Lección 39
39Pasaron varios días y yo seguia sin decidirme por ir a la boda o no, el trabajo estaba comenzando a ser aburrido, era lo de siempre, nada parecía cambiar en los últimos años, aunque ahora en mis tiempos libres al menos ya no me la pasaba tan sólo como antes, oi el sonido de mi teléfono lo tome entre mis manos y abrí el mensaje que había llegado.
De: Anna M.
Prepare un postre yo misma, me gustaría que lo probaras y como mi madre quiere que sea más refinada. Acompañame a la hora del té, no me gusta estar entre las amigas de mamá y sus risas de duquesas extorcionadoras.
No pude evitar reír a carcajadas, no sabía de donde era tan ocurrente Anna, si algún día ella llegará a tener hijos serían como ella una total explosion y si no es así me lamentare sus hijos porque lo más seguro es que sus nietos si lo sean. Me levanté de la cama y me aliste para ir a la fiesta de té de Anna.
En cuanto puse un pie fuera de su mansión la Observe abrir la puerta y dirigirse hacia a mi mientras corrían un vestido beige decorado de flores, subió a mi auto y yo la Observe confundido.
-Conduce Tobias, conduce.
Me ordenó y yo la mire aún más confundido, oí a un hombre gritar el nombre de Anna, levanté brevemente la mirada y observe a un chico como de mi edad en verdad molesto, subí a mi auto y mire a Anna quien parecía preocupada, bueno que más daba, supongo que podría pedir una explicación despues, arranque mi auto ignorando los gritos de molestia del tipo, mientras más íbamos alejándonos de su casa más aliviada se veía Anna.
-¿Y que sucedió?.
-Bueno veras, mi madre dice que debería casarme con ese tipo.
-¿Que?.
-Dice que ese tipo de billetes será bueno para mi, ¿qué le sucede?, en que época cree que vivimos, jamás haría eso por complacer a mi madre, y si quieres criticarme por eso está bien, pero la verdad yo creo que...
-Estas haciendo lo mejor- la interrumpi- nadie puede obligarte a algo como eso, tal vez huir a la fuga no fue la mejor eleccion, pero el que hagas saber tu opinión y el negarte a algo que no quieres aunque eso signifique llevarle la contraria a tu madre, creo que es lo mejor que pudiste haber hecho, eres muy valiente Anna.
-Gracias- respondió y la mire por un momento realmente se veía que tenía unas enormes ganas de llorar.
-Se por lo que estás pasando.
-Lo dudo.
-Hablo enserio, recuerdas cuando te dije que mi historia sobre Kim era larga.
-Si.
Aparque el auto, me gire para ver a Anna y con un breve suspiro le conté todo desde el principio, el como conocí a Kim, mi mala relación con mi padre, como tome la más estúpida decisión de mi vida, como ella perdió la memoria como tuve otra oportunidad y la dejé ir, ella me escuchaba con atención mientras me miraba a los ojos ni por un momento aparto la mirada.
-¿Y que opinas al respecto?- pregunte cuando termine de contarle todo.
-Que ella tenía razon, eres el rey de los idiotas, pero, creo que también fuiste muy valiente no es fácil dejar ir a una persona que amas, pusiste su felicidad sobre la tuya, creo que eso es algo que amerita mucha valentia.
-Espero que te sirva de elección, piensalo Anna y toma una buena decisión.
-Eso haré.
-¿Entonces te llevo de regreso a casa?.
-Me encantaría pero mamá dejo que ese tipo se quede en casa y debo confesar que tengo miedo de que me haga algo, tiene cara de maniático depravado.
No pude evitar reir, ella siempre hacía un chiste sin falta alguna.
-Podrías quedarte en mi casa.
Ella me observó mientras fruncia el ceño.
-Te prometo que no te haré nada, nisiquiera tengo cara de maniático depravado.
-No porque la tienes de idiota- comentó y suspiro.
-Casi no me paso en casa, tengo una habitación para huespedes, puedes quedarte ahí en lo que el maniático depravado se va o hasta que tu madre cambie de opinión.
-No quiero ser una molestia.
-No lo seras, además somos amigos.
-Bien me quedo, pero donde se te salga lo depravado te apuñalare con lo todo lo que encuentre a mi paso.
-Bueno con esas advertencia me mantendre más que alejado.
-Más te vale Tobías.
Al llegar, Anna observó el lugar maravillados lo único que me alegraba de todo esto es que si tuviese la casa ordena, la guie hasta su habitacion donde se quedaría y ella miro alrededor.
-¿Enserio puedo quedarme?- pregunto sentada en la cama.
