Jimin observó con inseguridad la cabaña frente a él, la casa donde viviria hasta el final de su embarazo y donde estaría con Jungkook para conocerse mejor.

El alfa tomó su mano para darle la seguridad de avanzar, el interior parecía ser acogedor, lo dejó que viera el lugar mientras él iba por sus cosas.

-No eres bienvenido a esta familia- Escuchó una voz femenina detrás de él- Pero no vamos a permitir que Jungkook lo deje todo por ti.

-¿Disculpe?- La omega se acercó a él, no parecía agradable.

-Escucha muy bien, más te vale no arruinar esto, nos costará mucho que crean que tú y Jungkook llevan meses conociéndose- A Jimin no le gustó el tono que la omega usaba.

-Ya déjalo- Escucharon a Jungkook.

-Lo haré, pero quiero aclarar de una vez que ese cachorro no será nada nuestro y menos será el responsable de esta manada- El alfa gruñó- Estas arriesgando mucho Jungkook, espero no te arrepientas en un futuro.

-Yo sé lo que hago- Su madre bufó antes de salir de la casa.

-Ella tiene razón- Murmuró Jimin- Soy un omega embarazado, tú no deberías querer que yo sea tu omega.

-Sonará extraño, pero siento que tienes que ser tú sin importar qué estés embarazado, si no eres tú dudo que acepte a alguien mas- El omega lo miró- Cada mes vendrán a revisar como está el cachorro y que no haya problemas.

-Muchas gracias por eso, de verdad no quiero que nada le pase- Jungkook sonrió.

-¿Como fue?- Jimin ladeó su cabeza- No me refiero a como quedaste embarazado, eso lo sé. ¿Por qué huiste si te importa tener al cachorro?

-Oh, bueno me interesé en alguien de quien no debía, pero yo no lo sabía- Aclaró- Él pretendió cortejarme, confíe en él y bueno pasó, yo en realidad no tengo a nadie más así que cuando supe que estaba embarazado se lo quise decir pero el estaba con una omega y dos cachorros- Bajó la cabeza avergonzado- Se veían muy felices y por eso huí, no quería que me lastimaran.

-Bueno aquí nadie te va a lastimar y no estarás solos nunca más- Hizo que levantará la cabeza- Y yo no voy a pretender cortejarte, lo haré en serio.

-¿De verdad no te molesta o incomoda que esté embarazado de otro alfa?- El más alto sonrió.

-Se que a cualquier otro alfa le molestaría, pero a mi no, yo si quiero hacer esta familia- Jimi se sonrojó.

-Después que mi bebé nazca, no me opondré a tener uno tuyo- El alfa lo miró con una calidez y negó.

-No debería ser una obligación, si tendremos un hijo será por decisión de ambos- Jimin de verdad no podía creer que Jungkook fuera así, él sería el alfa de la manada pero se veía demasiado dócil, o quizás no estaba acostumbrado a esa clase de alfas- Pero es muy pronto para hablar sobre eso.

-Trataré de ser un buen omega- Jungkook se acercó y acarició su mejilla.

-No te preocupes por eso ¿Si?- El omega sonrió, le estaba gustando la actitud del alfa- ¿Quieres comer?-Jimin asintió- Bien, mientras esperamos ¿Damos un paseo? Conozco bien la zona.

-Está bien.

Jungkook llamó a una de las empleadas para pedirles que hicieran la comida mientras ellos paseaban.

El alfa le dió un momento al menor para que se quitará su ropa y cambiara de forma, después fue el omega quien le dió privacidad, por vergüenza y respeto.

-Vamos- Jimin lo siguió con seguridad.

-¿A donde iremos?

-Bueno, solo pensaba en caminar, pero creo que hay un lugar que puede gustarte, y si te gusta haré que solo sea tu lugar- El omega lo miró.

-No creo que-...

-Es algo que quiero hacer, ¡Oh! Ven- El menor tuvo que correr para poder alcanzar al gran lobo.

Cuando el alfa se detuvo, Jimin soltó un bufido por haberlo hecho correr, pero su atención fue directo al campo lleno de flores, miró al alfa y ladeó su cabeza.

-¿Te gusta? A mi me gusta venir aquí, casi nadie viene así que no te preocupes- Después de sus palabras el alfa se lanzó hacia las pequeñas flores.

Su cola se agitó al ver a JungKook jugar entre las flores, fue una escena bastante tierna de admirar, el alfa no era igual a los demás y eso lo volvía especial, además no era cualquier alfa, era su alma gemela, y él le estaba dando la oportunidad que otro no le daría, Jungkook tenía algo que Jimin necesitaba, igual que él tenía algo que Jungkook necesitaba, nacieron para complementarse entre sí.

Jimin dejó a un lado sus dudas, quería que Jungkook lo cortejara, quería que solo fuera él.

