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—Hazte a un lado—. le dijo de mala manera Adachi al hombre que hacía de compañero de equipo de Kabuto.

—¡Que dices!— reprochó el hombre con gafas negras y máscara que cubría solo su boca.

Kabuto y los dos hombres estaban a punto de entrar a la torre para entregar los dos pergaminos, pero Adachi detuvo a uno de ellos para sacarlo del equipo y tomar su lugar.

—Son órdenes de Orochimaru ¿o acaso piensas desobedecer?— se le acercó amenazante con un kunai en mano.

—Tsk—. fue lo único que dijo, no quería desobedecer a su amo, no le quedó de otra que obedecer al castaño.

Dio media vuelta y se alejó de los tres, pero Adachi lo tomó del hombro e inmediatamente lo asesinó clavándole un kunai en el pecho.

Kabuto y su otro compañero no se inmutaron para nada, sabían que el castaño tenía sangre fría y cualquiera que se cruzará en su camino terminaba muerto.

Seguido de su acción lo despojo de sus anteojos, máscara y toda su ropa que traía encima, y se deshizo del cuerpo tirándolo lejos de la vista de los demás.

—Como siempre tan frío—. comentó Kabuto sonriente y acomodó sus anteojos con sus dedos.

—Cállate—. dijo Adachi asqueado de tener que usar la ropa de alguien más, mirando a Kabuto por el hombro.

El plan de Orochimaru era poner aprueba a Amaterasu, si la suerte lo acompañaba Adachi pelearía con ella. Quería ver a la elegida con el mismo chakra que esa persona, pelear, en pocas palabras ver su coraje de pelea antes de usarla.

Los tres se adentraron a la torre listos para ejecutar el nuevo plan.

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Amaterasu quito las vendas de sus manos ya que podrían entorpecer su batalla que tendría con el castaño.

Dejando a la vista los huecos de sus manos, donde podías ver a través de ellas.

Dio un profundo suspiro, tranquilizando sus nervios que tenía, lo cual superó no del todo. Aún podía sentir varias miradas en ella.

El castaño sin esperar un segundo más sacó un kunai de su porta armas ubicado en su muslo derecho y corrió con dirección a la pelinegra a toda velocidad.

La Sarutobi reaccionó rápido y desenvainó el ninjatō, provocando que ambas chocarán entre si produciendo un ruido cortante. La chica dio un ágil salto atrás debido al pequeño dolor se empezó a sentir en sus manos.

Pero un simple dolor no la detendría. Adachi volvió a correr pero esta vez usando cuatro kunais, dos en cada mano.

Pero ahora su correr era mucho más rápido que antes —Muy lenta—. en solo un segundo pudo herirla cortando la tela de sus calcetines largos cafés y su piel, la sangre empezó a salir lentamente de las heridas.

Haciendo que cayera arrodillada al suelo debido al dolor, pero solo por unos segundos, ya que recobró su parar.

—¡Cha! ¡Vamos Amaterasu, no te quedes ahí parada!— gritó enojada Sakura al ver que solo su amiga se quedaba parada sin hacer nada. Daba varios puñetazos al aire.

Pero en realidad estaba pensando en un plan, uno que no sería fácil de hacer y qué tal vez no resulté, pero el que no arriesga no gana.

Tiró al suelo su arma y sacó sus kamas, dio un profundo suspiro anhelando en que funcionará.

Posicionó su pie izquierdo atrás del derecho, inclinó su espalda y empezó a correr más rápido gracias al apoyo que recibió se su pie trasero.

Tomó una hoz en cada mano alargando la cadena, al estar unos centímetros frente a su objetivo, clavó la hoz izquierda al sedimento y empezó a dar vueltas alrededor del castaño.

Logrando encadenar todo su cuerpo y dejándolo inmóvil. Para que no pudiera liberarse sujetaba la hoz derecha con ambas manos con todas sus fuerzas.

Adachi que no parecía hacer ningún movimiento para librarse solo la miró incrédulo.

—¡Eso es Amate-chan, ya lo tienes, ahora dale un golpe para que ganes!— gritó Naruto emocionado.

