17. Anillos y regalos extraños
- Estos me gustan.
Yue Qi había señalado un par de alianzas doradas con una línea negra de diamantes, una más delgada que la otra. Shen Jiu seguía pensando como había terminado en una joyería viendo anillos con su novio, esa mañana había sido arrastrado por Yue Qi a una caminata por Central Park, antes que terminara desmayado después de solo correr poco menos de 15 minutos. Por poco sentía que iba a vomitar el delicioso desayuno que había comido en el hotel, habían sido los mejores huevos y salchichas que había probado nunca... y los panqueques con fruta tan fresca... quizás era el mejor desayuno que había tenido en su vida y ahora estaba a punto de vomitarlo por acceder a correr junto a su novio... o prometido. Aun no se decidía a si llamarlo "prometido" de ahora en adelante, al menos dentro de su cabeza. Había sido tan extraño acostumbrarse a decirse a sí mismo que Yue Qi era su novio que ahora llamarlo "prometido" y en algún momento "esposo" sería muy extraño.
Mientras se encontraba pensando en aquello y tratando de no vomitar, Yue Qi lo llevó a una joyería que no estaba muy lejos. Sabía que Yue Qi lo había hecho como un impulso, de todas formas pensaba que no iban a tener tanto dinero como para comprar una banalidad como lo era un par de anillos de promesa o compromiso o... como fuera que Yue Qi los hubiera llamado segundos antes de entrar a la tienda.
- Me gusta el precio - bufó Shen Jiu, Yue Qi hizo un gesto en señal que estaba de acuerdo... excesivamente caros - aun tenemos que regresar a China ¿recuerdas?
- Bueno... quizás algo un poco más pequeño...
- Esto es absurdo... no necesitamos esto.
- No. Pero me gusta.
Shen Jiu puso los ojos en blanco, a pesar de sus quejas no había dejado de ver un par de anillos que habían llamado su atención, un par de simples anillos plateados Con una línea que los dividía, podía ver que tenían algo grabado dentro, eran simples... Perfectos.
- Me gustan estos - los señaló, Yue Qi sonrió un poco.
- A mi también...
- ¿Lo dices solo porque dije que me gustan?
- No soy capaz de mentirte - Shen Jiu giró los ojos - en serio... Me gustan, además... no me importa tanto el anillo como su significado - recordó mientras besaba la mano del de ojos verdes - te amo... y te amaré siempre.
- Más te vale... O meteré ese anillo por tu garganta.
- Me lo tendría merecido.
Shen Jiu pensó que realmente quería golpearlo en ese momento, pero sonrió un poco sin poder evitarlo. Al final...compraron los anillos, en su interior había un solo carácter escrito, en el de Yue Qi estaba escrito (九) y en el de Shen Jiu simplemente (奇). Yue Qi no dejo de presumir su anillo con todo el mundo a donde quiera que fuera, de no ser por él nadie en la casa-mansión de los abuelos de Shen Yuan se hubieran enterado y no hubieran sido felicitados y regañados por todo el mundo... Shen Jiu compró una cadena y llevó su anillo en su cuello. Shen Yuan casi lo ahorca con la cadena por no llevar el anillo en su dedo como corresponde.
*
Al regresar a su apartamento en el segundo piso de la librería en Beijing, China, Shen Jiu y Yue Qi fueron sorprendidos por una lluvia de serpentinas de parte de Feng Wu. También habían algunos carteles de "felicidades" y un pastel sobre la mesa. Shen Jiu hizo una nota mental sobre cambiar la cerradura para que el hermano del antiguo dueño de ese cuerpo pudiera volver a visitarlo de forma inesperada.
- ¿Qué... es todo esto? - pregunto Shen confundido.
No era posible que supiera que se había casado ¿cierto? (una boda improvisada y muy cutre... pero boda al final de cuentas, llevaban el papel en una de las maletas, incluso doblado y quizás manchado del café de esa mañana en el aeropuerto) además ¿no debería estar más bien furioso porque no lo había invitado a la boda improvisada y cutre que había tenido?
