4 años después.

—Ellie deja de moverte.

Me estaba moviendo muy incómoda en mi asiento. Estaba un poco nerviosa de volver a mi hogar, pero principalmente de presentarles a mi pareja.

—Lo siento mi amor, pero no he visto a mis padres desde hace siete años, Alexia me mantenía informada sobre lo que pasaba en el reino, pero aún tengo miedo.

—De Will...

Pude ver que al decir su nombre se le tensó la mandíbula, hace tres años le conté toda mi historia con él, por lo cual lo odiaba.

—Y de Ed. —Finalicé.

—Tranquila Ellie, mi padre no hará nada contra ti. Recuerda que está en la cárcel y ahí se quedará hasta el último de sus días. —Hablo Emma mientras trataba de controlar a su bebé de dos años.

Le sujeté más fuerte la mano a Gabe y él sólo me dedicó una sonrisa cálida, mientras acariciaba la palma de mi mano.

—Hemos llegado. —Anunció Michael.

Voltee para ver afuera, tenía miedo cada vez se veía más cerca el castillo.

Se abrieron las puertas y entramos al castillo, en la entrada pude observar a toda mi familia, inmediatamente mis ojos se llenaron de lágrimas, no sabía que los había extrañado tanto hasta que los vi.

Se estacionó y Michael abrió la puerta, todos nos bajamos. Aunque yo prácticamente corrí hasta donde estaba mi mamá.

—Mamá, te extrañe mucho. —Le di un fuerte abrazo.

De ella pase a mi papá.

—Padre, también te extrañe mucho. —Lo abracé mientras las lágrimas recorrían mi mejilla

Vi a mi hermana que cargaba a una niña de cuatro años, mientras su esposo sostenía de los hombros a un niño de seis años. Milly y Mike.

Me los había descrito mil veces en cartas, pero eran muy diferentes a como me los imaginaba.

—Hermana. —Dijo Alexia.

—Abrázame. —Le pedí.

Ella me dio un fuerte abrazo. Sentía como si solo hubiera pasado un par de días y no años, todo volvía a la normalidad y no podía ser más feliz.

—Mike, Mike ella es su tía Ellie. —Los dos me saludaron y se fueron corriendo al patio perseguidos por Bruno.

— ¡ELLIE! —Gritó Candace con una notable pancita de embarazada, se veía hermosísima.

—Candace que gorda estas.

—Oye...

—Lo siento te vez adorable.

Me acerqué a ella para tocarle su pancita, era extraño saber que algo estaba creciendo dentro de mi hermana. Aunque lo que más se me hacía extraño era ver a todas ellas casadas y con hijos, ¿En qué momento habíamos crecido tanto?

— ¿Y Dimitria? —Pregunté.

Todos se quedaron viendo.

—Ella está adentro, pero ella está muy cambiada así que no te sorprendas... ¿Y quién es Gabe? —Cambio de tema drásticamente mi hermana.

Él caminó hacia mí y me agarro de la mano con mucho miedo, lo entendí perfectamente, tenía miedo que mi familia no lo aceptarán y tuviéramos que separarnos, pero nada nos podría separar, yo lo amaba y nada cambiaría esos sentimientos.

—Familia les presento a mi novio Gabe.

—Mucho gusto. —Dijeron todos.

—Iré a ver a Dimitria.

Antes de irme le dediqué una mirada a Gabe, pero él solo asintió con la cabeza, mientras Emma intervenía y hacía que todos participaran en una amena conversación.

Entré al castillo, mientras mi familia se iba a sentar al jardín. Me quedé un momento ahí observando todo, era mi casa, estaba todo igual como lo recordaba, el gran salón, las escaleras, el comedor, miles de recuerdos me llegaron tan rápidos como un huracán.

Will.

Borre ese pensamiento de mi cabeza y subí a buscar a mi hermana, pase por mi habitación, abrí la puerta, era como la recordaba, el escritorio, con algunos cuadernos, mi cama echa con los mismos edredones y el libro que deje hace siete sobre la cama.

Una sonrisa salió de mis labios.

Cerré la puerta y caminé hasta la habitación de Dimitria.

En la puerta había un cartelón. "No se acerqué". Toque la puerta, ella abrió la puerta, me vio y me cerró la puerta en mi cara.

—Dimitria, soy yo Ellie.

Ella abrió la puerta y se me quedó viendo. Extendí mis brazos para darle un abrazo y ella solo me evito.

