie más los escuchaba cuando parecían gatos en el tejado!?

Salió de la cama, azotó su propia puerta al salir y abrió la puerta de la habitación que estaba al otro lado del pasillo, la que se supone era de Jiang.

- ¿¡Cómo ustedes dos soportal tal ruido!? - entró gritando.

Mu QingFang y Shen Jiang lo vieron confundido por un segundo, estaban sentados en la cama con la computadora frente a ellos y audífonos puestos, al parecer veían alguna película o serie como lo hacían cada noche antes de dormir (¿Cómo lo sabía? porque un par de veces los descubrió hablando de porque los capítulos de Grey's Anatomy no tenían sentido y el enorme error que era entrar a cirugía con aretes... Sí... Por un lado gemidos y al otro discusiones de dos nerds de la medicina). Jiang se quitó los audífonos que tenía puestos y le ofreció una bolsa que guardaba en su cómoda.

- ¿Necesitas tapones para los oídos?

Ming estuvo a punto de decir algo, pero decidió aceptar los tapones que su primer hermano le ofrecía y regreso a su habitación, Jiang volvió a recostarse de la cabecera de su cama y QingFang se recostó de su hombro.

- ¿No sería mejor que pusiéramos el talismán para anular el sonido en su habitación de nuevo? - pregunto Mu QingFang.

- No... Deja que sufra un poco más.










*

*

*

*

*











Necesitaba la escena de Ming sufriendo por escuchar a su hermano en pleno papapa y los otros dos todos tranquilos viendo una serie 😂 por si queda duda: Mu QingFang (al conocer a su shixiong y Luo Binghe) recomendó a Jiang a poner un talismán para cancelar el sonido exterior en todas las habitaciones, después de la discusión que Jiang y SM tuvieron, Jiang quitó el de la habitación de SM ¿por qué? porque sí 😘

También quería agregar algunas escenas del pasado de Yue Qi y  al fin fui capaz de dar el contexto que quería para Yue Lan, en verdad sufrí por no poder decir nada sobre ella 💔ahora el padre de Yue... ese sí que arda en el infierno, por suerte Ming es buen abogado... aunque es malo resolviendo sus propios problemas 💔 le hace falta un Liu Qingge en su vida😏 (okno xD no se hagan esperanzas, Ming es 100% hetero).

Siento que el capítulo fue un poco apresurado, pero queda poco por resolver y lo que se va a resolver esta en los últimos capítulos, incluso sentí que el capítulo fue más largo de lo necesario. Realmente tarde mucho en finalizar este proyecto, me encariñe mucho con la pareja de Yue Qi y Shen Jiu, pero ya no hay mucho que contar de su relación 💕 a este punto... No sé si haré la tercera parte de esta serie que estaría principalmente enfocada en Luo Jin y... otras cositas por ahí, quizás cierto Bingge y su A-Yuan (que, de hecho, si tengo ganas de escribir una historia de Bingge y A-Yuan xD)... Pero ya veremos 😘

Y eso ha sido todo, realmente estoy feliz de terminar este fic... Y por eso he dedicado todas mis fuerzas en terminar los capítulos que están pendientes 😅, así que posiblemente esta semana finalice todo.

Gracias por seguir leyendo y hasta la próxima. 💕

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