- ¿Creías que no iba a saberlo? - pregunto con tono burlón y una sonrisa - vamos... soy tu hermano, aún cuando no quieras me voy a enterar cuando pasan cosas importantes en tu vida.
- Feng... - hablo Yue por fin - yo... nosotros... realmente pensábamos decirte pero... paso tanto y tan rápido que...
- No te culpo, Yue - lo interrumpió - realmente cualquiera podría dejarlo pasar, no necesitas disculparte.
- Oh... Es... bueno que lo comprendas, con el viaje... Realmente fue...
- Sí. No necesitan preocuparse.
- ¿Quién te dijo? ¿Fue Shen Yuan? - pregunto Shen Jiu, juraba que si había sido Shen Yuan lo iba a... iba a quemar parte de su colección de PIDW, sí... eso le dolería mucho más que cualquier golpe que fuera capaz de darle antes que Luo Binghe le arranque los brazos... y de alguna forma el celoso medio demonio estaría igual de agradecido que enfadado, no era un secreto que a Luo Binghe no le gustaba esa ridícula colección. Aun cuando se trataba de él mismo.
- Nadie me dijo - aquello sorprendió a ambos - llevo los días...
- ¿Días?
Shen Jiu hizo las cuentas. Habían pasado 10 años desde que llegó a ese mundo después de la sobredosis que mató al dueño original (o que al menos lo dejó como verdura después de seguramente celebrar su cumpleaños... después de una bolsa de papas, cinco cervezas, una botella de vido, un whisky y dos limones...), era octubre, había salido de rehabilitación hace... oh... así que a eso se refería Feng. Una pantalla azul con un enorme emoji sonriente y pequeños fuegos artificiales de pixeles saltó frente a sus ojos.
[ Felicidades querido usuario. Recibe +10 puntos de afinidad con Feng Wu y recibe la ficha de 10 años de sobriedad ]
Escucho la voz del Sistema y vió la pantalla frente a él para leer el mensaje un par de veces.
'Gracias por nada, como siempre'
Cerro la pantalla, recordaba que el Sistema le había dado esas alertas cuando recibía una nueva ficha o cuando Xiang WangFei lo felicitaba. Esa ocasión no había asistido a las juntas en dos semanas debido al viaje. Realmente no las necesitaba, nunca las había necesitado, pero por alguna razón le agradaba asistir a esas reuniones... a pesar de no ser alcohólico o drogadicto en su vida pasada admitía que tenía problemas, esas tontas reuniones lo habían ayudado de alguna forma.
- 10 años sobrio... - susurro a Yue - había olvidado que hace una semana se cumplían 10 años...
- ¿Lo habías olvidado? - pregunto Feng mirando confundido a Shen - ¿sucede algo? ¿acaso... has...?
- No... no pasa nada - negó - no he tomado ni nada... Yue es testigo de eso ¿verdad?
- Sí... incluso... brindamos con agua en...
Shen Jiu pateo la espinilla de Yue para que se callara, cosa que funciono porque Yue sintió un escalofrío recorrer todo su cuerpo gracias al golpe. Feng Wu parecía estar tratando de decifrar todo.
- ¿Para qué creían que era la celebración? - preguntó por fin.
- Bueno...
Se miraron entre ellos. Pero antes que pudieran decidir entre decirle la verdad a Feng Wu o fingir demencia y decir que estaban muy cansados por el viaje (cosa que era cierta) y que solo querían tomar un baño y dormir (quizás algo de sexo en el proceso, pero nada de fiestas), pero antes que pudieran decir algo Feng Wu se fijo en el anillo en el dedo de Yue Qi y soltó un grito.
- ¡te dije que no debías llevarlo en la mano! - regaño Shen Jiu al otro.
- Me gusta como se ve. A-Jiu debería usarlo también.
- ¿¡Por qué demonios no me dijeron que planeaban casarse!? - exclamó.
- No lo planeamos. Fue estilo Las Vegas - respondió Shen Jiu - y... ni siquiera es importante, no tiene valor en este lado del mundo.
