• Capítulo 40 •

...

—¡No puede ser! ¡No puede ser, demonios!— Amaterasu gritaba en su interior y también maldecía a la persona responsable de hacer los exámenes.

La primera fase del examen es escrito, y estudiar para ello, no estaba en los planes de Amaterasu.

Le había tocado estar sentada un lugar frente de Sakura y atrás de Naruto y Hinata.

Pedirle las respuestas era una opción, pero temía a que fuera descubierta por los examinadores, encargados de vigilar que ninguno hiciera trampa.

Mientras leía las preguntas super difíciles de la hoja posada en el escritorio, jalaba su cabellera con nervios, desesperación, miedo, muchas emociones negativas mezcladas.

Observó de reojo como Ibiki; responsable de aplicar el examen, la observaba, así que con la punta del lápiz un poco cerca de la hoja, fingió estar escribiendo, como si supiera todas las respuestas.

Ibiki al posar su vista en otra persona, dio un suspiro de alivio.

—Demonios, un examen escrito, y lo peor, es teórico—. suspiró nuevamente cerrando los ojos un momento —Debí prestarle atención a Sakura cuando "estudiaba" con ella en su casa—. dejó caer su cabeza al escritorio, golpeándose levemente.

Convirtió sus manos en puños al aire y apretó el lápiz con fuerza, aumentado su nivel de confianza, diciendo en su mente: Tú puedes.

Tomó la hoja y leyó la primera pregunta nuevamente, pero la soltó rendida.

No puede ser... ¡no puede ser! Cada pregunta se pone más difícil— su confianza le duro unos segundos. Volvió a leer las preguntas —Esto es un examen para convertirse en chunin, pero estas preguntas son para alguien mucho más avanzando... no tengo otra opción que copiar, pero ¿a quién?— de reojo miró por todo el salón, buscando a alguien quien quiera pasarle las respuestas.

Giró un poco su cabeza para mirar a Sakura de manera discreta, no podía pedírselo, no había forma. Observó a Naruto quien estaba frente, pero lo descarto, obviamente estaba en sus mismas condiciones o peor.

Bajo su cabeza mirando sus piernas, que no dejaban de moverse debido al miedo de reprobar. Si no pasa el examen quedaría fuera, aunque no se sentiría tan mal, ya que no tenía equipo y nadie la culparía.

En eso recordó algo antes de llegar a la academia.

Mientras comía un desayuno tranquila, su padre llegó y aclaro algo —Recuerda que harás éstos exámenes sola, no puedes pedir ayuda a nadie. Si lo haces haré que te reprueben— le advirtió a su hija con su semblante serio, mientras seguía fumando de su pipa.

Sabía que diría algo así, por lo que solo asintió. Seguía sin saber las causas de sus estúpidas decisiones.

Pero ¿si alguien de mi equipo me ayuda, sin habérselo pedido?— había posibilidades de que alguien le ayudase, pero quería saber las consecuencias.

No pasaría nada, ellos decidieron ayudarte por voluntad propia.

Solo tenía dos opciones, esperar la ayuda de uno de sus dos equipos o reprobar.

—En estos momentos desearía tener el sharingan para copiar los movimientos del lápiz o el byakugan para mirar a través de los exámenes sin que se den cuenta—. nunca le importaba tener un poder ocular, lo veía como un arma de doble filo —Por primera vez envidio a Uchiha y Hinata— apoyo su mejilla en la palma de su mano.

Los examinadores empezaron a nombrar los números de los equipos que ya reprobaron, algunos eran golpeados debido a que reprochaban. Eso hizo ponerla más nerviosa, golpeando repetidas veces la punta del lápiz contra la hoja.

Pero sus golpes cesaron de repente, no podía mover su mano, algo la estaba deteniendo.

—No puedo mover mi...— no entendía que pasaba, hasta ver una pequeña sombra sujetarla por su misma sombra.

Entendió al instante de quién era esa sombra. Shikamaru estaba usando su técnica en ella.

Su mano izquierda empezó escribir todas las respuestas del examen.

—Kagemane no jutsu completado¹— el chico de coleta sonrió mientras escribía las respuestas que le había pasado Ino.

La mano de Amaterasu imitaba los movimientos de su compañero. Aunque no sean un equipo permanente, no dejarían que nadie, quien haya sido parte del Ino-Shika-Chō reprobará. Es una regla básica de los ninjas; siempre apoyar a sus compañeros se equipo.

—Gracias Shikamaru, no, gracias al equipo Ino-Shika-Chō. Les debo una—. agradeció mentalmente a sus compañeros de equipo con una sonrisa de alivio.

Conseguir información, de eso trataba el exámen. Aunque todos se habían dado cuenta a excepción de Amaterasu y Naruto.