Pasó dejándome a un lado y se fue abajo, dejándome completamente sorprendida ante la actitud de mi hermana, aunque no pude evitar esbozar una sonrisa al verla, estaba de mi estatura, su cabello castaño le llegaba hasta la cintura. Ya no era la niñita que había conocido.

— ¿Quién es? —Preguntó una joven.

—Soy Ellie.

— ¿Ellie?, soy yo Jamie.

Me quedé observándola era idéntica a su hermana, no podía con la impresión del momento.

—Jamie, estas muy grande....

—Sí, igual que tú... Estas muy cambiada... Un momento ¿Ya llegó Em?

—Sí, si quieres ve a verla.

—Gracias...

Dicho esto, bajo corriendo las escaleras, yo fui en busca de mi hemana menor la busqué por mucho tiempo, pero no pensaba dejar las cosas así, hasta que decidí ir a la biblioteca. Estaba sentada leyendo.

—Dimitria...

—Ellie... Escucha, no quiero hablar contigo de acuerdo...

No pude evitarlo y me senté junto a ella, pero cada vez que me miraba era como si quisiera matarme.

— ¿Por qué?

—Porque me dejaste sola siete años, ahora estoy por cumplir 19, te necesite en muchas ocasiones y donde estuviste, oh cierto viajando...

Esto fue peor que una bofetada, no supe que responder simplemente me quedé con la boca abierta.

Ella dejo el libro en la mesa y se fue, yo la trate de seguir, pero Alexia apareció de la nada.

—Veo que ya "hablaste" con Dimitria.

—Sí, me odia.

—Odia a todo el mundo, desde que te fuiste esta insoportable y muy rebelde.

Sinceramente odiaba verla así... Yo la quiero, es mi hermana favorita.

—Vamos, todos te están esperando. —Dijo Alexia.

Caminamos hasta el jardín donde estaban todos sentados y comiendo, Dimitria tenía los audífonos puestos e ignoraba a todo mundo, mientras que mis padres bombardeaban de preguntas a Gabe.

—Ya tranquilos, lo asustan.

Le di un beso en el cachete y me senté a su lado.

—Cuéntanos Ellie sobre tu viaje. —Animó mi papá.

—Bueno, conocí a muchas personas y muchos lugares, eran hermosos e increíbles, nos divertimos mucho.

—Me alegro.

—Quítate los audífonos Dimitria. —Dijo mi madre.

Ella se quedó viendo con desafío a nuestra madre y se quitó los audífonos.

—Como sabrán, mañana cumple años mi bebe, así que le haremos una fiesta e invitaremos a todo el reino.

—Yo no quiero fiesta. —Dijo ella dándole una gran mordida a su postre.

Ella se parecía a mí, demasiado.

—Pues ya mandé las invitaciones, así que dile a Jamie que te ayude con el vestido y el peinado.

Ella puso los ojos en blanco y siguió comiendo.

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Estábamos en el cine, me había sentado en el regazo de Gabe, para estar más eh.... Cómodos. Cuando sonó el teléfono, lo tomé entre mis manos mientras salía de la sala para escuchar mejor.

Una sonrisa se formó en mi rosto al ver que era Romina.

— ¿Hola?

—Hola, Romina.

— ¡ELLIE!, me enteré de que volviste.

—Sí, acabó de llegar.

Pude escuchar una ligera interferencia, me moví unos centímetros para agarrar mejor la señal.

—Genial, ya se te extrañaba, lo bueno es que no veremos el viernes.

—¡Sí! —Dije animada, en serio la había extrañado.

—Me enteré de que tienes novio.

—Sí, se llama Gabe... ¿Y tú como vas?

Ella se quedó en silencio, como sino supiera que decir.

— ¿No te enteraste?, Me casé hace tres años con Matt y adivina que...

— ¿Qué?

Trate de asimilar la información que me había dado, se había casado con Matt, ¡CON MATT!, eso sí me había sorprendido, aunque me alegraba mucho por ellos dos.

—Estoy embarazada.

— ¡FELICIDADES!. —Fue lo único que pude decir.

—Es una hermosa y sana niña, estoy muy emocionada y tengo miedo.

—No debes de tener miedo, serás la mejor madre.

Y lo decía en serio, confiaba en las habilidades de mi amiga y de Matt, aunque no podía imaginarlos como padres, aún éramos demasiado pequeños, no me imaginaba ahorita con un bebé, aún había miles de cosas que quería hacer.

—Gracias... ¿Sabes algo de Will?...

Me quedé en silencio al escuchar su nombre.

