Amanecía en las Tierras del Reino y, como casi todos los días, Dan se levantó temprano para contemplar aquel momento de la mañana, para respirar el fresco aire de la juventud. Cada día de su nueva vida era una bendición para él, si la comparaba a su antiguo tío que más parecía patrón. Aunque no lo odiaba, sí podía sentirse algo molesto al recordar lo injusto que era con él.

"Pero ahora..." pensó, recordando cómo había conocido a Kion (ojalá hubiera sido en mejores circunstancias), "Tengo un nuevo tío..."

(Flashback: Un par de días después del final de El Rey León 4: Corazón de León...)

El cachorro se levantó como cualquier día, para contemplar el amanecer. Sin embargo, aquellos días aún le parecían tristes por lo que había pasado: Zira fallecida, Shany secuestrada, Simba y Kion heridos... se sentía culpable muy en el fondo.

Tratando de despejarse la duda, bajó para pasear un rato; pero, en la última roca, tropezó y rodó por el pasto. Por cosas del destino, terminó de rodar quedando de cabeza viendo el restro de un león adulto joven.

"Buenos días, nuevo príncipe" le dijo Kion.

"Kion... digo, tío Kion..." le dijo Dan, "Buenos días"

"Deberías tener más cuidado"

Kion le ayudó al cachorro a levantarse, Dan notó entonces el vendaje de lianas que Rafiki le había puesto, producto de la herida causada por aquel humano cazador. Era claro que se sintiera culpable por ello.

"¿Aún te duele?" preguntó Dan.

"Ya casi no" respondió Kion, "Además, he recibido otras heridas antes... y estaría mucho más herido o algo peor si un cachorro no me hubiera salvado..."

Dan se sintió conmovido por el agradecimiento, pero luego recordó...

"No pude salvarlos a todos..." musitó.

Kion comprendió que su sobrino estaba aún triste por la pérdida de Zira.

"No siempre todo sale bien, solo podemos hacer lo mejor que podemos. Es algo que aprendí como líder de la guardia del león" le consoló su tío, "No es tu culpa de lo que sucedió. Zira decidió el final en su ciclo de la vida y debes estar agradecido de que te dé la oportunidad de vivir"

"Pero..."intentó decir Dan, pero Kion le puso suavemente su pata en la boca, para evitar que se siga torturando con su consciencia.

"La Zira que yo conocí, me engañó y estaba dispuesta a hacer lo que sea para llegar a las praderas" le dijo Kion, "Por lo que me dijiste, cuando la encontraste, su voluntad estaba caída y ya no quería vivir o luchar. Pero, ¿dar la vida por un cachorro que no conocía? Diría que no solo le devolviste su voluntad de lucha, sino cambiaste también su corazón"

Dan rio por un momento, habiendo recordado aquellas palabras.

"Tu abuelo Mufasa me dijo que yo podía hacerlo" comentó.

"Hum" respondió Kion, "Sí, también me lo dijo antes de venir"

"¿Eh? ¿Qué te dijo?"

"Cuando se comunicó conmigo, me dijo de los problemas sobre los cazadores, que encontraría a mi padre herido y... que alguien especial que tiene un poder especial, nos necesitaría. Cuando le pregunté quién era, me dijo que sería un nuevo miembro de mi familia: alguien que me impresionaría conocer"

Dan se avergonzó un poco por eso.

"¿De verdad parezco tan especial?" preguntó, "No creo serlo tanto..."

"Ya lo veremos... cuando te conviertas en Rey León" le apoyó Kion.

Dan miró cabizbajo, ¿debía decírselo a su nuevo tío?

"Tú también crees en mí... ¿cómo puedes estar seguro de que pueda ser un rey?" preguntó.

Kion le puso su pata en su cabeza, mientras le decía:

"Porque eres alguien en quien mi abuelo, mi padre, madre y hermana ponen toda su confianza. Y también, porque eres ahora mi sobrino y eso te da todo mi apoyo en todo lo que quieras saber"

Dan se sintió agradecido por ello.

"Antes, vivía otra vida y no tuve a nadie como ustedes" le dijo el cachorro, "Tenía otro tío, pero este era... tal vez más malo que ese Scar que hablan. El murió; y me sentí aliviado, pero solo, y ahora... tengo un nuevo tío y eres el mejor que uno pudiera desear. Bueno, y la segunda mejor sería mi tía Vitani"

"En realidad, mi abuelo me dijo más cosas sobre ti" le dijo Kion ante el asombro de Dan, "No te preocupes, sé guardar un secreto y sigo feliz de ser tu tío.

"Oh bueno, entonces... puedes, ¿contarme tus aventuras como líder de la guardia del león?"

Kion sonrió: "De acuerdo"

Al transcurrir el día, hacia la tarde, Kion se sentó junto a Dan, contándole bastante de sus aventuras como el líder de la guardia del león, antes de Vitani. Le contó aventuras como cuando reunió a Fuli, Bunga, Besthe y Ono para ser su manada del león y cómo demostraron ser dignos de ser miembros; cuando aprendió que no todas las hienas eran malas (cuando conoció a Jasiri y cuando Janja y su manada se pasaron a su lado); cuando salvó a su hermana Kiara, a Tiifu y Zuri de una inundación; cuando perdió la confianza para usar el Rugido pero su madre Nala y Mufasa le devolvieron su valor; cuando buscó sabiduría de Kongwe, una vieja tortuga sabia; de la batalla final por las Tierras del Reino; y su viaje hacia el árbol de la vida, donde conoció a la manada nocturna y a Rani.

"¡Kion!" interrumpió Buga, gritando lejos, "Ya estamos listos"

No muy lejos de donde estaba este gritando, estaban el resto de la manada, junto con la manada nocturna, pues era el día de su regreso al Árbol de la vida. Dan se sintió triste, pues le estaban gustando las historias.

"¡Ya vamos!" respondió Kion. Luego, se volvió a su sobrino, abrazándole, "No te pongas triste, volveremos a vernos y te prometo que seguiremos con las historias. A mí también me gusta recordarlas"

"Siempre pensaré en ti, tío Kion" le dijo este, contestando el abrazo.

"Sé que lo harás"

(Unos minutos más tarde...)

Dan, con su amiga Shany y el resto de su nueva familia se despedían mirando a lo lejos como su antigua guardia del león se alejaba nuevamente a su hogar, el árbol de la vida. Pero todos ellos sabían que los verían de nuevo.

(Fin del Flashback)

Dan parpadeó, dándose cuenta que había pasado buen tiempo y la manada despertaría pronto. Mirando en dirección a donde partió su tío aquel día, dijo:

"Gracias. Te prometo hacer mi mejor mi mejor esfuerzo, tío Kion"

El viento pasó a su lado al sentir ese sentimiento, como queriendo llevarse el mensaje a quien el cachorro quería. Y, de alguna forma, este sintió que sus palabras sí llegarían.

"Solo un tío puede dar abrazos como un padre, mantener un secreto como un hermano y compartir su cariño como un amigo"

Anónimo

Nota de Autor: Capítulo dedicado a mi hermana (por parte de madrina), ya que va ser madre y yo seré el tío.