-Claro, mi habitación está del otro lado, por si necesitas algo- la comenté y oi mi teléfono observe la panatalla y lo tome- necesito ir al trabajo, no le vaya a abrir a nadie Anna, volver e hasta tarde.
-De acuerdo.
-Te veo después.
-Adiós Tobías.
-Adiós Anna.
Salí de mi departamento y me dirigí al trabajo, en verdad odiaba las juntas, mire el reloj y observe que era algo tarde, Anna no debe estar acostumbrada a estar sola aunque parece una niña bastante independiente, ahora que lo pienso, nisiquiera tiene ropa para quedarse, ¿Debería comprarle algo?, o tal vez ir a su casa y tratar de explicarle la situación a su madre pero, ¿y si pensaba mal de mi?.
O demonios tal vez no fue buena idea.
Al llegar a casa oi la carcajada de Anna entre y la Observe sentada junto con Jackson.
-¿Que haces tu aquí?- la pregunte a Jackson.
-Maldito asaltacunas pervertido- dijo mientras bailabas sus cejas.
-En primera Anna es una amiga, en segundo tu eres el madito pervertido por pensar en esas cosas.
-Y en tercera no creo que Tobías sea una asaltacunas, no creo que nuestra diferencia de edad sea mucha.
Observe a Anna y frunci el ceño era obvio que era una niña.
-Tengo 25 años- respondió Anna y lo mira sorprendido- ¿que edad tienen ustedes?.
-¿ Tienes 25?- pregunte mientras la miraba.
-Si lose me veo muy joven.
-Entonces no irás a prisión Tobías- dijo Jackson y yo lo mire molesto.
-Te dije que no abrieras la puerta, hubieras dejado a este afuera.
-Si pero, creo que es lindo, además me a contado muchas cosas divertidas.
-Bueno si Tobías no quiere nada contigo yo podría.
-Inténtalo y te axfio mientras duermas.
Jackson río asintió con la cabeza como si estuviese de acuerdo y se levanto de su lugar para dirigirse a la cocina yo mire a Anna y le entregue una bolsa.
-¿Que es eso?- pregunto mientras miraba la bolsa.
-Pensé que no te gustaría estar todo el día con ese vestido y no podría ir a tu casa sería raro explicarle a tu mamá.
-¿Así que compraste ropa para mi?, ¿incluso la interior?, creo que si eres un pervertido.
Dijo finguiendo pánico y yo rei.
-La dije a mi asistente que lo hiciera, debiste haber visto su cara de pánico, creo que realmente parecía sorprendido.
Respondió y gire la mirada para observarla mejor, nisiquiera había notado que ya no traía el vestido, no traiga puesta una camisa mía y mi pijama.
-¿Cuando fue que tomaste mi ropa?.
-Pensé que no lo notarias- dijo y río a carcajadas mientras miraba la bolsa- me tome el atrevimiento de buscar entre tu ropa y tomar lo más pequeño que encontre, tampoco pensaba dormir con el vestido y como dijiste que tardarias- comentó y miro hacía Jackson- debiste haber visto la cara de preocupación de tu amigo cuando por fin decidí abrirle la puerta, casi le dio un infarto.
-Si me lo imagino, debió haber sido así-dije mientras fingia un gesto de horror y Anna río.
-No fue más asi- dijo mientras hacia un gesto exagerado de Jackson cuando fingia pánico.
Ambos reimos a carcajadas sentí un golpe en la cabeza y observe la cara de molestia de Jackson, Anna estuvo burlándose de él todo el tiempo por eso y a ella no la golpeaba ni le daba sales sólo le sonreia, maldito.
-Parece ser una chica agradable- dijo Jackson mientras tiraba su maleta en la otra habitación de huéspedes.
-Lo es, es una chica bastante singular.
-Deberías darte una oportunidad con ella.
-Anna sólo es mi amiga.
-Si también Yuni era mi amiga y ahora nos vamos a casar, también Kim fue tu amiga durante un tiempo.
-Y ahora va a casarse con Pepe.
-Tengo fe que esa chica lograba cambiarte de opinión.
-Jackson, me gusta Anna sólo una amiga, déjala por favor, no metas ideas donde no hay.
-Sólo comentaba.
-No lo hagas, por favor.
Dije y salí de la habitacion, pase por la habitacion de Anna y abrí la puerta para observarlo dormir volví a cerrar la puerta y me dirigí a mi habitación.
Tal vez si podrías intentarlo.
Oi decir a mi conciencia de una manera leve, sin embargo decidi ignorarla, no quería perder a Anna, no a ella también.
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