- ¿¡Cómo que no tiene valor!? ¡No pude estar en la boda de mi hermano y me dices que no tiene valor porque leyes estúpidas dicen que no tiene valor! ¡Por supuesto que tiene valor! ¡Es muy valioso!
- Baja la voz antes que alguien te escuche y te manden a la cárcel - bufó Shen Jiu cruzándose de brazos. Yue Qi trato de no reír al notar que las orejas de su novio se encontraban rojas, había apartado la mirada para que nadie viera lo avergonzado que se sentía en ese momento.
Antes que pudiera decir alguna otra queja tratando de restar importancia a lo que habían hecho en Nueva York, Feng Wu ya se encontraba abrazando a su medio hermano menor y le dió un par de vueltas mientras lo felicitaba y lloraba de la felicidad porque su hermanito se había casado (¡ni siquiera era su hermano! ¡ese idiota había muerto hace 10 años!), Shen Jiu volvió a quejarse... pero se rindió después que Feng Wu y Yue Qi comenzaron a hablar sobre planes a futuro... dejó de prestar atención después que mencionaran algo sobre tres hijos y un hamster.
*
- Deberías tener una ceremonia... quizás en Cang Qiong.
Shen Yuan no había dejado de insistir en aquello. Había pasado más de una semana desde que regresaron de Nueva York, Shen Yuan y Luo Jin no habían regresado aún al otro mundo, dijeron algo de pasar unos días más en el mundo moderno (Shen Jiu suponía que tenía que ver con las vacunas del pequeño un cuarto demonio... aun no sabían que tanto las enfermedades del mundo moderno podrían afectar a un pequeño 3/4 humano que viene de un mundo de fantasía... o del peligro que sería llevar una enfermedad de ese mundo al otro... no quería ser el causante de una epidemia), ya que Shang QingHua había regresado al otro mundo un día después de regresar a China, Luo Binghe había tenido que regresar por una emergencia (pero suponía que estaría de regreso antes del anochecer para preparar la cena de su esposo y su hijo), incluso Shen Jiang había aprovechado los días que aun le quedaban de vacaciones para ir a Cang Qiong, al parecer había prometido algo a Mu QingFang.
Así que lo único que tenía para entretenerse era visitar a sus padres (donde Ming aun se encontraba quejándose por las demandas de divorcio, manutención y custodia de su hijo las 24 horas del día) o ir a la librería con Shen Jiu. Al menos su sobrino era adorable y nunca se cansaba de él.
- Sabes que no puedo hacer eso - le recordó Shen Jiu mientras daba otro bocado de papilla de zanahoria y manzana a su pequeño sobrino que había estado jugando con los guisantes de su plato e ignorando los "avioncitos" que su tío enviaba con papilla. - el líder de secta no necesita enterarse de estas cosas ¿verdad, A-Jin? Qi-shibo no tiene que enterarse que jiujiu se casó con tu Qi-ge.
- No hagas eso, es aterrador para mi - dijo, Shen Jiu puso los ojos en blanco y causo la risa del pequeño niño que comía - Estoy seguro que Zhangmeng Shixiong estaría muy feliz si supiera que te has casado con Yue Qi.
- Conozco a mi Qi-ge, Shen Yuan... sé que él estaría feliz por mi pero... me niego a hacerle eso.
Yue QingYuan seguía enamorado de Shen Jiu. Ambos lo sabían mejor que nadie, había pasado mucho tiempo para que lograra superar lo sucedido con Qi-ge, para poder aceptarlo, era una cicatriz dolorosa que ahora al menos podía ver... pero para Qi-ge... para él esa herida seguía tan fresca como el primer día. No había nada que pudiera hacer. No era como si pudieran viajar a otro universo y conseguir un Xiao Jiu que hubiera perdido a su Qi-ge. Shan Yuan soltó un suspiro.
- Sí... supongo que será mucho más difícil que Shagmeng shixiong te supere...
- No insinuas que fue fácil para mi el hablar con tu esposo y... disculparme... a mi manera.
