Madre e hijo
Tenten optó por no dejarse llevar por las emociones que sentía en ese momento, aquella misión era un asunto muy serio para Konoha.
Ella no sabían a dónde se dirigían pero dada la seguridad que los rodeaba se sentía nerviosa.
Neji no habló desde que se encontraron en esa celda con su madre, aunque la mujer volvió a comentar que lo había extrañado él fríamente tomó las cadenas que la aprisionaban y la hizo caminar fuera de la celda.
Ahora se encontraban en el bosque escoltando la pequeña carretilla que contenía a la mujer dentro, Tenten se había encargado de las cadenas y sellos para retener chackra.
Tomaron un descanso después de pasadas horas, Tenten solo observaba la tensión de Neji que no disminuía ni un poco.
—Iré a hacer un chequeo de rutina y verificar los sellos dentro y fuera de la carretilla.
Tenten anunció mientras vio a Neji encender el fuego con algo de leña que el mismo había recogido.
No la miró solo asintió entendiendo lo que ella había dicho y siguió observando el fuego arrojando otra madera y esta se consumía rápidamente.
Después de unos segundos preocupada Tenten desvío la mirada y se dirigió a hacer su trabajo.
Primero viendo los sellos de afuera y después entró abriendo el sistema de seguridad.
Al entrar la mujer le sonrió casi dándole la bienvenida con entusiasmo.
—Eres tú de nuevo, ya me preguntaba sobre el porque paramos, asumo que es un descanso después de horas, aquel templo si está algo lejos por lo que recuerdo.
Tenten no contestó, no hacía falta saber que hablar con criminales clase S no era parte de la misión, y por más curiosidad que sentía en esos momentos de preguntar la primera cosa que se le venía a la mente prefirió hacer su trabajo.
Los sellos por dentro de la carretilla estaban tan intactos como los de afuera.
Se acercó a la mujer y prosiguió a revisar el metal que unía sus manos y se encontraba lleno de sellos, levantó las mangas de aquel kimono de la mujer para verificar que no hubiera nada sospechoso.
—El color chocolate de tu cabello es hermoso.
Tenten hizo contacto visual con la mujer y después siguió verificando las esposas.
—Gracias —Tenten respondió secamente.
—¿Podrías ajustarlas un poco menos?, el metal está irritado mi piel cada que avanzamos —mencionó con voz preocupada— en serio te lo agradecería, creo que mis muñecas están a punto de sangrar, no me gustaría ensuciar mi kimono.
Tenten verificó lo que ella decía, la piel parecida a la de Neji se encontraba totalmente roja, rápidamente Tenten desajustó la presión en las esposas.
—Eres una persona muy linda gracias, llevo tiempo sin que alguien sea amable conmigo —ella le sonrió agradecida.
Y de nuevo el conflicto interno de Tenten se hizo presente.
¿cómo alguien con esa sonrisa podría ser un criminal altamente peligroso?
Se levantó en cuánto vio que todo estaba en orden con la seguridad.
—Creo que mi hijo no me ha presentado apropiadamente contigo mi nombre es Asa, ¿y el tuyo querida?
—Tenten —la castaña bajó la mirada sin saber porque no había salido ya de la carretilla, tal vez su curiosidad estaba ganando al fin.
—Gracias por responder, es un nombre muy lindo.
La mujer seguía sonriendo igual con amabilidad y Tenten se dijo a si misma que aquello había sido suficiente, debía de ir con Neji.
Se dispuso a salir cuando la voz de la mujer la detuvo de nuevo.
—No eres una Hyuga Tenten y sin embargo estás en esta misión, ¿puedo preguntar el por qué?
—Soy una maestra de armas, encargada de la seguridad de tu traslado.
—No, esa no es la respuesta, mi instinto materno no se equivoca nunca, tú eres alguien especial para él, ¿no es así?
Tenten no respondió, no sabía cómo hacerlo así que salió de aquella carretilla y lo último que vio antes de cerrar la puerta y poner el sistema de seguridad en ella fue la sonrisa cálida de esa mujer.
Se digió hacia Neji que ahora se encontraba sentado frente a la fogata.
Tenten lo vio inmóvil con la mirada fija en el fuego, sin hacer mucho ruido fue a sentarse a su lado y se abrazó de piernas hundiendo su rostro a medias en ellas.
—Neji... si quieres hablar de esto yo...
Ella mordió su labio inferior, no sabía como continuar hablando.
—Lamento haberte involucrado en esto —le sorprendió la voz tranquila de Neji al hablar.
—No digas eso, tú no...
—Si lo hice, pedí a mi tío que permitiera que vinieras a esta misión, necesitaba a alguien en quién más confiara conmigo.
Tenten se sorprendió de inmediato, ¿él la había elegido?
"no, esa no es la respuesta..."
Recordó la voz de la mujer minutos antes.
—Neji, ¿qué es lo que está pasando?, esa mujer... tu madre... ella...
—Mi madre murió hace años Tenten, murió junto con todos los recuerdos que tuve antes de que me abandonara cuando era niño, lo único que queda es una desertora y criminal clase S que debo escoltar para su ejecución —se levantó bruscamente y Tenten vio de nuevo esa mirada de ira contenida difícil de explicar— trata de descansar un poco, debo ir a reunirme con el jefe ANBU del escuadrón de apoyo para escuchar su reporte.
Tenten lo vio alejarse y perderse en la oscuridad de la noche, ella bajó la mirada y después la dirigió hacia la carretilla.
Necesitaba respuestas, las que Neji no podía darle en ese momento de debilidad emocional.
Se levantó y se dirigió de nuevo hacia la carretilla.
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