Capitulo 4
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—Nooooooo.
Mire hacia a todos lados para saber de donde provenía el grito estaba todo oscuro y llovía con fuerza un hombre cubierto por un capa negra me miro y se postro ante mi haciendo reverencia. Se acerco y me tendió una bolita de cristal transparente que si estuviera en el agua no se notoria.
La bolita se quebró y todo comenzó a destruirse...
Estaba en un lago, mire mi reflejo en este. Y era un lobo pero uno grande. Me asusté y por inercia camine hacia atrás. ¿Que significa esto?.
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Desperté con la respiración acelerada aun no amanecía, ya no tenía sueño así que me levante. Aun no había llamado a Jessica.
—¿Hola?
—Ashly... ¿Estas bien porque no me hablaste ayer eh?
—Lo siento.
—Vale tranquila. Stefan vino a buscarte.— di un largo suspiro.
—¿Y que te preguntó?
—Que si te había visto, si sabia algo de ti.
—¿Sabe que estoy aquí?
—Si.... Lo siento
—Ya que, de todos modos se iba a enterar ¿no?
—¿Porque terminar con alguien que amaste más que tu vida?
—Es por su propio bien creeme.
—Esta destrozado. Solo deberías hablar con el, tienes que hacerlo
—Mira Jessica yo se lo que hago, asi que no me digas lo que tengo que hacer ¿De acuerdo?
—L-lo siento...
—Lo siento no me encuentro bien hablamos después adiós.
Corte sin decir nada mas y dormí.
*Flashback*
Mis tíos me convencieron de seguir estudiando. Odiaba volver a al colegio sin tener ningún amigo. Desde la muerte de mis padres me aparte del mundo solo tenía a mi familia que me miraba con lastima y odiaba eso, ya conocía ese asqueroso colegio con esos niños presumidos y esas niñas todas fresitas me daban asco. Salí del baño con la cabeza gacha no miraba a nadie ni nadie me miraba, siempre iba arrastrando los pies como una niña rebelde.
Entre al salón estaba vacío nadie estaba solo yo y mi mochila, me puse los auriculares y me puse a escuchar música.
No puse atención a las clases porque me daba lo mismo todos mis jodidos compañero pensaban en "Pobre chica" "Será Emo" "Esa chica da asco" ufaa ya estaba aburrida de todos aquellos pensamientos.
—Señorita Stenly por favor ponga atención a la clase.
—Pero maestro. Su clase es aburrida.— dije escupiendo las palabras al maestro Jalmar, se molesto el estaba pensando "Y esta niña que se cree, tranquilo Jalmar tranquilo no tiene caso".
El maestro no me hizo caso, lo que me enojo y siguió explicando.
Todos los días eran iguales, todos eran iguales pensaban lo mismo nada diferente. Cierto día llego una niña cabello castaño liso muy liso ojos verdes claros entro con mucha vergüenza.
—H-Hola- dijo casi tartamudeando.
—Hola usted en la señorita ¿Jessica?.
—Si.
Dio una leve sonrisa y el maestro alzo las manos para tomar nuestra atención.
—Escuchen ella es Jessica la nueva alumna por favor no quiero malos entendidos te acuerdo— todos asintieron, bajo la voz y le casi susurro a Jessica— ve toma asiento.
La chica miro unos pupitres atrás y a lado mío había uno vacío. Lo primero que pensó fue "Por favor Dios que todo salga bien, no quiero sufrir mas".
—Hola me llamo Jessica.—dijo la chica nerviosa.
—Lo se me llamo Ashly.—queriendo ser amable ya que era nueva no quería que se llevara una mala impresión, quería saber que pasaba en su mente.
Sonrió y puso atención a la clase.
Comenzamos hacer amigas ella y yo era... Diferente me caía muy bien.
Fin de *Flashback*
—Hola Ashly ¿quieres ir a tomar algo hoy?.— me preguntó Karla.
—Claro.—dije necesitaba distraer mi mente.
Llegamos a un bar "Las nenas" raro nombre nos sentamos en una mesita y una mujer con un pantalón apretado y una mini camisa se acercó.
—¿Que desean?.—preguntó ella.
—Dos cervezas por favor.— la chica asintió y nos sirvió.
Estuve así casi toda la noche queriendo olvidar todo por un rato.
No me di cuenta de la hora que era solo pude ver como mi amiga me llevaba arrastras, tomo las llaves y entró a mi departamento. Creó que me excedi con las cervezas.
—¿Estas bien?.
—S-Siii.—dije mareada moviendo mi cuerpo de un lado a otro.— tranquila estaré bieeeen.
—De acuerdo. Ya me voy mi novio se va a preocupar.
—Adiooos.
Solo levante mi brazo en señal de "adiós" camine a puras penas y me tire a mi cómoda cama. Mire el techo, y escuché un suspiró en mi ventana... habia una sombra de un chico. Entrecerre los ojos pensando en que es una imaginación mía. Al abrirlos ya no estaba ahí.
No aguantaba el cansancio y caí en un profundo sueño.
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