- Sigue siendo una disculpa... aun si fue a tu manera.
- Bien. Entonces comprendes que Shangmeng shixiong tiene que hacer lo mismo. Necesita superar lo que sucedió entre nosotros y... hacerlo a su manera.
- Necesitaste de reuniones semanales de AA y terapia para hacerlo.
- Nunca dije que sería fácil. Podrías iniciar un grupo.
- ¿Cómo lo llamare? ¿Corazones Rotos Anónimos?
Shen Jiu trato de no reír al imaginar aquello, sería más como una reunión del harem de Shen Yuan... y TianLang Jun. Algo digno de ver, pero no tenía tiempo para escuchar anécdotas de corazones rotos y Shen Yuan siendo Shen Yuan.
- Tendrás que decirle en algún momento - suspiró de nuevo Shen Yuan - no puedes ocultarle esto toda tu vida. Lo descubrirá en algún momento.
- Pruebame.
- ¿Qué?... ¡No! ¡No te estoy retando ni nada!
- Mejor callate... me debes mi regalo de boda.
- ¡Ni siquiera me invitaste, escoria! ¡No te debo nada!
- No eres un buen amigo.
- ¿Qué dices? ¡soy tu mejor amigo!
- Los amigos no le roban el cuerpo a sus amigos... lo vuelven gay y le entregan tu ex trasero al discípulo que más odiabas.
- Creí que ya habíamos superado eso... además, tu ya eras gay, eres más gay que yo, si alguien volvió gay a alguien fuiste tu a mi. ¡Tu cuerpo me volvió gay!
Y eso había sonado muy mal, ambos se dieron cuenta de eso y no pudieron evitar reír, a la risa de ambos adultos se unió el pequeño niño de 1 año... bueno, al menos él no iba a recordar lo que habían dicho aquella tarde.
*
Esa tarde Shen Jiu había visitado Cang Qiong, solo había ido porque Shen Yuan lo había invitado tantas veces que recibir otra invitación sería molesto. Lo que no esperaba era que Shang QingHua le entregara un extraño artefacto antes de despedirse y entrar por el portal para regresar a su apartamento.
- Lo encontramos en un viaje y sigo sin saber de que se trata - explico Shang QingHua mientras revisaba el extraño quemador de incienso.
Lo habían dejado en medio de la mesa y los tres lo observaban extrañados. El quemador había sido revisado por muchas personas, Shen QingQiu había sido uno de los primeros en examinar dicho artefacto y no llegó a una conclusión, Shang QingHua lo había entregado a Yue QingYuan para que lo guardara pensando que quizás era solo un adorno... pero el líder de secta lo había regresado a la mañana siguiente sin demasiadas explicaciones, trato de entregarla a Liu Qingge para que este verificara si no se trataba de algo peligroso, al día siguiente le lanzo el quemador mientras gritaba y se veía muy rojo. Lo había dejado en el Palacio del Desierto Helado del Norte, pero su Dawang le pidió que lo sacara a la mañana siguiente. ¡No tenía sentido!
- Te lo dije. Es solo un viejo y feo quemador de incienso - bufó Shen QingQiu - no tiene nada de especial ¡ya lo revise lo suficiente!
- ¡Por eso le pido al otro señor de Qing Jing que lo haga!
- No me metas - bufó Shen Jiu - no soy Señor de Pico.
- Pero lo fuiste... y, lo quiera o no, eres el sujeto más inteligente de toda la novela después del protagonista y...
- Y también una escoria que maltrata a un niño sin razón... eso... no me hace el favorito de los lectores.
A veces aún era extraño pensar que era el personaje de una mala novela porno, se suponía que aquello debía causarle una crisis existencial ¿cierto? bueno... al parecer aun trataba de aceptar aquello, que todo lo que había pasado en su vida era culpa de alguien quien había controlado cada uno de los aspectos de su vida, su infancia, lo que pasó en la mansión Qiu, parte de su adultez antes de morir por una desviación de qi y volver a vivir. Había conocido a muy pocas personas religiosas en su vida, pero lo que decía era como culpar de todo a dios... y por su suerte, podía romperle la nariz a ese 'dios' si quería, cosa que seguramente muchas personas desearían en su vida.
