Capitulo 14.
La nueva familia...
Habían pasado ya unos cuantos meses y los cachorros de los reyes habían crecido bastante, aunque aun no eran unos leones adolescentes, no les faltaba mucho para serlo. Los cachorros entrenados por Zira también habían crecido y cada vez se volvían mejores en los entrenamientos de la malvada leona.
Ese día, en las Tierras del Reino, todos los animales estaban muy contento y emocionados con lo que estaba pasando ya que era el nacimiento de los primeros cachorros híbridos en toda la historia de Pridenlans, los pequeños eran hijos de una de las parejas más extrañas pero tiernas que se podrían encontrar en todo el reino. Su padre, el león ex guardián Kion líder de la famosa Guardia del León y su madre, una chita de nombre Fuli la miembro más rápida de la ex guardia.
En la Roca del Rey todos estaban emocionados, la familia real se encontraba fuera de la cueva esperando el poder entrar y conocer a los pequeños cachorros. Kion se encontraba sentado en frente a la entrada, para su mala suerte no lo dejaron entrar y la verdad no sabía el porqué, su mirada estaba fija en la oscuridad de la cueva. Se notaba tranquilo a comparación de todos los primogénitos padres pasados, su madre al notar eso se acerco al menor de sus hijos sentándose al lado de él hablo.
-te noto muy tranquilo Kion.-
El de melena no desvió su mirada de la cueva pero una pequeña sonrisa se formo en sus labios.-supongo que ver lo mismo me ha ayudado.-
-podrías enseñarles a algunos ¿no...?- al decir esto, la leona de ojos azul verdoso miro a su esposo y a su hijo mayor quienes al darse cuenta apartaron las miradas. Simba miro hacia el cielo silbando, haciendo como si no escucho nada, Kopa por su parte bajo la mirada al suelo quejándose mentalmente por la humillación.
-podría ser.- fue lo que contestó el ex guardián seguido de una pequeñas carcajadas.
Pasaron unos cuantos minutos que para Kion fueron eternos. Después de esperar un buen rato Rafiki y Kiara por fin habían salido de la cueva, que fueron recibidos por un Kion muy emocionado y algo nervioso.
-y bien...? ¿Cómo esta ella? ¿Cómo están los cachorros? ¿Fuli necesita algo o no? ¿Puedo pasar a ver a mis hijos?- los bombardeo Kion con preocupación pero con una gran sonrisa.
El consejero y la reina se miraron algo preocupados, no sabían cómo decirle a Kion algo tan delicado como lo que tenían guardado. Rafiki abrió la boca para hablar pero decidió callar, sabía que Kiara sería la indicada para decir tal noticia.- hermanito, veras...- a la leona se le hizo un nudo en la garganta y Kion noto la preocupación de su hermana, eso claramente no lo tranquilizo.
-¿Kiara, qué pasa?- hablo él en un tono autoritario exigiendo respuesta de lo que pasaba, Kiara al escuchar su voz sintió, por un momento, que era su propio padre hablando.
La hembra tomo bastante aire y lo expulso lentamente por su boca, intentando calmar sus nervios.- Kion, tu sabes que Fuli y tu no son del todo compatibles.- el macho asintió.- y que el poder tener hijos no es del todo posible.- el macho volvió a asentir.- por esto el poder llegar a tener cachorros fue un milagro para ustedes.- Kion ya se estaba hartando y Kiara lo noto.- hermano, tu sabes que ibas a ser padre de cuatro cachorros pero... lamentablemente uno... no pudo sobrevivir.- bajo su mirada esperando lo peor.
-¿QUÉ? ¿QUÉ QUIERES DECIR? A CASO, A CASO UNO... se fue?- las lagrimas empezaron a brotar en sus ojos, no podía digerir la información, no quería.- ¿Cómo está Fuli?-
-ella está bien Kion pero demasiado triste, no quiere vernos pero creo que a ti te dejara entrar.- le dijo Rafiki apartándose del camino para que Kion pueda pasar.
El macho corrió desesperadamente hacia donde su esposa que se encontraba recostada en el suelo y en sus patas delanteras se podía apreciar a un pequeño cachorro de pelaje beige que era cubierto por la cabeza de Fuli en un intento de abrazo, mientras que otros tres se amamantaban tranquilamente sin saber lo que pasaba a su alrededor.
Kion se acerco a su amada y se recostó al frente de esta, los ojos de la felina se encontraban serrados y se veía claramente que había estado llorando. El león poso su frente con la de su esposa haciendo que esta se despertara.
-Kion....- susurro y sus lagrimas comenzaron a salir, rápidamente el macho empezó a consolar a la chita acariciando su frente y dejando besos en su pelaje.- yo... lo lamento.- se disculpo, como si lo que paso hubiera sido su culpa.
Mostro al pequeño cachorro y Kion se quedo observando el cuerpo de su hijo que no se movía. El pelirrojo agarro al delicado cuerpo del menor y lo puso entre sus patas, se lo quedo viendo un buen rato, su estomago estaba hecho un nudo y no salía palabra alguna de su boca, estaba en shock, en un trance del que no podía salir. Sus ojos empezaron a arder y las lagrimas acumuladas nublaban su visión, poco a poco estas fueron cayendo mojando el suelo, sus patas y al cachorro.
No podía contener sus emociones, estaba muy triste, ese era su cachorro, su hijo, sangre de su sangre, su pequeño no podía irse ¡no podía! Fuli estaba destrozada y él tenía el alma partida por lo que estaba pasando en esa cueva en que, los únicos que no lloraban, eran sus tres pequeños hijos.