Las semanas comenzaron a pasar, y no había día que Jimin no despertara con algún detalle en su habitación, nada costoso, solo pequeños detalles qué al omega le gustaba, porque claro, no dormían juntos ya que Jungkook creía que así sería más cómodo mientras se conocían, casi todos los días salían a dar un paseo y Jimin podía jurar que ya conocía el bosque, además de eso conoció el lugar que Jungkook dijo que si le gustaba sería su lugar y bueno le gustó por supuesto, era un manantial que el alfa visitaba cuando quería relajarse.

Pronto ya habían pasado cinco meses desde que se conocieron, y todo estaba de maravilla, el cachorro no tenía ningún problema pero Jimin ya no debía cambiar de forma pues eso le quitaría bastante energía, así que cuando paseaban lo hacían en su forma humana.

—Las empleadas se fueron—Jimin sonrió cuando el castaño entró a su habitación—Supongo que se van a tardar.

—¿Por qué parece que vas a hacer una travesura?—Cuestionó con diversión.

—Ellas te cuidan mucho y yo quiero ir al manantial—El omega asintió—Por cierto ¿El bebé está tranquilo?

—Lo está— Acarició su robusta pancita.

—¿Puedo?—Jimin asintió.

JungKook se acercó con delicadeza hasta el omega sobre la cama, se sentó a su lado y colocó una de sus manos sobre su vientre, con su pulgar comenzó a acariciar la zona y pronto ambos sintieron un movimiento.

—Jungkook—El alfa lo miró—El bebé no se había movido antes.

—Creo que le agrado al bebé—Jimin sonrió y colocó su mano sobre la del alfa—Nos hemos estado conociendo desde hace cinco meses y estoy seguro de que esto es lo que quiero, estoy enamorado de ti Jimin y deseo tanto que me puedas dar una oportunidad.

—Haz sido el alfa más lindo conmigo, eres muy diferente y eso me gustó desde el principio—Jungkook se sintió orgulloso por eso—En estos meses que nos hemos estado conociendo puedo estar seguro de decir qué también estoy enamorado de ti y que si te daría una oportunidad.

—Entonces ¿Quieres ser mi novio?—El omega asintió con una sonrisa llena de emoción—Espero ser lo suficientemente para que te consideres el omega más afortunado.

—Creo que ya me considero el omega más afortunado—Murmuró con timidez.

—Y yo soy el alfa más afortunado, porque se que elegí al omega correcto con el que estaré—Las mejillas del omega se cubrieron de rojo—¿Puedo besarte?

—Puedes hacerlo.

Jungkook se acercó lentamente al rostro del omega, su vista está fija en los labios contrarios, Jimim se estaba emocionando al sentir la respiración de Jungkook cerca de él, quería sentir sus labios sobre los suyos en lentas caricias dándole la bienvenida a todos los sentimientos que sentían, el omega cerró sus ojos cuando sintió como el alfa acunó su rostro y una suave presión tocó sus labios, fueron lentas las caricias entre sus labios, formando un beso delicado, no necesitaban más en es momento, incluso cuando Jungkook se sujeto a los hombros del alfa, solo querían un beso sin ninguna otra intención, el tacto entre sus labios terminó cuando el aire estuvo a un paso de terminarse.

—¿Podemos ir al manantial?—Jungkook asintió.

—Tengo todo preparado—Ayudó al menor a colocarse sus zapatos.

El camino fue un poco tardado ya que iban solo caminando y hacían una que otra pausa para que Jimin descansar, pero al final llegaron y Mingi acomodó todo para poder tener un picnic, había preparado todo estando casi seguro de que Jimin si accedería a ir, y ver al omega sonreír lo hizo inmensamente feliz.

Jungkook estaba dispuesto a todo por su omega, incluso soportar su celo, o ese era su plan, porque resulta que Jimin había preguntado si estar embarazado le impedía tener relaciones y pues el doctor le dijo que no, estaba en perfecto estado y no había ninguna complicación, así que cuando el celo de JungKook llegó, Jimin ya estaba listo.

Negarse fue casi imposible para JungKook, su omega estaba ahí, a total disposición, su omega casi le estaba gritando que podía tomarlo, pero estaba asustado, no porque fuera su primera vez pues no lo era, de ninguno de los dos, sino que temía hacerle daño tanto a Jimin como al bebé.

—No pasará nada, por eso pregunté— El alfa cerró sus ojos al sentir la manos de su omega sobre su mejilla—Además, los alfas no lastiman a sus omegas, así que estoy seguro que todo estará bien.

—Me prometes que me avisaras cuando estés incómodo—Jimin asintió mientras se acercaba para besarlo.

Jungkook reprimió bastante bien sus instintos, para no lastimar de ninguna manera a su omega, habría querido que su primera vez juntos fuera distinto y en otra situación, pero a Jimin no le disgustó, ya después tendrían toda la libertad.