2: La profecía del rey

Orión

La cascada cae en mi espalda y escucho los murmullos de los demás. Se quejan por mis acciones, no obstante, no me arrepiento. Tengo que terminar esto, sea como sea, no me interesa porque medios lo consiga.

—¡Agh, ya cállense! —Abro los ojos y me levanto.

Muevo mi cabello negro y mojado mientras avanzo por la multitud. Salgo del arroyo, entonces me encuentro con mi madre. Su pelo, del color del mío, es tan largo que llega hasta sus piernas y sus iris son de un amarillo intenso. Me observa con una mirada acusatoria. Se encuentra acompañada de mi amigo Gales, el que me impidió hacer el inminente secuestro, y en su otro costado está mi padre, que la pasa por dos cabezas, él podría considerarse un gigante.

—Madre. —Agarro y beso sus manos, luego las suelto—. El bosque está deleitado con tu hermosa presencia.

—No te burles de mí —gruñe—. Sé que eres un hombre adulto, pero mi deber como alfa de esta manada es castigarte por tus errores.

Mi padre, el cual tiene un gran tapado de piel, que se mueve por su risa llena de eco, decide interceder por mí:

—Querida, hizo lo que cualquier macho haría. —Mueve su mano, pueden notársele sus uñas afiladas—. Estar junto a su hembra.

Ella lo ignora.

—Secuestro es secuestro.

—Madre, no te metas. —Bufo y me señalo con el dedo pulgar—. Yo hago lo que quiera con mi mujer.

—¡¡Recapacita, te va a odiar!! —advierte.

—Es lo que le dije —aclara, el castaño—. Pero no escucha.

—¿Eres mi amigo o mi enemigo? —me quejo, luego vuelvo a mirar a mi madre—. Estamos destinados, no hay razón para que le desagrade lo que haga.

Mamá suspira, observando hacia el pasto.

—Se puede amar y odiar a la vez, hijo. —Suspira, triste.

Mi padre traga saliva, girando su vista hacia un costado. Están juntos por el lazo, pero los sentimientos de mamá están bastante muertos por papá. Ella rompería su unión, si no fuera porque es la alfa de la manada y es todo lo que le importa. Por esa razón, ya lo veo venir, no me salvaré, voy a ser castigado. Su liderazgo siempre va por encima de todo.

Mi madre alza la vista y me tenso, luego declara:

—Yo, Asthiria Nermine de Acalius, Alfa de la manada Polaris, he decidido que tu castigo sea físico y mental, para que entiendas el daño que pudiste causar. —Se gira, entonces se da la vuelta, empezando a irse, dándome la espalda para no mirarme—. Cien latigazos y destierro.

—¡¡Madre!! —me quejo cuando me agarran dos de los guardias.

—Querida, cómo me calienta cuando eres tan agresiva —declara mi padre, feliz—. Pero podemos arreglar estas cosas en...

—Cállate, Baldor. —Mi progenitora comienza a caminar, luego gira su vista hacia mí—. Y no quiero que vuelvas, hasta que esta profecía esté terminada —dictamina.

—¿Me castigas por secuestrar y luego me pides que asesine a un bebé? —Me río con burla—. Qué descaro, madre.

—Yo no dije eso, solo espero una conciencia limpia cuando termines, porque no te quiero ver aquí.

Gruño.

—¡¡Cuando termine, tú dejarás de ser la alfa!! ¡¡Muerto o no ese bebé, tienes la vida acabada, madre!! —grito.

—No hables así —dice con temor Gales, luego mira a Asthiria—. Por favor, señora, es un poco bobo, pero...

—No voy a cambiar de opinión. —Niega mi progenitora, moviendo la cabeza—. Eres la voz de su conciencia, hazlo recapacitar. Hiciste que viniera, así que supongo que servirás.

—Querida... —Mi padre pone la mano en el hombro de ella, pero la aleja cuando sus ojos lo miran con furia, luego gira su vista hacia mí—. Tú haz lo que un macho debe hacer, yo estoy de tu lado.

Aclara eso, pero soy llevado a "mundo tortura". Es una forma de decir, ya que no podré evitar esos latigazos. El punto es que es un manejado, pero yo no seré como él, yo sí soy un macho de verdad. Lo único que me interesa es esta profecía, yo seré el rey de todas las manadas, y ese es mi último requisito, el cual, cumpliré con creces. No me importa si tengo que asesinar a un infante en el proceso, no hay manera de que mis actos perjudiquen mi misión.

Seraphine

Camino por la calle, los autos pasan. Sonrío como boba mirando la ropita en mi bolso. ¿Será niño o niña? No quise que el médico me dijera, pero estoy segura de que será enorme, mi panza es tan grande. Ya ven, bebé, ven para poder decir que tengo una gran familia.

Mis padres murieron cuando era muy joven, así que estuve sola hasta que Killian apareció. He tenido parejas antes de él, pero mi marido es el más importante, creo que es el amor de mi vida. Me entiende, me cuida, me abraza, me hace sentir que no estoy sola. Siempre quise sentirme así, por lo tanto, ahora puedo decir que soy la mujer más afortunada del mundo.

Escucho un crujido en un callejón y me sobresalto. Busco, rápido, en mi bolso el celular, para llamar a la policía. Luego freno, al ver al hombre de la otra vez, está sangrando. Camina, sosteniéndose de la pared, luego no puede avanzar más y cae al piso, desmayado.

—¡¡Oh, cielos!! —Rápido, corro en su auxilio y me agacho—. Tranquilo, llamaré a una ambulancia.

Toma mi mano, así que me sobresalto. Alza la cabeza y nuestras miradas tienen una extraña conexión, por lo tanto, mi corazón palpita de una manera veloz. Me paralizo, mis mejillas arden, luego reacciono.

—Yo... —Lo suelto, ya que me levanto.

Siento un extraño vacío, pero me pongo en determinación y así es como llamo a la ambulancia. Cuando esta llega, lo suben a una camilla y, mientras se va, no hemos parado de mirarnos. No entiendo qué me ocurre, pero es demasiado intenso. Trago saliva y, segundos después, cuando cierran las puertas de la camioneta, me aproximo al paramédico.

—La clínica de mi marido está cerca, llévenlo ahí.

Le entrego la tarjeta al conductor, luego veo cómo el vehículo se aleja y puedo oír que mi corazón empieza a estabilizarse. Me tiemblan tanto las piernas, no tengo idea de cómo comportarme. Necesito un poco de agua y regresar a casa, ha sido demasiado intenso. Debo cuidar del bebé. Pongo mi mano en mi vientre, entonces continúo mi camino, en el cual me vuelve la sonrisa, por el sentimiento del amor a mi hijo. Es mi lugar seguro para siempre.

Creo que Asthiria es una de las pocas madres de mis protagonistas que puedo decir: Te amo, písame la cara 😂💖

Estoy enamorada de esa mujer lobo 🤣

Por otro lado, Seraphine es un ser de luz y no sé qué hizo para merecer tremendo imbécil de compañero. Creo que ya se notó que me cae mal el protagonista masculino, pero como cualquiera de mis personajes, tengo fe de que va a evolucionar de buena manera. 

Saludos, Vivi.

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