Capitulo 10.

Compromiso y entrenamiento.

(ATENCION, antes de empezar una aclaración cuando escriba así se refiere a hechos pasados) ahora si lean.

Ya había pasado una semana de la propuesta de Kion a Fuli y en el transcurso de esos días varias cosas habían sucedido, principalmente la revelación de esto a toda la familia real que fue al día siguiente de la propuesta.

El día estaba pacifico, era de medio día y las leonas habían vuelto de una muy buena casería, llegaron con un gran búfalo que serviría de alimento por unos cuantos días para la familia. Por el gran tamaño y peso del difunto animal todos decidieron comer debajo de la Roca del Rey bajo la sombra de un árbol que no se encontraba lejos de allí. Ese día Fuli estaba invitada al almuerzo y a pesar de que eso no era nada fuera de lo común, ya que varias veces había almorzado con ellos, algunos, como Simba y Kiara, sospechaban que Kion diría algo importante.

El almuerzo continuo tranquilo, todos estaban más que satisfechos con la comida y cuando todos se estaban por levantar para seguir con las actividades del día alguien los interrumpió.

-FAMILIA.- anuncio a gran voz para que todos le prestaran atención.- tengo algo muy importante que decirles.

Los felinos se quedaron en silencio pensando en que podría ser, algunas leonas hablaban por debajo sacando conclusiones de lo que podría pasar, todos esperaban impacientes lo que diría el pelirrojo.

-Kion, hijo ¿está todo bien?- se acerco Nala a él preocupada, aunque su pequeño tenía una gran sonrisa en su rostro no podía no preocuparse.

-tranquila madre, no hay porque alarmarse.- la tranquilizo el menor dejando a la leona más calmada.

-¿Qué es entonces Scar?- hablo Kovu en un tono burlón.- ¿acaso ya vuelves a patrullar?

A pesar que la broma de Kovu no fue de mala intención Kion no pudo no tomarlo a mal, frunció el seño mostrando su disgusto pero intento tranquilizase no quería arruinar tan buena noticia. La manchada, que se encontraba a su lado, noto la actitud de su prometido, así que para calmarlo, paso su pata por la espalda de su compañero haciendo que este se calme. Kion ya calmado hablo al oji-verde.

-ya hablaremos de mi regreso al patrullaje Kovu, pero esto es más importante.-dijo sereno. -verán, todos ustedes saben de mi relación con Fuli y del largo tiempo que somos pareja, pero lo he pensado mejor estos días y por fin pude tomar la gran decisión de que ella y yo demos un paso más en nuestra relación- concluyo el de melena posando su mentón sobre la cabeza de la cheeta.

Todos estaban asombrados ante las palabras del príncipe más joven, todos excepto Simba y Kiara que ya veían venir esto.

Nala se acerco nuevamente a su hijo.- Kion, quieres decir que Fuli y tu...

-Sí, estamos comprometidos.- concluyo su hijo.

La de ojos claros se abalanzo sobre el león llenándolo de abrazos y besos de la felicidad que tenia.- Ho mi cachorro, mi bebe, mi pequeño príncipe ya es todo un león con prometida y prontamente esposa.- decía ella aun abrazándolo, Simba y Kiara se acercaron también para felicitar a la pareja.

-ves hijo, te dije que no perdías nada en intentarlo.- Kion asintió con la cabeza como pudo, aún tenia las fuertes patas de su madre abrazándolo.

-te felicito Kion, y también a ti Fuli te has conseguido un muy buen león, un poco cargoso, pero muy buen león de todas formas.-dijo Kiara.

-gracias, Kiara.- le sonrió la felina.

-sí, gracias hermana.- hablo Kion ya fuera de la patas de su madre.- ¿y cómo así que cargoso?- sonrió de lado con una ceja levantada.

Kopa se acerco a la conmovedora escena familiar en la que no estaba siendo parte.- me alegro por ti Kion, pero dime ¿Cuando será la boda?- pregunto el rey amablemente, quería ayudar a su hermano menor a organizar tan importante acontecimiento.

