15

El tiempo vuela, no sé ni cuántos días habían pasado desde aquello, tenía que ser una maldita broma de Iván. No quería pensar mucho en ello, pero habían pasado demasiadas cosas demasiado rápido. Primero la página, luego el chantaje, la rubia, los problemas, la extorsión, secretos, secretos, más secretos, la morena, la rubia de nuevo, mi hermano.

Cada vez que levantaba la mirada, que cerraba los ojos, todo el tiempo veía a mi hermano y tan solo escuchaba esas palabras, enamorado de mí, enamorado de mí, enamorado de mí, es lo único que mi mente podía repetir sin parar. No podía cogerle las llamadas, ni a él, ni a la rubia ni a la morena, solo cogí una vez la llamada y fue porque me estaba llamando mi madre preocupada de no saber que era de mí, tan solo pude mentirle diciendo que estaba estudiando muy duro ya que dentro de nada iría a la Universidad, dentro de nada sería mayor de edad, adulto.

Pero no me importaba eso ahora, mi trance estaba presente constantemente y no sabía cómo soportarlo, era terriblemente complicado. Supongo que para mí no hay finales felices, no hay buena suerte, no hay nada positivo. Tal vez debería apagar mi portátil y comenzar a escuchar algo que no fuera Queen. Mirando el techo con esa tristeza y vagancia que mi cuerpo no quería sobrellevar pensaba, seguía pensando en lo mismo que en las dos últimas semanas, escuchando las mismas canciones en bucle porque ahora mismo el trap y las canciones que los jóvenes de hoy en día escuchamos tan solo me dan dolor de cabeza, tal vez debería haber dejado de ir a aquella discoteca para menores, ahora que lo pienso sí que era una basura de discoteca.

Me levanté de mi cama y fui a la cocina, tenía hambre, como todo el día, pero ahora me dolía el estómago de ese hambre voraz que tenía, abrí la nevera, cogí la leche, los cereales del armario, me serví y me puse a comer sin muchas ganas de vivir con Bohemian Rhapsody de fondo, mierda, parezco un maldito emo.

El timbre sonó de pronto, y la verdad no iba a ir a abrir, dejarían que creyeran que me he muerto o que simplemente no quiero abrir o solo estoy durmiendo con música muy alta, pero cuando comenzaron a insistir, insistir e insistir me cansé y fui a abrir la puerta.

-¿¡¿Qué?!?- grité al abrir la puerta.

-Buenos días a ti también- dijo a quien menos quería ver en estos momentos de mi vida.

-Vaya si es la morena, eres mujer ¿no? No por diva si no que pareces sacada de una esquina, lárgate Raúl no te quiero ni ver.

-Me iría, pero por alguna razón me siento…. Como se dice- comenzó a decir.

-¿Culpable?- dije yo.

-Nah, lo que hice me importa un comino, creo que es… que me siento como responsable, como un papá que cuida a sus niños- dijo la morena.

-Pues si tú eres mi padre, entonces eres el peor padre del mundo ¿fuiste a por tabaco y de camino lo hiciste con tu hijo? Joder suena hasta peor que como sonaba en mi mente, mierda. Pero igual, a lo que me refiero es que, a ver, ya lo hiciste, eres un hijo de la maldita puta y te odio.

-Pero bien que gritabas y sacabas la lengua jadeando como perra- dijo burlón.

-Sigue por ese camino y perderás tu hombría, yo te he avisado- le dije serio sin muchas ganas.

-Vamos si disfrutaste admítelo, sé que follo bien- en ese momento, la patada que le di en la entrepierna la tenía bien merecida.

-¿Algo más que decir?- pregunté.

-No- dijo retorciéndose de dolor, veía como le dolía, era divertido.

-Bien, ahora vete de mi casa- le iba a cerrar la puerta cuando puso su pie.

-¿Me quieres dejar estéril y además me cierras la puerta? No seas tan cabron amigo, por favor, por cuando todavía me tenías cariño, amor- volví a intentar cerrar la puerta- ¡¡¡pero maldito espérate y déjame pasar, que intento ser bueno!!!

-Ya, y yo me lo creo- sonreí sarcástico- voy a llamar a la policía, no me fio de ti.

-¿Y de quien te fías? No tienes a nadie de tu lado- dijo la morena en mi cara como si fuera gilipollas- todos los que lo saben sobre esta historia están en tu contra y el resto están muy liados con sus problemas para prestarte atención ¿no te has dado cuenta?- dijo.

-Primero, si eso fuera cierto, no te pediría ayuda a ti ni aunque me pagaras, segundo, si tengo a alguien de mi lado, tercero, eres gilipollas, lárgate de mi casa que me da asco verte la cara- le dije mientras le iba cerrando de nuevo la puerta insistente de que no quería verle.

-¿En serio crees que la rubia esta de tu lado? ¿Y si te miente como todo lo que ha sido tu vida últimamente?- me preguntaba-¿No todo lo que estás viviendo te parece surreal? Iker cojones, despierta, eres una puta marioneta, joder Iker, déjame entrar, hablamos y te lo explico todo.

-No quiero escuchar tus mentiras ¿entiendes?- le dije, ya me estaba cansando.

