Capítulo 18
Alexandra abrió la puerta a las 3 de la madrugada.
— ¿Listos? —Dije.
—Sí, solo una cosa más. —Dijo Mike. —Si alguno lo atrapan no regresaremos por él, a excepción de Ellie.... A ella la tenemos que proteger con nuestra vida.
—No, regresaremos por cualquiera que se quedé atrás, entramos juntos, saldremos juntos, se los prometo. —Dije.
Todos asintieron salimos de la celda, al llegar a la puerta, la abrimos, al ver que no había nadie, todos corrimos en diferentes direcciones.
Gabe me sujetó de la mano y corrimos entre todos los pasillos abriendo puertas al azar, pero ninguna era la indicada, llegamos al puerto de mando, saqué el radio y dije.
"Las águilas llegaron al nido"
"Águilas"
"Águilas"
Esa era nuestra señal de que estábamos bien.
Minutos después escuché la voz de Mike por el radio.
"Las águilas encontraron el nido"
De nuevo repetimos las palabras. Eso significaba que habían encontrado la sala de armas. Jamás me había sentido tan angustiada en mi vida, inclusive me mordía inconscientemente las uñas, sentía que en cualquier momento nos atraparían o saldría algo mal.
15 minutos más tarde escuché la voz de mi hermana, que me hizo sentir más aliviada.
"Las águilas encontraron el nido"
Esa era nuestra señal, desactive toda electricidad, nos quedamos a oscuras, Gabe y yo corrimos hasta llegar a la puerta donde estaban los demás. Will me dio un uniforme. Gabe y yo corrimos adentro y nos cambiamos.
Salimos y vimos que todos los guardias estaban corriendo de un lado a otro, nosotros corrimos hasta encontrar el elevador, presione el botón y todos nos quedamos mirando esperanzados, las puertas del elevador se abrió y estaba Ed, todos bajamos la mirada.
— ¿Qué ha pasado? —Nos preguntó.
—Se ha ido la luz, veremos arriba. —Dijo Gabe fingiendo su voz.
—De acuerdo, corran.
Él pasó de largo viendo una hoja, nosotros no lo dudamos y subimos al elevador, presione el botón hacia la superficie, este se elevó rápidamente. Se abrieron las puertas y estábamos en el bosque de nuevo.
Todos corrimos, pero en eso escuchamos como se abrían las puertas y salían muchos soldados.
— ¡Atrápenlos! —Escuché la voz de Ed.
Todos seguíamos corriendo sin saber una dirección exacta, se escuchaban las respiraciones y los zapatos de los soldados atrás de nosotros.
Gabe dio la vuelta adentrándose en una cueva, todos nos quedamos ahí, sintiendo como el corazón se salía de nuestro pecho.
Escuchaba como las guardias nos buscaban desesperadamente. Podía escuchar como en cualquier momento nos descubrirían, estaban tan cerca que el fin era inminente.
Alexandra se acercó a nosotros.
—Chicos, derroten a Ed, te quiero mucho hermano, jamás lo olvides.
Ella corrió en dirección contraria de donde estábamos, todos los guardias la comenzaron a seguir, la atraparon, Ed le habló, pero nosotros no escuchábamos lo que estaba diciendo.
Ella soló negaba con la cabeza, le escupió a Ed en la cara, él le dijo algo al guardia, después de eso todo sucedió muy rápido, el guardia sacó la pistola, apuntó a su corazón y apretó el gatillo, Alexandra vio a su hermano por última vez, cayó al suelo y vimos como su vida se iba.
Gabe comenzó a llorar, trato de salir, pero todos lo detuvimos.
Pasamos una hora sentados en la cueva, cuando no escuchamos ni un ruido, salimos, Gabe corrió hasta su hermana.
— ¡HERMANA! —Gritó —No puedes dejarme, te acabó de recuperar, vuelve, no me dejes solo.
Abrazó el cuerpo de su hermana, todos mirábamos la escena melancólicos.
—Gabe, lo siento tanto. —Le dije.
—Tenemos que irnos. —Dijo Gabe.
Yo no sabía que hacer, no teníamos tiempo, podría que inclusive siguieran cercas los guardias.
—Adiós hermana, este no es un adiós es un hasta luego, espero poder verte en la otra vida, tú sacrificio no será en vano, detendremos a Ed, lo mataremos por ti.
—Lo mataremos por todo lo que ha destruido, por todo lo que ha matado, tú sacrificio y el de mi hermana no será en vano. —Dije.
Gabe me dio un abrazo.
—Tenemos que irnos, tenemos que llegar al castillo.
Llevábamos media hora caminando a lo lejos veía el castillo, sería 15 minutos.
— ¿Estas bien? —Le pregunté a Gabe.
—No. —Dijo.
—Escucha sé lo que estas sintiendo, Ed también mató a mi hermana y a su prometido y no te quiero decir todo lo que me dijeron cuando ella falleció. Que está en un lugar mejor, que con el tiempo sanará y que era una buena persona. Porque todo eso ya lo sabes, todos queremos creer que todos nuestros seres queridos que fallecieron están felices, algo muy dentro de mí lo cree, sé que todos están en el cielo, observándonos y cuidándonos. Tu hermana era muy buena persona, alguien ruda, joven...
—Ella no debía morir.
