• Capítulo 89 •

Sarutobi Amaterasu.

Una guerra para conseguir al Kyūbi y Gyūki para unir a todos los demás bijūs en uno solo y despertar a Jūbi: la bestia de diez colas. Convertirse en el jinchuriki de ese monstruo para aumentar los poderes de su jutsu ocultar y unificar todo el mundo ninja. Eso fue lo que entendí de toda la explicación de Madara.

Parece irreal que algo así exista además de que mencionó a un hombre con un doujutsu especial llamado rinnegan que llegó a controlar tal poder monstruoso. Había leído sobre esa persona en los libros de mitos y leyendas del mundo ninja: Rikudou sennin ese era su nombre.

Ahora que Madara ha declarado la cuarta gran guerra ninja los cinco kages se han puesto de acuerdo y crearon la alianza shinobi. Todos quedaron en apoyar dando cualquier tipo de información para que está guerra quedé ganada.

A Naruto y al hermano menor de Raikage los mandaran a una isla aislada de cualquier contacto y difícil de encontrar para que Akatsuki no pueda obtener a las bestias con cola que tienen sellados en su interior.

Y seguramente yo no podré participar en la guerra, Onoki-sama me encerrara hasta que Kakashi-sensei venga por mí para que me dé un castigo. Si, ahora él es el nuevo sexto hokage ya que Danzo ha perdido confianza con los demás kages.

Me quedaré en una sola y fría celda jugando con una pelota de hule, usaré un uniforme gris que me distinguirá por ser una prisionera, mi título de kunoichi será removido, comeré pan con agua, trabajaré cortando piedras con un pico, estaré encadenada de los pies para que no pueda escapar. Si, me espera una bonita vida cuando salga de esta cosa.

Me senté entrelazando los pies y me crucé de brazos en señal de que me había rendido, ya no importaba Sasuke ahora que me enteré que Naruto estaba cerca del lugar, él podrá encargarse de la situación —Papá, Asuma-nii por fin pagaré todos mis crimines—. sonreí cerrando los ojos unos segundos, nunca me sentí feliz porque me iban a llevar a la prisión.

...

Ahora que todos los kages quedaron de acuerdo para formar la alianza junto con los samuráis solo faltaba pedir permiso a los señores feudales para que aprueben está alianza.

Ay será el responsable de liderar toda la alianza shinobi, Gaara irá a informarle todo a Kakashi ya que es el único ninja de confianza que conoce, Onoki ayudará con todo tipo de información que conozca sobre Madara.

—¿Que vamos a hacer con ella? Se ha infiltrado en la reunión sin que nos diéramos cuenta—. comentó Ay señalando con el pulgar la pila de tierra.

El viejo de las dos escalas contestó —Cuando venga el hijo del colmillo blanco a la próxima reunión la entregaremos. La llevaré a mi aldea para ponerle un sello ya que el jutsu que la mantiene encerrada no durará mucho...—

Onoki fue interrumpido bruscamente por el Raikage que alzó la voz —No. Nosotros nos la llevaremos, la nube puede mantener más tiempo tu jutsu sin necesidad de poner sellos. Si escapa—; convirtió su mano derecha en puño hasta tronar sus dedos —le romperé el cuello—.

La Sarutobi tragó en seco aterrada por la amenaza del raikage, su boca cerrada empezó a temblar del mismo modo que sus manos y tocó su cuello aumentando la velocidad de su respiración —Prefiero ir con el viejo en lugar del él. Se que Onoki-sama me tendrá compasión y se negará en qué el Raikage me llevé—. cruzó sus brazos asintiendo varias veces seguidas con la cabeza.

—Esta bien, encárgate de ella—. dijo Onoki como respuesta.

Ella se quedó boquiabierta tartamudeando —A-ah—. sintió como varios kunais se clavaron en su espalda con la palabra "traición" gravada en ellos.

Onoki uso un jutsu para que el peso de la montaña de tierra se pusiera más ligera y el Raikage la cargará con su única mano sin tener dificultades.

El camino hacia Kumogakure fue el peor viaje que pudo haber recibido Amaterasu, el Raikage hacía mucho alboroto con movimientos bruscos debido a que su pelea con Kisame fue difícil después de perder el brazo por culpa del amaterasu de Sasuke. Pero con la ayuda de su hermano menor Bee fue posible derrotarlo. Posteriormente de varios días de camino por fin llegaron a la aldea de la nube.