Sin no hubiera sido por la ayuda del comentario motivador de Naruto, Amaterasu hubiera abandonado el exámen en la décima pregunta. Ibiki le provocaba mucha inseguridad y miedo, pero al final no lo hizo.

Cómo resultado, pudo pasar a la segunda fase de los exámenes chunin.

Una mujer de pelo morado; Anko, explicó en que consistía la segunda fase mientras Naruto repartía las hojas de consentimiento a los demás.

—Amaterasu—; la de cabello rosa la llamó, acercándose para aclarar una duda —así que, desde que recibamos nuestro pergamino, seremos enemigas ¿no?— con una mueca en su rostro y sus manos juntas preguntó, estrujando con fuerza la hoja.

Lo que menos quiere es tener que lastimar a alguien importante para ella, no podría haberle daño. Amaterasu ha sido una gran amiga, había formado una amistad inquebrantable.

Negó con la cabeza y le dedicó una sonrisa de confianza —No, aunque tengamos pergaminos distintos, no sería capaz de hacerte daño. Pero, si llegas a tener problemas— cerró los ojos mostrando sus dientes —solo grita y estaré contigo, antes de lo canta un gallo—. tocó el hombro de Sakura para que sintiera seguridad y confianza.

Movió su cabeza asintiendo. Ahora se sentía aliviada y más segura. Pero no dejaría sin protección a su amiga, también tiene que ayudarla —Y si también llegas a tener problemas, te ayudaré—. arrugó su frente formando un puño al aire.

Mientras asentía, la Sarutobi sintió una mirada amenazante, alguien peligroso la estaba mirando. De reojo miró de donde provenía dicha mirada, un hombre con un sombrero de paja y una cicatriz no quitaba su mirada de ella.

Amaterasu sintió un poco de miedo, un escalofrío pesado, haciendo que su cuerpo de tensará y formará una mueca. Sakura notó el repentino miedo de su amiga —¿Que sucede?— preguntó preocupada al verla de esa forma.

Miró donde ella estaba viendo, también sintió un escalofrío pesado en todo su cuerpo.

Tardó unos segundos en reaccionar a su pregunta, debido al miedo. Las palabras no salían de su boca —N-nada— fingió sonreír para evitar que Sakura se preocupara.

—Tú—, Anko se acercó a las dos rompiendo el miedo de ambas y refiriéndose a la pelinegra —por órdenes de lord hokage, harás este examen sola. Así que nos tomamos la molestia de hacer una puerta extra para que entrarás al bosque. Suerte— se despidió de con una mano, alejándose de amabas —la necesitarás— masculló con una sonrisa.

Sarutobi Amaterasu.

Después de entregar mi hoja de consentimiento, me entregaron un pergamino blanco: el del cielo. Antes de dirigirme a la puerta extra, me despedí de Sakura, aunque era algo innecesario, seguramente nos encontraríamos.

Tengo que usar todas mis habilidades para sobrevivir y conseguir el pergamino de la tierra en estos cinco días. Me esforzaré en lo que más pueda.

Finalmente abrieron las puertas, todos los equipos corrimos en diferentes direcciones, en este examen tengo que ser fuerte.

Mientras corría sin rumbo por el bosque noté muchos insectos demasiados grandes rondar por el suelo y los árboles.

—Me preguntó que sabor tendrá esa cosa—. mientras seguía corriendo miré un ciempiés de mi tamaño. Anko dijo que había suficiente comida para sobrevivir, y ese insecto se veía apetitoso.

Suena asqueroso, pero tienes que saber sobrevivir comiendo lo que sea.

Pero no pensaré por ahora en comida, tengo que buscar a alguien con el pergamino de la tierra.

Seguí corriendo con mi espalda inclinada para aumentar la velocidad, buscando a un equipo para quitarle el pergamino.

Nadie parecía ser amable, así que no me molestaré en preguntar qué pergamino traigan, solo atacaré. Puse mi expresión seria y aumentando mi vigilancia a los alrededores.

...

Orochimaru saltaba por las ramas de los árboles, buscando a Sasuke, el único sobreviviente del clan Uchiha. Sería un perfecto cuerpo para él.

Al encontrar a su equipo, se encargaría de todo el solo. El equipo siete al verlo se pusieron en posición de batalla sujetando un kunai cada quien.

Sonrió de manera malvada al ver a Sasuke. Adachi quien se encontraba a su lado solo los observó, confiaba en que su superior podría encargarse de ellos, después de todo es Orochimaru; uno de los legendarios sanin —Adachi, empieza con tu búsqueda y también encárgate de la chica—; ordenó con su sonrisa al hombre con la cicatriz en su rostro.

Solo hizo un quejido de asentimiento y en un parpadeo desapareció de la vista de los genin.