Pero no lo hacía... porque el esposo de 'dios' lo convertiría en un adorno de jardín.
Observó el quemador de incienso en el centro de la mesa, el humo del incienso hacia círculos y desaparecía. Pensó que era muy feo para ser un adorno.
- ¿No sé supone que eres el 'dios' de este mundo? ¿No deberías saber qué es esto y para qué sirve si tú lo creaste? - pregunto Shen Jiu a Shang QingHua.
- Ugh... Desde que este mundo se unió al mundo del borrador de mi otra novela no sé cuántas cosas de mis borradores ahora son reales - suspiro haciendo un puchero - no soy capaz de saber todo lo que pasa en los mundos que cree... soy un dios muy malo.
- Considerando lo que le haces a tus personajes... Sí, debes ser el peor.
- ¿Has leído el libro de Job?
Quien hizo la pregunta fue Shen Jiang que entraba en la casa de bambú. Había estado trabajando con Mu QingFang toda la tarde, curando quemaduras y huesos fracturados, llevaba una curiosa mezcla entre el uniforme de Qiang Cao (que le habían dado porque su ropa de había manchado) y su bata... y sus zapatos para correr favoritos.
- ¿Qué cosa? - pregunto Shen Yuan confundido.
- Biblia cristiana... Su ganado muerto, sarna, sus hijos muertos, su mujer lo deja y todo porque Dios apostó contra el diablo por la fidelidad de Job... - respondió Shen Jiang - ¿quién sería el diablo en esta situación?
Shang QingHua señaló a Shen Jiu y Shen Yuan. Shen Jiang pensó que tenía sentido.
- ¿Te vas a quedar aquí de nuevo? - pregunto Shen QingQiu a su hermano mayor.
- Sí. Fang quiere enseñarme a preparar algunos ungüentos más tarde y le prometí que a cambio le enseñaría los in vitro.
- Genial... Tendrás una cita para ver fetos congelados.
- No es una cita. Le muestro el laboratorio de mi lugar de trabajo a un colega interesado por la medicina tanto como yo.
- Nerd.
Dijera lo que dijera, aquello sonaba como una cita. Shen Jiu pensaba si era momento de decirle a ambos Shen que el mayor de los Shen comenzaba a enamorarse de Mu QingFang, miro a Shang QingHua que había sacado una bolsa de maníes con chocolate y...pensó que era muy pronto para hacerlo.
- Te lo regalo, quizás sus efectos sean más evidentes en el otro mundo - suspiro Shang QingHua a Shen Jiu - si descubres algo...
- Sí... Te llamaré si Cthulhu aparece en mi salón.
Después de de ir eso, tomo el quemador de incienso y regreso a su apartamento en el otro mundo.
*
Cuando Yue Qi llegó a casa encontró a Shen Jiu sentado frente a la mesa del salón, con varios papeles con notas inentendibles con la letra de Shen, algunas palabras tachadas y otras cosas subrayadas en todo el suelo, algunos libros abiertos en páginas que se refería a los sueños y con otras páginas marcadas. Habían muchas notas adhesivas en las paredes cercanas y sobre la televisión.
- Supongo que esta noche no podremos ver televisión - dijo mientras saludaba a su pareja con un beso en la mejilla - hola... ¿puedo preguntar?
- Avión encontró esta cosa en uno de sus viajes... no han podido encontrar nada extraño en él, pero cuando Qi-ge me vió con esta cosa en la mano me dijo que era mejor que me deshiciera de él... y dijo algo sobre sueños extraños. - respondió rápidamente mientras continuaba tomando notas sobre algo - hasta ahora... no he avanzado más que Shen Yuan. No encuentro nada extraño en esta cosa y he probado tantos inciensos como los había en la tienda.
