Habían pasado un par de meses y Kion estaba lo suficientemente grande como para salir de la cueva. Ese día tenía ganas de jugar así que pidió permiso a sus padres y estos lo dejaron con la condición de que volviera antes del atardecer.

Él acepto y salió de la cueva, sin embargo tuvo que ir a jugar solo ya que su mejor amigo Bunga se encontraba durmiendo y era prácticamente imposible despertarlo cuando él dormía. Además, su hermana Kiara tampoco podía, ella se encontraba con su padre en una de sus clases de las cuales el pequeño cachorro no entendía.

Así que Kion caminaba vagamente por las tierras de su padre, observando a las distintas especias de animales que habitaban y pensando en que podría hacer para divertirse. Mientras lo hacía algo llamo su atención, se trataba de un animal que no había visto antes, este se encontraba recostado en la tierra, se veía triste y algo deprimido.

El pequeño príncipe decidió acercarse para saber que le ocurría e intentar ayudarle si era necesario. Ya al estar frente a este llamo su atención para que se percatara de su presencia.

–¡Hola!– dijo alegre.–mi nombre es Kion ¿eres nuevo por aquí?–

Ella lo observó con cierta confusión, era el primer animal que se acercaba a saludarla.– Hola... yo, me llamo Fuli y sí, soy nueva.–

El macho noto los brillantes ojos verdes de la felina, le parecieron muy inusuales, no conocía a nadie con unos ojos así. Recordó que su madre tenía unos ojos verde azulados, pero estos eran distintos.

–¡Oye, estás bien!– ella se percato que el león se había quedado mudo mientras la obserbaba y eso la asustó.

–¡eh...! Sí.– sacudió su cabeza para despejar su ideas.– lo siento, ¿Fuli, verdad?  Es... un bonito nombre.–

–este... gracias.– sintió sus mejillas arder por un momento.

–note que estabas triste ¿puedo saber el por qué?–

–emm si, como dije soy nueva y no conozco a nadie, no tengo amigos ni familia y por eso me encontraba así.–

A Kion esto le sorprendió ¿no tenía familia? ¿Eso era posible? Le era difícil pensar que allá alguien sin una familia, él contaba con una gran manada la cual era su familia ¿Había animales que no tenían una familia así? Para él eso era extraño, por un momento quiso saber más al respecto, pero al ver el estado de la chica decidió no preguntar, esperaría a que  ella le dijera. Sin embargo había algo que si podía hacer.

–oye, si quieres, yo puedo ser tu amigo.– le propuso con una sonrisa.

Esta le miro de reojo.– ¿de verdad?– El cachorro asintió con su cabeza entusiasmado.–eso me encantaría Kion.– le contesto con una sonrisa.

Kion sonrió aún más, había logrado que sonriera por primera vez y eso le ponía feliz, se había propuesto mentalmente que se encargará hacerla sonreír cada vez que pudiera.

–¡genial! ¿Te gustaría jugar?– le propuso él.

–esta bien, que tal si jugamos una carrera.–

–me parece bien, pero debo decir que soy bastante rápido. – dijo orgulloso, recordando las veces que le ganó a Bunga.

Fuli sonrió de lado, sería muy fácil vencer a ese cachorro engreído. –muy bien, corramos hasta aquel árbol.– dijo señalando un grana árbol que se encontraba a la distancia. Kion acepto y se pusieron en posición, a la cuenta de tres salieron.

Kion pensó que tenía la delantera por un momento, pero en realidad Fuli le había dando un poco de ventaja, al ver que estaba a mitad de camino y sentir la victoria una nube de polvo lo cubrió por completo. Al llegar hasta el árbol noto que su nueva amiga ya estaba allí.

–¿Pero qué?– dijo con cansancio. –¿cómo has llegado tan rápido? Estuve delante de ti ¿que animal eres?–

Fuli río a carcajadas, sin dudas la cara del cachorro era un poema de asombro. –soy un guepardo y nos caracterizamos por correr a gran velocidad a corta distancia.– explicó ella.

–ya veo...–

–con que eras bueno en las carreras, cachorro de león. – le dijo burlona, este se sobresalto y sintió como el calor se le subía a las mejillas al escuchar esa frase, "cachorro de león" se repitió en su mente, se sintió avergonzado y al mismo tiempo le gustó.

No quería que ella lo viera en ese estado así que aprovecho el hecho de que la tarde estaba llegando a su fin. – Fuli, me agrado haberte conocido pero debo de volver a mi hogar, ya han de estar esperándome.–

–yo también debería irme, Kion.–

Ambos se despidieron y cada quien se fue por su lado. Aunque el joven príncipe había perdido y se sintió humillado por su nueva amiga, estaba contento de haberla hecho feliz, y ese era mejor triunfo que ganar la carrera.

***

Ya habían pasado dos semanas desde el encuentro con su nueva amiga y Kion pasaba tiempo con ella cuando Bunga no podía estar con él. Ese día el joven príncipe y su mejor amigo habían decidido jugar una partida de baobalon.

Ambos se divertían mucho y no les importaba que opinaran de ambos los demás animales. Kion intentaba atrapar a Bunga quien tenía la fruta del Baobab, pero en uno de sus intentos esta terminó cayendo en una fosa que marcaba el límite con Las Lejanias.

–genial, parece que nuestro juego terminó.– se quejó Kion con sarcasmo.

–bah, claro que no. Recuerda lo que dicen mis tíos.– en eso Bunga se lanzó a la fosa gritando su tan característica frase "zucazama".

El felino rodó los ojos ante lo dicho por su amigo, sin dudas Bunga nunca media los riegos.– hakuna matata...–

El tejón no tardó mucho en encontrar su baobalon y al hacerlo lo alzó con sus patas para que Kion pudiera verlo. Ya listo para volver a subir por donde vino una hiena lo atrapa por su pelaje junto con otra que observaba al tejón de manera divertida. El príncipe observó la escena con impotencia, su amigo intentaba zafarse y estas no lo dejaban.

– ¡Hey! ¡suéltalo hiena!– hablo con enojo.

Ambas rieron a carcajadas al escuchar la voz del cachorro.–¿Y qué piensas hacer al respecto? Si sólo eres un pequeño cachorro de león miedoso– dijo la otra para después burlarse nuevamente.

Kion se enfureció ¿por qué pensaban que él era un cobarde?– ¡No! ¡Tengo! ¡Miedo!– y ruge con todas sus fuerzas, causando un gran y sonoro estruendo que deja a las hienas aturdidos y asustadas, logrando así que Bunga pueda liberarse y volver hasta donde su amigo.

Bien amigos aquí les traje un nuevo capítulo así que les dejo que decidan que historia quieren que actualice el próximo finde.

Además he salido de vacaciones de invierno así que espero poder tener tiempo para poder actualizar un poco más.

Espero que les allá gustado y si fue así déjenme una estrellita.
Sin más que despido bye bye.