-amm... pues.- Kion miro nervioso a Fuli, esta le negó con su cabeza, aún no tenían fecha de boda y ni siquiera habían hablado de eso, la felina saco de los pensamientos al león con un ligero golpe en el hombro dándole a entender que dijera algo.- este... en una ¿semana?- dijo lo último algo dudoso.

-¡TAN PRONTO!- se sobresalto el castaño, Kion no se había percatado de lo que dijo hasta ese momento y decidió usarlo a su favor.

-si... pero si es demasiada molestia podría cambiar la fecha.- el oji-naranja conocía algunas cosas de su hermano y posponer planes importantes no era una de sus cualidades, además de que tenía que aprovechar la ventajas de ser el menor.

-¿molestia? No, ninguna molestia, en una semana entonces, hermanito.- concluyo el mayor sin darse cuenta de lo que dijo. Desde que era pequeño a Kion nunca le gusto que le dijeran "hermanito" en realidad lo odiaba, se sentía como alguien indefenso que no puede defenderse cuando en realidad era todo lo contrario, pero como era algo especial dejo dejarlo para por ese día.

-¡UNA SEMANA! DEBEMOS DE EMPESAR YA.- grito Kiara.- no te preocupes Fuli, yo te arreglare.- la felina trago saliva ante las palabras de la actual reina, aún recordaba lo que le hizo el día anterior y el baño que le obligo darse.

-hija tranquilízate, yo te ayudare.- afirmo Nala, eso no calmo a Fuli ni un poco, al menos podría escaparse corriendo cuando quiera.

-mami, yo puedo ayudar también ¿verdad?- pregunto Nama acercándose a ambas leonas.

-claro pequeña, puedes ayudarnos a tu madre y a mi.- le respondió su abuela con mucha dulzura.

-no es justo, yo también quiero ayudar.- hablo Tani molesta entre los demás.

-claro que puedes Tani, solo pregúntale a tu mamá si te deja.- contesto su tía.

-mami ¿puedo ayudar, verdad?- pregunto la pequeña princesa moviendo la pata delantera de Vitani.- ¿siiii?

La leona de flequillo miro a su hija, la verdad eso de arreglar a los demás no era su estilo pero no podía negarle tal petición a su hija.- bien, si es lo que quieres...

-siii, gracias mami, pero ¿tú también ayudaras verdad?- pregunto curiosa la leona, recibiendo las miradas de Kiara y Nala además la de Fuli.

-¿Qué? No, imposible, sino quien guiaría a las cazadoras.-sostuvo la oji-purpura intentando zafar de tal pedido.

-si ese es el problema amor, no te preocupes que hay varias leonas muy buenas que pueden remplazarte por unos días, además solo serán unas cuantas horas no hay problema.- argumento su marido intentando buscar solución a su problema.

-gracias.... Mi rey.-dijo ella con un tono sarcástico.

-¿dije algo malo?- le susurro Kopa a Kovu.

-amigo, creo que hoy duermes afuera.- le contesto del mismo modo.

...

En otro lugar alejado de las praderas, más conocido como el Bosque abandonado, dos pequeños cachorros habían empezado su entrenamiento hace unos días atrás. Zira era quien lleva a cabo tales entrenamientos y desde que empezó no han sido nada fáciles. El primero que tuvieron fue el mismo día en que los animales atacaron al reino.

La leona había llegado al ahora considerado hogar y se dirigió donde jugaban los cachorros de sus nuevos compañeros, ella los llamo y ambos le obedecieron. Se alejaron unos cuantos metros de donde habitualmente descansaban todos ellos.

Los dos cachorros aún no entendían muy bien a qué se debía todo eso, solo sabían que se estaba planeando algo aúnque no sabían muy bien qué. La leona los detuvo en un lugar en donde no había tantas ramas ni árboles muertos, les ordeno que limpiaran y despejaran la zona y luego les ordenó que se sentaran para prestar atención a sus palabras.