Y era verdad. Yue Qi pensó que para ese punto el apartamento olía como una de esas clínicas de acupuntura que había de camino a su universidad y estaba tan lleno de humo que casi envidiaba a Shangai aun cuando el balcón y la ventana de la cocina se encontraban abiertas. Se sentó al otro lado de la mesa y se recostó de esta, miró el feo quemador de incienso que se encontraba en medio de la mesa.
- ¿Crees que es un objeto mágico? - preguntó con curiosidad.
- Todo lo que viene de ese mundo es un peligro - respondió - aunque... shen Yuan dijo que no había rastros de energía negativa, tal vez sea solo una baratija.
Realmente parecía que solo se trataba de una vieja baratija que no valía nada. Aunque eso no explicaba porque Yue QingYuan y Liu Qingge lo habían regresado, ni siquiera explicaba porque ambos se veían tan avergonzados de hablar de ese objeto cuando lo vieron en el momento que Shang Qinghua entró con este a la casa de bambú de Qing Jing. Quizás lo dejaría como decoración en la librería si resultaba ser solo un tonto quemador de incienso. Estaba demasiado cansado como para pensar en eso.
- Supongo que solo otro regalo tonto de Shang QingHua - bostezo mientras se estiraba un poco en su lugar - ¿tienes que estudiar o hacer algo?
- Nada con urgencia.
Shen Jiu miró a Yue Qi, se había levantado de frente a la mesa de café de la sala y se encontraba preparando algo de té para ambos. Había pasado suficiente tiempo junto a Yue como para saber que cuando decía "nada con urgencia" significaba "tengo dos proyectos que van a llevarse la mitad de mi vida y cordura y debo iniciar lo antes posible o terminaré sin dormir tan poco como un cirujano en su residencia", se puso de pie y quitó los implementos a su novio.
- Hazlo.- ordenó.
- Es en serio... no es para tanto.
- La última vez que me dijiste eso terminaste desmayado en mitad de la sala y dormiste casi dos días consecutivos.
Yue Qi sonrió un poco. Beso la frente del de ojos verdes.
- ¿Te he dicho que te amo?
- Lo suficiente como para que no pueda olvidarlo - respondió mientras le daba una suave patada en el trasero al otro - ahora ve. Pediré algo para comer y limpiare todo esto.
- Gracias.
Shen Jiu mordió su labio para no sonreír mientras veía a Yue Qi alejarse hasta la habitación del apartamento, preparó el té y pidió una pizza para la cena, cuando dicha rueda de masa, carne y queso llegó llevó un par de rebanadas a Yue Qi que se encontraba enterrado entre libros con su computadora en el regazo y regresó al salón. A pesar de haber dicho que limpiaría todo, se quedo en el suelo viendo el quemador de incienso, pensó que quizás era un artefacto lo suficientemente antiguo como para que no pudieran reconocer el poder que tenía, si tuviera algunos libros de Qing Jing quizás sería más fácil. Había leído la mayoría en el pasado, en su vida pasada, pero no tenía tan buena memoria como para recordar las mil y un cosas insignificantes que había leído contra las 10 cosas importantes que podía encontrar en uno de cada cien libros viejos y que muchas veces estuvieron a punto de volverse polvo entre sus manos. Decidió dejar todo e ir a la habitación.
- Creo que tendré que visitar de nuevo Qing Jing. Tal vez haya algo importante en algún libro - se quejo mientras se cambiaba la ropa, Yue Qi desvió la mirada de su computadora un par de veces mientras Shen se desvestía - deja de verme el trasero.
- ¿Me culpas? Es lindo y redondo.
- ¡Cállate! - bufo tratando de reír - yo no me la paso viendo tu pene.
- ¿No lo haces?
Shen Jiu le lanzó el cojín que tenía más cerca, Yue Qi rió un poco mientras el cojín chocaba contra su espalda y caía al suelo. Ya no podría concentrarse de nuevo en su trabajo y decidió girarse a ver a su novio quien ya se había cambiado el pantalón y puesto una de las sudaderas de Yue para dormir. Subió a la cama junto al de ojos verdes.