Una lagrima rodó por la mejilla del dorado, resbalando hasta caer y mojar la nariz del pálido cuerpo del cachorro, en eso unos maullidos empezaron a sanar por toda la cueva y no provenía de ninguno de los tres cachorros. Los primogénitos padres miraron asombrados a su difunto hijo, al ver que se podía notar el movimiento de la respiración en su cuerpo los dos se miraron con alegría y abrazaron al cachorro como si fuera la última vez que lo verían, lo acercaron con sus hermanos y ,con un poco de ayuda, pudo unirse con ellos para poder alimentarse.
-es un milagro.- susurro Kion.- gracias abuelo, gracias a todos los reyes.-
-mi pequeño.- hablo Fuli lamiendo la pequeña cabeza de su hijo.
En eso, mientras los padres lloraban de felicidad, los demás integrantes de la familia real entraron a la cueva, todos tenían una cara de pesadez y tristeza por lo que había pasado. Nala se acerco a la pareja que miraban atentamente a sus hijos mientras se alimentaban.- hijo, lamentamos mucho lo que paso, Rafiki y Kiara nos contaron todo y...- la leona se quebró y lagrimas empezaron a resbalar por sus mejillas, no podía creer que uno de sus nietos se halla ido.
-Madre..- el león se paró de su posición y abrazo fuertemente a la leona, la miro a los ojos con una sonrisa de par en par que Nala no podía descifrar.- no llores, el pequeño ha vuelto a vivir, ¡a resucitado! Míralo.-
Nala hizo caso a la orden de su hijo y junto con toda la familia se acercaron a ver y confirmar que efectivamente el pequeño había resucitado. Todos se quedaron boquiabiertos a lo que veían, felicitando y dando sus buenos deseos a la nueva familia, todos menos Kopa que no había dicho nada desde que entro y, aunque poseía una sonrisa en su rostro, el hecho de que su sobrino resucito no le movía nada dentro de él, después de todo ya había pasado por algo parecido pero aun así se sentía feliz porque todo estaba bien.
-y como se llamen mis sobrinos.- hablo el rey recibiendo las miradas de todos que luego fueron dirigidas a la pareja. Tanto Fuli como Kion se miraron de reojo, ninguno lo había pensado en todo ese tiempo.- ¿ho los llamaremos cachorros por el resto de sus vidas?
-tienes razón Kopa, debemos de pensar en unos bonitos nombres para estas bellas bolas de pelos.- dijo Kion mientras miraba a sus hijos que ya se encontraban en las patas de Fuli.- dime amor, ¿Cuál es el mayor?-
-él.- la manchada señalo a un cachorro de pelaje amarillento con manchas difusas como el de ella, en su cabeza poseía unos mechones rojizos como los de Kion y sus ojos eran tan verdes como los de su madre.
Kion miro atentamente al pequeño pensando en algún nombre que vaya bien, en eso se dio cuenta que el cachorro poseía un cuerpo bastante aerodinámico como el de su esposa.- puedo asegurar que este pequeñín será tan rápido como tu amor, su nombre será Haraka.
-oww me encanta Kion, el siguiente es el sobreviviente.- contesto Fuli señalando el pequeño de pelaje beige con manchas difusas, mechones rojizos como los de su padre pero más oscuros y ojos marrones como los de él. Su padre se acerco para verlo mejor, ya que estaba escondido entre sus demás hermanos, pero al hacerlo este oculto su cara.- creo que es algo tímido, que te parece Aibu.
-me parece genial amor, ¿Quién sigue?-
-este travieso, no dejo de molestar a sus hermanos cuando nació.- y señalo a un cachorros de pelaje dorado como el de Kion que, en sus orejas, tenía un color amarrillo al final y poseía unos ojos verdes muy oscuros.-
-¿un bromista? Creo que le queda bien Prank.-
-es perfecto amor, la ultima es ella, la única hembra.- la chita señalo a una cachorra de pelaje parecido al de Kion pero más claro que poseía dos anillos en sus orejas de un color muy parecido a las manchas de su madre, sus ojos eran rojizos como los de su padre.
El de melena se acerco para ver mejor a su única hija pero antes de que pudiera hacerlo Kiara lo empujo a un lado para poder ver a su sobrina.- hoo es toda una ternurita.- Nama se aproximo a donde su madre para también poder ver a su prima.
-es verdad madre, es muy tierna.-
-oye Kiara, porque no le pones nombre a tu sobrina.- le ofreció Kion.
-en serio? Gracias hermanito.- la felina se había quedado pensando unos segundos hasta que se le ocurrió un buen nombre.- que te parece Huruma.
-me gusta, ¿Fuli?- la chita asintió en respuesta.- está decidido.
-¡genial! Ahora tendré tres primos con quienes jugar.- hablo Chaka asomando su cabeza para ver a los cachorros.
-sabes que tendrás que esperar que crezcan ¿verdad?- pregunto Tani en un tono de obviedad.
-lo sé, no arruines mi felicidad.- finalizo él haciendo que todos se rían.
Hola amigos, si ya se tarde años en actualizar y la verdad lo lamento mucho, espero que el capítulo les haya gustado. Prontamente estaré subiendo a Prank en personajes y a más tardar mañana a Huruma.
Además tengo algo que espero y les interés ¿que es? UNA NUEVA HISTORIA.
Así es, tengo pensado hacer una nueva historia, bueno, no una sino dos. Espero que la idea les agrade y si les gusta no olviden comentar y botar.
Sin más que decir me despido bye.
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