-ESCUCHEN CON ATENCION ¿SI? Esto no es un juego, esto es un entrenamiento duro en el que tendrán que poner todo su esfuerzo, moverán huesos que no sabían que tenían y utilizaran músculos que no sabían que servían. Van a usar las garras, los colmillos y su velocidad, no quiero ver debilidad y mucho menos fracaso, no seré nada buena y les exigiré demasiado. Esto no es para bebes llorones ¿ENTENDIERON?-

-¡sí, Zira!.-dijeron al mismo tiempo.

-bien, hoy será "sencillo" quiero que pelen entre ustedes, necesito ver sus habilidades, utilices garras y colmillos si es necesario, no tengan piedad entre los dos porque cuando estén conmigo ya no serán primos sino contrincantes. AHORA EMPIENSEN.- ordenó

Ambos se pusieron en posición de ataque, había un metro de distancia que los separaba.-bien, empecemos.- dijo el mayor de los dos corriendo hacia el de flequillo negro, Maumivu intenta golpearlo con su pata derecha pero falla ya que Mane lo esquiva de un salto, este aprovechando la distracción de su primo, se tira sobre el dejándolo bajo sus patas.-te tengo.- susurro el menor pensando que ya había ganado.-es lo que crees.-le recordó el mayor que estaba bajo sus patas. De un movimiento rápido Maumivu gira bruscamente en su lugar proporcionándole un golpe con su pata en el asicó de su oponente sacándolo de su agarre.

Mane se soba el mentón por el golpe y ve que su primo, ya de pie, se lanza contra él, pero de un rápido movimiento esquiva el ataque de su primo y esta vez él lo embiste haciendo rodar al de mechón rojizo dejándolo fuera de combate.

-bien, Mane veo que serás un buen peleador, pero la próxima no tengas piedad y usa esos dientes y garras.-Mane se veía muy contento por lo que dijo su entrenadora.- Maumivu, tu..-el cachorro miraba esperanzado a la vil leona.-LO HAZ HECHO HORRIBLE, ESPERO MÁS DE TI Y ESPERO QUE LLEGUES A PELAR COMO TU PRIMO MENOR.

El menor bajo sus orejas ante tal critica.-sí, Zira.- dijo este frustrado.

-más les vale dormir bien esta noche, mañana será un entrenamiento duro, esto solo ha sido el comienzo de todo, AHORA LARGO.- concluyo la de ojos sangre viendo como las dos bolas de pelos salían corriendo del lugar.

-eres mala... no...malvada...me gusta.-la extraña voz provenía a espaldas de Zira, esta no tuvo que voltear para reconocerla, ya la tenia cansada.

-y tu un tarado y nadie te dice nada.- la leona se giro para ver a la silueta.-solo dime lo que sucedió.

-te parece que primero no se, ¿comamos halgo?- el leon poseía un aspecto intimidante, pero Zira lo opacaba y hacia que no lo pareciera.

La leona gruñero severamente a la respuesta del leon haciendo que unas pequeñas carcajadas nerviosas salieran de los labios de este.-lo sabia, sabia que perderíamos.-exclamó enojada.- no se porque te hice caso.-

-pero, ¿mi paga?- aún era insistente con eso.

-olvidalo.- y se retiro de lugar muy enojada dejando solo el leon






Ya los tenía buen tiempo esperando, sepan perdonarme y se que también el capítulo no es tan largo como para que lo hagan, pero de verdad quería hacerlo mucho más largo aunque creo que quedo bien así.
Espero les halla gustado y no se olviden de votar y comentar.

Y ahora unas preguntitas para que se olviden del corto cap:

Si fuesen Kion ¿cómo le hubieran propuesto matrimonio a Fuli?

Si fueran Zira ¿cómo entrenarían a los cachorros?

Bueno ahora si me despido, bye.

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