—Nadie merece morir. —Dije. — Y menos a esa edad, pero así es la guerra, siempre habrá muertos, es algo que no podemos evitar, pero podemos evitar que hayas más muertos, ella estaba consciente de ello.
—La extrañaré mucho.
—Lo sé, la gente que muere jamás se olvida, duele su ausencia, pero ella siempre estará aquí. —Dije tocando su corazón. —Ella no morirá, porque vive en tus recuerdos, en tú corazón.
Él asintió con la cabeza.
— Ella jamás se irá.... Te amo Gabe.
—Te amo Ellie.
Él me abrazó, Will y los demás corrieron hasta las puertas del castillo. Los guardias me reconocieron y todos entramos, avanzamos hasta la sala, extrañaba mucho estar en casa, todo parecía nuevo y diferente.
Toda mi familia entró y me abrazaron.
— ¿Qué les pasó hija?
—Es una larga historia, pero hemos venido, porque en... —Miré mi reloj. —Exactamente 15 minutos aproximadamente vendrán los soldados para dar inicio a la guerra. Tenemos que evitar que la inicien, tenemos que hablar con todos los soldados para que entren en razón, les tenemos que devolver las tierras.
— ¿De qué estás hablando? —Dijo mi padre.
—Ellos solo quieren recuperar las tierras que les hemos quitado, solo tenemos que devolvérselas y se acabará.
—Alexia dime que no estás pensando en dar todas nuestras tierras... —Dijo mi padre fulminándola con la mirada.
—Sí, es eso o nuestra vida.
—Un verdadero rey hubiera preferido nuestra vida.
Me quedé anonada ante lo que había dicho mi padre, no podía ser verdad lo que acaba de decir.
—Si ellos quieren guerra les daremos guerra.
Me quedé petrificada y sentía como se me helaba la sangre, mi padre no podía preferir tener tierras a nuestras vidas.
—Padre no puedes hacer eso, ¡Estarás matando a muchas personas!, ¡Estarás haciendo exactamente lo que Ed me dijo que harías!, yo te he defendido, he dicho que entenderías, pero veo que él tiene razón.
—Guardias. —Gritó.
Muchos hombres aparecieron.
—Llévate a mi familia ponlos en la celda hasta que esto haya terminado.
— ¡NO! —Grité. —Tú no puedes hacernos esto, no tienes ningún derecho a decidir por nuestras vidas, te la estás jugando, ¿Sabías eso?, ¿Qué pasará si ellos ganasen?, ¡NOS MATARÁN A TODOS!
—Llévenselos.
Sentía como las lágrimas caía sobre mi mejilla.
—Padre, por favor. —Dije.
—Hija, no podemos darles las tierras, si se las damos con el tiempo pedirán más y más, después no podremos darles todo lo que piden, lo mejor es detenerlo de una vez, antes de que sea demasiado tarde. A veces un rey tiene que tomar decisiones que parecen malas, pero son las mejores para nosotros y para ellos.
Me quedé congelada, sentía que las lágrimas recorrían mi mejilla, todo lo que habíamos hecho no había servido de nada.
Habría guerra, no importaba ahora nada, mi padre nos había condenado a todos.
Nos llevaron abajo, bajamos hasta llegar a la última celda, nos metieron ahí y deslizaron la puerta, pusieron cadena y candado y nos dejaron ahí.
—Ellie, ¿Estas bien? —Me preguntó Gabe.
—No, no lo estoy, hice todo para esto para evitar la guerra, pero al parecer todos quieren eso, todos quieren el poder, no entiendo la decisión de mi padre y mucho menos la de Ed.
—Entiendo todo fue en vano, pero ahora lo único que nos queda es esperanza.
Lo abracé con mucha fuerza.
Pasaron horas, escuchábamos mucho movimiento arriba de nosotros, disparos, gritos, voces.
Vi mi reloj 12. Sentía como el tiempo se volvió cada vez más lento, el aire se volvía más pesado, hasta me costaba respirar.
Nuevamente miré mi reloj: tres de la tarde y así pasaron las horas, se hizo de noche, volvió a hacerse de día y no había noticias, ¿Cuánto tiempo dura esto?
Ya me estaba poniendo nerviosa, había pasado más de un día y nadie había bajado a darnos de comer o agua, pero supongo que era para que no descubrieran nuestra posición. Will se acercó a mí.
— ¿Qué crees que esté pasando?
—No lo sé....
—Le has dicho a Gabe....
—No, a nadie, solo a ti.
—Me siento halagado. —Dijo levantando una de sus cejas.
Reí sin muchas ganas, ya que la falta del alimento, del agua e inclusive de sueño me estaba sobrepasando y me sentía mareada.
—Tengo miedo. —Lo solté.
—Yo también.
De repente hubo silencio, no hubo más balazos, más voces, nos quedamos callados tratando de escuchar un sonido por más mínimo que fuese, pero no había nada, era como si fuéramos los únicos del castillo.
Escuchamos como abrían la puerta, después las pisadas que se acercaban a nosotros, me alejé de la rejilla y me acerqué o más bien me pegué a la pared.
Los pasos cesaron y había un hombre en frente de nosotros.
Ed.
—Hola, princesa Ellie, hola familia Andrade. —Dijo con una inmensa sonrisa en su boca.
Sí él estaba aquí significaba que él había ganado.
N/A
Hola, dos capítulos más o uno xd y termina :c
vieron el trailer de Yo antes de ti, es hermoso TnT
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top