- Así que... ¿volveras a ir a... al otro mundo?
- Podrías venir conmigo este fin de semana - sugirió - tendremos tiempo para viajar un poco.
- ¿No sería extraño tener a dos Yue QingYuan en el mismo lugar? - pregunto soltando una suave risa - La cara de tu Qi-ge ya debe ser conocida. También la tuya por Shen Yuan... ver al líder de secta y al señor del Pico Qing Jing en una cita sería un escándalo.
Sabía que había una razón más profunda para que Yue Qi no quisiera acompañarlo. Sentía curiosidad por ese mundo, lo había demostrado las pocas veces que había aceptado acompañarlo, pero de alguna forma también respetaba que el tiempo que pasaba en ese mundo era el tiempo que él tenía para estar con su viejo amigo de la infancia, un tiempo en el que no se sentía bien interfiriendo. Pero quería compartir esa nueva libertad de viajar al mundo que una vez fue lo más parecido a su hogar con la persona con quien ahora compartía su vida.
- Ja, si no reconocen a Shen Yuan de quién hay incluso canciones populares contando su vida sexual dudo que nos reconozcan a nosotros - se burló - y se divulgó por ahí que Shen QingQiu tiene un gemelo, así que no importa... - suspiro, añadió en voz baja - maldito barrendero.
- ¿El barrendero?
- El hombre que barre la entrada - se volvió a quejar Shen Jiu soltando un bostezo en mitad de la frase - tiene un particular gusto por los chismes.
Yue Qi sonrió tiernamente.
- Vamos a dormir, Baobei - sugirió besando la frente del de ojos verdes, Shen Jiu lo miró un poco adormilado - mañana hablaremos de ese viaje.
- Solo quiero saber que vendrás - insistió volviendo a bostezar, acomodándose en la cama matrimonial que compartían.
- Deja que lo piense - respondió en un suspiro, abrazando a Shen Jiu por la cintura y besando la punta de su nariz - aun no me acostumbro a esto de vivir en un isekai.
Shen Jiu trato de no reír con aquella respuesta, apagó la luz de la lampara que estaba en la mesa a su lado y cerro los ojos quedándose dormido casi instantáneamente entre los brazos de Yue Qi. Aunque... aquella noche, sus sueños fueron... extraños.
*
*
*
*
*
Creo que ya muchos saben que sucederá en el siguiente capítulo 👀
Y sí, voy a reescribir ese capítulo ([ Extra 4 ] Sueños extraños de incienso) con unos pocos cambios, por ejemplo... digamos que vamos a ver más la perspectiva de Yue Qi ante los acontecimientos. Si creían que era un pícaro por lo del cuero... pues aun no han visto nada~
Well... pasaron muchas cosas en menos de 5000 palabras xD y nos acercamos a un pequeño evento que realmente me emociona y toma lugar en año nuevo del año 2020... hay que revivir un poco el trauma de vez en cuando (?). Digamos que si lo ponemos así, este capítulo se lleva a cabo más o menos por 2018 o así, las fechas y yo no somos buenos amigos, así que perdón por los errores temporales. Literalmente tengo que llevar una línea de tiempo con los acontecimientos para no equivocarme tanto.
¿He dicho que me encanta el ship entre Shen Jiang y Mu QingFang xD? no sé, simplemente me enamoré de ellos dos juntos y, por como van las cosas, quizás ya se hayan dado cuenta que Shen Jiang es tan denso como Shen Yuan... es cosa de familia. Y la verdad no sé como explicar el estado de Shen Jiang del todo... ósea, como autor, sigo persiviendolo como un personaje asexual pero no arromantico... más bien comencé a verlo como que él creía que la atracción sexual y romántica era lo mismo y, hasta ahora que ya se ha comenzado a aceptar a sí mismo, comienza a darse cuenta que esta enamorandose de Mu QingFang... y ni aun así. Pero pronto se dará cuenta. Tal vez...
Y eso es todo por ahora. Gracias por leer y hasta la próxima!!!
💚
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top