Amaterasu no sabía que pasaba en el exterior a causa de que su vista no veía nada más que oscuridad, ni siquiera tenía noción del tiempo solo podía escuchar los sonidos y voces de las personas.

De repente la montaña de tierra que la tenía encerrada fue azotada bruscamente contra el suelo —Darui, llevá esto a mi oficina—. Ay se lo acercó al mencionado para que lo llevará a su oficina donde acostumbra a pasar la mayor parte del tiempo encerrado.

—A la órden—. contestó el moreno peliblanco rascando su nuca. Se acercó a la montaña de tierra sólida y lo miró unos instantes asimilando que estaría muy pesado para él. Después de unos segundos se digno en cargarlo con ambos brazos, le sorprendió su peso liviano como una pluma que hasta podía cargarlo con un dedo.

En el transcurso del camino por las calles de Kumogakure, Darío ignoraba las miradas y susurros de la gente de la nube. Cuando llegó hasta la oficina de su líder con mucho cuidado la dejó a un lado de un sillón grande y largo del Raikage para después retirarse del lugar suspirando del cansancio.

Sarutobi Amaterasu.

Estoy segura que han pasado muchos días desde que me tienen en contra de mi libertad en esta cosa del viejo de la roca. No toleraba estar en un espacio tan reducido que no podía ni estirarme para que esté maldito dolor de espalda se me quitará.

Mis pies y brazos estaban entumecidas no podía moverlos a mi gusto y mí cuello me dolía. Di un profundo respiro cansada de estar aquí hasta que de repente la tierra se empezó a cuartear, luego los pedazos de tierra sólida empezaron a caer dejando pasar los rayos de luz.

Luego toda la montaña de tierra se rompió en miles de pedazos dejando ver a una persona que no esperaba ver con vida. Era Tsunade-sama enojada. ¿Cómo lo sabía? Esas cejas completamente fruncidas al igual que sus ojos me miraban fijamente mientras tenía su puño al frente dándome a entender que fue ella quién lo rompió de un solo golpe.

—Tsunade-sama...— estaba por decirle lo feliz que me sentía verla una vez más, pero no me dejó terminar de hablar a causa de que me tomó del cuello de mi abrigo bruscamente.

—¡¿Se puede saber en qué estabas pensando?! ¡Ir con Danzo e infiltrarte en la reunión de los kages! ¡Estás en serios problemas!— exclamó a punto de estallar en llamas y estaba en su derecho de estarlo, lo que hice no tiene precio pero tenía mis razones.

—Lo siento—. bajé la cabeza mirando el suelo sintiéndome avergonzada por mis acciones. Los demás Kages solo estaban viendo como mi orgullo se iba cayendo con una disculpa sin embargo eso no importaba. Incline mis cejas para mirarla de nuevo —Tengo mis razones Tsunade-sama, yo hice todo eso por Naruto y Sakura. Si no lo hacía la vida de Sasuke iba a correr peligro, solo quería reparar mis errores—.

Esos ojos marrones inspeccionaron mi cara buscando indicios de que dijera la verdad, pasados los segundos me soltó del cuello haciendo que cayera sentada al suelo —Supongo que liberarse de Danzo debió ser duro—.

Negué cuando usó la palabra “debió” en tiempo pasado —No, aún tengo que arreglar asuntos con él...—

Nuevamente fuí interrumpida —Danzo está muerto, Sasuke lo ha asesinado—.

Abrí los ojos desmesuradamente abriendo un poco mi boca para liberar un ligero suspiro, sentía como un sentimiento de alivio, felicidad y algo de tristeza iba invadiendo mi cuerpo. Me era difícil creer lo que dijo Tsunade-sama, era imposible que Danzo estuviera muerto, su brazo que estaba repleto de sharingan de los cadáveres de los Uchiha's lo hacía una persona invencible.

Además el ojo de Shisui... ¿que paso con el? Nunca le creí a Danzo cuando dijo que iba a remover el permiso para que mataran a Sasuke, la razón por la que acepté uniéndome a Raíz fue porque iba a matarlo cuando tuviera la oportunidad.

Suena estúpido e imposible pero como se trataba de Naruto y Sakura estaba dispuesta a dar mi vida. Pero Sasuke se ha encargado de él y eso me alegraba, ahora un gran peso se me quitó de encima —Es una buena noticia—. musité con una sonrisa ladina y toqué mi pecho.

