Esta bien, está bien, está bien...

Me acabo de tirar a la morena, me ha grabado, se lo ha enviado a Iván... ¡¡¡Iván!!! En cuanto le vea lo mataré, esa maldita perra come mierda.

Iba caminando a mi casa lo más rápido posible, tenía que encontrar a la rubia y decirle que nos habían engañado, que todo era un estúpido y retorcido plan para sacarnos información y si bueno, lo consiguió, pero no es mi culpa, es que folla de puta madre y eso ya no es mi problema.

Maldita morena.

Caminaba pensando en lo que acababa de hacer, dejarme usar y pisotear por un estúpido de mierda que no sabe nada, sólo utilizarme.

Al llegar a mi apartamento escuché voces conocidas des de la puerta de la entrada, me quedé inmóvil durante unos segundos, las piernas no me respondían y mi mente estaba en blanco, no se cuanto pasé en ese estado de confusión pero en cuando reaccioné salí corriendo al salón.

Estaba Iván y Raúl en mi salón, hablando como si nada.

-Vaya, Hola hermano- sonrió dulcemente mi hermano, cabron mentiroso.

-Hey- dije yo sin muchas ganas, visualicé mejor la escena, mi hermano sentado al lado de la rubia en el sofá con el teléfono en esas manos tan hermosas que una vez soñé que me tocaran con pasión y ahora no sabía que era lo que quería. La rubia se encontraba mirándome con una mirada vacía y sin ninguna expresión.

-Raúl.... Que sorpresa verte aquí- dije yo como si estuviera sorprendido de verlo allí.

-Íker.... ¿ha estado bien?- dijo, mierda lo sabía, lo ha visto, mierda, mierda, mierda.

-.....¿el Que?- pregunté como si no supiera de lo que hablaba, pero ya me podía imaginar lo que había hecho la perra de mi hermano.

-Íker, ya sabemos que te has acostado con Raúl, no sabíamos que te iban esas cosas pero....- dijo Iván con una mirada vacía y tetrica- ¿no te parece muy feo lo que nos has hecho?

-¿Que?- dije yo sin entender a que venía esa última frase.

- No te hagas el tonto, te colaste en mi apartamento, me robaste cosas personales, hiciste a la pobre rubia cómplice mintiendole a la cara, ay hermanito ¿no te cansas de hacer daño?- abrí los ojos sorprendido ante sus palabras- ¿crees que no sabía que te estabas acostando con la rubia? Que ingenuo, lo supe todo el tiempo, el que no sabía que estaba siendo utilizado- miró a la rubia- era él- volvió a mirarme con esa sonrisa macabra, una mirada que decía que en realidad, era yo el que había sido utilizado todo el tiempo como un muñeco de usar y tirar, un muñeco que a nadie le importa y sólo juegan con él con maldad.

-Raúl yo... tiene todo una explicación te lo- antes de terminar de hablar, la rubia se levantó de mi sofá.

- No tienes que contarme nada, en serio- la rubia caminó y pasó a mi lado con la cabeza gacha, yendo fuera de ese lugar.

-¿y ahora qué harás?- me dijo Iván, solté un gruñido y salí corriendo tras la estupida rubia.

-¡¡Raúl!!- le grité- ¡¡esperame!!- seguía caminando sin hacerle caso a mis constantes gritos, me acerqué lo más rápido posible y le cogí del brazo- ¡¡que me escuches te digo!!- le grité, él me miró, no con esa mirada idiota y cariñosamente melosa que siempre me dirije con ese narcisismo, sus ojos no tenían ninguna expresión hacia mi persona, estaban muertos.

-¿Que?- me preguntó sin ganas de escucharme.

-Lo que sea que te haya enseñado es una trampa Raúl, en serio.... debes creerme.

-¿por qué debería creerte?- preguntó él.

- Porque yo....- lo había dicho una vez... podía decirlo una segunda- creo que yo... me he enamorado de ti- le miré, Raúl se quedó sin palabras ante las mías- yo... me acosté con él si, pero porque me dijo que me diría todo lo que sabía sobre Iván a cambio, era como lo que tu me pediste pero menos doloroso, sólo no quería que te enteraras.

-Bueno...- dijo la rubia, no sabía que decir en realidad.

-Ademas... es tu culpa que lo hiciera.

-¿Que?¿perdona?- me dijo él enfadado.

-Bueno pues la llamada donde hablabas con mi hermano sobre el buen polvo que habíais hechado.