-¡¡La rubia te esta mintiendo!!- me quedé quieto, esperando… no sabía el qué pero sentía que debía parar un segundo- te ha mentido desde el principio- comencé a sentir el corazón latiendo con muchísima intensidad, sentía el corazón en la garganta, en la cabeza, en cada parte de mi de tan rápido que latía mi corazón- solo te ha usado- latía más y más fuerte- él en realidad no siente nada por ti- y en ese mismo instante, un corazón se partió en pedazos, como un cristal que cayó impactando contra el suelo, mi cuerpo seguía intentando no creer sus palabras, pero ese daño seguía tan presente en mi que las lágrimas que comenzaron a atravesar mis mejillas como cuchillas sin que yo me diera cuenta.

-Me estas mintiendo de nuevo ¿verdad?- le dije- la unica mierda que sueltas por tu boca suelen ser mentiras.

-Te prometo que no te estoy mintiendo ¿si?- me dijo la morena, serio, mirándome.

-Me voy a arrepentir de esto- le dejé pasar- entra, te doy una maldita ultima oportunidad, espero la sepas apreciar- le dije mientras me quedaba esperando a su movimiento, me miró, sonrió y caminó dentro de mi casa tranquilamente.

Sentía algo que me carcomía lentamente por dentro, sabiendo que algo malo iba a descubrir hoy, que tal vez iba a descubrir algo que me partiría el corazón en mil pedazos como hace apenas unos instantes.

En el salón le vi sentado en el sofá el cual me miraba intentando parecer inocente, tan sólo pude poner una cara de asco y desagrado.

-A ver, dime ¿por qué la rubia me está mintiendo?- le pregunté.

- Pues por lo que yo tengo entendido, Raúl se declaró antes de que tu te enteraras de que Iván hacia vídeos en Internet, y supongo que cuando tu te enteraste le pidió el favor.

-¿Qué favor?- le pregunté, ahora mismo no quería tonterías, acertijos, ni menos mierdas complicadas.

- Pues que se pusiera de tu lado para destrozarte, se suponía que esto no tenía que acabar así, Iván me ha llamado hecho una furia, gritando, llorando, una maldita locura, esa perra está loca- dijo sin darle importancia.

-¿Y cómo se supone que tenía que acabar?- pregunté yo.

- Pues Raúl dejándote en la mierda, tu te vas hecho mierda dándote cuenta que en realidad lo que sientes por tu hermano no es sólo físico y que harías lo que fuera por tu hermano, tu hermano te ayuda y te da un hombro donde llorar, te declaras, Iván te pide hacer el vídeo porno a cambio sin ningún beneficio cada semana, entrar en PornHab y comenzar a vender su cuerpo por millones y millones como una estrella internacional del porno.

-Pero Raúl me dijo que me amaba- le dije yo.

-De eso yo ya no se nada, a lo mejor le gustas de verdad o algo.

-Sus ojos brillan cuando me miran…- cuando dije eso la morena fingió una arcada.

-Asco el amor, prefiero sexo sin compromisos, tiene más morbo, más gracia- dijo muy diva la maldita morena.

-Creía que te gustaba….- comencé a decir pero me interrumpió.

-Shhh, eso no viene a cuento ahora mismo ¿está bien? Ahora lo importante es que te han engañado como a un tonto- me dijo.

-Tu si eres tonto capullo, no vengas a mi casa a insultarme si no quieres que te mate.

- No me saques las garritas que tu no eres ninguna santa Íker, mira, de la nada ahora todo está en tu contra y creo que te has vuelto un- no le deje acabar.

-¿ninfomano?- le pregunté sarcástico.

- No idiota, ninfómana es para la mujer el hombre es sátiro- me dijo obvio.

-Tu sabes de todo ¿cierto?- le pregunté con una mirada de asco.

-Si, soy muy listo, más que tú.

-Cabron.

-Perra- este maldito se está metiendo en terreno peligroso.

- ¿¡Quieres que te mate?!- subí el tono.

-Sigo teniendo el vídeo que grabé si quieres los público.

-No creo que los muertos suban vídeos a páginas porno- le amenacé.

- Bueno, otro tema por el que he venido es porque ¿para qué quieres el ordenador? No tiene nada, la verdad, es que es lo más estúpido que buscas, lo interesante está escondido, jamás dejaría algo importante a simple luz del día.

-¿Entonces qué es lo que esconde?¿cuál es el secreto de mi hermano? Me estoy volviendo loco Raúl, por favor, por favor, todo esto es una tontería, una locura, cada día… cada hora… todo es…- suspiré- no sé que estoy haciendo…. Me siento un total capullo integral enamorado del que se suponía que iba a ser su rival.

- La vida es una mierda.

- Ya pero….- comencé a decir- ¿me está mintiendo de verdad la rubia? Dime por favor la rubia no me haría algo así y que sólo es una broma.

- Creo que deberías hablar con él- se levantó del sofá- y debería dejarte sólo para pensar bien en qué pensarás decirle, yo sólo quiero ayudarte, ya sabes- dijo.

- Sí… supongo que sí- dije yo.

- Ya me dirás qué harás Íker, yo no soy el malo de esta historia- metió sus manos en sus bolsillos mientras me miraba.

-Pues no se que decirte la verdad- le miré riendo un poco- eres un maldito cabrón.

- Pues nada, yo aquí no soy el malo, sólo soy alguien que está de paso- sonríe- nos vemos pronto Íker- caminó por el pasillo desapareciendo después de abrir la puerta y cerrarla detrás de él.

- Pues nada, ahora ya no se que voy a hacer...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top