—Ahora que Danzo ya no está vivo eres libre de elegir tu camino Amaterasu—. posó su mano en mi cabeza para transmitirme confianza y seguridad —Espérame afuera, la guerra está por acercarse y debo atender asuntos con los demás kages—.

Me paré del suelo acatando sus órdenes —Entendido—. le dediqué una sonrisa y fruncí mi ceño. Salí del lugar cruzando el gran portón de madera, creo que era la oficina del Raikage si no me equivoco.

Tío Danzo. No. Danzo, te aprovechaste de mi para poder cubrir algunos de tus crimines, le quité el ojo y maté a Shisui para que tú no te ensuciarás las manos. Me has mentido diciendo que todos los Uchiha's eran seres de odio puro, pude seguir creyéndote pero por suerte conocí a Kagami.

Me hizo ver qué juzgar a las personas sin conocerlas antes estaba mal, los Uchiha's son personas que llegan a amar mucho pero si pierden a esa persona especial el odio los controlan.

Juzgué a Shisui diciéndole malo cuando en realidad él solo quería evitar el golpe de estado que quería su clan. Nunca entendí porque me usaste a mí y no a otra persona. ¿Que me hace diferente a las demás personas?

Es algo que nunca lograré saber.

Por fin estaba en Konoha, ya extrañaba mi aldea después de tantos días afuera. Desearía tomar un buen baño y comer algo dulce pero ya no tendría esos privilegios porque iré a prisión.

Estaba en la oficina temporal de Tsunade-sama mientras que construían la otra donde siempre acostumbraba a estar. Tenía mis brazos cruzados sobre mi espalda y movía constantemente mis pies impaciente —¿Que harás ahora Amaterasu?— esa pregunta por parte de ella no me la esperaba.

Sinceramente solo quería que dijera “estas arrestada por cometer crímenes” —Iré a prisión que es a donde pertenezco ahora—.

—Es cierto que debes ir a prisión por asesinar a Uchiha Shisui y quitarle su ojo, trabajar en la oscuridad con Danzo, tratar de asesinar a Sasuke, ocultarme cosas sobre Danzo y muchas más cosas—. recargó sus codos sobre el escritorio.

—No es necesario que me recuerde todo eso Tsunade-sama—. miré a otro lado sonriendo sarcásticamente —Solo debe decir que iré a prisión y listo—.

—No. No diré eso—.

—¿Eh?— la miré de nuevo desorientada.

—Todo lo que has hecho son crimenes que debes pagar con cárcel, pero todo eso lo hiciste porque estabas cegada por Danzo. Te dejaste llevar por sus ideales creyendo que todo lo que decía y hacia estaba correcto. No irás a prisión por dos razones—. alzó dos dedos al aire.

—La primera es: te daré una segunda oportunidad, se que eres una buena chica capaz de proteger a tu aldea y personas que son importantes para ti y eso es digno de una kunoichi. Y dos: no te mandaré a prisión cuando se está acercando la guerra, tus habilidades con las armas, el Katon y Futon, y el sharingan son esenciales en el campo de batalla—.

Sus palabras me conmovieron, Tsunade-sama comprendía que lo que hice estuvo mal pero fue porque Danzo me tenía cegada además reconocía mis habilidades de ninja —Pero...— no iba a aceptar eso, yo debo ir a prisión.

—No hay peros. Irás a la guerra a demostrar quién es Sarutobi Amaterasu. Muéstrame de lo que eres capaz en el campo de batalla—.

—¡Esta bien!— no había forma de hacer cambiar de opinión a la hokage. Si quiere que vaya a la guerra entonces iré.

—Ahora ve a los campos de entrenamiento y entrena todo para mejorar tus jutsus y la resistencia de ese sharingan—.

—¡Lo haré!— fue lo único que dije antes de salir del lugar para entrenar. Ya no había vuelta atrás, Akatsuki a declarado la guerra para conseguir a los bijūs que tenía Naruto y el hermano menor del Raikage, pero las cinco grandes naciones lo evitaremos. Daré todo para proteger a Naruto, no, a todo el mundo ninja de Uchiha Madara y Akatsuki.

Jisub Yoshimura
Daiki Yoshimura

Y con este capítulo entramos al arco de la guerra que marca casi el final de este fanfic super largo, y he decir que me siento emocionada al igual que Daiki por subir todo y finalizar esto de una buena vez. Y también para leer los comentarios xD

Daiki: Con los comentarios que voy leyendo de algunas lectoras no creo que resistan el capítulo final que es el más fuerte de todos.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top