—Es hora de acabar con esto—. anunció la Sarutobi declarándose ganadora. Alzó su pie al aire para poder darle una patada en el abdomen ya que tenía las manos ocupadas.

Adachi solo dió un suspiro molesto, antes de que el pie llegará al su estómago utilizó su mano para detenerlo —¿Creíste que algo tan tonto como eso me detendría?— manifestó ya hartó de tanto juego.

Antes de que pudiera reaccionar notó que el castaño ya no se encontraba atrapado entre las cadenas de las kamas —¿Que...?— no pudo formular su pregunta debido que le fue proporcionado un gran golpe en su costado derecho.

Salió disparada hasta chocar en la pared del terreno, tosiendo sangre.

—¡Amaterasu!— gritaron sus dos equipos temporales.

Sakura solo miró sorprendida al castaño mientras debatía en su mente en bajar o no al terreno para sacarla de ahí, si no lo hacía terminaría herida, pero no quería hacerlo o pensaría que no le tiene confianza.

—Eres una tonta—. dando un salto largo tomó a la pelinegra de los cabellos quien mantenía sus ojos cerrados, con una mueca en sus labios, tratando de contener el dolor —Idear un plan así de patético sin tener en cuenta las habilidades de tu oponente es estúpido—. acercó sus labios a la oreja de Sarutobi —No vales para ser una ninja, alguien que viene de un gran clan y no puede ni hacer un simple jutsu solo es una vergüenza para su propio clan e incluso para tu padre: el hokage— le susurró al oído.

—A-ah si...— balbuceó sonriendo. Sentía tantas de darle un buen golpe o algo para que dejará de subestimarla. No por ser alguien sin ningún talento natural no significa que no sea fuerte.

"Entrenar duro" esa era la única solución para superar todos tus obstáculos.

Rápidamente Amaterasu sacó un kunai de su porta armas e hizo un corte cerca de la mano de Adachi provocándole una pequeña herida. Dió varios saltos atrás, alejándose de su enemigo. Con brevedad sacó todas las shurikens que portaba de su pequeña mochila y los lanzó.

Mientras Adachi estaba distraído tratando de esquivar y desviar las shurikens con un kunai, Amaterasu formó sellos en un dos por tres —Por favor, funciona— suplicó en su mente —¡Katon: Goukakyuu no jutsu!— gritó tomando una gran bocanada de aire, que pronto liberó en una gran bola de fuego, esta vez de un gran tamaño.

Todos gimieron de sorpresa ya que nadie de esperaba un jutsu por parte de la Sarutobi, sabían que ella no podía realizar jutsus como ese aún.

Hiruzen mantenía su mirada sería en su hija, pero por dentro estaba orgulloso que inclusive una pequeña sonrisa se formó en su rostro.

Orochimaru sonrió mientras tenía los brazos cruzados. Era de esperarse de alguien que tuviera ese chakra en su interior.

La bola de fuego salió disparado a Adachi, quién rápidamente se percató de ello, pero no lo suficientemente. Por muy poco logró escapar del fuego, pero su máscara no, dejando a la vista su cicatriz en forma de X.

Amaterasu abrió los ojos desmesuradamente, había visto esa cicatriz antes y sabía de quién se trataba. Frunció su ceño recordando lo que había hecho esa persona.

—¡Tú!— dijo furiosa señalando al castaño —¡No creas que dejaré pasar por alto lo que me hiciste!— exclamó acelerando sus pasos.

Aunque antes no se sentía capaz de hacerle frente a ese hombre, después de su logro repentino al crear la bola de fuego, esta vez se sentía alguien más fuerte y capaz.

Un gran error de Amaterasu.

Adachi chasqueó la lengua, volteó a ver a Orochimaru; quien solo asintió con la cabeza.

Entendió perfectamente lo que quiso decir, está vez sin ningún arma en manos volvió a correr hacia la Sarutobi, esta vez sería con puro taijutsu.

El castaño daba continuamente patadas en dirección al estómago de la pelinegra, pero ella los detenía con sus brazos. Trataba de no usar toda su fuerza, tenía que mostrar piedad ante ella, y no lo hacía por qué quisiera, así fueron las órdenes del hombre serpiente.