—No, desde que se fue perdimos todo contacto.

—Alguien te lo tendrá que decir... —Dijo haciendo una pausa, mientras yo sentía que lo que me iba a decir no me iba a gustar. —Ellie, se va a casar con Sofi

—Era obvio... Me tengo que ir, hablamos el viernes...

—Adiós.

Colgué, respiré hondo y entré. Pensé que me iba a afectar más que Will y Sofía se casarán, pero no fue así.

Me senté junto de nuevo en el regazo de Gabe, pero esta vez puse mis brazos sobre su cuello y mi cabeza sobre su pecho. Comenzó a hacerme caricias en mi cabeza.

— ¿Todo bien?

—Todo bien.

Él me sonrió y me abrazó más fuerte pegándome completamente a él.

Era lo único que necesitaba en ese momento. En serio lo quería, él lograba hacerme feliz en mis momentos más oscuros.

Bajamos a cenar y hablábamos con toda la familia, vi que faltaba un asiento, no estaba Dimitria.

Me paré para buscarla, caminé hasta su habitación, pero de camino tropecé.

— ¿Estas bien? —Me ayudó un joven rubio con ojos cafés.

—Sí, ¿Quién eres?

—Soy el príncipe Aaron.

—Princesa Ellie. —Dije dándole la mano.

Él se me quedó inspeccionando, era mucho más alto que yo, lo cual si me intimidaba.

— ¿Eres la hermana de Dimitria?

—Sí, soy su hermana mayor.

Él se me quedó viendo con una sonrisa.

— ¿No has visto a Dimitria? —Preguntó.

—No, la estaba buscando, si quieres puedes bajar yo la busco.

—Te ayudo.

Trague saliva y caminamos hasta su cuarto, estaba la puerta cerrada y de debajo de esta salía luz.

Toque la puerta, ella abrió la puerta, con una mueca de indiferencia, traía puesto una camisa de manga larga negra, con un short de mezclilla y unas medias rotas.

—Ellie, Aaron.

—Dimitria, ya estamos cenando.... —Ni siquiera me dejó terminar porque me cortó y miró a Aaron.

—Gracias, vamos Aaron.

Se lo llevo a casi arrastras, pero él volteo.

—Fue un gusto conocerte Ellie.

No le pude responder ya que se había ido.

Gabe venía.

— ¿Ellie, ¿qué haces aquí?, todos te estaban buscando.

—Vine a buscar a mi hermana, pero me está ignorando, odio que haga eso.

—Tranquila, verás que las cosas se solucionaran, ahora vamos para que acabes de comer.

Le di un beso en los labios, él me rodeo con sus brazos mi cintura.

—Vamos...

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Me estaba poniendo mi pijama, me acosté en la cama y me quedé pensando en que quería que estuviera Gabe ahí. Durante todos estos años habíamos dormido juntos, pero ahora era como si mi cama fuera demasiada grande para mí.

Alguien tocó la puerta, me levanté arrastrando los pies, hasta que abrí la puerta. Era Gabe, no lo pude evitar y lo jalé adentro de la habitación, cerrando la puerta.

— Yo... —Comenzó hablando, acercándose a mí. — No puedo dormir sino estas junto a mí.

Podía sentir como las mariposas revoloteaban en mi estómago.

—Mmmmmm... ¿Entonces ahora qué haremos?, no podemos dormir juntos... Mis padres te matarían.

Él solo sonrió, mientras yo ponía mis manos en sus hombros, mientras él ponía sus manos sobre mi cadera, estas estaban demasiado calientes ya que lo podía sentir inclusive arriba de la ropa.

—Es un riesgo, que estoy dispuesto a hacer.

Me levanté de puntitas y me permití besarlo, pude sentir como me pegaba completamente a él, yo puse mis manos sobre su nuca para profundizar el beso, cada vez que me besaba de esa forma sentía que mis piernas se volvían de gelatina. Era como si me dejará desarmada. Él me cargo de la parte de los muslos, mientras ahora besaba mi clavícula y la parte baja de mi cuello. Pude sentir como caminaba hasta que me soltó ligeramente sobre la cama, él se posó arriba de mí.

Se separó un momento, pude ver como estaba ligeramente sonrojado e inclusive traía los labios hinchados. Era tan hermoso, no pude evitar pasar mi mano por su rostro, acariciando su mejilla, Gabe puso su mano sobre la mía, quitó mi mano de su cara y le dio un beso en la palma de mi mano.

—Sabes pensé que venías a dormir...