-¿Que?¿de qué hablas? Si ni si quiera nos acostamos después de que me acostara contigo.

-Pues yo escuché una conversación cuando iva....Iván... me la jugó para que cayera en la trampa de Raúl y grabarme, que hijo de puta tan listo...

-¿Quieres decir que todo esto es una trampa?- me preguntó la rubia.

- Si... pero la morena me dijo algo muy interesante....- le miré.

-¿El que?- me preguntó.

-Dijo que llevar una página de esas era muy difícil.... que se cansó de hacer negocios con mi hermano....- dije sin entender mucho la situación.

-Oye, iré a casa y ya te contaré lo que encuentro- se giró y comenzó a caminar.

-Raul....

- ¿Si?- se giró y me miró.

-Olvida lo que te dije.... porfavor....- le dije con ojos llorosos, quería tirarme y salir corriendo.

- No- se acercó a mi, me cogió de la cintura y me besó, correspondí el beso el cual era suave y lento, puse mis manos en sus hombros pasando hasta la nuca.

Cuando nos separamos me miraba fijamente.

-¿E...eso que significa ante lo que te he dicho?- le pregunté nervioso, mierda.

- Que yo también estoy enamorado de ti- sonrió, mi corazón dio un brinco.

- Oh....- no pude articular palabra... debía decir algo, abre la boca Íker porfavor- pues que bien....- ¿¡¿en serio?!? Dios, ya no puedes fastidiarla más, al menos si dices algo ya no será peor- no es que me importe o algo la verdad sólo te lo decía para que te sintiera mejor y.... eso- ¿sabes que? No digas nada mejor, lo empeorar cada vez que hablas.

- Te llamo- me besó la frente y se fue caminando feliz, le odio.... bueno... y le tengo un poco de cariño.

Volví caminando a casa, entre cerrando la puerta y cuando llegué al salón vi a Iván.

-Hola- sonrió cínicamente.

-Hey- le dije-¿sigues aquí?- le pregunté.

-Quería saber que te dijo nuestra rubia favorita- dijo sonriente cruzando las piernas y apoyándose en el respaldo del sofá.

-Le dije que le quería y él me dijo lo mismo- sonreí durante unos segundos forzado h luego le miré.

-......- no dijo nada, sólo me miraba cambiando su expresión de malicia por una de sorpresa no grata, se le veía mal.

-¿Que?- le pregunté.

- No.... e...¡¡¡eso No tenía que pasar!!!- se levantó de golpe y se acercó a mi- Eres un maldito idiota, te odio, eres horrible, todo por tu culpa.

-¿perdona?¿se puede saber cuál es mi problema aquí? Que yo sepa eres tú el que tiene el problema- le dije obviamente ante sus insultos y quejas.

-¡¡¡No es eso!!! Así no tenía que pasar, así no, tu no debías enamorarse de Raúl, me has roto el plan... ¡¡¡me has roto lo único que quería maldito estúpido de mierda!!!- me gritó.

-¿¡¿pero de qué coño hablas?!?- le pregunté a gritos a él.

-Mi plan era perfecto....- cayó delante de mi, de rodillas, con las manos en la cara, llorando desconsoladamente.

-¡¡Iván!!- me sorprendí y me a iba a agachar, pero se levantó de golpe limpiandose las lágrimas.

-¿por que?- me preguntó, aún que se había limpiado las lágrimas, seguía llorando.

-¿por qué que?- le pregunté sin entender.

-....Eres tan tonto- se acercó a mi, poniendo sus manos en mis mejillas con suavidad, sentía su valor en mis mejillas y sentía un pequeño ardor en ellas- Iván, yo estoy enamorado de ti...

-.....¿¡Que?!- le pregunté.

- Yo Sólo.... he fallado...- se juntó más mirando mis labios los cuales rozaban con cuidado- me alegro que sientas algo tan bonito por la rubia... Ojalá hubiera sido yo- sonrió, todavía cerca de mis labios- si tan sólo... hubieras sido mio...- se separó dolido- lo siento- caminó fuera de mi casa a paso rápido, entre sollozos, entre dolor.

Yo seguía de pie en mi salón, sin entender, en un estado de incomprensión, no sabía que hacer, estaba paralizado, mis piernas no respondían, ni mis brazos ni nada de mi cuerpo, además de mi cerebro que intentaba procesar todo lo que había pasado.

¿Iván está enamorado de Mi? Pero si eso es verdad.... si yo se supone que ya lo habia olvidado después de ver quien era.... ¿por qué se me sigue acelerando el corazón?