Pero si continuaban así, la pelea nunca acabaría, tal vez usar un poco de fuerza mayor no le haría ningún daño. Amaterasu volvió a formar sellos y grito el nombre del jutsu —¡Katon: Goukakyuu no jutsu!— pero esta vez no salió la gran bola de fuego como la primera vez fue todo lo contrario.

Su cara de chasco de todos al mirar la bolita de fuego —Parece que solo tuvo suerte la primera vez—. habló Asuma —Nada ha cambiado en ella.

Adachi sonrió victorioso, había confirmado sus sospechas. Esta vez terminaría con esta absurda pelea. Tomó un kunai del suelo y volvió a correr, pero esta vez con intensiones totalmente distintas y cambiando un poco el plan.

Más veloz que la última vez, se acercó a Amaterasu, proporcionadóle un golpe en la cara con su puño libre. Al caer al suelo el castaño se posó sobre ella realizando varios cortes un poco profundos sobre todo su cuerpo.

Rasguños en su ropa y piel que poco a poco se pintaban de sangre.

Amaterasu quejaba de dolor mientras trataba de quitárselo de encima, moviendo sus manos y dando de patadas, pero era inútil, su fuerza era superior a la suya.

—¡Esto es malo!— exclamó Ino asustada, si no detenían pronto la pelea, terminaría mal.

—¡Oiga Asuma-sensei, detenga está pelea!— ordenó Shikamaru preocupado por su compañera —Si continúa así, terminará por matarla— habló con razón.

—Tienes razón Shikamaru—. Asuma bajo de su lugar de un ágil salto, empezando a correr mientras le gritaba a Adachi que se detuviera.

El mencionado volteó a verlo serio, alzó en kunai al aire. Asuma pensó que daría el golpe final dándole en algún punto vital, pero fue todo lo contrario. El arma fue clavada en el suelo cerca de la cara de la pelinegra; que no dejaba de sangrar su cuerpo.

—Me rindo—. anunció Adachi sereno a Hayate alzando ambas manos al aire y recobrando su postura. Asuma se detuvo sospechando.

Hayate lo miro extrañado, tosió y asintió —Por que el oponente se rinde, Sarutobi Amaterasu es la ganadora final—. la miró quien por suerte seguía consiente, pero no por mucho tiempo.

Sakura bajo rápido, al acercarse a la pelinegra la tomó por la espalda para abrazarla, mientras contenía su furia —Había dicho que te protegería, pero no pude hacer que detuvieran la pelea—. dijo acariciándole la cabellera.

Se culpaba asi misma, pero sabía que nadie tenía la culpa, la única culpable era Amaterasu, por no mostrar que todas esas palabras de querer ganar en acción.

Aún era débil y ella lo sabía, pero siempre se mantenía con la frente en alto pensando que siempre podría ganar sin ningún jutsu.

—Descuida... se que no lo hiciste por qué tenías confianza en mí y eso me alegra—. entre una sonrisa adolorida acarició la mejilla de la pelirosa.

Los médicos ninja llegaron con una camilla, con mucho cuidado posaron su cuerpo en el objeto mencionado para llevarla al hospital lo más pronto posible.

Hiruzen tapó su ojos con el gorro hokage siguiendo con la vista como se la llevaban —Esto me da una mala impresión— meditó.

La segunda fase de los exámenes ha terminado, dejando como resultado a once ganadores.

Sakura quería ir a visitar a Amaterasu al hospital, pero no pudo debido a que Kakashi la detuvo.

Al tomar un papel de la caja que traía Anko para saber con qué persona le tocaba luchar, su cuerpo se tenso al ver la tabla de combate y comparar los números. Su mente recordó unas palabras.

—Tuvimos una buena pelea, espero que tengamos otra.

—Claro, y la próxima vez yo te ganaré.

Aquellas palabras que no quería que fueran a mencionadas por ninguna de las dos.

Sakura pelearía con Amaterasu en la última fase de los exámenes chunin.

Kanae Yoshimura
Daiki Yoshimura