Pude ver como me miraba e inclusive me dedicó una pequeña sonrisa, que sabía perfectamente que significaba.

—Oh, sinceramente tengo muchas ideas de que podemos hacer antes de dormir.

Me sonrojé, mientras lo empujaba para que cayera sobre el colchón.

—Solo quiero dormir...

—De acuerdo, entonces ven...

Vi como se quitaba los zapatos y se metía debajo de la cobija, yo me levanté para apagar las luces, de un saltito me metí a la cama, le di la espalda a Gabe y pude sentir como el se ponía cerca de mí y me envolvía en sus brazos. Podía sentir su respiración sobre mi nuca.

—Ellie, ¿Por qué dejaste todo esto?, digo castillos, sirvientes, comida, tienes todo.

—Cuando vives 16 años encerrada, viendo el mismo castillo, los mismos sirvientes, se hace tedioso, simplemente quería irme, además de que venía muchos príncipes y todos fueron unos idiotas.

—No lo sé, comida, sirvientes y lindas princesas. —Le di un codazo. —De acuerdo, sabes que tú eres la más linda princesa.

—Según tú...

Él solo río, podía sentir su mirada sobre mí, inclusive dándole la espalda.

—Será mejor que vayamos a dormir, viajamos mucho y mañana tenemos una fiesta.

—Cierto, descansa.

Me dio un beso y me quedé profundamente dormida en sus brazos, sinceramente podría acostumbrarme a estar así durante el resto de mi vida.

Al día siguiente todos estaban de un lado a otro, estaban nerviosos por la fiesta de Dimitria, yo solo me quedaba observando y riéndome de mi madre que parecía que fuera a darle un ataque.

Le ayudé a organizar la fiesta con mi lindo novio, no quería que le diera un ataque a mi mamá. Cuando terminamos era muy tarde, todos corrimos a arreglarnos. Me di una merecida ducha, salí y ahí estaba Em arreglada se veía hermosa, me ayudó a ponerme el vestido que era rojo, de tirantes hacía los lados, tenía un escote de corazón y en la parte del escote y los tirantes tenían flores que se llegaba a extender por un lado hasta llegar a la mitad de mis piernas; En la parte de abajo era completamente liso. Después me colocó los zapatos, me peinó, maquilló y me ayudó con los accesorios.

Cuando estuve lista me puse la corona, la cual no recordaba que pesará tanto. Me quedé observándome, había olvidado lo incomodo que era usar tacones y vestido, además de lo pesada que era la corona.

Salí de la habitación y estaba Gabe con un traje negro y una corbata roja que combinaba con mi vestido, se veía hermoso.

—¿Lista?

—Lista.

Me agarré de su brazo, llegamos a la escalera, ya todos había llegado, vi como Dimitria se movía nerviosa.

—Espera.

Me acerque a ella.

—Hola, no estés nerviosa, solo mira hacía algo que te guste como Aaron.

— Claro decirle a alguien que no esté nerviosa, cuando lo esta se le quitará mágicamente...—Hizo una pausa al darse cuenta de que le había dicho más cosas. — ¿Qué?, no me gusta Aaron, solo somos amigos.

Les juro que ella se parecía demasiado a mí.

—Bueno, entonces ve algo, no a la gente o te pondrás nerviosa. Estas hermosa.

—Gracias, igual tú.

—Me tengo que ir, nos vemos en unos momentos.

Me acerqué a Gabe que me dio su brazo.

—Ellie Andrade y su novio Gabe Woods.

Bajamos las escaleras, mientras yo veía a mis padres, cuando bajamos, era turno de Dimitria, ella bajo como toda una estrella era hermosa, me dieron tantas ganas de llorar al ver que ya era toda una adulta.

— ¿Quieres algo de tomar? —Preguntó Gabe.

—Si, por favor.

Él se fue, yo me quedé observando a mi hermana, cuando alguien topo conmigo.

—Perdona....

—No te preo....

Oh santos dioses de los dioses... ¿Por qué a mí?

N/A

Espero que les haya gustado el capítulo :D

Voten y comenten eso ayuda mucho e.e

Capítulo dedicado a : mely_solange, Fabiola0599 y WriterSecretTkr

Los tres primeros en comentar se ganan una dedicación, los quiero y nos vemos el otro lunes.

Gabe en galería.

Si tienen alguna duda o aclaración me lo pueden decir por mensaje o en los comentarios, que siempre los leo  y contesto. También me pueden seguir en mis redes sociales que estan mi perfil de wattpad.