El hombre serpiente sacó su lengua y empezó a atacar al equipo siete.

Adachi paró al ver un equipo que había presenciado por su chakra: un chico de abrigo con un perro pequeño en su cabeza; Kiba. Otro con un abrigo gris de cuello alto y gafas negras; Shino. Y una chica de ojos perla, cabello corto; Hinata.

—Bien, empecemos—. murmuró escondido atrás de un gran árbol. Con una mano formó un sello juntando su dedo índice y medio, posado a la altura de boca.

Había memorizado el chakra que liberaba la cascada, solo era cuestión de comparar el chakra de otra persona con la de la cascada. Suena un trabajo fácil pero requería de mucha práctica.

Primero comparó el chakra de Hinata, pero fue descartada al no coincidir. Después con Kiba y de paso también de Shino, ninguno se parecían.

¿Si es un gran ninja sensorial, por qué no busca con todos a la vez? Fácil, a él no le gusta hacer las cosas de manera sencilla, además quiere conocer gente que se vea prometedora para sus experimentos.

—Oye, más vale que salgas de ahí— le dijo Kiba con tono serio. Akamaru ladró. Cuando olió el aroma de una persona que se escondía en un árbol atrás de ellos, sabía que alguien los estaba espiando.

Kiba y Akamaru tenían un sentido del olfato muy desarrollado, pueden captar aromas a distancias muy lejanas.

Adachi chasqueó la lengua y rápidamente se alejó del lugar, tiene que ser muy sigiloso, no querrá toparse con personas más fuertes que él, aunque tiene mucha ventaja, al ser un ninja sensorial.

Sarutobi Amaterasu.

Seguía buscando un equipo, pero no debo apresurarme, lo primero es observar sus técnicas, idear un plan y atacar.

Me detuve en seco al ver un chico de pelo largo y castaño, supe que era perteneciente al clan Hyuga, por esos ojos perla, iguales a los de Hinata.

Rápidamente busque un lugar para esconderme, suena estúpido debido a que el byakugan puede ver a través de todo, pero no había opción. Me plante detrás de unos arbustos.

Pero no estaba sola, también se encontraban Ino, Shikamaru y Chōji, que al parecer también se escondían del Hyuga.

—¿Que hacen ustedes aquí?— murmuré lo más bajo que pude. No creía que el gran Ino-Shika-Chō estuvieran ocultándose de alguien.

—Solo estamos planeando una estrategia—. cuchicheo Ino con una sonrisa pícara, quien no dejaba de vigilar al castaño.

—¿Y tú qué haces aquí Amaterasu? Esto es tan fastidioso— con la mano en su nuca, cuestionó Shikamaru con voz queda.

—Estoy buscando una forma de escapar del Hyuga—. encogí los hombros, con mi tono burlón le respondí sinceramente —No quisiera enfrentarme a un usuario del byakugan.

Una gota de sudor apareció en un mejilla. Shikamaru se le veía nervioso, pero no solo él, también los demás. Con su mano rascó su nuca —Pues para mí, es un fastidio tener que enfrentarme a él, solo por un estúpido pergamino— como siempre Shikamaru es un tedioso para todo.

—Suficiente, se que están ahí— el castaño habló, refiriéndose a nosotros.

En ese momento todos nos pusimos tensos, era obvio que nos descubriría. Shikamaru empezó a quejarse, como siempre.

—Bien chicos—, informó Ino aún con la voz baja —nuestra estrategia oculta y atrapa fallo, así que usaremos en plan dos—.

Chōji exclamó quejándose. Seguramente harían algo genial y peligroso, algo que hiciera que el mismo Chōji se quejara.

—¿Nos ayudarás Amaterasu?— me cuestionó Ino mirándome. Pero me negué moviendo mi mano.

—Mientras ustedes hacen su genial plan, yo escaparé para buscar otra persona— respondí. Sería una buena forma de escapar mientras esté distraído.

Shikamaru me miró raro, como si mis palabras los hubieran sorprendido.

Ella solo movió la cabeza aceptando. Seguramente no esperaba que me negará, pero tenía que hacerlo. El gran Ino-Shika-Chō tienen grandes técnicas y yo no debo interferir.

Los tres salieron, haciéndole frente a Neji. Pude escuchar que Ino le llamó así. Mientras estaba distraído, rápidamente salté de los arbustos hacia los árboles para escapar.

Me arrepentí de mirar atrás, Ino estaba tratando de coquetear con Neji y Shikamaru le pidió su autógrafo.

—Asi que ese es su genial y peligroso plan—, una gota de sudor caía por mí cabeza y negué con la misma —lo bueno que no acepté.

Kanae Yoshimura
Daiki Yoshimura

¹Kagemane no jutsu: Imitación de sombra.

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